Partida Rol por web

Introduccion 

Esto ha comenzado, esto durara hasta que decidan reunirse en el palacio. Segun lo que decidan puede haber tiradas, por ejemplo:

Tirada de Val si quieren abrir la puerta del templo:
Tirada de Sab del vizir si quiere intentar contentar sus subordinados, pero aun asi no menos retractores 
Tirada de Car por si se quiere intentar interrogar al mendigo y ver si es alguna amenaza en realidad
Tirada de Per por si quieren investigar los alrededores de las puertas o, si quieren realizar alguna hazaña manual.(Malabares  extraordinarios enzo?)(?¿

A partir de eso tienen total libertad de acción y para agregar detalles al reino.

La region 1 es algo asi como un palacio dentro de estrechos y altos muros del que sale un delgado pasillo hasta lo desconocido del laberinto. Por lo que gran parte de esta region la ocupa el palacio, aun asi se puede ver el cielo, pero de forma mas debil y con menor brillo que en la zona 2. 
La region 2 es una planicie abierta rodeado y atravesada por por altas columnas de roca.
 

El Rey Hoshi estaba en la gran Sala Triangular en medio de la cual estaba la Mesa Redonda.   

Bien hubiera podido ser al revés, pero así lo decidió la Corte y la suerte, bien.   

Amplio espacio había atrás de la mesa, para bien circular (o triangular) y tomar libros y mapas y bocadillos si fuera necesario.   Altísimos ventanales dejaban entrar la luz; unos era transparentes para la buena lectura de libros, mapas, labios, expresiones y gestos.   Otros eran vitrales multicolores, con escenas que representaban, con mayor o menor grado de abstracción, diferentes formas de ver los valores de lo Guacamayéutico, lo Pa'delantario, o lo Poliamoroso de esta nueva República.   

Mhmm, nuestra siguiente exploración deberá ser con conocimiento previo.  Ya sea lo que nos diga el templo, o lo que nos consigan las habilidades ninjas de Vincenzo, estoy seguro que lo podremos saber de antemano.  Haremos lo posible para no perder a nadie del contingente en esta nuestra exploración.   

Tales eran sus deseos, aunque luego la realidad los hiciera difícil de cumplir.  

Meditaba en esto Hoshi revisando un mapa de la Región 2, la que conectaba al templo vía una escaleras con la región principal; lo hacía bajo la variegada luz de uno de los vitrales más altos, cuando se abrió la puerta y vio entrar a... 

Subió, entonces, las escaleras hacia Palacio con el propósito de contactar con el Rey.

Las escaleras que conectan la región 1 con la 2 están hechas con libros grandes de antiguos sabios, apilados unos con otros. Pesan mucho y no se pueden abrir. Los que se encuentran arriba, en la Región 1, quedaron petrificados por las condiciones de la región, ya que estos libros necesitan luz de estrellas para mantenerse. Los que se encuentran abajo, más blanditos, están cerrados por el peso que ejercen los libros de encima. Éstos podrían sacarse, abrirse y descubrir su interior, pero, ¿quién se arriesgaría a destruir las escaleras y desconectar el Templo del Palacio? A los bordes de las escaleras crece diversa vegetación, hongos de medio metro, árboles que gesticulan. Las luciérnagas se pasean a la espera de que el señor Sapo y la señora Rana capturen su comida con la lengua.

—Mmmm, estos libros están más duros que de costumbre. —Se frena en la mitad de las escaleras para comprobar las suelas de sus sandalias de madera.— No me he equivocado de calzado. Espero que la señorita Richards no esté jugando con sus hechizos en las conexiones del Reino...

Arturo entra al palacio, Mis disculpas su alteza, estaba estudiando las dinamicas y efectos de los besos y perdi la nocion del tiempo, lamento sinceramente haberlo hecho esperar tanto.

Arturo se percata de una mirada en los ojos del Rey, ¡eh! no... no me mal entienda... todo es teorico, pero siento que es una tecnica que estoy por lograr comprender, aunque ahora empiezo a dudar si sus beneficios justifican las consecuencias, lleva su mano a su barbilla de manera pensativa.

Como siempre, estoy acompañando al rey mientras los otros sirvientes menores (a los que por cierto recompense por su tarea con sueldo extra) se ocupaban de otros quehaceres. 

Sigo al rey en todo momento, pero observo como Chiyoko-sama entra en escena subiendo por una escalera que no recuerdo haber creado con mi magia ¿La habrían creado algún elfo mago aleatorio? ¿O mi maestro en su salida del castillo? Es igual. Pero la estructura era impresionante. 

