Partida Rol por web

Khyron corre hacia la torre, para reunirse con Nakus y el resto de sus compañeros.

Sola.... otra vez sola.... sino fuesen compañeros me los cargaba....

El perro cae sobre sus cuatro patas tras el tremendo golpe de Lirianne sin hacer más ruído, está vivo aún pero parece que no sabe donde está.

Los dos ballesteros que hay en las ventanas escogen a Lirianne como su objetivo

La clériga se acerca a sus compañeros a ver como quieren seguir:

- ¿Hay algo dentro, qué hacemos?

Maldito chucho...le clavo el guantelete y sigo avanzando, esos ballesteros lamentarán haberse quedado ahí.

Podéis ver una torre que es de una sola sala con una pequeña escalerilla que lleva hasta la ventana. No se ven más salidas.

El perro muere ante tu crueldad con el animal. Luego avanzas, la puerta está cerrada.

bueno, a ver si avanzan rápido por el interior y abren la puerta... sino intentaré tirarla abajo xD

Nakús se mueve sigilosamente, pegándose a las paredes para tratar de llegar al otro lado de la torre. Lentamente desenvaina su wakizashi.

Sólo esperaba poder pillar desprevenido a aquel bandido o sería pasto de los virotes de éste.

Avanzas hasta la pared y puedes ver que no hay salida ni comunicación entre las torres. Debes salir fuera para llegar hasta la torre central.

Vigornia sale de la torre y se pega a la pared para no ser pasto de los ballesteros. Situándose junto a Lirianne.

Khyron, al ver a Vigonia correr por fuera de la torre, lo sigue y pasa a su lado, hasta llegar a la entrada de la torre central.
Desde alli, observa hacia adentro, antes de ingresar a buscar refugio del ballestero.

No ves nada pues la puerta está cerrada y no hay manera de ver en su interior.

Al ver la puerta cerrada, y sabiendo que aun los estan atacando desde lo alto, Khyron continua pegado al muro, con la esperanza de toparse con algun otro ingreso.

Algunos siganme, daremos un rodeo! Mientras tanto, intenten derribar esa puerta!

Se abre la puerta y uno de los pandilleros armado con una ballesta dispara a Lirianne, luego se esconde de nuevo tras la puerta. No véis a ninguno de ellos auqnue escucháis pasos acelerados, órdenes y gente que grita y habla.

Davan avanza hasta llegar a sus compañeros.

Buuurp! eso me ha sentado genial- digo mientras los virotes salen de mis heridas y se cierran.- Vamos, chicos, acabemos con esto. Dicho eso avanzo al interior a acabar la tarea.

Nakús salió corriendo hacia el exterior, en busca de sus compañeros. Aquel combate se presumía largo.