Partida Rol por web

Next-Gen

Capítulo 1: Piloto

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11/08/2014, 23:11
Director

Hannah y su hermana gemela Rachel habían subido a buscar la pelota, con la que estaban jugando hacia unos minutos, al tejado. Todo pasó muy rápido; su hermana perdió el equilibrio y se precipitó hacia el jardín, unos cuatro metros y medio hacia abajo. Hannah sabía el resultado de aquello, intentaría coger a su hermana por la mano pero no lo conseguiría, era la misma pesadilla de cada noche antes de despertarse para ir al Instituto Franklin D. Roosevelt o sencillamente hacer novillos como ya había hecho más de una vez. No obstante, el sueño se torció de repente, y fue ella la que caía hacia un precipicio sin fin mientras en su cabeza sonaba una voz que Hannah ya creía olvidada, la de su hermana.

- Me mataste...¿Por qué Hannah?¿Por qué me empujaste?

La chica se despertó sobresaltada y comprobó que la alarma de su teléfono móvil estaba sonando. Lex estaba al lado de la cama y cuando ella despertó se dirigió hacia ella y apoyó la barbilla en el colchón cerca de ella haciendo un gruñido como preguntando qué pasaba. Un nuevo día había empezado.

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12/08/2014, 17:12
Hannah Mason

Aquella singular pesadilla que la había atormentado durante los últimos tres años de su vida como un recordatorio constante de su culpabilidad había cobrado nuevas proporciones. Quizás un psicólogo hubiera encontrado aquella variación de lo más interesante y se hubiera preguntado cuál era el detonante del cambio pero para Hannah era una nueva y tortuosa forma de penitencia que le impedía cerrar una herida que, por otro lado, ella nunca permitiría que desapareciera.

Sin embargo, escuchar la voz de su hermana otra vez, aunque fuera el simple eco de su memoria tirando de recuerdos y uniéndolos a su propia voz, era morboso incluso para ella, que parecía regodearse en su sentimiento de culpa. Aunque claro, no había sido tanto sacar ese recuerdo a relucir como aquellas palabras que nunca había escuchado en boca de su hermana lo que la había dejado impactada hasta el punto de que ni siquiera se había dado cuenta de que, cual autómata, había apagado el móvil y estaba acariciando la cabeza peluda de Lex.

¿Por qué me empujaste?

Sacudió la cabeza con aire molesto a la par que se levantaba, lo cuál la llevó a tropezarse con Lex, que se dio a la fuga antes de que su dueña se le cayera encima, cosa que Hannah evitó por los pelos aunque sin llegar a salvarse de un codazo con la cómoda al trastabillar. Soltó un gruñido malhumorado. Que divertido es levantarse con el pie izquierdo, refunfuñó para sus adentros mientras empezaba a quitarse el pijama, que, en realidad no era tal porque se había quedado dormida con la ropa puesta. Ya en sujetador se dio cuenta de que algo taponaba sus oídos. Mierda. Por eso seguía con la ropa de calle, se había dormido escuchando música y el hecho de que no sonara sólo indicaba que su mp3 había decidido que aquel era el momento para quedarse sin batería.

Aquella fue la señal que faltaba para que decidiera que, un día más, no iba a ir a clase. Siempre encontraba excusas similares que sólo le valían a ella, como aquella: soportar al señor Higgins sin música no era ni deseable ni aceptable. Cierto era que no iba a prestar atención a cualquier intento que pusiera de explicar raíces cuadradas, ecuaciones o lo que fuera que estuvieran dando en clase aquel año pero al menos el rap a todo volumen acallando los sonidos exteriores y ahogando sus pensamientos daba una visión más entretenida de todo aquel teatrillo que algunos llamaban educación.

Estaba repitiendo el último curso de instituto y, si los profesores no la aprobaban por hartazgo, al año siguiente sería la tercera vez, pero ni siquiera esa certeza la motivó lo suficiente como para coger la mochila de clase en cuanto salió de su habitación seguida por Lex, que iba, de lejos, mucho más aseada que ella, que se había puesto una camiseta arrugada y unos pantalones caídos con un roto a la altura de la rodilla.

