Partida Rol por web

Casi de manera instintiva Mark comienza a correr hacia el pokemon que esta tendido en el suelo. Una serie de recuerdos comienzan a agolparse en su mente, como gotas que golpean la roca horadandola. A mitad de camino deja caer el baston en un intento de ir mas rapido lo que solo ocasiona que a los tres pasos caiga cuan largo es levantando una polvareda.

Sin detenerse se arrastra hasta la serpiente recogiendola como si cogiera un muñeco de trapo a punto de romperse. La palpa buscando alguna señal de vida, aunque solo recibe el silencio por respuesta. Se puede ver que una lagrima cae de su cara, medio tapada por su casco, tiñiendose de rubi puro antes de deslizarse por el cuerpo de la serpiente en un tatuaje rojo. La abraza acercandola a el.

Con una voz ronca casi sacada de la cueva donde se encontraban, Mark pregunta.

- ¿Que ha ocurrido?

No se notaba ira, ni reproche, ni tan siquiera busqueda de culpable. Solo queria saber que habia pasado, aunque en el fondo de esa pregunta tan corta puede que Abra y sobretodo Ralts, podrian notar una ira y un dolor tan frios como el acero.

Sweet se pone al lado de Mark, mirándole con curiosidad. La serpiente estaba muerta, eso es seguro... qué demonios abría pasado... Sweet hubiera reaccionado probablemente como Mark, pero se queda tan sorprendida por la reacción de Mark que no sabe bien como actuar.

Sin embargo acaba reaccionando. Se pone en situación de combate, preparada para atacar a quien haya sido el culpable. Aunque Oak haya intentado que sean compañeros, si alguien ha hecho esto... no, no está bien.

La fría mirada de Sweet golpea a todos, mientras intenta leer la mente de los presentes.

Negue con la cabeza, mientras Mark intentaba salvar a la serpiente*, era demasiado tarde para hacer nada. Quizas si hubieran estado aqui un poco antes.

-Se hacian llamar los Cuervos, unos tipos vestidos de negro.- Explique, agachandome para recoger el baston del doctor y sopesandolo entre mis manos.- Nos asaltaron y fueron directos a atacar a Kate, tuvimos que actuar en consecuencia.- Extendi el baston hacia el doctor, para que lo recogiera. No me moleste en ayudarlo, era un soldado, y tendria su orgullo.- ¿Vosotros estais bien?

La imagen que contemplo cuando volvió a encontrar aquellas personas claramente no era la que estaba esperando.El cadáver de un Pokemon justo delante de sus ojos, probablemente obra de Sneasel.Mark "corrió" para ayudar al Pokemon, pero todo daba a entender que ya era demasiado tarde.Las palabras de Sasori para explicarle lo que había pasado, con cierta falta de detalles, pero cumplía con los puntos críticos.El hecho de que unos tipos vestidos de negro los atacaran en este lugar, llamándose a si mismos los cuervos como si fueran una especie de organización, solo lo hacían sospechar que estaban tras la investigación del profesor.Sin embargo, ¿Por que fueron directo tras esa chica?

Gin aun sufría por el dolor de cabeza, quizá podría verse un hilo de sangre bajando por esta desde la herida causada por el impacto, pero ciertamente ya no le servia de nada quejarse -No mejor que ustedes.- Una sensación de repudio recorrió su cuerpo al ver al Sneasel lamiendo la sangre de sus garras, sangre probablemente de su oponente.La visión de un sádico, y el hecho de que tomaran como objetivo a aquella chica, hacia que se preguntase a si mismo cuanta confianza podía depositar en estas personas.

El resto del grupo llegan. Me siento feliz de verlos. Es raro, apenas he pasado rato con ellos, pero los aprecio. Sin embargo parecen haber pasado un rato peor que el nuestro. Muchas piedras debieron de caerles. Las piedras son malas, hacen mucho daño.

Todos tienen una reacción parecida. Se abalanzan sobre el cadáver, aunque se ven tristes, preocupados y afectados. Claro, yo también tendría hambre y estaría triste si me hubieran caído tantas rocas y tierra. Sweet me mira raro, bueno, no solo a mí. Sin embargo ahora mi atención se centra en el largo y pesado pokémon que todos quieren examinar.

Aquello es demasiado. Todos iban a coger carne primero ¡No es justo! Mi presa… es mío. Yo debería dar el primer y el más grande bocado. Pero Kate no parecía gustarle que reclamara mi parte. Me siento impelido a hacerle caso, y noto… cariño hacia ella; pero… Miro a Kate y tironeo un poco de su pierna para llamar su atención. Con ojos suplicantes señalo al oponente derribado y gimoteo un poco.-Chate… ma… mi… mío.- Trato de imitar los sonidos para reclamar mi propiedad, o al menos mi parte. Pero es difícil reproducir esos sonidos.

