Partida Rol por web

Sangrientas Navidades

Roja Navidad

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08/08/2016, 08:29
Jim Thompson

Las palabras de Lindsey le reconfortaron, siempre sabía que tenía que decir para animarlo o tranquilizarlo. Los años de amistad habían hecho que Lindsey conociera los pensamientos de Jim incluso que su madre. No, no me pasa nada… Respondió de forma mecánica con el fin de que no siguiera preocupándose por él.

¿Crees que nos dejaran hablar con él? ¿Crees que habrán encerrado también a tu hermana? Jim no estaba que el sheriff le dejara ver a su amigo. Entonces se escuchó la puerta de la entrada y una de las dos preguntas quedo respondida.

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08/08/2016, 08:31
Jim Thompson

Miro hacia la puerta y vio a Mercy con cara de pocos amigos y el maquillaje corrido por las lágrimas.  No había que ser un experto en psicología para saber que la chica más popular del instituto estaba pasando por uno de sus peores momentos. Mercy ¿Qué ha pasado? Pregunto movido por la curiosidad.

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08/08/2016, 13:03
Troy Jacobson

La expresión de Troy cambió cuando Sidney se disculpó.

- Eh, tú no tienes que disculparte de nada. -dijo con seriedad.- La culpa es de Kurt, por creerse por encima de los demás. -relajó el gesto, pasándose la mano por la cara.- Y del poli mejor ni hablamos, el tío tenía demasiadas ganas de irse a su casa.

Antes de poder pensar en algún otro comentario sarcástico sobre el agente, Troy sintió como Sidney tiraba de él hacia el interior. No pudo evitar cierta sorpresa, pero su cuerpo no ofreció ninguna resistencia. Se le aceleró el pulso, pero hizo uso de todo su aplomo para no dar señales de ello.

- Hola. -dijo en dirección hacia donde había hablado ella, suponiendo que su padre estaba en otra parte de la casa.

Siguió observando el interior con curiosidad. Se acercó al sillón con cautela, como si fuese algo que no debiera estar tocando, y se sentó en el borde. Cuando Sidney le preguntó si había aceptado la propuesta de Mercy, Troy se mostró divertido y satisfecho.

- Pues claro, no iba a dejar pasar la oportunidad de darle semejante patada en la moral a Kurt. Hasta tú habrías aceptado. -añadió sonriente, percibiendo que Sidney no parecía muy conforme hablando de Mercy. Tuvo que contenerse y elegir bién sus palabras.- Dudo que Mercy se hubiese dignado a aparecer en el baile conmigo al lado, la intención de ambos era fastidiar a Kurt.

Troy recordó entonces la reacción de Kurt, lo trastornado que parecía y lo peligroso que sabía que se había convertido después de todo aquello. Pero en mitad de ese pensamiento, Troy percibió una forma extraña de hablar por parte de Sidney, haciendo referencia al director. Entrecerró los ojos, con curiosidad por lo que había estado apunto de escaparse de su boca.

- Sí, Kurt perdió la cabeza. Literalmente, creo. Se reía como un poseso, y no descarto que pretenda vengarse. Pero lo ha perdido todo, y si intenta hacer algo quedará aun peor. Y sobre lo que diga tu... -hizo una pausa intencionada.- el director, ahora mismo me da bastante igual. No puede hacerme nada, y nunca he tenido especial interés en el baile. -apoyó la espalda en el sofá, con claro gesto de satisfacción y tranquilidad. Después se le ocurrió algo y volvió a separarse del respaldo, acercándose a Sidney. -Tengo una idea. Ni tu ni yo tenemos pensado ir al baile. -se puso una mano juntoa al boca y habló bajito, como si compartiera un secreto.- Entre tú y yo, no hay mas que sosos ahí dentro... -sonrió y volvió a hablar con normalidad.- ¿Por qué no montamos nuestra propia fiesta? Delante del instituto, que todos vean que pasamos de su baile y de su ponche y de sus caras de aburridos. Puedo coger mí... -paró en seco, mostrando seriedad durante un segundo.- Puedo intentar pasar por mi casa a por mi equipo de música, nos podemos llevar algo de beber... Kat no irá al baile si tu tampoco vas, podría venirse. Y quizás Jim pueda escaparse de Lindsey un rato. -se quedó mirando a Sidney con cierta expectación, pero apenas había terminado de hablar volvió a echarse hacia atrás en el sofá y miró a otra parte.- Olvídalo, no se lo que digo. Es una idea absurda.

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08/08/2016, 15:03
Director

Kurt buscó por todos los lugares la pistola de su padre, pero no tuvo éxito en su búsqueda. Registró con afán todos los armarios, cajones, gavetas, y posibles escondrijos donde su padre podría haber guardado el arma y la munición de la pistola que Kurt sabía que guardaba en casa. Buscó en la cama, bajo ella, en el sofá, y en todos los rincones que se le ocurrió en que podría caber una pistola. Pero no la encontró.

Sabía que estaba allí, en algún lugar, la había visto ciento de veces. Su padre era muy descuidado y la dejaba por cualquier lado. Nunca se había atrevido a cogerla, pues temía las posibles represalias de tan osado acto, pero alguna vez la había tocado e incluso sostenido entre sus brazos para saber como pesaba. Esta vez iba a llevarse la con él, pero no logró dar con ella. Su padre la había escondido bien. O tal vez, dada la amenaza actual que se respiraba en Birchmont, se la hubiera llevado consigo, para protegerse.

