Partida Rol por web

Penny Dreadful: 1°Temporada.

5.0. Daños Colaterales.

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16/06/2016, 05:51
Agnes Blackstone

guardó las cartas, y las dejó delante de ella, al parecer la carta había demostrado que no era sólo una jugarreta barata de adivina, sino que realmente lograba ver más allá. Miró hacia abajo, sus cartas, ante la pregunta de la chica.

- te puedes transformar en un gato- adivina, sonriéndole, pero luego mueve la cabeza de lado a lado - en realidad, no es de mi interés ni curiosidad, algo me dice que tarde o temprano se sabrá, y prefiero que las cosas se den en su momento...ni antes, ni después...pero si quiere decirlo, adelante, si se siente en confianza de compartirlo - mueve su mano hacia delante, en una gesticulación de esa invitación.

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17/06/2016, 01:03
Genevieve Shaw

- Nunca he dicho que sea una molestia. Si eso desea, puede acompañarlos mientras en el camino nos dice qué lo ha llevado a pensar eso - entonces, hizo una reverencia y miró a Laszlo para que se dirigieran al carruaje y con ello, a su casa. Sea lo que fuere, sería una reunión importante.

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19/06/2016, 13:55
Will Blunt

El joven muchacho, un poco más distanciado de las señoritas y el sr. Wesley, escuchó atentamente lo que Eddith les pedía. Su cara se arrugó al escuchar cómo planteaba un viaje al futuro. - No... - respondió de forma automática, mientras lanzaba una mirada, casi inapreciable, de preocupación hacia el hombre y luego volvió a Eddith.

Escuchó luego cómo Edward respondía, quizás haciéndose el fuerte, dirigiendo su atención hacia él. Apretó fuerte el puño contra su chaqueta, pero sin tornar su expresión atenta, al recordar lo que habían conversado hacía poco. Levantó de nuevo la mirada hacia Edward. - No. - pronunció, sin tomar la mano de este cuando se la tendió, y luego miró a Eddith. - Señorita, no creo que el señor Wesley deba jugar con su  salud de esta manera. - hizo una pausa, para luego continuar. - Esa habilidad debe tener un coste muy caro... - Por supuesto que iría si iban, pero eso no significaba que tuviera que aprobarlo. Por supuesto que no pensaba dejar que Edward pasara por eso solo, pero eso no significaba que Edward debiera pasar por eso aunque él fuera.

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19/06/2016, 23:30
Dean Winchester

Elijah asiente tímidamente pero alegre por poder acompañaros.

El carro llega a la puerta y os conduce lentamente a la mansión de los Shawn. No esta demasiado lejos de la casa de Alice, al fin y al cabo ambas son de alto linaje y de grandes riquezas.

Cuando llegais, uno de los mayordomos de tu padre os abre las puertas y os conduce a los tres al salón principal. Alli, la luz es muy tenue, lo justo para no hacer daño a la vista, pero también para ocultar muchas cosas en las sombras.

Elijah, visiblemente afectado por tanto lujo, no puede contener su emoción y comienza a corretear de un lado para otro.

Notas de juego

Si quieres, Genevieve, puedes narrarle con detalle a Laszlo como es tu casita ^^

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19/06/2016, 23:38
Elijah

- Oh, santo cielo! Estos muebles... son un Luis XVI!! Creia que no había tantos en Londres! El señor Edwar entiende mas de estas cosas, al ser anticuario pero... Y aquel retablo...madre mía!! Grandiosos pintores. Y los candelabros!! Vendería mi alma por una casa como esta!- Comenta Elijah, susurrando, pero evidentemente no lo suficientemente bajo mientras toquetea un jarrón de la dinastía Ming.

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19/06/2016, 23:41
Sr. Shawn

De entre las sombras, aparece otra mucho mayor que por un momento os asusta con sus palabras.

- No diga eso muy alto... Elijah. Mas de uno se vería tentado a tomarlas en serio. Y por favor... no toque el Ming..- Carraspea tu padre , Genevieve,  mientras sale de las sombras con el semblante serio.