¡Oh, genial! Doc llorando...joder, a mí tampoco me hace ninguna gracia que nos hayamos cargado a un Pokémon, ni siquiera en defensa propia, pero tampoco hay que ponerse existencialistas. ¿Es triste? Lo es, ¿Está feo? Lo está, ¿Hubo otro remedio? Seguramente, pero hubo poco tiempo para pensar en ello cuando casi me matan.

Y encima Charmander no entiende la situación. Creo que quiere reclamar su trofeo y me está llamando para que defienda sus intereses. Me agacho y le paso la mano por el hombro.

- Tranquilo, criatura. Nadie te va a arrebatar lo que es tuyo; me has salvado la vida

Luego miro a Doc, a Gin y a Sasori con ojos interrogantes, ¿Cómo hago para que entienda que no puede quedarse con el Seviper muerto?

Un area de poder mental golpea a todos, humanos y pokemon. Un grito en su mente, de dolor y sufrimiento por el alma perdida. Un grito contra aquellos humanos que usan a los pokemon para sus propias luchas. Un grito de alma sufriendo por una vida estúpidamente perdida. Miro con ojos fríos ha Kate, pero entiendo que ella no tuvo la culpa. Ni siquiera charmander, o sneasel, o quien quiera que acabara con él, la culpa de este pokemon muerto es de aquel que lo envió a luchar. Me acerco a ambos, al principio parece que con intención de luchar, pero mi cara cambia pronto. Si bien su semblante sigue siendo sombrío, mira a ambos.

Me alegra que estéis bien, debió de ser una lucha dura.

No dice más, no cree necesario decir más. ¿Qué harán ahora con este cadáver? Lo mejor sería enterrarlo, pero... ¿qué pensará Mark hacer con él? Tampoco sabe muy bien las costumbres de pokemons tan salvajes como un charmander, o tan raros como un sneasel... mira interrogadora a Mark.

Lo enterraremos, ¿no? es lo menos que se merece... la culpa de luchar no fue suya.

Cierro mis ojos, los abro poco después. Hemos salido al exterior, y hay un Pokémon muerto. Kate, Sasori, y sus dos Pokémon parecen los responsables. Me acerco, curiosa, a visualizar mejor el cadáver de lo que fue un Seviper unos minutos antes. No sé cuanto tiempo ha pasado, pero tampoco ha sido tanto. Ellos también tienen la culpa de lo sucedido, pero actuar en defensa propio es legítimo. Parece que Kate es la única que no se ha visto involucrada en la pelea, como dictan los estándares de esta tóxica e infecta sociedad. Los chicos pelean, y las chicas miran. No siempre es así. 

Mark estaba hecho polvo. Gin, perplejo por lo que iba viendo. Sasori, más hablador que de costumbre, nos explicó que una banda les había atacado. A aquellos cuervos debía tenérseles respeto. Si habían permitido que uno de sus Pokémon muriera por un combate, había que tener cuidado con ellos. No obstante, seguro que con dejarlo inconsciente habría bastado. Yo había sido la primera del grupo en pelear, y había herido al Pokémon contrario, pero Sneasel, o Charmander, o ambos, con sus respectivos dueños, habían matado a otro Pokémon. 

No sentía tristeza, pero no estaba feliz. Sabía que la guerra causaba estas cosas. No obstante, imaginaba que éramos ajenos a ello, o por lo menos, que la muerte no visitaría nuestra puerta tan pronto. Por un lado, estaba preparada para ver cadáveres. Por otro, no imaginaba que los vería tan pronto. Sacudí mi cabeza muy lentamente, deshaciéndome de esos pensamientos. Entendía lo que había sucedido. Y punto. ¿Qué más daba? Al fin y al cabo, era como decía Gin. Mejor ellos que nosotros. 

Mis vínculos con Sneasel, Sasori, Charmander, Kate, Sweet y Mark no eran grandes. No lo era tampoco mi vínculo con Gin. En parte porque no sentía que pertenecía al grupo, en parte porque aún no los entendía, pero en parte porque no quería yo. Sin embargo, sabía qué sucedía cuando la tristeza azotaba a algún ser, fuera quien fuera el mismo. Levitando, como me movía, me aproximé al Doctor Caramelos con la misma expresión en mi rostro que siempre, denotando indiferencia (no de forma voluntaria, no era capaz de cambiar mi expresión), y con una de mis garras le toqué la mano un poco, intentando con ese gesto tranquilizarlo o animarlo, acariciándola muy suavemente por un breve periodo de tiempo antes de retirarme poco a poco hacia un lugar alejado un par de metros del resto de los miembros del equipo.

Antes de poder sepultar al Seviper como corresponde, los demás miembros del grupo se reúnen con nosotros. El Doctor es el primero en llegar, con una dramática entrada tomo el cuerpo sin vida del pokemon y no logra contener las lagrimas, si realmente fue un militar habrá vivido esto mismo en las guerras. Nunca es fácil llevar una muerte y es la primera vez que sneasel se ve involucrado en algo tan severo, pero su pasado lo ah preparado para estas situaciones.