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08/08/2016, 17:07
Mercy Wells

Sin mirar a Jim ni a su hermana, sin parar siquiera, un puñado de palabras surgieron de su boca. Tocaba el cielo Jim. Era feliz... Y entonces el director Cameron lo estropeó todo. Disfrutad del baile sin mi. Aceleró el paso y se encerró en su cuarto.

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08/08/2016, 22:24
Kurt Williams
Sólo para el director

¡joder! Maldijo para sí mismo, mientras volvía a dejar todo más o menos en orden para que su padre no notara el desastre. Tenía prisa y no podía perder más tiempo en aquello, así que dejó la búsqueda con la promesa de que en algún otro momento, con más calma, volvería a por ella. Sin embargo ahora apenas quedaban algo más de dos horas, y necesitaba moverse de casa aún. Miró si llevaba pasta, asintió cuando la encontró en uno de sus bolsillos y sin más dilación se largó otra vez dando un portazo en represalia a su padre por haber guardado el arma fuera de su alcance, aunque este no tuviera ni idea de que era lo que pasara. 

Condujo rápido aunque con ojo para no volver a ser detenido por la policía - tres encuentros con los agentes no iban a ser nada buenos para su reputación - y se fue directo primero al túnel de lavado y después a la tintorería a por su traje. Regresó a casa sin incidentes, se duchó, se preparó y antes de irse de casa, justo después de mirarse durante un rato al espejo hasta estar perfecto, cogió su guante de béisbol y se lo guardó al bolsillo. Intentó no pensar en el motivo, aunque los recuerdos le vendrían después durante el homenaje, estaba seguro. 

Suspiró y miró el reloj. Quedaba aún media hora y tardaría apenas diez minutos en llegar al instituto, había sido rápido. Salió aún así ya, a sabiendas de que llegaría pronto, y cuando llegó se quedó en el coche un poco más hasta que abrieran las puertas, observando a los que iban poco a poco llegando. 

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09/08/2016, 22:05
Sidney Evans

Sidney no estaba tan segura como se mostraba Troy respecto a las verdaderas intenciones de Mercy. Podía ser cierto y que la gemela Wells sólo pretendiera humillar más al que, en teoría, era su novio, pero ella pensaba que había algo más oculto tras las intenciones de Mercy, pues las miradas que le había visto lanzarle a Troy podían tener muchos significados. De todas formas y bajo el punto de vista de Sidney, tanto Kurt como Mercy eran dos impresentables necesitados de que alguien les diera una buena lección, quizás de esa forma ganaran un poco de humildad y se dieran cuenta del comportamiento que habían mantenido hasta el momento con los que no consideraban populares. Sí, una buena lección era lo que merecían aquellos dos.

Puede que tengas razón, aunque tengo la sensación de que Mercy se ha encaprichado de ti. —Se sorprendió al escuchar en voz alta la reflexión que debería haber guardado para ella, pero ya estaba dicha y no podía volverse atrás—. Kurt es una mala persona, muy rencoroso... Prométeme que vas a tener cuidado cuando te vuelvas a encontrar con él. No me fío de él y creo que sería capaz de cualquier cosa sólo por venganza.

La explicación que Troy le había dado del comportamiento de Kurt la dejó preocupada y no quería que se metiera en un lío por culpa de aquel imbécil porque seguramente sería él el que saliera perdiendo, la mala fama que tenía Troy era un punto en su contra.

Abrió los ojos sorprendida, sintiéndose de pronto expectante y animada ante la idea de Troy, pero después de unos segundos pensando en ella se dio cuenta de que, por mucho que le apeteciera a ella el plan, era imposible de realizar.

Estaría encantada de poder participar en esa fiesta, yo tengo mi equipo de música así que no haría falta que tú fueras a casa a buscarlo, y sino siempre podrías amenizarla tú con tu guitarra. —Pero había un detalle que a Troy parecía habérsele olvidado aunque a Sidney no, sobre todo después de lo que había visto hacía tan sólo unos momentos a través de la ventana—. Me parece una idea estupenda si no fuera porque sigo convencida de que el asesino de Derek y su familia aún está suelto y mucho me temo que, después de haberle visto rondándonos a todos, acosándonos y siguiéndonos, no va a cejar en su empeño por... por... —Fue incapaz de acabar la frase, negando con la cabeza para apartar cualquier imagen macabra que quisiera colarse en su cerebro.

Esa era la razón principal para considerar la idea de Troy poco oportuna en aquellos momentos, aunque no era la única.

Además, no creo que nuestra fiesta tuviera la aceptación necesaria. Hace ya tiempo que apenas hablo con Kat, casi ni la veo y si te soy sincera no tengo ni idea de cuáles serán sus planes para el baile. —Le resultaba difícil sincerarse sobre ese punto, pues Kat y ella habían sido inseparables desde que se conocieron—. Y dudo mucho que Lindsey suelte a Jim fácilmente, no deja de ser una Wells... egoísta, caprichosa y acaparadora. —Aunque consideraba a Mercy mucho peor que a su hermana, para Sidney las dos eran igual de crueles con la gente que no era popular—. Tendrías que aguantarme sólo a mí y dudo mucho que a ti te apeteciera...

