-Bien, veamos el dinero entonces. Luego podemos ir a buscar mi caballo y partir enseguida, Alex...
Espera la confirmacion del trato en efectivo antes que nada... Una vez que lo tiene, lo coloca en su saco especial, salvo una moneda que deja en la barra por la bebida. Sale del local caminando con desicion junto al hombre, en dirrecion al alojamiento donde tiene su montura, ya que una vez emprendido un contrato, lo mejor es cumplirlo cuanto antes. Su expresion es suavemente alegre, sin embargo, al considerar el beneficio de la transaccion, pero sin embargo en su cabeza pesan los interrogantes hacia la identidad del misterioso contratante que desea hacerle una proposicion....
El hombre esboza una gran sonrisa y toma un par de bolsas que colgaban de su cinto.
Aquí esta el dinero - dice y te tiende las pequeñas bolsas -
La noche ya está avanzada y el fulgor de la luna ilumina la calle empedrada.
Alex sale junto a tí y, una vez están fuera, se apura hacia la calle, donde puedes ver que hay dos caballos bien cuidados atados uno a un poste y otro a un letrero que no parece capaz de resistir un tirón proveniente del animal. Se coloca a un lado del caballo atado al poste...
Aquí está tu caballo - dice - Es tuyo si lo quieres, aunque si no es así, lo dejaremos...Sólo retrasaría nuestra marcha...
Luego, espera tu respuesta antes de dirigirse al establo en donde está tu montura.
Peerdón, no me salió en novedades =/
-No. Lo llevare conmigo... Nunca se sabe cuando podras necesitar un caballo de repuesto..
Sonrrio, acariciando mi animal... Estos nobles seres son resistentes, y hay maneras de aprovechar sus capacidades para escapar o recorrer distancias mucho mayores a lo normal, en las que probablemente alguien fuera de mi linea de trabajo no este familiarizado... Algo util. Tomo las bridas del animal, enrrollandolas en mi mano y extendiendolas. Sin embargo, no lo monto, sino que voy con el a los establos, donde recojo mi caballo. A este si subo, sujetando las riendas del nuevo a su silla, de modo que nos pueda seguir tranquilamente. Una vez acomodada, regreso con ambos animales junto a Alex.
-Bien, estoy lista. Partamos.
suele pasar :P
Mañana posteo...hoy ya se me hizo muy tarde...
Alex se sube a su caballo con pestreza al verte llegar y asiente con la cabeza...
De acuerdo, hacia el sendero del sur entonces - dice y hace avanzar a su montura - Nuestra primera escala será en Untergard, deberíamos llegar allí y encontrar un lugar para dormir, para luego seguir viaje hasta Middenstag...
Atraviesan las calles hasta una de las salidas de la ciudad, una vez fuera, el hombre espolea a su montura para llevarla al trote, seguramente querría ir a toda velocidad, pero no puede permitirselo al llevar a otro caballo...
Hago un pequeño espacio para roleo antes de seguir.
La picara magica le sigue sin vacilar, pero manteniendose a la izquierda y detras del hombre durante la cabalgata... No se siente obligada a cruzar mas palabra con el... Sabe demasiado poco para satisfacer su curiosidad al respecto de la situacion. Por ende solo monta y deja que sus pensamientos la distraigan, trazando planes ante contingencias como ser atacados o una traicion... De ningun modo piensa dejar de llevarse el caballo, quien al no tener jinete ni ir cargado, los sigue facilmente. Ese animal estara mucho menos agotado que el que monta, y en caso de tener que huir, o que su montura actual sea herida o muerta, solo tomaria unos momentos cambiarse a el...
Abstraida en estas y muchas otras cosas piensa a lo largo del camino hacia Untergard...
Ambos recorren el sendero al trote con sus monturas, el clima es fresco y hay una quietud agradable.
No se cruzan con nadie en su camino, sin embargo, en algunas ocasiones te ha parecido sentir la presencia de criaturas del bosque que linda con el sendero, pero no hay percances.
Tras unas horas de viaje, llegan a Untergard, un pequeño poblado de pocos habitantes. Alex entra sin dudar y habla con un guardia que se despierta cuando ustedes llegan. Luego se da la vuelta y te dice
Iremos a una posada para pasar la noche ¿Si? - inquiere -
-Ningun problema +sonrrio+ Pero pide habitaciones separadas, no quiero picardias, de acuerdo? jajaja...
La joven se toma el viaje a buen humor, despues de todo es lo que es. Agita su cabellera rojiza con desparpajo, observando el pueblito. Seria agradable retirarse algun dia a un lugar de estos, pero primero debe hacer muchas, muchas cosas...
El joven sonríe jocosamente...
Oh no, heh, vamos, el guardia me ha indicado el lugar...- dice mientras desmonta y comienza a caminar, manteniendo su sonrisa en su rostro -
Caminan un poco, si es que desmontas, y pronto llegan a un edificio de estructura más bien pobre, aunque de piedra casi en su totalidad. Desde afuera puede oirse un pequeño murmullo, sin duda no hay muchas personas en el lugar.