Pasaba de ir a la cocina. Sabía la escena que encontraría. Su madre removiendo el café con aire ausente, su padre animándola a comer algo más que una escuálida galleta. Ni siquiera repararían en su presencia si entraba, así que no les importaría demasiado si prescindía de la entrañable reunión familiar. Sin más, le hizo un gesto de cabeza a la perra para que la siguiera al exterior de la casa con la intención de perderse por algún lugar de la ciudad.

Y fue entonces, justo cuando la puerta hacía "clack" a su espalda, que se dio cuenta de que se había olvidado su sudadera y el monedero y que el pobre contenido de sus bolsillos que consistía en dos chicles, un paquete de cigarros, un mechero y tres dólares no incluía las llaves de su casa. Sus ojos se cerraron un momento con resignación antes de alejarse de la puerta de su casa con la creencia de que llamar para volver a entrar no era, en absoluto, una opción.

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16/08/2014, 12:00
Director

Hannah descendió desde Ahston, el barrio residencial dónde vivía con sus padres, lleno de casas unifamiliares las cuales eran, y de eso había habido bastantes quejas tiempo atrás, idénticas como un campo de setas. Al ir con su perra Lex no podía ir a la línea de bus y coger uno que la llevase hasta el centro, en el parque de Liberty Park, una pequeña copia del Central Park de Nueva York, dónde podría estar con Lex sin que nadie les molestara. Por lo tanto tenía que cruzar West End para llegar a la ciudad. West End había empezado siendo un núcleo étnico, pero en la actualidad había de todo, por desgracia era una zona que aún padecía crimen de bandas y demás. Sin embargo, salir a plena luz del día era bastante seguro. Fue en ese preciso momento en el que Hannah (y Lex) notaron el terremoto, la tierra bajo sus pies se sacudió como si tuviera espasmos y las alarmas de los coches de alrededor empezaron a sonar, incluso hubo alguna farola y árboles que cayeron, por suerte no provocaron muchos daños. Pronto la gente salió de sus casas rápidamente con sus caras asustadas mirando alrededor...

***

Debra estaba arrodillada en el césped del patio de su casa, las lágrimas cubrían su rostro y estaba en shock. Delante suyo tenía un cráter de unas proporciones considerables dónde tendría que estar su casa ahora sólo quedaba tierra, madera y cristales rotos. No recordaba cómo había sucedido, pero de algo estaba segura: ella lo había hecho.

***

Daria Denver se despertó en su habitación en la residencia para estudiantes de la Academia Claremount, compartía habitación con Wendy Davies, la hermana menor de Monique, no obstante Monique dormía a la habitación de al lado, y dado su poder parecía que las dos habitaciones en realidad no tuvieran tabique entre ellas. Una vez se tuvo que reconstruir el tabique divisorio entre las dos habitaciones dado que Wendy lo derrumbó un día que estaba especialmente irritada con su hermana, la dirección del centro había dicho que la próxima vez unirían las dos habitaciones y aplicarían medidas severas contra Wendy (y Monique). Como cada mañana Monique traspasó la pared y saludó a las dos chicas.

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19/08/2014, 11:03
Monique Davies

Había dormido del tirón, cosa que le ocurría bastante a menudo. Después de todas las actividades que realizaba durante el día Monique terminaba agotada. Por suerte, recuperaba toda su energía tras bastantes horas de sueño. Así pues se desperezó en su cama, miró durante un segundo al techo y se levantó sin molestarse en calzarse. Traspasó la pared más como rutina que como algo extraordinario y entró en la de su hermana y Daria.

- Buenos días.- dijo en tono cantarín.

Caminó hasta la cama de Wendy y sin pensárselo dos veces le tapó la nariz mientras su hermana dormía con el fin de despertarla.

- Vamos, vamos, dormilona.- sabía que su cabeza peligraba de ser despegada del resto de su cuerpo, y por ello se centró en su poder. Si su hermana intentaba pegarle tan solo la traspasaría.- ¿Qué tal dormiste, Daria?- Comentaba con tono normal, como si estar despertando a su hermana de una manera tan poco dulce fuera tan normal para ella como el beber.