Le dedicó una sonrisa traviesa, intentando enmascarar la parte de verdad que latía tras esas palabras con el tono bromista que le había dado. Por otra parte a Sidney no le había pasado desapercibido que Troy se había dado cuenta del desliz que había cometido cuando nombró al director. Se mordió el labio pensativa, dudando si sería buena idea contarle la verdad ya que si conocía el parentesco que le unía al director, quizás Troy preferiría incluso dejar de ser su amigo para evitar problemas.

Sobre el director Cameron... Verás, hace poco me he enterado que el director es mi tío. No tenía ni idea de su existencia y poco puedo contar sobre él porque mi madre no me quiere contar nada al respecto. No he dicho nada porque me da algo de vergüenza... es un hombre cruel y tiene esa fría mirada que me da escalofríos cuando se posa en mí... Para mí sigue siendo el director, soy incapaz de verle como un miembro de mi familia.

Ya estaba. Acababa de revelar uno de sus mayores secretos pero, por algún motivo que no podía explicarse, confiaba en Troy y sabía que si no le daba permiso, no se lo contaría a nadie.

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10/08/2016, 04:30
Lindsey Wells

Justo en el momento que estaba por responder a la pregunta de Jim, es Mercy quien ingresa a la casa envuelta en un extraño halo de tristeza. Algo que indudablemente su hermana gemela pudo captar a simple vista, no obstante se incorporó del sillón donde se encontraba abrazada a su novio mientras bebía un refresco. 

- ¿Qué sucede ahora? -preguntó la animadora cruzando los brazos, bastante ofuscada porque ya estaba al tanto del numerito que montó su hermana hace unos minutos. - ¿Tocabas el cielo? No entiendo nada y no te vas a tu cuarto hasta aclararme las cosas. Durante el día me viven llegando novedades de ti, que te vistes como Kat y ahora que eres la amante de Troy, aún saliendo con mi ex novio. Por favor, aclárame las cosas. - inquirió sin intentar herir demasiado a su hermana, la quería mucho y le dolía verla así. Sólo que también necesitaba comprender todo lo que estaba sucediendo con Mercy. 

Y tras formular las preguntas necesarias, le dedica una mirada a Jim complaciente. También se lo notaba preocupado por la gemela Wells. 

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10/08/2016, 11:11
Jim Thompson

Jin trato de ordenar las ideas, la información que le llegaba era confusa. ¿Troy y Mercy? ¿Mercy y Kurt? Lo que estaba pasando era más propio de una telenovela o una serie de adolescente que de la vida real. ¿En que estaba pensando Mercy para crear ese triángulo amoroso? Nada de eso podría salir bien.

Mercy, tranquilízate. ¿Qué ha pasado? Pregunto con calma mientras apretaba la mano de su novia. Hablando se solucionan las cosas. No…no… creo que sea tan grabe. Agrego con ingenuidad, dentro de su lista de valores la fama no era su prioridad más bien no estaba en su lista de prioridades, pero en el caso de Mercy la fama parecía ser su prioridad. 

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10/08/2016, 12:26
Troy Jacobson

Troy no pudo evitar sonreir ante el comentario sobre Mercy. De nuevo, no quiso hablar más de la cuenta e intentó medir sus palabras.

- Mercy no es más que una niña un poco malcriada. Ser repelente es la forma que ha escogido de defenderse de los demás. ¿No es eso lo que acabamos haciendo todos?

Recapacitó sobre la posibilidad de que el Santa Claus asesino siguiera suelto. Troy nunca había sido muy amigo de la autoridad (fuese la que fuese), y que Sidney hubiese visto a aquel tipo no ayudaba a que su confianza en la labor del sheriff aumentara. Apoyó la cabeza en la mano, pensativo. Tenía ideas encontradas sobre lo que podía ocurrir aquella noche, y temía que su actitud terminaría por decantar sus decisiones hacia el lado peligroso. Pero antes de poder decidirse, oyó el comentario de Sidney sobre pasar la noche solo con ella. La miró, notando el tono que le había dado a aquella frase. La mente de Troy dió dos saltos mortales con tirabuzón, y tuvo que toser para no atragantarse con su propio aliento. Se recompuso como pudo e intentó fingir normalidad.

- He aceptado quedarme a cenar, si no quisiera aguantarte ya habría roto una ventana y habría saltado por ella. Además... - hizo una pausa, intentando poner orden a todas las cosas que pasaban por su cabeza. Negó con la cabeza y volvió al tono de antes.- No se quién aguantaría a quién.

"Bravo, tío. Ya puedes volver al zoo del que te has escapado", pensó para sí mismo. Tenía la sensación de que no estaba dando ni una, y se sorprendió repiqueteando con los dedos en el sofá de forma nerviosa. Cambió de postura e intentó tranquilizarse, escuchando a Sidney hablar. Pero nada podría haberle preparado para lo que acababa de oir. ¿Cameron era tío de Sidney? Troy se la quedó mirando, con el ceño fruncido como único gesto en su cara. Después miró a su alrededor, como si esperara ver aparecer una cámara oculta. Volvió a girarse hacia Sidney, de nuevo sin inmutarse durante un instante.

