Partida Rol por web

La pantera sabía que estaba muy malherida, y también que las siguientes heridas que recibiera las sufriría Nicholas. Por lo que se avalanzó con furia contra el jabalí para acabar con él de una vez por todas.
La perdida de sangre hacia que no fuera todo lo efectiva que normalmente podría, pero aun así era lo bastante mortifera como para hacer mucho daño.

El mordisco de Alcaudon fue mortal de necesidad para el malherido jabalí, que dejó de moverse entre estertores ante el último garrazo de la pantera. Por fin, después de sufrir mucho más de lo esperado, el estrecho sendero que llevaba a la torre de vigilancia volvía a quedar despejado.

Venga. Ya está bien de jugar con animalillos. Vamos a hacer lo que hemos venido a hacer. A la torre de vigilancia. Harper, ve al frente.

De acuerdo, abro camino mientras se recupera la pantera y Nicholas.

Nicholas se acerca a la pantera, la cual se la veía bastante herida.

Tranquilo Alcaudon, bien hecho.
Pero la próxima vez retirate, no pasa nada por dejar que otros también se diviertan.

El joven se concentró un momento y lanzo un conjuro para restaurar algo de la vitalidad de la pantera.

Eso es todo lo que puedo hacer de momento, así que no te metas en muchos problemas, ¿vale?

Por toda respuesta el eidolon gruño y lamió la mano de Nicholas.

Malickud mira lastimeramente los dos guarros masacrados.

¿En serio vamos a dejarlos aquí? estoy hasta el mostacho de ese guiso de pescado que preparar en el astillero, el único pescado que he visto es en el nombre. Creo que lo hacen hirviendo trozos de barcos desmantelados.

El gnomo suspira y se pone en marcha, cerrando la comitiva.

¿Os he hablado de que la carne de jabalí es excelente para hacer en salazón?, podríamos llevar varios barriles de esto en el Grindylow. ¿Tú que dices Nicholas? eres el cocinero, leñe.

Nocholas se encogió de hombros ante el comentario del gnomo.

Oye, que a mi ya me va bien tener un poco de descanso en hacer la comida para todos. Yo no tengo problema en hacer algún que otro estofado de carne. Pero desde luego, lo que no voy a hacer es ponerme a cargar ahora mismo con esas pedazo de bestias.
Mejor dejemoslas aquí, acabemos rápido con la investigación de la torre de vigilancia. Y a la vuelta, si no se la han comido las demás bestias salvajes que hay en esta isla, y no está muy llena de moscas e insectos, trataremos de recuperar algo. Por lo menos para uno o dos bistecs. ¿Te parece?
 

Psfffff...

Bufa en gnomo encogiendo los hombros.

Está bien, veamos de una vez qué hay en ese puesto de vigilancia. ¡Que ganas tengo de ponernos a navegar!

Estáis a punto de retomar el sendero cuando de pronto escucháis un aleteo y varios graznidos sobre vuestras cabezas:

-¡Fuerrrra, larrrrrgo, nonme memolestéis!--os impreca un enorme y colorido loro en varias ocasiones antes de salir volando hacia la torre de vigilancia.

jajajaja, que gracioso el loro. Digo señalando al pájaro

No le matéis si podéis evitarlo. Intentad golpearlo y dejarlo sin sentido que podríamos tenerlo como mascota

Tranquilo, no queremos molestar, tan solo vamos a buscar a alguien al puesto de vigilancia. ¿Tienes hambre? Busco en los bolsillos algo para darle de comer, sin dejar de mirar al pajarraco

Al ver salir volando al pájaro, levanto la mano pero...esperaaa!! Digo viendo como se aleja antes de volverme al resto 

pues si tiene un amo, esas son las palabras qe nos dice a través del pajarraco, así que será mejor tener cuidado 

Nicholas ve salir volando al loro sin poder hacer nada para evitarlo.

Bueno, desde luego si hay alguien que no sabía que estabamos aquí, ya no es el caso. Aun así, el vigia debería reconocernos. O por lo menos saber que venimos del raquitico.
No sé, todo esto me da muy mala espina. Mucho me temo que al vigía no lo vamos a encontrar demasiado vivo. Después de todos estos ataques que hemos sufrido es más que razonable que puedan haber llegado hasta aquí.

Seguramente todos pensaban lo mismo, pero él era el único que lo había dicho en voz alta.

Sandara, te agradecería que usaras tú poder para curar a Alcaudon. Aun está bastante herido, y con los problemas del veneno además.

La pantera mira a la mujer como si hubiera entendido perfectamente lo que ha dicho Nicholas y le ronronea un poco.

Asiento a Nicholas mientras acaricio la cabeza de alcaudon. 

Tienes razón digo mientras agarro el símbolo y musito unas oraciones 

Subamos lo antes posible para evitar que se preparen demasiado.

A mí no me va a decir un loro que tengo que hacer. Venga, en marcha.

No obstante, Feijud va con el sable en una mano y el hacha en la otra.