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19/08/2014, 19:42
Hannah Mason

Hannah tenía cierto afán por probarse a sí misma que no era una cobarde y por eso mismo el paso por West End no parecía cohibirla como haría con la mayoría de adolescentes solitarias que se vieran forzadas a pasar por ahí. Por supuesto, el contacto en su pierna con el costado de Lex sólo hacía que acrecentar el sentimiento de seguridad.

Sentimiento que desapareció por completo cuando Lex, previamente alertada por algún sexto sentido animal de lo que iba a suceder, soltó un gemido e intento esconderse entre sus piernas. No tuvo tiempo de rechistar cuando empezó el temblor, sacudiéndola con fuerza y provocando que se agachara detrás de Lex y abrazara al animal para impedir que saliera corriendo por el miedo. Las alarmas de los coches a su alrededor empezaron a pitar de forma estridente mientras algunos árboles caían, abriendo el pavimento al destapar el lugar en el que habían estado ocultas sus raíces.

Por muy chulita que fuera y siendo que nunca iba a reconocer que por un momento su estómago se había encogido por el miedo, Hannah supo en cuanto una farola cayó justo a un metro de donde estaba que aquel no era un lugar seguro. Sujetó el collar de Lex, puesto que la llevaba sin correa, antes de ponerse en cuclillas.

- Vamos chica, tenemos que salir de aquí, vamos, vamos...

Y susurrándole lo que ella consideraba palabras de aliento a su perra, ambas empezaron a moverse, abandonando la acera para moverse directamente sobre la calzada y buscar alguna explanada lo suficientemente espaciosa para que pudieran quedarse sin peligro en caso de que el terremoto dudara. Lo cierto era que Hannah no tenía conocimiento alguno sobre cuál era el protocolo a seguir ante terremotos así que había decidido obedecer a su instinto.

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20/08/2014, 23:26
Debra Pulido

Pero... ¿qué has hecho?

Su corazón bombeaba tan fuerte que si se le hubiese salido del pecho no le hubiera sorpendido en absoluto. Quizá era lo mejor que podía pasarle en ese momento. Que su palpitante órgano cayera sobre el oscuro y manchado césped hasta que perdiese cualquier atisbo de vida. Pero no tendría tanta suerte.

¿Cómo ha pasado?

Le costaba pensar. Sus sienes palpitaban como si su cerebro estuviese a punto de estallar. Mientras, la tensión y el terror se acumulaban en su pecho impidiéndole completar con éxito el ciclo respiratorio.

¿Cómo lo he hecho?

Ni siquiera recordaba que estaba haciendo en el momento de la explosión. Cerró los ojos con fuerza intentando olvidarse de lo que estaba a su alrededor. Sabía que la gente estaba empezando a acercarse para saber qué es lo que había pasado. Con una explosión como esa, se habría enterado toda la ciudad. Entonces, ¿por qué todavía no se había acerado nadie hacia ella?

Porque eres invisible. Porque nadie sabe que existes. Porque no vales para nada.

No sabía cuánto tiempo llevaba de rodillas encogida sobre sí misma. Sus manos, en completa tensión, rodeaban su cabeza en un intento de mantenerse en una pieza. Ahora tendría que hacer frente a su hermana. Había destrozado todo por lo que tanto había luchado, después de que accediera a acogerla en su casa. Después de que le salvara de su familia. Después de que le demostrara que había alguien en ese mundo capaz de invertir algo de tiempo en un ser tan miserable como ella.

Deberías haber muerto en esa explosión.

Jason. Era él en quien estaba pensando cuando todo empezó. Cuando el calor empezó a concentrarse en su estómago y, sin ningún esfuerzo, fue acaparando cada milímetro de su cuerpo.

Caíste en la trampa

No debía haber cogido el teléfono. Pero, ¿podía haberselo imaginado? Lo único que sabía era que debía haberlo hecho. De esa manera las cosas estarían como hacía apenas una hora. La casa intacta y el futuro de su hermana preservado. 

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22/08/2014, 10:06
Daria Denver

Para no perder la tradición, Monique traspasó la pared para despertar a su hermana derrochando amor y delicadeza. Sabía lo que podía ocurrir si Wendy se despertaba de malas, así que alargué la mano hacia el despertador, teniendo bien agarradas las pequeñas cúpulas metálicas que eran golpeadas cuando el despertador sonaba. Por si acaso.