Se dirige a ti para saludarte, pero ve a Laszlo y entrecierra los ojos y pone cara de disgusto.

-Lo he olido nada mas salir del coche de caballos. No deberías haberlo hecho... Genevieve...- Dice señalando al enano- Hay reglas... Lo sabes. ¡¡¡ Maldita sea, Genevieve !!! Quiero una explicación...ahora mismo!!- comenta visiblemente enfadado.

Las palabras de tu padre no dejan duda ninguna que debes hablar, y cada palabra que dice se os mete dentro de la cabeza, taladrándoos desde dentro, como alguien golpeando un tambor demasiado grande.

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19/06/2016, 23:47
Morgan "Le Fay" Bolt

Morgan asiente. Aunque antes te mira de arriba a bajo con algo de desconfianza. Luego esboza una sonrisa, como con desgana.

- Te creeré amigo. Aunque es distinto... a lo que hacíamos antes. Ya sabes... tu yo solos... contra el mundo. Mucha gente ... comete errores. Tu mismo lo dijiste en cierta ocasiones. Pero si tu, mi hermano, dices que es así... así ha de ser. - Dice poniendo una mano en tu hombro.

- Pero no me pidas que confíe en ninguna muchacha de las de arriba.- Dice mientras se acerca a su mesa y te extiende unas cuartillas para enseñártelas. - He estado trabajando en algo, Mordred. A ver que tal te parecen.

- Balas penetrantes, con corona desechable. La primera capa entraría como una rosca y luego se abriría agrandando el agujero. En el interior lleva una corona normal, para que si la cabeza principal se rompe o se atasca, se rompa y la segunda continúe entrando como si fuera un punzón. Nada las detiene. Y cuando digo nada.. es nada. He probado con una plancha de acero y ... ha dado mejores resultados de lo que creía. - Comenta Morgan orgulloso.

-La pega es que se tarda mucho en hacerlas y solo hay un cargador. Esta sobre la mesa. Recógelo después. Lo bueno es que son de un calibre menor, un 17hm2, así ahorramos en peso , ganamos en velocidad y con un revolver normal se pueden usar. Muy ligeras. Efectivas a 50 metros. Sigo... investigando en ellas.. quizá con mas peso lleguen mas lejos pero necesitaríamos un calibre mas grande, del 22 para arriba.

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20/06/2016, 01:14
Mordred Le Fay
Sólo para el director

-¿Confiar? Oh, nada de eso. Ni yo confío. Ni siquiera en el hombre que los ... "lidera" a todos ellos. Como mucho a ... No, ni siquiera en Agnes. Son, por otro lado, inocentes. Al menos los dos niños. Si se les acerca Annis... Soy capaz de morir por ello. Los demás pueden morirse, luchando con ella o huyendo. Me da igual... -reflexionó, mientras escuchaba a Morgan hablar de las nuevas balas y contemplaba él mismo el proyecto.

-Son increíbles. Eres increíble. Usaré el cargador con el Mauser que me queda... Lo voy a marcar con una cruz, lo tendré guardado y lo usaré sólo si es imperativo. Por lo demás, los Parabellum deberían valernos. El otro Mauser es tuyo... -se alejó del mesón y fue hacia sus armarios de rifles. 

-Veamos qué tenemos por aquí para los señores más rudos... ¡Ah! Recuerdo haber comprado esta belleza en nuestro viaje al continente... -dijo, dando con una ballesta enorme con una cabeza de carnero saliendo por la punta. Tenía un enorme cargador circular, que permitía fuego semi-automático. La levantó y dejó sobre otra mesa, donde pensaba ir recopilando las cosas.

 

-Sigilosa. No se sabe cuándo vendría bien. Sé de cierta señora pelirroja que gozaría de este artilugio... Y si no ella, su compañero enano. Ella no parece necesitar armas, de todas formas...

Volvió a los depósitos.

-¿Qué te parece esto?

Sacó un modelo personalizado de una Dreyser Pinfire Double-Fire, un rifle bonito y no demasiado largo, casi una escopeta.