Acto seguido, entra el zalamero cocinero de Arturo, cuyos modales eran tan deliciosos como sus platos... O eso creía yo. Me río suavemente ante sus palabras y procuró mantener las formas mientras le guiño un ojo. 

Listo, pueden reunirse si quieren y comenzar la fase de organización. Vamos a unirla con la fase de acción así que también pueden rolear sus acciones.

No se preocupe estimado visir, el estudio de los besos siempre será una prioridad en esta nuestra poliamorosa república.  Cualquiera puede llegar tarde por ello a cualquier reunión, sin duda.    Es como un pase universal.   

Ahora bien, es intrigante la pregunta que usted se hacía: ¿superan los beneficios a las consecuencias?    Seguro que no siempre, ni que tampoco nunca.   La pregunta sería entonces mejor girarla a: ¿cuando?  -suspiró-  Hay tanto que no sabemos, sobre todo cuando el amor se entrelaza en ello.  Creo que siempre se decide bajo incertidumbre, impulso, intuición, y otras cosas que empiezan con la letra "i".   (Irracionalidad, e irreverencia, son dos que se me ocurren por el momento.)  

Claro que las teorías pocas veces sobreviven a la práctica en estos casos, tómelo en cuenta.  Al menos eso nos dice el libro de las Revoluciones Científicas del viejo Khun.  Apuntó a un viejo tomo, cuyo lomo sugería que había sido minado de las escaleras del templo en otra época menos responsable que esta.  

Pero pase, busque un lugar entre los asientos vacíos en lo que llegan lxs demás. -El suyo estaba marcado por aquella tetera con lapsang que humeaba delicioso.-   Con las nuevas que traiga cada persona de la Corte decidiremos donde explorar esta temporada.   Me imagino que usted nos viene a contar que hay premura por conseguir recursos, ¿cierto?    ¿Logró tranquilizar un poco a la gente?   Con esto de mendigos llegando por la puerta de Visitantes, y heridos llegando por la puerta del Laberinto, creo que enfrentamos problemas en ambas fronteras.  -frunció el ceño, notable ahora que no usaba el sombrero en el interior de Palacio.-  No será fácil decidir.

Christa y yo, por nuestra parte, confirmamos que las estrellas están muy inquietas, y averiguamos que no están saliendo para su migración diaria entre regiones por que dicen que hay un Devorador de Estrellas.     Algo grave.    Sin estrellas no habría reino ni república, sólo caos.  

¿Qué se sabe de Nimia?   -Preguntó Hoshi preocupado. 

Alguien que vaya a buscar por donde último fue vista, por favor.  Disponga para ello de un equipo de 7 seguidores, es decir, 7 personas que le ayuden a seguir su pista. 

Vamos.  -Estaba preocupado por la médica de la república. 

Christa, igualmente, toma por favor a 7 ayudantes y busca pistas por favor del Devorador de Estrellas.   No te expongas demasiado por favor.  Si percibes mayor peligro, manda llamar por refuerzos.  

Gotorda tiene una guarda de 7 expertas guerreras. 

Igualmente, la hermana Chiyoko tiene 7 guardias/acólitas asignadas al templo, sus rituales y seguridad.

Se que Biancarella tiene 7 "gorriones", sus espías dispersos, algunos juglares, otros ninjas, otros más subrepticios. 

Los nekos guerreros que llegaron heridos en la calabaza parece que son 7 también.  Las predicciones astrológicas estaban coincidiendo.

El rey hacía cuentas de la gente asignada a los diferentes responsables en la Corte.   Curiosamente su más reciente predicción astrológica le decía que lo mejor era asignar 7 personas a cada quien, para entrenarlos y para que, con el tiempo, les fueran ayudando a crecer en mayores habilidades y talentos.  

Reconvenimos a la noche, estimada Corte, para que todo el mundo pueda avanzar en sus tareas y decidamos lo más sabiamente posible nuestra exploración próxima. 

Me pido a los más grandes... No quiero estorbos a mi cargo...

Al entrar al laberinto, cada quien podrá llevar de su comitiva a los que considere necesarios.  - dijo el rey Hoshi, confiando en que cada quien evaluaría las tareas. 

De esa manera alguien se quedará cuidando que no se escapen los unicorniconejos por el prado.  Luego para arrear a esos toma intervención divina.  Díganselo a ese agujero en mi sombrero.

Chiyoko llegaba hacia la Mesa Redonda. A su paso, sus ayudantes abrían las puertas y se inclinaban cada vez que pasaba. Si hubiera algún pueblerino, hacían apartarles del camino. Ella, sin embargo, se paraba para saludarles y desearles los buenos días.

