Partida Rol por web

El área de combate narraba visualmente batallas pasadas, aunque no habían sido tan violentas pues las instalaciones no demostraban que alguna masacre se haya realizado en dicho lugar. Los Kombatientes entraron a la plataforma e ignoraron las miradas de algunos guardias presentes, sabían que habría sangre pero era su deber evitar que ambos guerreros llegaran muy lejos.

Entraba vestido para la ocasión, o eso entendía... por lo que se le podía ver con un traje a la medida, de color blanco, camisa rosada, zapatos mocasines blancos y un corbatín que se acababa de desatar.

Mientras subía a la plataforma, pudo observar a su contrincante y esbozó una sonrisa que demostraba malicia y deseos oscuros. Sin mas se posiciono en combate y dijo -Si no me ganas te don un beso querida-

Su cuerpo iniciaba a dejar salir humo por todos lados, hasta cubrirlo en su totalidad, dejando apenas ver unos ojos brillantes entre todo aquel humo que inundaba su zona, el cual se dispersaba, dando mas claridad y mostrando a un ser caótico muy lejos de su figura original.

-Bailemos- dijo su frase celebre, antes de enfrentarse a un oponente.

Vestía su mejor cara póker, por lo demás, sus atuendos de siempre, un toque un indígena con matices de valkiria. Deseaba mantenerse impasible, una forma de ocultar lo patético que veía del esfuerzo de su oponente por parecer llamativo. Ella no necesitaba hacer o decir absolutamente nada para atraer las miradas de los curiosos. Seguramente su oponente la subestimaba.

Subió a la plataforma arco en mano, con una flecha preparada en la otra, y sus cuchillos colgando del cinto, dispuestos a que sus hojas fueran alimentadas con sangre.

Cuando su oponente comenzó con su transformación, primero pensó que era una reina del drama, depués, estaba convencida de que sus flechas no ayudarían ahora mismo, así que decidió devolver el arco y la flecha a su carcaj. Tomó sus dos cuchillos haciendolos girar con gracia entre sus dedos y adquirió una pose de combate que ella llamaba "el cuervo".

- Más quisieras...

Claus sonreía debajo de su masara, espero escuchar la palabra Fight, para esfumarse en una neblina, centecímas de segundos luego, reaparece detrás de la joven e inicia una serie de fuertes golpes contra ella.

Todos estaban dirigidos a las articulaciones, desestabilizandola con cada uno y aremetiendo con fuerza devastadora en su cuerpo a cada éxito. Aun así, fue cuenta de su adversario al recibir sus ataques y experimentar que no era una mujer ordinaria, dejando esto mas satisfacción al combate.

Poco a poco el gas que emitía, envolvía el entorno de ambos y de un momento a otro, claus vuelve a desvanecer y a reaparecer apresando a la joven... esta vez no poseía su mascara permitiendo decir las siguientes palabras -cuando gane este combate, seras mía- tras ello lamió la mejilla de la joven.

Claus se avecina a la pantalla del jugador y tocando la misma dice -sere corazón, donde estas que no te veo-

jejeje

No sabía donde estaba más dolida, si en su cuerpo o en su orgullo. Había conseguido resistir los golpes sin emitir ni un solo sonido de dolor, pero lo cierto es que dolía. Entre eso y el absoluto asco que sentía tras el lametón de la mejilla, la ira se acumuló a su alrededor de su pecho. Reunió sus fuerzas para deshacerse del agarre y golpear fuertemente el estómago de su contrincante.

Solo pudo asestarle un único golpe, pero fue lo suficiente para recuperar la compostura, tomar distancias y limpiarse la mejilla. - Me llevaré tu lengua en una bandeja...

Tras ver que la joven pudo liberarse de su presa, este sonreía mas abiertamente -Que hermosa criatura- dijo mientras el humo cubría su boca, reformando la mascara. Su deseo lascivo y sombrío no los ocultaba al expresar dichas palabras.

Tras esto, salio corriendo y realizó varias fintas, para luego de ello acertar golpes en sus articulaciones nuevamente -te debilitare a tal punto que no podras hacer nada cuando seas mia- pensaba al hacer todo aquello.