- ¡Alto, ¿qué?! -exclamó finalmente, sacudiendo la cabeza. Se giró para ver si había alertado al padre de Sidney con su grito, y volvió a girarse rápidamente, esta vez hablando en tono mas bajo.- ¿Qué? ¿Cameron es tu tío? Ni siquiera me había imaginado nunca que tuviese familia, no me preguntes porqué. Waw... -la sorpresa inicial fue calmándose. Troy no pudo evitar sonreir maliciosamente.- Todo encaja, ahora ya sé a quién has salido. No me castigues...

Esperaba que aquel comentario sirviera para quitar algo de hierro al asunto, pues era evidente que a ella no le gustaba aquella situación. Y era comprensible, bastante suponía aguantar a Cameron en el instituto como para tener que verlo en alguna reunión familiar o en tu propia casa. Hablar del director volvió a recordarle el baile, y Troy retomó el hilo mental que estaba siguiendo momentos antes.

- Sobre el baile... Yo tengo que ir igualmente, me gustaría despedirme antes de irme. -señaló con el pulgar hacia la puerta, donde descansaban sus cosas. No estaba seguro de querer explicar la idea que había tenido, pero comenzó a hablar, esperando aclararse sobre la marcha.- Además... Entiendo que pueda ser peligroso con ese tipo suelto por ahí, pero el baile es, posiblemente, el sitio más seguro esta noche. Piénsalo: Ese tío fue a casa de los Spencer de noche, cuando nadie podía defenderse. Entró como un cobarde. En el baile habrá decenas de personas; si algo sucediera, se estaría metiendo en serios problemas. -hizo una pausa, dudando si continuar exponiendo lo que pensaba. Finalmente cogió aire y prosiguió.- Y si realmente ese tío busca a alguien y aparece esta noche, es el momento de cogerlo. Ojalá me equivoque, ojalá lo de hoy sea un baile cutre como cualquier otro, pero... Pero si ese cabrón aparece, tengo que estar ahí. Tengo que hacer algo al respecto. No quiero irme y saber que puede seguir por ahí, o que volverá a escaparse, o... -paró en seco. Notaba que le faltaba el aire. Apartó la mirada y frunció el ceño, apretándose las manos.- No quiero irme y saber que puede hacerte daño...

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10/08/2016, 21:43
Mercy Wells

Mercy se arrepintió de abrir la boca para responder a Jim, justo cuando su hermana la intentó poner contra la espada y la pared.

Pues,,, osea... si ya te lo han contado... ¿no? Osea.. no se que más quieres saer... ¿saes? respondió a Lindsey sorbiendo los mocos.* Antes de llegar a su cuarto escuchó Troy, amante, salir con su ex en la misma frase. Mercy paró en seco. Osea... me parece super mega fuerte!! Kurt y yo no salíamos. ¿Saes? Ese... maldito... se contuvo en soltar cualquier tipo de palabra malsonante. ni tan si quiera me pidió ir al baile.. ¿saes, no?

Y.. y... y... Troy! ¿Mi amante? Osea! ¿Qué disparate es ese? La voz de la joven temblaba y sus ojos emitieron un extraño brillo cuando pronunció el nombre del macarra del instituto. Jim, osea... Troy es tu amigo.. Llámale ¿no? Osea.. para él no existo como mujer, ¿saes? Mercy apretó los puños con fuerza. Iba por mal camino. Estaba dolida y confusa y el tercer grado al cual le sometía su hermana sólo la alteraba más.

Osea.. no quiero hablar más... sólo estar sola ¿saeis? Su rostro pareció tornarse gris cuando la tristeza volvió a apoderarse de ella. Mercy continuó su camino hacia su cuarto.

Notas de juego

* Perdón, tenía que ponerlo xDD

 

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11/08/2016, 03:19
Sidney Evans

A Sidney le empezaba a dar la sensación de que Troy estaba intentando, de alguna forma, defender a Mercy. Seguía sin entender porqué había que usar el menosprecio o la humillación como una forma de defensa y, a los ojos de Sid, aquello no era una excusa válida. Pero prefirió no decir nada al respecto pues empezaba a tener sus dudas si Troy no estaría igual de interesado en la Wells como ella parecía estarlo en él.

No se dejó arrastrar por ese pensamiento ya que las bromas de Troy consiguieron arrancarle no sólo una sonrisa sino incluso una leve carcajada.

Te he aguantado tantas horas mientras te daba clases que creo ser capaz de soportar algunas más.

La broma seguía aunque, por unos instantes, el gesto de Sidney volvió a ser frío cuando escuchó la incredulidad de Troy al saber que Cameron pertenecía a su familia, algo por otra parte bastante lógico ya que nadie en el instituto lo sabía y, desde luego, ella no iba a ir pregonándolo a los cuatro vientos. Pero por suerte Troy tenía la habilidad de hacerla sonreír dando por zanjado, con su última broma, el tema.

Sin embargo, le tocaba el turno a ella de sorprenderse cuando escuchó las intenciones de Troy de ir al baile.

Pensaba que habías dicho que el director te había prohibido ir al... Espera... ¿Despedirte? Pero... sólo te vas de vacaciones ¿no?