Incroporándome poco a poco y frotándome los ojos con la mano libre, le devolví a Monique los buenos días.

- Buenos días a ti también. Y he dormido como un tronco, para variar. - era un chiste que hacía de vez en cuando, ya que no era un secreto cuales eran mis poderes y una vez en mis primeros días en la escuela, cuándo me costaba dormir por las noches, me había dormido en el pupitre y mi cuerpo se había convertido en madera. Esta anécdota era conocida por cualquier que me conociese. No sabía porqué pero era al parecer lo primero que salía en tema cuándo alguien preguntaba por mí. - ¿Y tú, qué tal? - le seguía el juego pues era algo ya rutinario, pero no sacaba ojo de Wendy. Su despertar era inminente y esperaba que no destrozase nada hoy.

 

Notas de juego

Siento la tardanza, tiempo al límite.

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25/08/2014, 23:12
Director

Wendy abrió los ojos de golpe cuando tuvo respirar por la boca. Al inicio estos intentaban enfocar y se movían rápidamente de un lado para el otro, hasta que repararon en Monique. Wendy trató de empujarla hacia el techo, pero la traspasó de forma que fue ella quien se alzó, cayendo de la cama. No obstante esa mañana estaba de buen humor.

- ¡Buenos días a las dos!- dijo toda risueña.

Antes de que le pudieran preguntar el porqué de esa sonrisa en su cara sintieron el terremoto. Pasaron varios minutos, escucharon todo el ruido de los alumnos al ir y venir por el pasillo y la puerta de su habitación se abrió de golpe. Al principio tan sólo vieron a muchos alumnos de la escuela transitar por el pasillo, pero ninguno de ellos parecía haber llamado a la puerta...¿una broma tal vez? Cuando Wendy se había dispuesto a ir a cerrarla poco a poco se fue materializando (aunque esa no era la palabra idónea sino más bien "visualizando") Janelle Cox, una buena amiga de Daria.

- ¡Hola a las tres! ¡El director Summers ha convocado una reunión urgente en la sala de actos!

La sala de actos se encontraba en el edificio de las aulas, y para ello debían cruzar los jardines dirección Este.

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26/08/2014, 13:44
Monique Davies

En cuanto Wendy se hubo despertado, Monique se sentó en la cama como si no hubiera casi asfixiado a su hermana, mirando hacia Daria, fijándose en que la camiseta del pijama que llevaba era genial.

-Bien también. Suelo dormir como un tronco, ya sabes.- se encogió de hombros y entonces empezó el temblor. En un principio ni se asustó, poniendo los ojos en blanco, creyendo que era Wendy moviento la cama para asustarla, pero no era así. Arrugó entonces la frente, extrañada. Fuera, en los pasillos, la gente parecía salir despavorida.- Vaya prisas...

Entonces entró la amiga de Daria avisando de una reunión urgente. ¿Qué querría el director a aquellas horas? ¡Pero si ni siquiera habían desayunado!

- Sí que debe de ser urgente. ¡Está bien!- comentó levantándose de un salto; se acercó a la pared que daba a su habitación, la traspasó con el brazo y tanteó hasta encontrar una sudadera. Se la puso y se recogió el pelo en un moño bastante vulgar.- Habrá que ir entonces.- Como llevaba unos pantalones de pijama largos negros, tampoco parecía que iba en pijama aunque así fuera realmente. - Déjame unas zapatillas, Wen.- se calzó unas deportivas y ya estaba lista para seguir a la multitud.- Vamos chicas. Cojamos un buen sitio para poder dormirnos mientras el director habla. ¿Qué creéis que querrá?

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27/08/2014, 13:13
Daria Denver

Solté el despertador cuándo Wendy se levantó de buen humor. Estas hermanas eran unos terremotos impredecibles. A veces me preguntaba si me habían puesto de "hermana mayor" para controlarlas, aunque yo no fuese precisamente la persona más responsable de la escuela. Pero poco importaba. En los años que llevaba había aprendido que todo aquí era por una razón y que las decisiones no se tomaban a la ligera.