Sus ayudantes tienen este aspecto, variando entre humanos y ranas:

—¡Tenemos un nuevo ciudadano! Está en el Templo limpiándolo, dice que no recuerda nada. Puede que sea verdad... porque venía ebrio, quizás drogado con píldoras de olvido. Su nombre es Kata, debe ser abreviatura de algo. La impresión que me dio fue de un antiguo guerrero. Según dice, es el único superviviente...

Mis ayudantes me servían té y me humedecían la boca para seguir hablando.

—Nos será útil si nos acompaña en el Laberinto. Al menos sabrá indicarnos el camino correcto en las primeras vueltas, antes de que el laberinto cambie demasiado. ¡Podríamos pobrar sus habilidades!, quizás el caballero Gortorda pueda analizarle mejor, él tiene más experiencia en el campo de batalla.

Entendido señor ire con un grupo a investigar las cercanias de la casa de Nimia.

No me gusta exponer a los ciudadanos a los peligros del laberinto, pero no puedo negar que su ayuda es indispensable, mi plan original era llevar a 6 ciudadanos, incluyendo a 3 de los ancianos, 2 con lanza y 1 con escudo

(En este orden Sophie, lanza, Alexis, lanza y Robert, Escudo)

Y tres ciudadanos mas 2 escudos mas y otra lanza

(En orden Frank, Escudo, Melissa, Escudo y Mei, lanza)º
 

Asi partimos a investigar la pista de la desaparicion de Nimia en la Naturaleza, pero ya en el area noto algo inusual, se unio al grupo una ciudadana nueva, no se cual haya sido su motivacion pero me da la impresion de ser confiable, asi que le permito unirse a la exploracion, le entrego una lanza

¿Sabes usarla?, me acerco y le susurro, ese anciano de ahi se llama Sophie y odia que le recuerden que es nombre de mujer la mayoria lo llamamos señor S, por cierto ¿cual es tu nombre?

El rey Hoshi estudiaba como canalizar a "la voz del pueblo" para que el oráculo del templo le develara qué tipo de monstruos había en distintas partes del laberinto.   Claro, una vez decidido en la Mesa Redonda a donde irían, sería cuando le pediría a la Síbila Chiyoko que lo acompañase al ritual.

Por lo pronto estudiaba, esperando que las y los cortesanos fueran trayendo las nuevas nuevas de sus averiguancias (o vagancias, que de todo se aprende).

Asiento, sonriente ante su majestad y le hago una reverencia amable.

 - A sus órdenes majestad. Mandare a los sirvientes de más confianza que tenemos en nómina. Son buenos hombres y mujeres, harán el trabajo satisfactoriamente - vuelvo a hacer una reverencia y me retiro, de camino a la sala de espera del servicio. 

Cuando llego, me encuentro con todos preparándose para trabajar. Está a punto de empezar el turno de la mañana. Los que estaban de guardia eran siervos mágicos que había instalado yo. Les sonrío a todos mientras les miro preocupada.

- Chicos, esto es algo grave. Su majestad el rey Hoshi y yo hemos descubierto algo preocupante. Un Devorador de Estrellas. Tranquilos, no debéis asustaros. Para nosotros, directamente no es peligroso a corto plazo, pero a largo plazo puede absorbernos la energía de la República. Así que vengo buscando a los más aptos para buscar pistas sobre este ser "cósmico" - miro entre mis hombres y mujeres más aptos.

- Veamos... Tú Leandris - señalo a una chica gato - Hmmm. Tu Serperior - señalo a uno de los superiores, un hombre serpiente que solía ser algo "frío" con ellos, pero es que era una serpiente - Y tu, Walter - señalo a otro, un chico moreno, con una sonrisa contagiosa. Parecía humano, pero en realidad era un hombre cuervo que ocultaba sus alas.

- Nos reuniremos por la noche, en la puerta de Palacio ¿De acuerdo? - les digo a los tres, con una sonrisa - De mientras ¡A trabajar, siempre con una sonrisa!

Chiyoko, feliz porque el pueblo fuese muy, pero que muy devoto, salió de las oficinas hacia la Mesa Redonda, sin dar mayor importancia al coste del reino.

—¡Oh! ¿Todavía no han vuelto? —Se preocupó, sacó un abanico de una de sus mangas y empezó a airearse lentamente. —¿Qué habrá ocurrido? Aquella entrada más allá del Templo siempre ha estado cerrada, desde que tengo memoria. —Dejó el abanico a uno de sus ayudantes para que le abanicase mientras ella descansaba.— Algunas veces me acerqué por curiosidad y la oscuridad de lo desconocido me hizo retroceder. 