Sidney desvió la mirada hacia el punto que señalaba el dedo de Troy y un torbellino de pensamientos, sensaciones y sentimientos se cruzaron por su cabeza. Parecía increíble que una persona, en cuestión de segundos, pudiera pasar por tantos estados emocionales, pero así era.

Siempre había estado tan centrada en Derek, su amor platónico, convencida de que era el hombre de su vida, que nunca se había preocupado por fijarse en otros chicos. Y cuando en el instituto le asignaron la tutoría de Troy, había pensado que aquello iba a ser un desastre, que no encajarían y que lo único que conseguiría sería perder el tiempo. En cambio, durante las horas que había pasado junto al chico malo del instituto intentando que sus notas mejorasen, había descubierto una faceta completamente desconocida de Troy, descubriendo en él a alguien amable, capaz de hacerla reír, más inteligente de lo que demostraba en las clases y muy distinto a la imagen a la que todos estaban acostumbrados. Completamente distinto al inalcanzable y distante Derek.

Sin embargo no había sido hasta unas horas antes que los sentimientos que ella consideraba tan fuertes, se habían desmoronado por completo. Había llorado a Derek, pero no tanto como debería haber hecho, incluso se había sorprendido pensando más en las miradas que le lanzaba Mercy a Troy que en la muerte del chico que siempre le había gustado.

Saber que otra chica podía estar interesada en Troy había conseguido remover algo en su interior, algo que había estado latente, esperando el momento para saltar sobre ella y desmoronar su mundo conocido.

Acababa de perder a Derek pero, en cambio, no había sentido tanto miedo al conocer su muerte y saber que no lo volvería a ver nunca más, como el que tenía ahora al descubrir que podía perder a Troy también.

Su mundo conocido, la seguridad que le daba la inercia y la monotonía que había vivido hasta el momento, acababa de dar un giro de ciento ochenta grados.

Volvió a la realidad para enfrentarse a los ojos de Troy y escuchar la locura de lo que pretendía hacer esa noche. Negó con la cabeza, aún aturdida por el descubrimiento que acababa de hacer sobre sus sentimientos.

No pienso dejar que vayas tú solo al baile. Es una locura y no lo voy a permitir... Si quieres ir, me tendrás que llevar contigo.

¿Dónde había quedado la dulce, tímida, apocada e insípida Sidney? La seguridad que había mostrado en sus palabras dejaba muy claro que su intención era acompañar a Troy y que no admitiría una negativa por su parte.

Pero fueron sus últimas palabras, dichas sin mirarla a los ojos, las que consiguieron dejar esa aparente seguridad a un lado, su estómago bailando por los nervios y su cara roja hasta la raíz del pelo.

¿Por qué quieres irte del pueblo? —Sentía la garganta tan seca que las palabras quedaban atascadas en ella—. ¿No piensas terminar tus estudios? Lo estabas consiguiendo Troy... No lo eches por la borda. —¿Acaso se percibía suplica en el tono de su voz?

¿Cómo puedes ser tan tonta? Con todo lo que está sucediendo y tú hablándole de sus estudios...

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11/08/2016, 15:40
Troy Jacobson

Troy sabía que la idea del baile era una locura y que se podía meter en serios problemas, pero pensar que el peligro era real y que nadie parecía querer hacer nada al respecto le parecía aun peor. Miró a Sidney con seriedad cuando dijo que no le dejaría ir solo, sintiendo una extraña mezcla de satisfacción por el coraje de la chica y preocupación por ponerla en peligro de ese modo.

- Ok... Pero si las cosas se ponen feas, no te quedes ahí. Ves donde haya gente y pide ayuda.

No acababa de entender ni cuándo ni cómo se había convertido en el supuesto héroe de la historia, pero parecía que no le quedaba más remedio que intentarlo. Si tenía que fiarse de agentes como el que lo trajo en coche, estaban todos listos. Pero antes de enfrentarse a ese peligro, debía hacer frente a otro más inmediato, uno que había intentado evitar a lo largo del día y que había esperado poder eludir: Sidney acababa de preguntarle por qué se iba. Troy echó la cabeza hacia atrás, cerró los ojos y suspiró sonoramente. Los recuerdos de la noche anterior volvieron como perros, asaltándole con todo lujo de detalles. Pensó que si alguien debía saber lo que pasaba, debía ser Sidney. Abrió los ojos y se quedó mirando al techo, manteniendo esa postura mientras comenzaba a hablar, de forma pausada.

- Mi padre... Mi padre empezó a beber cuando yo era pequeño. Se volvió un hombre violento, hasta el punto que mi madre... Decidió irse. Desde entonces he sido yo quien ha tenido que sufrir sus borracheras. La mayoría de las veces que he llegado a clase con la cara así -se señaló el rostro y sus heridas.- ha sido por su culpa. Ayer fue una de tantas, pero esta vez... -bajó la mirada, posada en algún punto perdido de la sala.- Esta vez tuvimos una pelea de verdad. Le devolví todos los golpes que pude, hasta que me dejó K.O. Esta mañana no estaba. -miró a Sidney a los ojos, mostrando tristeza y rabia.- No aguanto más. La de ayer fué la última. Me voy a algún sitio donde no tenga que estar... fingiendo constantemente que todo va bién. Quiero vivir de la música y aquí no podría conseguirlo. Quizás busque a mi madre, no lo se...