-Para el señor Wesley, y , si no lo quiere, para Clarence...  Oh, te encantará Clarence. Dice que nos va a arrestar... Ni siquiera sabe que habló hoy mismo con Jack... 

-Con esta casi que ni quiero partir. No la he llegado a usar. Y es de aquí, muy nueva. Acaban de sacarla... Es una belleza... En fin. Para ti. Ya la conoces. Una maravilla moderna... Quizá... Quizá puedas ponerle una mira telescópica, por si hay que disparar a lo lejos. 

-Este revolver es para Agnes. Detalles dorados, como su melena. Grácil, blanco y puro. Al menos, así parece... Las dos, en realidad... 

-Este es más tímido pero es fuerte. Para la señorita Merril. No parece querer dejarse caer más bajo que los demás... Son... Todavía no tengo una palabra para ellos, Morgan. ¿Extrahumanos? ¿Superhombres? ¿Meta-humanos? Pero tienen talentos especiales. Brujería, clarividencia, magia... Cuando acabe todo, si erran, habrá que purgar esa casa. De uno en uno... Por algo somos Jack...

-Otro que no he llegado a usar debidamente... Para el señorito Blunt. Le vendría bien extravagancia máxima a su lado... Ha hecho una cosa increíble, el chico ese... Tanto, que ni sé qué ha hecho...

 

-Ahora... Este monstruo no sé para quién es. Pero sé que es automático, grande, pesado... Para Clarence, o para Cone, tal vez.

 

-Este es para la señorita Cushing. Pequeño, pero bonito. Hermano del de Agnes... 

-Este, para Genevieve. El gemelo del de Agnes. 

-Este gigante es para quién sobre... Ya he perdido la cuenta...  Los niños no van a tener armas. Es una abominación armarlos, aunque fuera para defenderse. Impensable. No deberemos fracasar como adultos en proteger a los inocentes... 

Cuando terminó con poner todas las armas sobre la mesa, miró a Morgan con una sonrisa llena de orgullo. Eran sus niños bonitos, lo mejor de lo mejor. Verlos funcionar todos juntos sería una maravilla... 

-Y ahora las blancas...  Estas dos retráctiles para ti y para mi. No vamos a necesitar ya bastones ni basura. Jack ha vuelto, y esta vez verán todos ellos qué significa ser un Vigilante. Además, no necesitamos el alcance de una hoja-bastón...

-Estas dos últimas, para Genevieve y la señorita Merril 

 

-Llevar más es una sobrecarga ya... Y no creo que muchos de ellos -ni las damas mencionadas- sepan usarlos. ... Eso sí, suficientes dagas para todos ellos. Y esta, para Agnes.

 

-¡Oh! ¡Estos están genial! Y son suficientes... Llevaré el cinturón de dagas entero, y que se los repartan... Son seis, deberían bastar... Y los niños... Bueno, pueden llevarse uno... 

 

-Ahora sólo queda blindarse... -comentó cuando todo el armamento estaba preparado, incluyendo munición para las armas escogidas.-¿Qué tal vas? 

Notas de juego

Bien , supongo que mientras Mordy ha tardado una eternidad buscando tal o cual arma y llevarlas, Morgy habrá tenido tiempo de arreglarse el Mauser. Ahora, hora de armarse ^^

Morgan tendría la otra, la parda ^^

 

Más las espadas y las armas, y las ballestas y demás... Estarán todos ellos hechos un batallón <3

Aunque Annis sigue siendo más fuerte que todos ellos juntos... xDDDD

Dios. Llevo unas 3 horas en esto. Desde las doce, por ahí. Documentándome sobre las distintas armas, buscando fotos, decidiéndome entre una y otra, y encima pensando si sirven en la partida sin volverla una casa de locos. Con la ballesta y el rifle automático me atreví mucho, pero recordé a Tyrion con su ballesta y la película Hellsing, que se pasa Hugh Jackman por donde se pasaron los dos Le Fay , y no pude resistirme a ponerla xD.

¿Te mola el arsenal? 