Y hablande de terremotos, a instante comenzamos a notras el temblor sin duda de uno de ellos. Fruncí el ceño y me puse en tensión, recuperando el agarre al despertador. No sabía qué ocurría, y lo más probable es que fuese algun alumno descontrolado... Pero si ocurría algo debía protegerme, a mí y a ellas (o a Weny. Monique podía hacerse "traspasable"). Sin embargo, el temblor terminó sin parecer haber causado daños y la puerta se abrió de golpe.

No se veía nada cuándo esto ocurrió, pero al instante comencé a ver la familiar silueta de Janelle materializarse.

- ¿Una reunión urgente, ahora? ¿Tan pronto? - suspiré y puse los ojos en blanco. Y yo que quería ducharme o tal vez ir a hacer unos largos en la piscicna. - Dame un minuto, no puedo presentarme en público enseñando las bragas.

Me puse unos tejanos y una sudadera encima de la camiseta que usaba como pijama. Me puse unos calcetines y unas converse y me levanté. Lo bueno de llevar el pelo corto es que no necesitaba mucho trabajo, así que simplemente lo repasé un poco con los dedos apra que no hubiese ningún cuerno mañanero.

- Lista, cuándo queráis.

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02/09/2014, 17:42
Director

Janelle sonrió a Daria.

- Seguro que muchos estarían esperando ver ese cuerpazo.- y le sacó la lengua acto seguido.

Se dirigieron a la sala de actos de la Academia Claremount. Para ello tuvieron que salir a los jardines y dirigirse hacia el este, dónde estaban las aulas. La visión verde del césped de los jardines no impresionó ya a las chicas, acostumbradas como estaban a realizar ese trayecto cada día, pero había que reconocer que tanto la Academia como sus alrededores estaban impecables, más aún si uno consideraba el tipo de alumnado que residía tras esas verjas.

Evidentemente todos los cursos se dirigían hacia allí, de hecho todo aquello no era algo nuevo, el director Summers hacia siempre una charla al inicio de cada curso, pero aquella vez la reunión se había adelantado por algún motivo, tal vez el terremoto tenía algo que ver.

La hermana de Monique sonrió al ver a Megastar, un alumno de pelo plateado de 1,85 m de altura. Se decía de él que era uno de los más fuertes de la Academia.

- ¡Chicas, ya os alcanzaré luego!- dijo Wendy y acto seguido salió corriendo hasta dónde estaba Megastar para saltar a su espalda y taparle los ojos con las manos.

Llegaron a la Sala de actos y al cabo de unos minutos, que los alumnos aprovecharon para hablar de sus vacaciones de verano, entró Summers. El director iba cojo, una secuela de sus años de héroe, pero avanzaba a buen ritmo hacia el estrado. 

- Bienvenidos al nuevo curso en la Academia Claremount, a las viejas caras no os tengo que decir cómo funcionan las cosas aquí dentro, a los nuevos recordad que tenéis a portavoces en cada uno de vuestros cursos respectivos para que os ayuden a instalaros y os enseñen las instalaciones de la escuela. Perdonad que me salte el protocolo de presentación, pero ya habréis notado el pequeño movimiento...muchos pensaréis que esto no era más que un terremoto, no obstante debo deciros que no es así. La fuente de ese terremoto es una persona con poderes, como vosotros, pero que aún no tiene controlados, por lo que las autoridades la ven como un peligro...

Mientras el director hablaba, Monique dio un repaso a la sala en busca de su hermana y vio que ella se había sentado junto a Megastar, le agarraba el brazo y el chico estaba algo sonrojado.

- ... se de buena tinta que se ha desplegado un equipo para reducir a esa persona y llevarla a la prisión federal de Blackstone.

De repente se hizo un silencio absoluto. La prisión federal de Blackstone era dónde llevaban a los peores criminales y de ella se decía que nadie había conseguido escapar...

 

***

Charlie Clarke estaba muy cerca de la fuente del terremoto, dirigiéndose hacia el instituto. Vio el humo, o quizás era una gran nube de polvo, alzarse en el cielo y decidió dirigirse hacia allí. Al cabo de cinco minutos estaba en frente de un gran cráter dónde antes debía haber estado una casa y delante de éste había una chica arrodillada completamente en shock.