Troy sentía que, por primera vez en mucho tiempo, tenía ganas de llorar. Notó los ojos húmedos, pero no hizo gesto alguno. Llevaba tanto tiempo haciéndose el duro que ahora, cuando podría desahogarse por completo, no sabía cómo hacerlo. Desvió la mirada de nuevo, en cierto modo sorprendido de sí mismo por aquel momento de autosinceridad. De pronto, se levantó del sofá y se giró hacia la puerta.

- No se porqué te estoy contando todo esto, será mejor que me vaya. Olvida lo del baile, ¿vale?

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12/08/2016, 05:49
Sidney Evans

Sidney asintió en silencio complacida al comprobar que Troy aceptaba su proposición de acompañarle esa noche al baile. Pero esa leve alegría duró muy poco pues su amigo, en un gesto que no llegaba a comprender, había cerrado los ojos por un instante dispuesto a contestar a su pregunta. Y lo que escuchó la dejó horrorizada.

A través de sus palabras pudo sentir el dolor, la rabia, el odio que latía en el interior de Troy y, mientras asimilaba todo lo que estaba oyendo, el entendimiento se abrió paso en su cabeza. Comenzaba a comprender el porqué del comportamiento de su amigo y supo que no podía dejarle a la deriva, no podía abandonarle precisamente en esos instantes de sufrimiento.

La tristeza que vio reflejada en los ojos de Troy cuando la miró, traspasó su alma como un dardo envenenado.

Yo... No sé qué decir...

Sidney se había quedado tan perpleja que sabía que cualquier cosa que dijera sólo sonaría como palabras huecas sin valor alguno. Se sintió mal por él, por ella misma al verse como una estúpida al pensar que su mundo era una mierda cuando había gente sufriendo más que ella.

Los ojos acuosos de Troy la conmovieron profundamente, pero fue incapaz de hacer movimiento alguno hacia él, ni siquiera consiguió moverse cuando él se levantó dispuesto a irse. No fue hasta que escuchó sus últimas palabras que no reaccionó y, a pesar de sentirse dolida y decepcionada con su último comentario para que olvidara lo del baile, se levantó para ir tras él.

Troy había estado a su lado cuando esa mañana había necesitado la compañía de un amigo, se había preocupado por ella cuando le mandó el mensaje sobre Santa Claus, y ahora le tocaba a Sidney mantenerse firme a su lado.

Le agarró del brazo para impedirle coger sus cosas e irse, obligándole a enfrentarse a ella.

No, no pienso olvidarlo. Ya te dije que no iba a permitir que fueras solo y te puedo asegurar que a cabezota no me ganas.

Y en un impulso que ni en mil años hubiera imaginado ser capaz de hacer, rodeó con sus brazos a Troy en un intento por reconfortarle a pesar de saber que su gesto podía resultar vano e insignificante.

No me dejes... —Fue un susurro casi inaudible que se perdió rápidamente en el aire.

Malcolm, Derek, Troy... Todos parecían alejarse de su lado de una forma u otra, desmoronando su mundo ya de por sí frágil. ¿Acaso, de alguna forma, era culpa suya?

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12/08/2016, 21:12
Troy Jacobson

"Bonita escena, capullo", pensó. No podía evitar recriminarse el haberse puesto de aquel modo. No se sentía cómodo mostrando su parte sentimental. En aquel momento su mente le pedía irse, aunque una parte más profunda quería quedarse. Entonces notó la mano de Sidney agarrándolo, y no opuso resistencia cuando tiró de él para girarlo sobre sus piés. Pudo ver en la expresión de la chica un ímpetu que le sorprendió, y antes de que pudiera responderle, se abrazó a él. Troy se quedó congelado, sin saber cómo reaccionar. Su repiración se aceleró notablemente mientras su cuerpo se quedaba rígido como un palo. Pero entonces ella habló de nuevo, esta vez con un susurro, y los músculos de Troy se relajaron. Cerró los ojos, dejando caer las lágrimas que se habían acumulado en ellos. Le devolvió el abrazo, sugetandola con firmeza contra su cuerpo, y apoyó su cabeza con la de ella.

- No te dejaré nunca. -susurró.

Por un momento, no existió nada en la mente de Troy. Por un momento, solo eran ellos dos, de pié, en mitad del vacío. Por un momento, no existió el miedo ni el dolor, ni las mentiras y los reproches. Se separó de ella apenas unos centímetros, con el rostro aun cerca del suyo. Se quedó parado, con el pulso acelerado, mirando los labios de Sidney. Lo único que podía pensar era en...

- Perdón. -dijo de pronto, alzando la cabeza y mirando a otra parte. Se secó las lágrimas con la mano.- Lo siento, no se en que... Se me ha ido la cabeza. -rió por lo bajo de forma nerviosa, sin saber dónde meterse.- Creo que... Avisaré a Jim, para saber cuándo estará por el baile y... Eso...

Miró furtivamente a Sidney, rascándose la frente para disimular, y volvió a desviar la mirada. Tan solo esperaba no haber terminado de meter la pata.

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14/08/2016, 16:50
Lindsey Wells

La joven animadora observa a su hermana un tanto ofuscada, al punto de negar con la cabeza ante las palabras que Mercy ha logrado soltar. - No entiendo porqué te metes con mi ex novio, tanta necesidad de ser como yo tienes... Ya no sé que pensar. Kurt es Kurt, no esperes más de él y deberías ya saberlo. - dijo en un tono cargado de sinceridad, le costaba entender el motivo de su hermana al ir detrás de su ex novio. 