 

 

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20/06/2016, 04:53
Edward Wesley

La negativa de Will produjo sentimientos cruzados, por un lado se dio cuenta que la palabra "No" al ser pronunciada por él le producía un efecto diferente después de lo ocurrido, como si su alma se hiciese mas pesada al saber de su negativa, y a la vez podía percibir que el origen de esta negativa era cuidar su salud y eso le produjo una ternura indescriptible. Sus ojos de depositaron en Alice, era imposible que ella no percibiera el torbellino de emociones que él sentía en ese momento, su don de permitía sentir lo que otros sentían y hasta interferir con ellos a través de los sueños. Ella estaba agotada, tal vez no lo había notado o tal vez si pero respetó a Edward. Suspiró y quedó en silencio unos segundos. Luego se puso de pie.

- Claro que el costo es caro, carísimo, créeme que por semanas pagaré esta osadía. Pero no hacer este viaje pone en riesgo mi vida, la tuya, la de Alice y la de Edith. Si no hacemos algo, todos moriremos... no quiero eso Will, ahora menos que antes- Los ojos de ambos caballeros se cruzaron, había tristeza e impotencia en la mirada de Edward, y un solo consuelo - Acompáñame, no podré solo...- dijo sabiendo cuál iba a ser la respuesta de Blunt.

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21/06/2016, 00:30
Will Blunt

Con señal de resignación, sus ojos se dirigieron directos a los de Edward. - Sabes perfectamente mi respuesta. No he dicho nada de lo que he dicho en vano, ni me he olvidado. - respondió, dando un suspiro. - Si no queda otra,  iremos. -

Notas de juego

Okay, nos vas avisando jefe.

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22/06/2016, 12:45
Roy Clarence

El plazo de cuatro horas estaba a punto de terminar. Me levanté de la cama y estiré un poco mi ropa. Cogí mi chaqueta de la silla donde la había puesto para que no se arrugase y el resto de mis pertenecias. Luego me encaminé para reunirme con los que habían quedado en la casa.

Espero que haya sido productivo este tiempo. Dije nada más entrar, mirando una a una a las personas que estaban en la sala. En mi caso he renovado fuerzas y mi mente está más.. despierta. ¿Algo de interés en los libros? Pregunte mirando fijamente a Edith, con gesto serio.

Bien caballeros. Dije a continuación mirando a Edward y Will. Creo que me uniré a ese paseo que planean. Saber que es lo que va a pasar siempre es una buena ventaja para evitarlo.
 

Notas de juego

Creo que los marqué bien. Sino que el dire corrija ^^

Hasta he renovado look xD

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27/06/2016, 03:16
Genevieve Shaw

Al llegar a la casa, Elijah se ve emocionado y algo impaciente. Genevieve comprende ahora por qué Edward y este joven se llevaban tan bien. En una casa como la de Genevieve, no era de extrañarse que hubiera lujos como ese.

Esta gran mansión tenía un gran jardín delantero y su estilo gótico rústico la hacía un poco diferente de las demás del vecindario. Sus padres tenían arbustos de diferentes flores a la entrada, multicolores y hermosas, algo sobrio pero que mostraba el cuidado que estos le ponían a su jardín. Siguieron y al entrar, uno de sus mayordomos abrió la puerta. Una puerta de roble barnizada, cada uno de los objetos de ahí hacia adentro mostraba el estilo de vida de la familia Shaw. Un recibidor que daba paso a una sala de muebles con cojinería fina y cuadros de grandes pintores a lo largo del tiempo. Un comedor que podía verse desde allí con más de veinte puestos para invitados y una escalera que llevaba al segundo piso. Seguramente a las habitaciones.

Detrás del comedor, había una pared solo de vidrio que mostraba un jardín trasero gigantesco y aunque no podía apreciarse mucho más desde ese lugar,  podía inferirse que habría más que eso.

Su padre llegó y aunque la chica se tensó por un momento, luego se relajó al escuchar los reproches de su padre. Le hizo la reverencia que correspondía por ser su padre y luego le miró con severidad aunque en parte ignorando su reclamo.

