Partida Rol por web

Conforme el vehículo se alejó y ella se acercaba la figura que la esperaba se hizo más evidente. Alexander era un hombre joven de cabello castaño que esta noche iba vestido de marrón con una camisa negra, todo de la marca Brooks Brothers, destacaba su buen gusto. El hombre apenas logró sonreir un segundo, luego del intento fue a estrechar la mano de la despertada en un gesto distendido.

- Gracias por venir Max, esta noche es de las que no se olvidan. ¿Va todo bien?

Aprovechó para echar una ojeada alrededor, no le gustaba dar la impresión de estar inquieto mas una sensación en la nuca le decía que la prudencia era necesaria. No se sentía bien allí en la calle.  

- Mi jefe está enojado, uno de sus tesoros ha quedado en ruinas y es el menor de sus males. Ha hecho preguntas y en consecuencia ha llegado a sus oídos que una amiga tuya está detrás de esta destrucción. - La miró profundamente. - Una amiga íntima de Marvin.

Lanzó una acusación velada, tanto que parecía querer que Max la completara.

- Ji-Soo no es lo que parece, eso es lo que dicen sus fuentes.

Terminó por aclarar, pendiente de lo que podía aportarle la guitarrista.

Esperaba sentirse intranquila, pero fue lo contrario, a medida que la camioneta se alejaba dejándola sola empezaba a recordar lo cómoda que se sentía en su propia piel en esas calles llenas de criaturas variadas. Se acercó con seguridad al hombre omitiendo la sonrisa y estrechando su mano en su lugar. -Tan bien como puede ir todo esta noche - Contestó con calma encogiéndose de hombros, como sin saber porque le preguntaba aquello cuando ambos eran conscientes del caos que los rodeaba. Notó su mirada, aunque no hizo mucha falta, ella también sentía ojos en la espalda, le indicó con un gesto de cabeza que se adentraran más en el callejón, al menos desde allí, si alguien quería espiarlos tendría que ponerse a la vista. 

-¿Qué precisamente ha quedado en ruinas? - Si iban a hablar más valía ser claros, que conocía de sobra el jueguito de los vampiros de dar más vueltas que información, en espera de que uno completara el resto. Solo asintió con la cabeza al comentario sobre Ji-Soo sin hacer ningún gesto - Gracias por la advertencia. ¿Eso es todo? - No tenía deudas con el sire de Marvin, y no era lo bastante idiota para intercambiar información gratis, ni había posibilidad que lo hiciera sobre su compañera. -¿Por qué me quiere tu jefe Alexander? Dudo que fuera solo para ver si podía servirle de cabina de información, tiene otra gente para eso - Señaló ladeando la cabeza con una sonrisa suave y mirándolo significativamente.