Puedo notar como varios de ellos clavan sus miradas en mi, era normal y estaba acostumbrado, entre un pequeño Charmander y un Sneasel es lógico que deduzcan eso por eso no le dio demasiada importancia. 

Sasori había explicado bien la situación, tal vez las cosas podrían haber sido de otra manera, pero no lo fueron, sucedieron así y no hay vuelta atrás. Me pongo al lado de Sasori y hablo con el doctor deberíamos enterrar el cuerpo es todo lo que dice.

Mark alcanza su baston y lo deja en el suelo junto al pokemon el cual deja descansar.

- La decision es tuya Kate -dice como respondiendo a todos- tu fuiste la afrentada.

Levanta la mirada y puedes er que solo ha soltado esa lagrima, pero sus ojos se han endurecido considerablemente.

- ¿Que quieres hacer con el Seviper?

Suspiro profundamente. De mal humor. Charmander quiere comerse al muerto, lo cual, imagino, es lo natural, pero no lo correcto. Doc está sensible y quiere hacer algo correcto, pero que va contra mi naturaleza, que me pide que le conceda a Charmander lo que quiere. ¡Maldita sea, ha matado a un Pokémon mucho más grande que él para salvarme! Si, claro Sasori y Sneasel han contribuido, y estoy conmovida, pero Charmander, mi Pokémon desde hace solo unas horas, mi pequeño Charmander, mi compañero de viaje Pokémon, me ha salvado la vida arriesgándose mucho.

- El único que me ha afrentado ha sido el entrenador de este Pokémon, que lo ha empleado con malos fines - "ajustaremos cuentas, amigos de negro", juro mentalmente -. El Seviper no ha hecho nada más que lo que le han ordenado

"Ha muerto como un esclavo", dirían los Armonia de Teselia.

- ¿Qué...qué debemos hacer? - pregunta Kate Manson, la indecisa y dulce granjera de Ciudad Orquídea, que nunca antes se había encontrado con la muerte

"Deberíamos enterrar el cuerpo dice..." Mientras los demás seguían hablando, Gin terminaba de acercarse a los demás.Aunque tuvo una actitud extraña en ese momento, quizá porque no podía terminar de anexar sus ideas concretamente debido al golpe.Se acerco mas y mas a Kate, quizá demasiado cerca dirían algunos.Al punto de que sus narices estaban separadas por un par de centímetros si Kate no se alejaba.Sin duda había una linea de sangre bajando por un costado de su cabeza, pero sus ojos grises y profundos miraban directamente a los de la mujer.Parecía que la estaba examinando, que buscaba ver algo mas allá de la simple mascara que era el rostro humano.

Segundos después Gin sonrió de forma carismática y coloco una de sus manos sobre el hombro de la muchacha -Vamos a enterrarlo, seguro podrás hacer que tu Pokemon entienda.- Gin se dio media vuelta -Luego tenemos que ir a Ciudad Trigal, debemos entregar el portátil del profesor al profesor Trillo.- En ese segundo Gin lanzo una mirada a Mark, dejandole saber que estaría en el decir las razones por las que debían hacer esto o no.Sin mas, después de buscar un lugar en el suelo, ajusto sus guantes y miro al Sneasel -Quizá necesite ayuda.- Disponiéndose a cavar.
 

Estaba bastante difícil, no te culpo. De todas maneras no tiene manera de reconocer de quien proviene el sondeo mental...y habiendo 2 pokémon psíquicos tú eres el último en quien va a pensar jeje.

-Si, si que la vas a necesitar.- Comente, acercandome al doctor y quitandole su casco en un gesto rapido de muñeca.- Lo siento, Doc, a menos que guardes una pala en esa "joroba" tuya que llevas siempre a la espalda, tendre que utilzar esto con tu permiso.- "O sin el" Pense, ante colocarme junto a Gin, arrodilladonme en el suelo.

Sin decir mas, me dispuse a cavar con el casco la suficiente tierra para crear un hoyo que enterrar la no pequeña serpiente. Habia muchas cosas por hacer, pero algunas tenian prioridad sobre otras, entre ellas, la muerte, ya fuera humana o pokemon.

Mark asiente, en su rostro se ha dejado de reflejar la compugcion. Mira a Charmander quien reclamaba su parte, se gira hacia Kate y deshaciendose de su cinturon se lo lanza.

- Las bolas estan en el bolso derecho.

Luego habla a los que tiene alrededor. Contesta primero a Sasori.

- No, no tengo pala, usa eso. El resto... dejadme un poco de intimidad porfavor. Seviper aun tiene un ultimo servicio que prestar. -dice agarrando su cuchillo- Sweet, ven conmigo.

Se notaba que su tono de voz habia cambiado a un tono mas neutro y frio.