- Padre, te presento al Señor Elijah y al Señor Laszlo. Ambos están involucrados, al igual que yo, en un asunto referente a Annis Black – luego lo miró con reproche al mencionar su nombre. Si él le hubiera hablado de Annis, no tendrían tantos problemas en este momento.

- Con respecto a las leyes, existen leyes para el abrazo, Padre. Y él no ha sido abrazado. Además, no tengo a otros ghouls y dadas las circunstancias, necesitamos protegernos mutuamente – su tono era serio y en ningún momento descortés.

- La bruja se ha llevado a mi madre y la tiene en su reino. ¿Seguirás buscando una excusa para tratar de hacerme arrepentirme o tratarás de ayudarme a rescatarla? Viajaremos a su reino pronto y por lo que ella dijo, tú la conoces – y así, esperó la respuesta de su padre aunque no dejó la mirada desaprobatoria al lado. En este caso, era ella quien tenía el derecho de protestar.

- También quisiera que me hablaras un poco sobre la señorita Alice. Sé que sabes algo sobre ella también y sobre Adam Black -.

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01/07/2016, 23:38
Valentino "un ojo" Cunningham

La voz de Victor suena como un carnaval de locura dentro de la cabeza de Valentino. Las palabras del niño destrozan la pobre mente como si tuviera moscas dentro, pues este sacude la cabeza y con la misma arma que empuña intenta restregarse los ojos.

-Que haces.. Maldito!!! Mama!! No madre yo...yo hice lo que ellame dijo...NO!! Sal de mi cabeza... Noah!! Te mataré ahora mismo.. Si... No! Para!!! Demonio!!! Ese chico es un demonio... NOoo!!

Del suelo salen unos zarcillo invocados por el brujo. Manos de los muertos de un lugar sagrado que se enredan en las piernas del pistolero tuerto. Pero una vez mas, el efecto del embrujo de Noah sumado a la voz de Victor, hacen tabalearse al mas duro de los Norteños americanos.

Visiones de su vida se meten en la cabeza con las palabras de Victor... y aunque el no lo quiera asi, y no fuera esa  su intención, taladran el cerebro del hombre. Los brazos de los muertos suben por las piernas de Valentino y llegan a  tocar su alma o corazón ( si es que lo tiene) cuando se queda congelado. Como si una mano helada hubiera tocado su alguno de ellos.

Inmovil y babeante, Valentino, sin propia conciencia, se tambalea con los ojos viriodoso frente a vosotros. Como su hubierais sido particies ambos dos de una trepanacion craneal. Ni los loqueros de Bedlam hubieran hehco un trabajo mejor.

El pistolero baja el arma, como un sin mente. Y cae de rodillas aun abrazado por las sombras de los brazos de los muertos.

Dura poco mas.

Tan solo sabeis que esta alli porque aun respira, aunque , no de otra manera, parece ser que otro respira por él.

Notas de juego

Perdon, me quede sin pc :S

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01/07/2016, 23:49
Ashley Septen

Ashley salta encima de la mesa, pero lo hace gracilmente. Cuando pensais que se os va a abalanzar encima, ella se posa lentamente Sobre las cartas en su forma de Gato. Un precioso gato negro con ojos verdes que os mira a Agnes y Jessica.

Como cosa del destino, Ashley gato coge la carta que le has enseñado con la boca y te la entrega en la mano quedándose a tu lado , encima de la mesa y mirando interrogativamente a Jessica.

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01/07/2016, 23:53
Dean Winchester

Mordred y morgan parecen bien equipados, porque justo en ese momento entran por la puerta de la concina. Todo normal, salvo por un detalle: Hay un gato negro al lado de Agnes y falta la señorita Ashley.

Jessica está algo asombrada y parece que solo Agnes podria explicar algo, que sonrie ante  esta pintoresca escena.

Notas de juego

Os recuerdo que Edith Cushing esta en la biblioteca de Mordred buscando cosas...;)

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02/07/2016, 09:09
Victor Nicholas Keller

El niño se quedó paralizado.

