Your hellish rebuke consumes your attacker and its nearby allies.
Level: 13
Price: 17000 gp
Implement (Wand)
Enhancement: +3 attack rolls and damage rolls
Critical: +3d8 damage
Property: When hellish rebuke causes a target to take damage from attacking you, all of its adjacent allies take damage equal to half that amount.
Power (Encounter • Arcane, Fire, Implement): Standard Action. As the warlock’s hellish rebuke power.
First published in Adventurer's Vault.
Así a bote pronto no veo nada muy interesante para mí. En cualquier caso yo soy de la opinión de seguir a Helen :)
Truvio: Si puedes usar la varita.
¿Queréis hacer algo durante el día?, ¿que?. Si no supondré que lo pasáis en la posada esperando que suceda algo.
Tras pasar la noche en vela por si había un ataque nocturno, Eyskhan se echa un rato en su camastro para dormir unas horas
- Yo creo que la idea de Helen no están tan mal. Me refiero a pasear por las calles buscando información.
La idea de estar a la espera en una posada todo un día no parecía nada atrayente, además, podría ser sospechosa...
- Otra opción es salir a ver si el viejo dragón (¿Jubok?, no recuerdo el nombre) no ha desaparecido también. No nos costó mucho entrar en la ciudad, no creo que pongan problemas hoy tampoco.
Ok a lo de la varita Master.
A ver si soy capaz de actualizar mi ficha sin equivocarme :D
En cualquier caso, sería mejor ir a ver Juptal más adelante. - comenta Quarion al comentario de Truvio. - No queremos que nos cobren cada vez que salgamos.
Búsqueda de información en la calle. Seremos escolta de Helen y del arma ahí fuera.
El grupo pasa el día vagabundeando por Durbenford. Visitan el mercado, comen en un puesto callejero y pasan la tarde paseando por el barrio noble, la calle de los templos y la zona portuaria, con sus impresionantes vistas del lago.
Todos se muestran callados y reservados, excepto por Helen, que se introduce en todas las conversaciones posibles, desde los puestos del mercadillo hasta las oscuras tabernas del barrio portuario, pasando por la entrada de casi todos los templos.
Al caer la noche, se dirigen al Buey y el Martillo, a cenar y a disfrutar del espectáculo. Como siempre la posada se encuentra a rebosar.
Habéis disfrutado de un día libre en la ciudad. Si queréis comprar/vender rituales/objetos mágicos/cosas mundanas, no tenéis mas que decirlo.
Las conversaciones tratan sobre los mismos temas que las de la noche pasada. A medida que iba transcurriendo el día, la gente se sorprendía menos al veros. Sospecháis que el verdadero tema de conversación de la ciudad sois vosotros, pero evidentemente nadie os lo cuenta.
- ¿Y ahora qué hacemos? No parece que estemos avanzando mucho aquí.
Los pocos que estamos estamos muuuu perdidos...
Yo propongo lo de Juptal, por probar alternativas...
Tras pasar la noche en la posada, el grupo se retira a sus habitaciones a dormir. El nerviosismo de la espera, hace mella y duermen mal.
Cuando los que no están vigilando logran conciliar el sueño les despierta el sonido de alguien llamando a la puerta: Toc,toc,toc...
Es normal que estéis perdidos. No tenéis nada que hacer excepto esperar.
La culpa es mía por no avanzar la historia mas rápido. Mala gestión del ritmo. Complicada por el temor a dejar a alguien que no este atendiendo sin hacer alguna cosa.
Como no habéis dicho nada supongo que dormís en la suite de la posada (para algo tenéis pasta). Son dos habitaciones con una salita central. La puerta hacia el pasillo, la que suena es la de la sala. Rikkard se queda a dormir fuera, en la sala común.
hola javi,
Tengo muy poco tiempo para la partida (posiblemente hasta final de septiembre que tenga internet en casa) asi que PNJotizame como veas conveniente, que mis motivaciones las sabes igual de bien que yo :-)
Digo, por no retrasar la historia...
Gracias!
Al ver que no le abren lo que quiera que este llamando a la puerta empieza a golpearla. La puerta resiste a duras penas los embates de lo que aceche al otro lado.
Tirada: 1d20(+5)
Motivo: Fuerza
Resultado: 9(+5)=14
El minotauro se levanta rápidamente, flexiona sus poderosas piernas y prepara su gran hacha para golpear a lo que quiera que esta al otro lado de la puerta.
Tras despertar a los que no estén despiertos Truvio se coloca detrás de la puerta y calcula el ritmo de las embestidas, escuchando los sonidos al otro lado.
Cuando detecta la siguiente carrera espera el momento más adecuado para abrir la puerta.
.....
....
ahora
La idea es ponerme al lado de la puerta para la que no abre (es decir, la pared del pomo, no de las bisagras) y cuando calcule que va a embestir abrirla.
El que esté embistiendo, en una situación ideal correría más de la cuenta y o caería o quedaría en el medio del grupo y bastante descolocado.
Quarion percibe la estrategia de Truvio y asiente su conformidad con la cabeza mientras espera a recibir al visitante con sus armas preparadas...
Truvio ejecuta su maniobra perfectamente, al abrir la puerta un bulto se precipita en la habitación, aterrizando en el suelo a los pies de Rikkard.
El bulto es un hombre pequeño, de cuerpo delgado y muy fibroso y la cara llena de arrugas. Tres estrañas cicatrices con forma de estrella adornan su mejilla derecha. Mira hacía el grupo confundido.
El minotauro hace un gesto con su hacha, como golpeando al hombre del suelo, mientras mira al grupo:
-¿ Mato....?
Quiero aclarar que a efectos de reglas, el sujeto esta prone y sorprendido, pero ni derrotado ni indefenso. Vamos que Rikkard no lo va a tener tan fácil como cree.
Vuestros personajes se dan cuenta que el hombre ha recuperado la postura instintivamente, lo que probablemente significa que está acostumbrado a luchar por su vida.
Tranquilo Rikkard. - dice Quarion mientras mira al bulto.
Estás más que rodeado así que empieza a decir quién eres y qué quieres.- Quarion hace una pausa dramática y continúa.
Eso o te dejamos con Rikkard. Tú decides.
[PNJitazada]
- Las marcas... es el emisario del principe. - Helen parece sorprendida.
- ¡EXACTAMENTE! - gritá el desconocido mientras se levanta con toda la dignidad que puede sacudiendose el polvo. - Y ahora, enseñarme la caja, quiero ver el Nanok. - el tono es claramente imperativo.