Chiyo miró a los demás cortesianos que se encontraban en la Mesa Redonda con una sonrisa floja, sin ánimo de aparentar alegría, pues ahora estaba preocupada por su pueblo. De todas formas confiaba en los que estaban allí y podía permitirse mostrar alguna debilidad. Agarró el rosario que le colgaba del cuello con el símbolo de Manon y lo apretó fuerte. Tenía miedo por Nimia, Hoshi, sus niños y por perder la fé de su Guacamayeutica Republica Padalentaria Poliamorosa .

—Queridos, os confesaré mis preocupaciones... Tengo el presentimiento de que las noticias que nos traigan de aquella vieja forja más allá del Templo nos harán replantearnos nuestra... filosofía... de vida. —Dijo filosofía, por no querer decir religión, lo cual hubiese sido muy inquietante viniendo de ella.

Lord Gortorda, -lo buscó el rey- mi sugerencia sería que hiciera una inspección de seguridad a las fronteras de la república.  Las estrellas están inquietas, y la gente también.   Mi intuición me dice que es mejor estar prevenidos que lamentados.  Sabía que él sabía mejor dónde y que hacer para ello, así que continuó con sus tareas de mapear estrellas.

Estimado Visir, el almacen creo será destinado al recurso del cual consigamos la mayor cantidad durante nuestra siguiente expedición; para que haya menos pérdidas de éste al guardarlo durante varios ciclos.   O eso creería yo.

El hablar de lo administrativo con el administrador del reino siempre lo calmaba, el frío de los números era algo refrescante dados los acontecimientos.   Pero después de un rato su semblante se ensombreció. 

Estoy pensando que Nimia, tan cuidadora de estrellas, quizá fue siguiendo la pista de las espantadas o desaparecidas.  Y no la encontramos precisamente porque estuviera en la cueva del DevoradordeEstrellas. 

Si fuera cierto, eso decidiría cual sería el lugar del laberinto al que irían a continuación. 

Uno de los guardias entró rodando en la Mesa Redonda con un mensaje para Chiyoko. Era un hombre vestido con una redonda coraza de acero que cubría todas sus extremidades que dificultaba sus movimientos al caminar. Para remediar su torpeza, prefería moverse rodando como una bola. El mensajero entró rapido y frenó a pocos milímetros de chocar con Chiyoko causando una cortina de humo.

—Respetable Sibila, su nuevo monje ¿llamado? ¿Kata? os ha enviado un mensaje desde el Templo, en donde sigue realizando sus tareas diaria que usted le ordenó.

—No se preocupe, puede decir el mensaje en voz alta. —Se tapaba la nariz, aquél humo junto al olor del metal le era desagradable.

—El mensaje era: "Creo que conocí a la tal Nimia...". ¡Esto es todo! —Se tiró al suelo y salió de la habitación rodando de nuevo.

Chiyoko se levantó de la alegría de un golpe, muy contenta. Cerró las dos manos junto al pecho para contener la alegría que estaba sintiendo. Sus ojos se iluminaron imaginando haber encontrado el tesoro perdido. Su expresión jovial, a pesar de su larga edad, terminaban de componer su faceta tierna característica.

—Señores aquí sentados, nuestros dioses ya me lo decían a través de mis corazonadas. El Viejo Dios que Ríe, sí, es él, JAJAJA, me hace reír. —Se contuvo, necesitaba expresar lo que quería decir y para eso debía relajarse.— Nuestro nuevo ciudadano, que ahora se encuentra en el Templo limpiándolo y que no recordaba nada, ¡acaba de obtener la gracia de la Diosa Memo! —Con su manga de tela se limpió algunas gotas de saliva que habían caído a sus labios de la emoción. Ahora sus manos estaban sobre la mesa, sujetándola con firmeza.— ¡Lo sabía!, ¡sabía que las diosas se apiadarían para ayudarnos a encontrar a Nimia! —La seriedad que mostraba al hablar de dioses daba un poco de miedo.

Después de hablar, se asomó por el balcón de la habitación y colocó sus manos de forma curvada sobre su boca para llamar a su montura.

—¡¡¡¡¡RRRRRRRRo!!!!!! ¡¡¡¡¡RRRRRRRRo!!!!!! —El enorme conejo cornudo azulado apareció dando saltos desde la lejanía. Todavía tenía una zanahoria gigante en la boca, parecía que estaba comiendo.— ¡Rro! Necesito que traigas a Kata hasta aquí,  por favor, está en el Templo, ¿podrás? —El conejo asintió, era bastante inteligente para ser una montura. Se perdió de vista saltando. Chiyoko se giró de nuevo hacia dentro y sonrió.— Ahora podremos pensar mejor en nuestro plan junto a nuestro nuevo acompañante. ¿Qué decis?