Partida Rol por web

El combate había sido corto pero sangriento. Ya teníamos una nueva embarcación y, algunos marineros más, que a buen seguro que cambiaran de capitán como una veleta ante un cambio del viento.

Mientras Harper hace su trabajo e investiga todo lo que transportaba el zorrillo, me quedo en cubierta ayudando a los marineros heridos, cuando veo que Mama Tom comienza a hablar en extrañas palabras. ¡¡Detente!! Digo cuando me doy cuenta que está intentando revivir a nudillos. Mierda, al final trabajaban juntos pienso mientras agarro mi pica y voy dispuesta a ensartar a nudillos de nuevo pero, en el último momento, las palabras que dice Mama hacen que me detenga pero ¿que coño has hecho? Digo con el ceño fruncido, mirando con suspicacia a la mujer

-He traído de vuelta a este hombre para que nos sirva. No sé cansará nunca, no se quejará nunca y nunca desobedecerá -dice Mamá Tom.
-Tengo el don de traer a la no-vida que el Wendifa me otorgó. El don de salvar a los vivos y a los muertos del rígido abrazo de la noche eterna.
Mamá mira con tranquilidad a la bucaneros.
-Nada has de temer de mi, Sandra Queen.

Raymond era bueno en lo suyo, y en muchas cosas más de hecho. Pero sabía que a cada cual lo suyo. Y lo cierto es que Harper era mejor encontrando cosas ocultas y abirendo cosas cerradas. Así que lo dejó hacer a él junto con alguno de los hombres, ya que éstos se merecían un saqueito de vez en cuando, y se quedó en cubierta.

Lo que sirvió para que escuchará, aunque no entendiera, las palabras de Mamá Tom (a la que por algún extraño motivo alguien había liberado). Y viera lo que sicedió a continuación, que era que el antiguo capitán del Zorro Marino se levantara de entre los muertos.

Sandara se había quejado de ello, e increpaba a la mujer negra, cosa que parecía preocuparle más bien poco. Pero Raymond fue algo más allá.

Volvió al Grindylow y golpeó con su hoja negra al nomuerto.

Su nombre es Sandara, no Sandra. Y aseguraría que nadie te ha dicho que puedas hacer una aberración como ésta. Ya me extraña que te hayan dejado libre.

-Eres pasional, Raymond Veracruz -dijo Mamá Tom atónita ante lo sucedido. -Pero este no es un vulgar acto nigromántico fruto del mal. Es devolver a la carne su gloriosa plenitud. Créeme cuando os digo que necesitaréis la ayuda de vivos y muertos para afrontar los peligros que se acercan -agrega la Wendifa.
-Mis disculpas, Sandara, mi sobrecorrección me ha traicionado -dice con un gesto galante.- Y si no me creéis, analizad está criatura. No veréis mal en él, os lo aseguro. Los seguidores de Wendo no abrazamos las sendas tenebrosas de la perversidad.

La tripulación entera de ambas embarcaciones se sobrecoge ante lo que acaba de ocurrir. Rápidamente, todos los bucaneros se alejan cuanto pueden tanto de la wendifa como del "nuevo" Nudillos Grype. Por su parte, el zombie sigue en calma, con la mirada perdida y sin reaccionar ante el tajo que acaba de soltarle Raymond, más allá de saltársele un sanguinolento trozo de carne del brazo.

-¡Calma, calma!--se adelanta Malickud para interponerse entre Raymond y... y aquella cosa... para luego dirigirse con suma curiosidad a Mamá Tom--¿Los Wendo dices? ¡Mmm! He oído hablar de ellos, pero jamás pensé que la leyenda pudiera ser cierta. Explícate, por favor.

Atusándose los bigotes, el intendente del Grindylow Embrujado aguarda una respuesta mientras observa asombrado el prodigio y entonces confiesa:

-¡Ah, señores! He sido yo el que la ha sacado de ahí. Al ver que nos había dicho la verdad respecto al Zorro Marino, me tomé libertad de dejar que Mr. Plugg le entregara las llaves de la jaula. Pensé que nos sería más útil en cubierta que encerrada.

Harper se interna en el barco capturado y se pone a investigar el barco a fondo.

La reacción de Raymond me dejó un tanto ojiplática. ¿Acaso me había defendido o solo lo había utilizado como excusa para aumentar su ira sobre esa mujer? sea como fuere, no pude darle más vueltas, pues la explicación de la mujer tampoco me quedó muy clara. No sabía que era una, o un, wendo, pero cuando Malic habló, me encogí de hombros negando con la cabeza

no se de qué coño estáis hablando. Para mí eso es levantar un cadáver, un acto nigromántico a ojos de todos, pero también he aprendido a valorar los conocimientos del gnomo, por lo que, al menos, te dejaré que nos expliques más detenidamente qué es eso que dices y qué diferencia hay entre lo que has hecho y lo que hacen los putos clérigos que levantan y perturban el descanso de los muertos.

Raymond escuchó tanto a la mujer tatuada cono a Malick, y no sabía de lo que estaban hablando. Y la verdad es que no le importaba, porque tenía claro lo que tenía delante suyo.

Por más crueles y curtidos que sean los marineros, incluso los piratas, eran de las personas más supersticiosas que existían. Y una de las que más mal fario daban tenía que ver con los no muertos. Así que el magus prefería no arriesgarse y acabó con el zombie mientras escuchaba a Sandara expresar su disconformidad con aquella criatura. Lo cuál hacia que la respetara aún más.

Se volvió a la mujer tatuada.

Perdona. ¿Decias algo? Es que tengo cierta desconfianza a los no muertos. No trabajo con ellos, no con gente que trabaje con ellos.

El grotesco zombie sucumbe ante el segundo envite del excitado Veracruz y el capitán del Grindylow Embrujado, después de fulminar con la mirada al magus, decide que ya ha tenido suficiente:

-¡BASTA! Mira, Ray. Hemos tenido a bien enrolarte abordo por la amistad que nos une con Hake. Y está fuera de duda que has cumplido de sobra con lo prometido. Eres uno de mis mejores hombres. Aprecio tu labor y espero que sigas desempeñándola tan bien como hasta ahora. Pero si vuelves a desobedecer la orden de un oficial, te juro que vas a tener tiempo para reflexionar en la jaula. ¿Entendido?

Sin dar posibilidad de réplica, el pirata de Puerto Riesgo se vuelve hacia la defenestrada criatura, concluyendo la reprimenda como si tal cosa, y se queda a la espera de que la animamuertos conteste a Malickud.