Había sido malo. Se había dejado llevar y ahora ese señor iba derecho al infierno, empujado por él. Sin derecho a recular. Sin opción a arrepentirse.

Una vez, una señora en una de esas cenas de ricos donde le exhibían como “Mercurio, el niño demonio” se levantó de la mesa y reprendió a los presentes por disfrutar de tan vil espectáculo. Con voz autoritaria y firme la mujer entrada en años afirmó que no creía en los demonios de nacimiento y que el niño que tenía ante ella sólo era eso, simplemente, un pobre niño pequeño.

Enmudeció al resto de ricachones que discutían si el niño era un ser venido del submundo o una especie extinta, les cerró la boca al menos un instante aseverando que uno no es ciudadano del infierno hasta que muere. Que en vida si acaso uno es visitante del infierno en un mal momento, en los errores crueles que puede arrastrar una crisis de fe, o cometiendo un crimen..., pero, decía, cualquiera, siempre, tiene opción de volver a casa y negar al demonio. De arrepentirse y volverse en el mejor de nosotros. Ella miró a Víctor sin miedo dijo ¿Mercurio? ¿Qué feriante se ha inventado ese nombre? ¡Un buen baño, buena alimentación, comprensión de las escrituras, buenos libros, una madre amorosa, un padre ejemplar y un sabio tutor y tendremos ante nosotros el mejor de los caballeros!

Eso le dio esperanzas al niño. ¡Podía ser un niño normal!

Pero ahora, por miedo a morir, en el cementerio, había sido un demonio. Un demonio.

Se puso a llorar.

-Sniif, sniff. uaaaaaaaaaaaa. ¡Yo no quiero ser un demonio! ¡Señor Cone, yo no quiero ser un demonio!

Y para colmo se dio cuenta entonces que la bruja podía estar allí, y eso le heló la sangre. Pensó que si se lo llevaba ahora sería un demonio para siempre, se imaginó removiendo una caldera de lava con un cucharón y no pudo más que correr a esconderse tras las piernas de su nuevo amigo. Desde allí le habló bajito.

-Señor Cone, es la bruja. Tenga cuidado…

Quitándose las lágrimas de la cara con sus mangas.

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02/07/2016, 11:11
Noah Cone

Durante un instante, Noah sintió un escalofrío por el espinazo cuando el niño comenzó a hablar en esa voz oscura. Sin embargo, cuando el tuerto cayó sucedió algo que llevaba mucho tiempo sin pasar. Sonrió.

El niño entonces empezó a llorar y el antiguo esclavo de la familia Cunningham trató de consolarle. No estaba hecho para tratar con niños, no después de lo que le sucedió a su familia.

- No te preocupes joven, esté hombre estaba condenado desde que vino aquí. La bruja lo habría matado después de que él nos hubiera enterrado. Ahora tendrá que enfrentarse al guardián de las puertas del cielo con menos pecados que los que habría tenido con nuestra muerte. Aunque debo decir que espero que vaya al infierno a pagar lo que hizo. En cualquier caso, sigue vivo y no le vamos a matar, pero necesito algo suyo... Será mejor que no mires, puede ser... horrible - dijo con voz queda mientras sacaba un cuchillo.

No pretendía matar al hombre dado que aún no había llegado el momento de la venganza, pero el ojo de un tuerto... Era un ingrediente poderoso, algo que podía necesitar pronto.

Con cuidado, y sin tocar el amuleto que le protegía de sus hechizos, Noah arrancó el ojo de su enemigo tratando de no dañarlo. Con cuidado lo guardó en una bolsita de cuero envuelto en un pañuelo. Si llegaba a sobrevivir, lo usaría.

- Debemos irnos... Y gracias. - Le dijo al joven mientras le daba unas palmadas en la espalda. Ahora que tenían todos los ingredientes, debían volver a la casa para tratar de poner fin a esta maldición.