Iré a guardar mi montura, ¿Quieres que lleve los tuyos? - inquiere -
Sonrrio suavemente, desmontando
-Si, por favor... +miro la taberna, escuchando el bullicio. Suena muy familiar...+ Te esperare adentro.
Aflojo un tanto mis dagas, comprobandolas en las vainas de mi cinturon. Puede que las necesite... Luego entro mientras el lleva los caballos. Caminando lentamente, me dirijo con determinacion a la barra, dando miradas de reojo a derecha e izquierda, para captar el ambiente, asi como determinar posibles salidas en caso de necesitar escapar...
Es muy tarde, y el establecimiento está casi vacío, el encargado se encuentra detrás de la barra, contando monedas. En una mesa, hay dos personas charlando que, cada poco tiempo, hacen ademán de irse pero se quedan un poco más a continuar la charla.
El posadero levanta la mirada con gesto cansado
Buenas noches, ¿Desea una habitación?
Alex no debería tardar en volver...
-Buenas noches. Si, dos habitaciones separadas, por favor, y algo de cenar, si no es molestia. +digo cortesmente, acomodandome en la barra.+ Un poco de queso, pan y vino estaran bien, el camino despierta el hambre, pero noto en vuestro aspecto que no estais como para esperar a un par de comensales de una cena elaborada, y no somos melindrosos. Asi podreis cerrar mas pronto y todos contentos.
Sonrrio al decir esto, como si considerara los problemas del posadero. La amabilidad es la primer llave que debe probarse en las puertas de la gente...
El tabernero tuerce el gesto cuando dices dos habitaciones, pero en eso Alex entra en el establecimiento, despejando sus dudas.
Por supuesto - asiente el encargado - Es usted muy considerada
Se da vuelta y comienza a tomar un par de vasos y demás, para luego dejar su cena en la barra.
Sería una pieza de oro por todo - dice el hombre, sin mirara a ninguno de los dos en particular -
Alex entra en la posada y se dirige a la barra, junto a tí.
Aquí tiene buen hombre - dice y deja una moneda sobre la barra, para luego beber un sorbo de vino - Mañana deberemos partir temprano, he dejado los caballos en un establo cercano - dice y da una mirada hacia la puerta -
Luego, el hombre se dedica a comer, sin tener nada más que decir.
Asiente al tabernero levemente y tambien a Alex.
-Si, no hay que perder mas tiempo del debido, verdad...? Tan importante es?
Sonrrie suavemente, comenzando a cortar trozos de queso y poniendolos sobre doajas de pan, para comer y beber tranquila y comodamente.
El hombre te mira con una sonrisa en los labios
Me siento un estúpido siendo un guía que no conoce su destino - dice Alex - Me encomendaron esta tarea y me exigieron rapidez. Esto es lo que hago - agrega mientras come un trozo de queso -
Sólo espero que el viaje siga sin percances hasta que nos reunamos con sus compañeros en Delberz - dice y emite un pequeño suspiro -
*O sabes y no dices, o más probablemente, realmente no sabes... Curioso, en cualquier sentido.
-Por que habria de haberlos? +sonrrio, masticando otro bocado. Luego de tragar, continuo+... Solo somos una pareja cabalgando. Ningun ladron que se precie de tal atacaria a dos personas armadas que viajan solas, pudiendo esperar tantas carretas bien cargadas que vallan hacia o desde un pueblo tan comercial como Delberz...
Entrecierro los ojos mirandolo con una expresion mucho mas peligrosa por lo dulce.
-...y los que lo hicieran, solo serian mequetrefes que estarian metiendose en lios por nada...
Bebo un poco de vino, dejando la copa en la mesa luego.
-jejeje bien, Alex, basta de pensamientos tan nefastos no? Me voy a dormir... Hasta mañana!
Bajo del taburete y voy a mi habitacion, dandole un pequeño beso en la mejilla al pasar junto a el.
El hombre asiente ante tus comentarios, aunque su semblante sigue siendo serio.
Sí, te esperaré aquí a primera hora - dice Alex una vez te despides, luego, se queda y termina su cena -
En cuanto a tí, subes las escaleras y vas a tu habitación, no es gran cosa, pero basta.
Como precaucion, antes de acostarme, trabo la puerta con una silla que halla en el cuarto, o sino con mi escudo de madera... Luego me despojo de mis ropas, prefiriendo dormir desnuda, algo que podria desconcertar a un atacante nocturno. Sin embargo, pongo bajo mi almohada las dos dagas, y para mas seguridad coloco el arco a la izquierda y el estoque al alcance de la mano derecha...
Tambien pienso en la conveniencia de alguna trampa, pero descarto la idea de momento. Asi asegurada, me acuesto boca arriba, cerrando los ojos y relajandome para dormir...
salvo que pasa algo, sigue asi hasta la mañana siguiente.
Te despiertas en la mañana, el sol del alba se filtra por la cortina que tapa a medias la ventana. En el cielo no se ve una sola nube, parece que va a ser un día agradable.
Puedes oir algunas voces del piso de abajo, sin duda de las personas que ya estaban desayunando.