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03/09/2014, 11:55
Charlie Clarke

  - Bueno, el primer día de clase, no sé ni por qué sigo yendo a esa mierda de academia, sólo hay gente mediocre que se cree importante, si por lo menos enseñasen algo que valiese la pena... - Llegaba tarde al discurso del director, lo sabía, tampoco es que me interesase escuchar a un viejo echándose flores todo el tiempo y diciendo lo bien que iba el instituto mientras el lamía el culo a todos los presentes. - Menuda mierda de héroe fracasado

  Me tomaba todo el tiempo del mundo para llegar hasta la academia, no era mi intención llegar a tiempo, pero si no llegaba en algún momento vendrían las quejas a mis padres, y las aburridas charlas de mi padre sobre cómo se tiene que comportar un hombre de nuestra familia. El discurso ya me lo tenía mas que aprendido, buena presentación, buena educación, buen talante, puntualidad, amabilidad... Tenía que tratar a todos los que consideraba inferiores como si fuesen iguales para que se sintieran importantes y estuviesen contentos, un asco.

  Mientras ocurría el terremoto, al que no le di mucha importancia, vi como se levantaba la nube de polvo en lo que parecía ser el epicentro. - Creo que ya sé de qué va todo esto. - Mi afán por querer saberlo todo me llevó hasta aquel lugar, donde se veía un gran cráter, al que no dudé en bajar para ver que había una niña arrodillada en su centro.

  - Halaaa, si que has montado una buena, ¿no? - Le digo mientras le pinchaba con un dedo en el brazo para ver si había reacción por su parte. - ¿Has hecho tu todo esto? - Esperaba una respuesta que quizás no llegaría, pero aún así no me moví del lugar para ver si la chica reaccionaba.

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03/09/2014, 20:25
Debra Pulido

Si hubiese sido capaz de sentir algo más que la culpa haría varios minutos que habría cambiado de posición. Sus rodillas habían empezado a notar las consecuencias del peso y la parte inferior de sus piernas había comenzado a quedarse dormida. Le dolía tanto la cabeza y la presión era tan excesiva que prácticamente no podía escuchar lo que ocurría a su alrededor. Por eso le costó tanto darse cuenta de la presencia de aquel chico. 

Por un momento le entraron ganas de correr y alejarse de él. Estaba segura de que si se acercaba a ella acabaría sufriendo algún daño. Por desgracia, las ganas de volatilizarse no concordaban con su capacidad de movimiento. Permaneció arrodillada, con la cabeza inclinada hacia un lado observando los pies de su interlocutor. Algo en su interior le impedía levantar la cabeza y mirarle directamente a los ojos. No solo era la vergüenza e inseguridad tan características en ellas. También estaba la culpa y el remordimiento.

- ¿Cómo... cómo iba a hacer algo como esto? - Su voz sonaba débil y temblorosa. Hubiese sido poco convincente si no fuera por el poco sentido que tenía que hubiese sido ella la promotora de un desastre como ese. Claro que el chico no sabía lo monstruosa que ella era... Con un esfuerzo sobrehumano consiguió elevar su cabeza. Encontrarse con un chico tan joven le sorprendió tanto que el pálido y enfermizo color se tornó a un gracioso rosado.

- No... no es necesario que te quedes. Estoy segura de que mi hermana está a punto de llegar.

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09/09/2014, 15:54
Daria Denver

Ignoré el barullo y las presentaciones, pero mi atención se vio captada cuándo el director habló del posible nuevo alumno (persona con poderes sin controlar era básicamente el perfil de cualquier alumno al entrar aquí). Cuándo dijo que habían enviado un equipo para reducir a esa persona y llevarla a la prisión federal, mi expresión se endureció y me levanté de la silla cómo un resorte.

- No puede permitir eso. - dije con voz grave, seria. Y no era una petición, era una afirmación. Yo y mis causas perdidas... - No es un criminal o un terrorista, es seguramente un adolescente asustado - si hubiese sido un niño no harían eso, nadie se creería que un niño podía hacer eso y ni de coña lo llevarían a una prisión - y necesita ayuda. Ayuda especial, ayuda cómo la que se ofrece aquí.