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04/07/2016, 03:37
Mordred Le Fay

Llegaron con maletas amplias, como cajas de guitarras, en las manos. Adentro seguramente llevarían armas y más armas. Incluso desde los cinturones colgaban espadas, pistolas y dagas, y , sobretodo, tiras de cuero con balas -escopeta, rifle, pistola...- y cada uno de ellos, en el pecho, ajustados en una correa, unos mangos de madera de color claro, con visible hierro en él: unas dagas largas retráctiles (o unas espadas cortas).

Además, habían cambiado por completo el atuendo: los dos llevaban gabardinas largas, de cuero, oscuras. La de Mordred era negra y con botones sólo hasta la cintura, mientras la de Morgan era más clara y detallada y caían sus cierres hasta abajo. Además, cada uno llevaba un sombrero de copa, de los oscuros y altos.

 

-Disculpe, señorita Merril, pero no tengo prendas de damas aquí... La única que ha vivido en esta casa fue mi madre y... Bueno, ahora que lo pienso, tal vez tenga algo, pero tendría que buscarlo. Le traje esto, por si no le importa que sea de hombre...

 

-Puedo entender perfectamente que no le agrade... -dijo con cierto pesar, mientras se lo entregaba. Lo había llevado en un brazo, con una maleta en la otra mano. Con ella libre, podía ya dar las armas a quienes estaban ahí. 

-Ahora, a lo bueno. Ya que estoy con usted, señorita, le entregaré primero sus armas. Dijo usted que no quería que la tomara por sorpresa la bruja... Aunque supongo que querrá luchar. No se le ve tranquila. Así, pues, con el revolver podrá mantenerse en combate suficiente tiempo. Tiene bastantes balas y fuerza , no está nada mal. Y el diseño es precioso... Y el estoque es ligerísimo. Sólo debe usted apuñalar. No corta, sólo perfora la carne. Fácil de manejar y letal... Espero que disfrute de él tanto como ... Que disfrute. -sonrió sombrío.

 

 

Se giró hacia Agnes, sacando de la cintura una daga envainada, con detalles dorados, y un otro revolver, parecido al de Jessica.

-La daga es más discreta, fácil de ocultar. Use el revolver para abrirse camino a través de Annis. -aquella vez, la sonrisa era más bien altiva, arrogante. Esperaba que de verdad hicieran daño a la bruja sus armas.

 

-¿Dónde están la señorita Cushing y Ashley?-se percató entonces del gato, habiendo estado ensimismado con sus artilugios. -¿Qué es esto? -preguntó con un leve desprecio en la voz- ¿De dónde ha salido el animal?

Notas de juego

Me he pasado con las fotos, vale? xDDD

Esto abajo es recordatorio para poder pegarlo después con los demás también y ahorrarme el tener que volver a buscarlos ^^U

 

 

Posiblemente para Lazslo:

Wesley/Clarence:

Morgan:

Agnes:

Jessica:

Will:

Clarence/Cone:

Edith:

Genevieve:

Para quien falte (ignoro quién tiene ya armas, o si los que tienen "/" van a coger o no alguna):

 

 

 

Blancas:

 

Mordred y Morgan:

Agnes:

Los niños (Ashley, Vic y ... Edith xD)

Genevieve:

Jessica:

Para los caballeros:

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05/07/2016, 23:57
Dean Winchester

Edward asiente ante ellos. Mira sus manos y ve, que  hay algo puesto en ellas que antes no estaba: El destino de todos ellos. Un vistazo al futuro. Tan solo un vistazo. Eso puede ser lo que los separe de la muerte total. Ya puestos, ¿ que hay mas alla de ellos? Tan solo el tiempo podría trascender.

Las miradas de Alice y Edwar se entrecruzan, asi como las de Edward y Will también. No hacen falta palabras. Ya todo esta dicho. Será peligroso. Y de todos ellos, solamente el Anticuario podría ser el único que regresase de allí... al fin y al cabo es el único de ellos que no está atado a este tiempo... no como tal.

Léntamente mete la mano en su bolsillo para sacar el reloj con su cadena dorada y lo mira.

El reloj tiembla en las manos de Edward. ¿O son las manos de él  las que lo hacen? Sea como fuere, incluso en Inpector Roy tiembla, no al ver el reloj como tal, si no lo que representa para todos ellos.