- Todo el mundo habla mal de tí, tienes que cuidar tu imagen y salir del conflicto Mercy. Si Kurt no te ha pedido ir al baile, será porque esta liado y ni lo pensó. Lo conozco, seguramente se le pasó. Háblale si te hace mejor, yo no lo haré porque no quiero que se tome ciertas libertades conmigo y piense algo diferente. - musitó tomando la mano de Jim, afianzando más aquella relación que en verdad le daba felicidad. 

- Haz como quieras pero llorando no solucionas nada,  si quieres a ese idiota ve por él. - terminó por decir, ofuscada. Tanta obsesión con ese chico, no lo comprendía. 

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14/08/2016, 19:51
Sidney Evans

Muchas fueron las ideas que cruzaron por la mente de Sidney al comprobar como Troy no correspondía a su abrazo. Durante esos segundos el miedo fue el sentimiento que más se asentó en su cabeza.

Miedo al rechazo por ese impulso salido de a saber dónde que había tenido. Miedo a que Troy creyera que era una egoísta que sólo pensaba en ella misma. Miedo a ser una mala persona por no estar deprimida y llorando por la muerte de su amor platónico. Miedo a perder a la única persona que había conseguido hacerla reír y se había mantenido fiel a su lado, siempre en segundo plano. Y, sobre todo, miedo a ser ella el detonante que acelerase la partida de Troy.

Pero cuando, después de esos segundos que le parecieron eternos, sintió los brazos de Troy rodeándola, pegando su cuerpo al suyo, el mundo y todo lo que en él sucedía dejó de tener importancia para ella. Sintió la humedad de una lágrima caer en su mejilla cuando él apoyó su cabeza en ella, estremeciéndose cuando su cálido aliento rozó su cara al pronunciar unas palabras que llenaron de felicidad a Sidney.

Estaban tan cerca el uno del otro que, por unos instantes, Sid deseó que los labios de Troy se acercaran a los suyos, pero la magia desapareció cuando el joven apartó su cabeza y habló rompiendo el silencio que se había instalado entre ellos.

Sidney levantó una mano para limpiar la mejilla de Troy, pero el gesto quedó a medio camino al comprobar que era él mismo el que lo hacía. Dio un paso hacia atrás separándose del joven, sintiendo aún el desbocado latido de su corazón y el cosquilleo en la boca de su estómago.

No tienes que pedir perdón... Creo que lo necesitabas. —Siguió manteniendo el tono de voz bajo y confidencial, quizás para alargar un segundo más la confianza que se acababan de demostrar.

Sid no sabía como interpretar el comportamiento de Troy en esos instantes, nervioso y con aparentes ganas de quitarse de en medio. ¿Habría hecho algo malo? ¿O acaso él estaba tan inquieto como ella misma se encontraba? Negó imperceptiblemente con la cabeza apartando todas esas preguntas de ella, pero dejó que la mínima intimidad que habían vivido hacía unos segundos, quedara guardada en sus recuerdos.

Será mejor que cenemos algo y luego... cuando tengas noticias de Jim, podemos acercamos al baile. —Desvió la mirada de la cara de Troy hacia el lugar donde reposaban su guitarra y su bolsa—. Será mejor que dejes tus cosas aquí, ya las recogerás en otro momento, quizás así... —se mordió el labio nerviosa por lo que iba a decir— te pienses mejor el irte del pueblo. Aunque... supongo que es un tema difícil.

Sidney consideró que sería mejor no seguir hablando sobre aquel asunto, por lo menos por el momento, así que intentó cambiar de tema poniendo una nota de humor al momento.

Seguro que nos coronan como los más elegantes del baile.

Tenía claro que las circunstancias que la iban a llevar a pisar el baile eran muy distintas a las que se había imaginado en sus sueños y por ese motivo, aunque pareciera un tema trivial para un momento como aquel, no tenía pensado usar el vestido que había comprado y que traía malos recuerdos a su cabeza. El motivo por el que iba a ir a ese baile era para acompañar a su amigo y poder estar a su lado en caso de que la necesitara.

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14/08/2016, 20:19
Mercy Wells

Osea.. ni yo porqué le defiendes.. ¿saes? Replicó a su hermana, ya cansada de tanto reproche y aburrida de sus tonterías de diva donde se sentía superior a Mercy en todo. Osea, si tanto te importa Kurt, estás tardando en ir a su lado ¿saes? Osea... Yo no he corrido nunca tras él ¿no? y no voy a hacerlo ahora... ¿saes? Osea.. después de lo que me ha dicho ¿saes? Me parece super fuerte que te pongas de su lado con tu amorcito pegado a ti, ¿saes?¿no? Mercy estaba realmente enrabietada. Había cambiado las lágrimas por los gritos. Apretaba los puños con fuerza.

"Bueno, no llegabas a tu hermana ni a la suela de los zapatos, ya estaba tardando en librarme de ti." Me dijo tu ex ¿saes? Soltó Mercy, cada vez más colorada por la rabia que iba generándose en su interior. Osea... ¿y hablan mal de mi? Ja Ja Ja. Rió de forma fingida. Despierta hermanita.. osea, nunca han hablado bien de mi... ¿saes? Y de ti menos aún. Cargó contra su hermana nuevamente. Mercy parecía ignorar la presencia de Jim en ese momento.