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13/09/2014, 13:23
Charlie Clarke

  Se le notaba a la legua que había sido ella la causante de aquella explosión, por mas que intentara ocultarlo no podía. Estaba realmente asustada, temblaba y estaba confusa, para mi verla así era una delicia, no todos los días podía ver a alguien con esa expresión en su cara, sin duda era algo que admirar.

  El problema de todo aquello es que la explosión que había causado era demasiado llamativa como para que alguien la pasara por alto, yo había venido por mera curiosidad, pero seguramente dentro de poco vendrían las autoridades a ver lo que había pasado y, si veían que había sido ella la causante de aquel destrozo, querrían llevársela. Eso no era admisible, para nada. - Verás, sé que lo has intentado, pero no puedes engañarme, nadie se va a creer que no has sido tu la causante de todo esto. - Mis palabras podrían parecer crueles, pero tampoco estaba allí para darle un hombro sobre el que llorar, estaba allí para observar y disfrutar de su desesperación. - Tienes suerte de que andase por aquí cerca y me haya acercado a ver qué pasaba, ¿sabes que dentro de poco vendrá alguien a ver qué ha pasado y desde que averigüen que has sido tú la causante te querrán llevar con ellos. ¿Quieres eso?

  ¿Cuál será su siguiente reacción? - Quería verla, quería ver qué pasaría a continuación, la miré fijamente a la espera de que hiciera algo, aunque no dijese nada.

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15/09/2014, 12:54
Debra Pulido

"Pero no puedes engañarme"

Esas palabras hicieron que Debra comenzara a temblar todavía más. Por supuesto que no podía engañarle. Era demasiado estúpida como para eso. Frotó la palma de sus manos en el pantalón intentando quitarse el sudor que se había instalado en ellas. Le resultaba demasiado molesto... le hacía sentir todavía más asquerosa de lo que ya se sentía.

Sus palabras se clavaban en el cerebro de Debra como dagas afiladas. ¿Por qué le estaba diciendo eso? Sabía que en que descubrieran que había sido ella y no encontraran una explicación racional al suceso empezarían a hacerle preguntas. Le echarían la culpa de lo ocurrido, le obligarían a pagar los daños y, seguramente, la meterían en algún centro de menores... alejada de su familia. Quizá fuera lo mejor. La única persona que la quería estaba a punto de odiarla para siempre.

- ¿Q...qué debería hacer? - No conocía de nada a ese chico, pero algo en su interior de decía que sería capaz de encontrar una solución más eficaz que la suya. Se secó las lágrimas que caían de sus ojos en vano. Pronto los surcos eran sustituidos por nuevas perlas saladas.

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15/09/2014, 18:01
Director

Antes de que Charlie pudiera abrir la boca para contestar oyeron el caos que eran el conjunto de sirenas de ambulancias, policía y bomberos, así como el ruido característico de varios helicópteros que sobrevolaban la zona. Observaron que había todo de gente congregada varios metros más allá mirando el transcurso de la acción. Los coches patrulla se pararon a una distancia prudencial, unos diez metros, y bajaron los agentes poniéndose a cubierto detrás de los coches y sus puertas. Un oficial de policía se alzó y con un megáfono en mano empezó a hablar.

- Soy el oficial Hamilton, están rodeados por el departamento de policía de Freedom City y por una brigada STAR, no se resistan y todo irá bien. Si me escuchan y están de acuerdo con estas órdenes alcen las manos, descenderán hombres de la brigada STAR de los helicópteros y los esposaran. La Liga de la Libertad está dispuesta a intervenir si hiciera falta, no hagan estupideces...

La brigada STAR era un operativo de control superhumano. Sus agentes estaban especialmente entrenados y equipados para tratar con supercriminales.

***

El director Summers hizo callar a los estudiantes allí reunidos, puesto que estos se habían alterado al escuchar las palabras de Daria.

- Señorita Denver, soy realmente consciente de la situación, no hace falta que puntualice la tarea a la que se dedica esta institución, creo que conozco el trabajo que realizamos aquí. Si es tan amable me gustaría que me acompañara para hablar en privado acerca de esa actitud...ah! y ya puestos que la acompañen también la señorita Davies y su hermana...