Y así, el conejo blanco apreta la perilla del reloj y cierra los ojos esperando que no agote su vida, ni la de sus compañeros en el viaje. Tan solo espera.

 


Todo a vuestro alrededor gira y se contrae.

No veis nada mas que un tunel estrellado. El tiempo mismo y el espacio se contraen y se estiran al mismo momento. Los dos extremos del tunel corren por tocarse y todo deja de importar. Todo deja de existir por un tiempo que parece una eternidad.

La casa, Alice, Edith... incluso el buen señor Poe os mira desde la fina capa que recubren sus ojos llorosos esperando que todo acabe, desaparece y se esfuma. VMiráis como el tunel se estrecha y vosotros mismos no os véis. Tan solo vuestra conciencia parece que está intacta.

Finalmente, la luz os ciega. Edward ya esta acostumbrado a ello, aunque  nunca ha ido tan lejos. Edward esta visiblemente cansado y apenas se mantiene en pie. Parece que va a desfallecer en cualquier momento.

Pero todo pasa. Nuevamente sois vosotros mismos. Vuestra conciencia y vuestro cuerpo son uno una vez mas. Tanto Clarence como Wil tienen sus manos en los brazos de Edward, aferrándose como si en ello les fuera la vida. Y en cierto modo... asi es. Hasta que Edward no se recupere, teméis no poder volver.

A vuestro alrededor todo es distinto. Parecéis estar en el exterior pero aún distinguís cosas del interior de la casa de Alice. Todo parece muy viejo y deteriorado. Incluso veis cosas que no comprendeis, artilugios, grandes puequeños... todo tipo de cosas que negais su existencia porque, en realidad, aún no existen. Al fondo veis la imagen de una ciudad, pero muy distinta. Muy grande, alta y distinta a las que hayais podido ver. Y en su centro algo que te parece un castillo sacado de un cuento de hadas.

El aire y el viento es ensordecedor, y el polvo se mezcla con los remolinos de viento mientras azotan vuestro rostro y os ciegan cuando algunos fragmentos de, ceniza u otras cosas de meten en vuestros ojos. Sin embargo a lo lejos puedeis ver un figura extrañamente familiar: Agnes

Esta al borde de lo que parece, la zona mas alta de donde estáis, y desde allí se puede ver todo lo que hay a vuestro alrededor.

 

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05/07/2016, 23:33
Agnes Blackstone

Realmente estaba jugando con lo del gato, de ahí su sorpresa cuando pasó lo que pasó, y ese gato negro quedo delante de ella, con la carta que había sacado y que ahora quedaba en sus manos. No dio tiempo para mucho, porque Mordred y su colega hacen su entrada magistral en la cocina, acompañados con un arsenal, como si aquello fuera a hacer daño a lo que iban a enfrentar. Agnes, guardó las cartas rápidamente, sin saber si al anfitrión podrían gustarle o no ese tipo de esoterismos en su residencia. La joven carraspeo, e intento mantenerse un poco al margen de la conversación, con las cartas envueltas en sus manos y buscando guardarlas entre los pliegues de su vestido.

- eh...- queda desconcertada un poco la chica cuando le pasaron esas armas, sin saber si tomarlas o no, aunque lo hace porque no le quedaba mayor opción, dejándolas sobre la mesa de la cocina, rápidamente, como si le quemaran o algo similar - gra...gracias - susurra, incómoda por la presencia de tantas armas, nunca había tenido cercanía con ellas, además, por sus estudios de enfermería, le eran horrendas porque hacían daño. 

- es... espero no tener que usarlas, señor - su voz sonaba dubitativa, y espera que alguien más responda a sus últimas preguntas - eh... la señorita Cushing fue a otra estancia de la casa, no sé cual... y sobre Ashley... pues...-  no sabía que decir, y miró de reojo al gato negro - creo que... que está enterándose de lo que está pasando - ni sabía si ese secreto debía revelarlo ella, aunque Ashley no había mostrado mucho interés en mantenerlo oculto ante las mujeres.