Cuando acabó de hablar, se encaminó a su cuarto, más relajada por soltar todo aquello. Notaba como su cuerpo comenzaba a temblar por la tensión liberada y la rabia volvia a convertirse en lágrimas. No lo entienden. Nadie lo hará.

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14/08/2016, 20:33
Lindsey Wells

Los ojos de la animadora se pusieron en blanco ante la réplica de su hermana,  más no tardó mucho en responder a todo aquello,  visiblemente enojada. 

- No me interesa Kurt, lo amo a él y por eso soy su novia. Si me molesta y mucho que quieras meter a Kurt en la familia. Es mi ex, no lo quiero cerca al margen de que esté todo bien con él. - refuta haciéndole entender a su hermana que aquello le fastidiaba, no quería verle la cara luego de todo lo sucedido porque Kurt confundía las cosas demasiado. 

Y como ya sabía que era así, no le sorprendió lo que su ex le dijo a Mercy. - Lo siento, nunca tenías que haberte fijado en él. Era de esperar... ¿Y sabes qué? No me importa lo que digan de mi, ya fui popular y una estúpida superficial, ahora solo quiero estar bien con Jim porque es lo único que me importa. Nada más. - replicó enojada con su hermana, tenía las cosas claras desde un principio.  - Y si... Ve a estar sola... A ver si espabilas. - sentenció Lindsey ya ofuscada,  tenía que ir a hablar con ese idiota que le hizo daño a su hermana. Por eso cogió las llaves del auto y se acercó a Jim para besar sus labios con dulzura. 

- Amor... Tengo que hablar con Kurt... ¿Me acompañas? - preguntó sujetando su mano mientras espera la respuesta de su novio. 

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14/08/2016, 20:46
Mercy Wells

Ya en cuarto, con la música puesta, se desplomó sobre la cama y rompió a llorar como si no hubiera un mañana. La selección de música que había hecho era ideal para estar llorando hasta el día del Juicio Final y Mercy parecía que era lo único que tenía ganas de hacer.

Por su cabeza cruzaban una y otra vez las palabras de Kurt, buscando herirla. Aquella risa de perturbado... Sabía que no permitiría que las cosas quedasen así. Kurt no tiene termino medio, o estas de su lado o estás en contra y Mercy se pasó al otro lado delante suyo, pidiendo a su mayor enemigo ir al baile con ella. Sabía que Troy había accedido por molestar a Kurt, pero ella estaba feliz... hasta que el director Cameron lo estropeó todo. A la mierda el baile. A la mierda Kurt. A la mierca Cameron. Pensó con rabia, mientras se abrazaba con fuerza a la almohada

Ahora, con el corazón roto y su más cercano sueño esfumado por aquel maldito director, lo único que deseaba la joven era que acabase el curso de una vez por todas, buscar una universidad lejos de todo y todos y empezar de cero. Pero quería a Troy en su vida, la costaba sacarlo de su pecho y su cabeza. Entonces comenzó a recordar la mañana en la tienda, en el lago... lo feliz que estaba, tan natural, tan sincera, tan ella... y no esa imagen de pija cruel y superficial que se había creado.

Y recordó la ropa que ocultó en el fondo del armario. Entre sollozos la sacó y se fue abrazando, prenda a prenda, recordando el preciso instante que vivió con cada una de ellas en la tienda donde las compró. Las bromas con Troy, las risas... Cuando quiso darse cuenta, se había vestido con aquella ropa oscura. Sobre la cama quedaban la chupa, los guantes y la braga.

Miró por la ventana, oscurecía ya. Era lo que tenía el invierno, se hacía de noche enseguida. El asesino estaba preso y ella necesitaba salir, respirar y más que nunca, no ser Mercy Wells y olvidar por completo el tema del baile y de Kurt. Frente al espejo de su cuarto, la joven se recogió el pelo y se maquilló como imitando el estilo de Kat. Se puso la braga, luego la capucha y la cazadora. Luego aquellos guantes sin dedos que tanto le recordaban a Troy. Cogió su móvil, documentación y algo de dinero, metiéndolo todo en los bolsillos de aquella chupa, encontrando en uno de ellos el mp3 del joven. Creí que estaba en el coche... debería... devolvérselo.. me lo pidió... sería una buena excusa para.. verle....

Si en  algún momento la puerta de la joven sonó, Mercy lo ignoró por completo. Si había alguien tras la misma cuando salió de su cuarto pareciendo más la gemela de Kat que una de las Wells, no le prestó la más mínima atención. Salió de su cuarto como alma que lleva al diablo, corriendo hacia el exterior de la casa, hacia la protección de la noche.

Una vez lejos de su casa, se encaminó hacia la del chico de sus sueños. Mientras caminaba y le daba vueltas a todo, se puso uno de los cascos del mp3 del joven y lo encendió. Esta vez iba más tranquila y segura que aquella mañana. Estaba segura de que esa noche, sólo la reconocería una persona... si es que estaba en casa. Colocó el otro auricular en su otro oído y subió el volumen de la música.