 

***

Hannah vio pasar al menos cuatro helicópteros hacia la zona que parecía el centro del terremoto, de dónde salía humo y polvo hacia el cielo. Pronto oyó las ambulancias y demás servicios de emergencia. Si hubiera mirado tan sólo hacia el extremo opuesto habría descubierto que una figura solitaria la estaba observando.

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15/09/2014, 20:07
Debra Pulido

El chico nunca llegó a contestarle y su mundo comenzó a hundirse en una espiral de caos y desesperación. El ruido de los motores y las sirenas lo envolvían todo impidiéndole incluso ser consciente del su ritmo cardiaco y respiratorio. Daba igual, no hubiese sido capaz de sentirlo. Estaba totalmente bloqueada.

"Brigada Star"

Esta vez sí que la había fastidiado pero bien. Hasta ese momento sus rarezas habían pasado prácticamente desapercibidas, solo vistas por una familia que se limitaba a excluírla, ignorarla y demostrarle su desprecio. Pero esta vez se había pasado de la raya.

"Alcen las manos"

La orden llegó a sus oídos como si se tratara del eco de un sueño. Ni siquiera reaccionó al principio. ¿Cómo podía ser verdad lo que estaba pasando? Ella siempre había sido una chica solitaria y prácticamente invisible para todo el mundo. ¿Cómo había acabado siendo el foco de la policía local?

"Liga de la Libertad"

Fue lo que necesitó oír para levantar las manos. Hasta en su estado de shock era capaz de entender lo que eso significaba. Sabía lo que le hacían a cualquier persona que demostrata tener algún poder sobrenatural y tendencia a delinquir. Por desgracia, en esos momentos ella cumplía con los dos requisitos básicos.

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15/09/2014, 20:45
Hannah Mason

No tenía ni idea de lo que había sucedido y no quería quedarse a averiguarlo. Su curiosidad estaba a buen recaudo, junto a aquel tejado en el que había causado la muerte de su hermana, de modo que empezó a andar en dirección contraria, totalmente ajena al par de ojos que la vigilaban mientras animaba a Lex a seguir andando, acariciándola tras las orejas.

- Venga chica, busquemos una cafetería hasta que todo esto pase.

Algo la impulsaba a alejarse de aquel lugar y quedarse a cubierto hasta que el despliegue de servicios de emergencia evacuara la zona y todo volviera a la normalidad. O quizás era un sexto sentido que la avisaba de que algo en aquel marco estaba fuera de lugar.

Mientras andaba con nerviosismo sacó un cigarro del paquete y se lo llevó a la boca, encendiéndolo inmediatamente con gesto ansioso. No era la necesidad de nicotina lo que buscaba satisfacer con aquel gesto sino ocupar su ansiedad en algo. Se dejó el cigarro en la boca mientras se frotaba los brazos helados con las manos, imprimiendo fuerza al movimiento con tal de entrar en calor.

Ya eran varios los motivos que la impulsaban a resguardarse así que, cruzando la calle, empezó a buscar alguna cafetería o bar en el que esconderse un rato.

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15/09/2014, 21:19
Monique Davies

Estaba casi más atenta a su hermana y su compañía que a lo que estaban diciendo. Incluso se inclinó tanto en el asiento que lo traspasó y se chocó con el de atrás.

- ¡Perdón!

Se colocó de nuevo rápidamente para no llamar la atención, pero pronto regresó a mirar a Wendy.

- ¿Y ese quién es?- le preguntó a Daria.- ¡Le está agarrando del brazo! No me digas que hasta la fortachona de mi hermana tiene novio antes que yo... no podría soportarlos...- puso una mueca de asco. Le daban un poco de envidia, pero pronto se centró en el tema en sí. Ya estaba Daria hablando de salvar a la gente.- ¿Qué importa, Daria? Ya se salvará, ¿no?

Me va a llevar con ella. Lo veo.

Los ojos se le fueron de nuevo hacia Wendy y Megastar. Monique no pudo más que poner una mueca de asco. ¡Era su hermana pequeña!