Sintió nuevamente sus golpes y apreciaba que esta contrincante daba batalla... todo lo hacia mas exitante. Tras uno de sus ataques, este se disolvió entre el humo. 

Ella quedo totalmente cubierta por el denso y asfixinate gas que se encontraba a su alrededor, mas esta vez, dicho gas se sentía caliente, como si emanase de un incendio o volcán. Se escuchaba su voz alrededor de ella y si la situacion no fuera tan tensa, ella podria jurar que su piel alertaba estar siendo rosada por su lengua. 

Con el cuerpo debilitado de los golpes anteriores y el denso gas que emanaba ese ser repugnante, los sentidos de Serenity estaban adormecidos. ¿Estaba permitido drogar al oponente? A este ritmo iba a perder el combate, tenía que reaccionar. Consiguió hacerle un bonito corte con su cuchillo, no había pillado la mejor zona, solo un corte poco profundo en el pecho... al menos le había jodido el traje.

Pero al ver que era capaz de sangrar, se animó, y con velocidad consiguió hacerle un segundo corte en el muslo. Debería haber continuado, pero él era demasiado rápido y ella estaba demasiado entumecida. - Veo que puedes sangrar, eso es lo único que quiero de ti, ver tu sangre correr...

A este paso, yo te veré correr...- dijo materializándose  a unos pasos de ella, le guiñó un ojo y realizando unos gestos con sus manos, como si de danza se tratase, claus inicio a llenar todo el escenario de mas y mas humo.

-no estoy aquí querida- dijo cuando este humo le estaba cubriendo en su totalidad -bu!- termino diciendo, reapareciendo detrás de ella y propinándole una series de golpes entre las costillas, rompiendo una de estas en el proceso.

Esa maldita sabandija escurridiza lo único que sabía era ocultarse en la niebla, me estaba destrozando, pero era un maldito cobarde. La costilla rota dolía como el demonio, me costaba respirar y me faltaba el aliento. Pero no iba a rendirme sin luchar. Caí al suelo, casi arrodillada, ocultando mi cuchillo y, cuando no se movió, confiado de su superioridad, la clave el cuchillo en el pie atravesando todo el zapato. El sonido del dolor fue música para mis oídos y me dio fuerza para sacar el cuchillo y clavarlo en su pantorrilla, mucho mas fácil de atravesar.

- A ver si ahora te mueves tan rápido, pedazo de mierda cobarde... - dije con voz entrecortada por la herida.

Sintió fuertemente el dolor... y no le gusto para nada, por lo que le propino una patada en la cara que la puso a rodar unos metros.

Retiró el cuchillo de su pie y sangre salia del mismo. El humo inició a manar de todo su cuerpo con mayor fluidez, sus ojos se volvían brillantes y estableció una postura que mas que defensiva aparentaba meditativa.

-Ven cuando quieras princesa-

No puedo tenerme en pie, el dolor paraliza mi cuerpo, siento como estoy perdiendo la consciencia, pero justo antes de desmayarme, consigo arrojar mi otro cuchillo a mi contrincante. Consigo ver como la hoja le hace un corte en la mejilla justo antes de perder el conocimiento.

El corte no le quito la concentración, por lo que al instante de recibirlo este se esfumo en humo y reapareció frente a ella, le tomo por el cuello levantándola lentamente con una sola mano. El humo se aferraba a la joven como se de cuerdas se trataran y una vez estuvo con los pies separados del suelo, este la miro con sus ojos vaporosos y resplandecientes y dice.

私はすぐにあなたを私の闇の王国に連れて行きます...そしてあなたは永遠に私のものになります。- tras ello, sus dedos sueltan a su presa, se agacha rápidamente mientas ella cae al suelo y como si de un rayo se tratara, este descarga un golpe en el mentón, al mismo tiempo que decia -Shouryuu-ken- arrojándola por el aire. 

Mientras ella caía, se veia como las heridas de Claus se cerraban como si se desvanecieran , dejando apenas un halo de humo al sanarse... luego la ropa se revestía nuevamente, dejando su cuerpo intacto.

ROUND 2

Me había recuperado del anterior combate. Me sentía fuerte, concentrada, había aprendido como se movía esa rastrera bola de gas y estaba dispuesta a partirle su fea cara. Era hora de enseñarle que yo también sabía jugar a ese juego y que era mejor que él.

Saqué mi arco, preparé 3 flechas y me dispuse a la lanzarlas a la vez. Estaba tan pagado de sí mismo, que no me veía capaz, y esa sería su perdición. En cuanto dieron la señal de incio del combate, concentré mi energía vital, creando una esencia brumosa y de color rojo sangre, que manaba de mi cuerpo y se movía hacia el suyo.

La maniobra lo distrajo pensando que la esencia en sí era un ataque, cuando quiso reaccionar, mis tres flechas habían dado en el blanco y yo... "desaparecí", ahora estaba fundida en la bruma roja, materializándome detrás de él y asestando una puñalada en su espalda. Le susurré al oído. - Yo soy la maestra de la bruma, tu gas no es nada comparado con mi poder... ummm... huele a... venganza.... - Mordí su ojera hasta notar el sabor de la sangre en mi boca.

El dolor fue intenso, mas la mordida de ella exito a Claus y se podía ver como en su pantalón de tela el bulto se hacia grande -así me gusta querida- se dijo a si mismo.

Se movió unos paso para atrás con una sonrisa de satisfacción -Parece que ahora si va en serio la cosa - mientras decía eso su traje pulido se desvanecía y aparecía vestido con su atuendo de batalla.

Tras ello, se desvanecio en humo para aparecer suspendido en el aire con las manos unidas  y entre ellas una densa bola gris con destellos electricos se encontraba suspendida. 

Sabia que ella no podía seguir sus movimientos mientras usara su misty step, pero el asombro que ella revelaba en sus ojos llenaba de satisfacción a Claus ya que no sabia lo que le esperaba.

-Hadōken- dijo mientras lanzaba la bola que daba de lleno en la cara de la joven.

Un gas a 800 grados celcius y a 200 kilometros por hora no era algo que mas cosas podían aguantar, menos una humana, por lo que verla salir rodando y su piel ardiendo seria algo normal.

Tras esto, se puso en una postura defensiva y realizó un gesto en señal de que venga.

Me llevé todo el golpe y tuve que retroceder varios pasos, pero al menos conseguí moldear mi esencia carmesí para evitar que mi delicado rostro terminara como una vela derretida. Éste tipo, además de grosero y asqueroso, debía reconocer que tenía bastante peligro. Pero ésta vez nada iba a impedir que ganara.

Me estabilicé, enfoqué mi vista hacia él y corrí con todas mis fuerzas, casi parecía que iba a estamparme contra él pero, en el último momento, me lancé al suelo deslizándome entre sus piernas. Había ocultado en mi corsé varias puntas de flecha y éstas terminaron clavadas MUY cerca de sus testículos. - Tsk, solo unos centímetros más y habría acabado con tu posibilidad de procrear... - dije mientras levantaba de un salto y me aleja de él recuperando una postura vigilante.

El dolor fue intenso, mas la satisfaccion fue mejor -Al parecer no entiendes algo- dijo calmadamente mientras se retiraba aquellas flechas -en mi habita un ser que seguro a tus ojos seria perverso ya que este disfruta del dolor...-  tras decir eso lanza las dos flechas que habia recibido mas esta no buscaban impactar.

Distraida por el disparo, no se percato de que claus tambien se habia esfumado y reaparecido justo a su lad, en el preciso momento que esta esquivaba las flechas. Aprovechando la oportunidad se agacha y enviste con fuerza el menton de la guerrera lanzandola nuevamente al aire.

Sin esperar a que toque el suelo, claus se vuelve una densa neblina en toda el area de lucha... -jajajajaja- reia abiertamente, percibiendose los deseos lascivos

Como si de otra voz se tratase, se escuchaban constantemente un cántico -あなたは私の王国の喜びと恐怖を目撃します-