Partida Rol por web

Levanto la mano en señal a Cobain para que le deje hablar. No tengo dudas de como acabará esta conversación, pero te daré la oportunidad de que pares esta locura. Esa pobre gente de la colonia no te ha hecho nada y es una lucha desigual e indigna.

Cuando veo su rostro emerger de la sombra reconozco sus tatuajes, marca de un poderoso linaje de señores sith lo que me hace pensar que la situación es más dificil de lo que ya lo era.

Hemos destruido tu bunker de maldad y acabado con tus hombres. Antes de acabar con esto dime ¿Por qué haces esto?

Doy un par de pasos atrás mientras me pongo a la defensiva.

La tentación era grande, tenía todo como para disparar, mas el aparecido (que sí parecía un SITH) empezó a conversar, podría ser para ganar tiempo... o estaba activando/preparando otra trampa, instintivamente dió la cabeza vuelta en redondo para ver si estaban rodeados o si algo había cambiado en medio del salón.

Se sintió a la vez valerosa y demasiado expuesta, algo debía andar mal...

El zabrak fija la vista en Haka un momento, mirándole de pies a cabeza hasta que se detiene en sus ojos. El noble siente unos ojos que se ensartan en su alma antes de que su voz, con un efecto igual de perturbador, salga de su boca:

 - "Mi nombre es Darth Amras y esto que llamas locura o innecesario es solo una pequeña parte de un gran plan. Soy un miembro de la nueva Orden Sith, la Orden del Único Sith. Ya no tenemos las limitaciones del pasado, ya no seguimos las antiguas reglas. La Fuerza, el Lado Oscuro se manifiesta en nuestro Maestro y todos somos sus súbditos. Darth Krayt es nuestro señor, Darth Wyyrlok es su mayor sirviente y mi maestro. Somos legión y somos uno a la vez. Nunca fuimos tan poderosos como hoy."

Da un paso más fuera de la habitación para continuar hablando mientras sonríe:

 - " Vine acá con una misión clara: Se me encargó eliminar la colonia y dejar la imagen de que el proceso de Vongformación falló para acabar con los colonos en forma de estas bestias que he diseñado. Vine con mi aprendiz y un piloto/Técnico. Fuimos traídos en un transporte mientras el piloto vino en un caza que ya destruyeron con él dentro. Organizamos nuestro laboratorio en la montaña y luego este lugar en caso de que fuese necesario separar nuestros recursos. Allá creamos nuestras bestias mientras desde acá las controlábamos."

Les mira y la sonrisa se le borra de pronto:

 - "Los colonos debían morir pero resistieron el primer ataque, el segundo y todos los que lancé después. Luego llegaron ustedes y consiguieron cambiar la balanza. Mataron a Amon y destruyeron mi laboratorio. Con eso pusieron en jaque toda la operación. Tuve que poner en marcha el plan B que significaba hacer que nuestras tropas de apoyo acabasen con la colonia y luego intentar cubrir las evidencias para hacer creer que fueron las bestias las asesinas y no armas bláster. Ese plan alternativo tenía más de una consecuencia negativa pues aparte del riesgo de que nuestra mascarada cayese, nuestro señor se enteró de nuestro fracaso inicial."

Traga un poco de saliva mientras parece quedarse pensando un momento, con algo similar a miedo en el semblante. Las respuestas parecen salir del sujeto como si agua de un manantial se tratase. No hay secretos, no parece haber trampas, solo las confesiones de alguien que no teme pronunciarlas.

De pronto todo toma sentido: Estos Sith son diferentes a todo lo que alguna vez te habían enseñado. A través de las Eras, los Sith se guiaban por la regla de un Maestro y un Aprendiz mientras que la nueva Orden Sith, la Orden del Único Sith cree en que todos deben seguir a solo un miembro y así es como un solo maestro puede tener múltiples aprendices.

Es una orden renovada, más fuerte y con muchos más miembros por lo que él menciona. Es sin duda un gran descubrimiento y es sin duda, tu Destino ser el primer Jedi en conocerlo y prevenir a tu Orden.

Casi sin quererlo las respuestas al fin fluyen sin tapujos, miro a mi alrededor y a los jedis para ver si sienten algún tipo de artimaña pero todo parece trasparente, demasiado para mi gusto lo que me hace preveer un mal desenlace. El sith es consciente de su derrota al menos parcial, su señor ya es consciente de sus errores y tapar todas las evidencias de su presencia resultará casi imposible.

Pero este mismo fracaso es el que le hará luchar hasta el final, ya no tiene nada que perder y sabe que la muerte a manos de su señor es probablemente lo único que le reste al salir de aquí, parece que acabar con nosotros y la colonía es la única alternativa posible para intentar obtener la redención de su amo.

Preparaos digo susurrando al cuello de mi camisa, susurro que rápidamente se propaga al equipo por los comunicadores.

Has fracasado y lo sabes, solo la muerte te espera ya de tu amo. No podrás limpiar el rastro de tu presencia aquí, pronto llegarán más enviados del imperio y de la alianza y oleran tu maldad y actos a distancia. Tus naves, el bunker, los soldados todo esta plagado de tu presencia y fracaso.

Para el ataque a la colonia ahora! digo en tono imperativo.

Ya no tiene sentido, pues la mascara de tu orden ha sido revelada al universo entero. Se que no piensas rendirte, y en ese caso ya solo la muerte te espera bien a nuestras manos o en las manos de tu señor. Te ofrezco un trato, para el ataque a la colonia ahora y te otorgaremos una lucha y muerte digna, persiste en tu ataque sin sentido y usaré tu cuerpo para alimentar a tus propias bestias en el fango.

¡Decide! Digo mientras preparo mi arma apuntandole.

Rogboor no apartaba la vista del zabrak, ansioso por volarle la cabeza de un disparo. Demasiadas palabras para el viejo wookie. Mientras Haka parlamentaba con el Sith, las criaturas que éste había lanzado sobre Sefresna se acercaban cada vez más a la colonia y a sus habitantes. ¿¡Es que no se dan cuenta que solo está ganando tiempo para que sus bestias acaben con esa gente indefensa!? El gigante peludo gruñó impaciente, delcolgando la granada que aún pendía de su cinturón y acariciando el gatillo de su arma, a punto de presionarlo y empezar la batalla. 

Miro al Noble Bel-Iblis.

- "No es un simple Jedi Oscuro que haya seguido el mal camino, es un auténtico Sith como los de las leyendas... Pero esta es una amenaza mucho más insidiosa para la galaxia que la de un Maestro y un Aprendiz. Son muchos Sith, todos sirviendo a un único Maestro.

Debemos transmitir el aviso a la Orden Jedi, a la República y al Imperio. Todos deben saber a lo que nos enfrentamos." -

El Sith vuelve a fijar la vista en Haka, esta vez con dureza y odio, pero luego vuelve a sonreír aunque sin suavizar sus ojos. Sigue hablando aunque con más prisa:

 - "Aún tengo opciones. Cuando el plan B fracasó, mi maestro dijo que debía medirme ante quienes han frustrado mis planes. Si les elimino, probaré ser digno de seguir en la Orden. Aparte de eso, he tomado mis precauciones y si muero ahora, solo vuestras palabras serán la prueba de lo ocurrido acá. Si les mato, mis bestias se encargarán de la colonia y todo saldrá según mis designios. Ya no tengo nada que perder y si le demuestro a mi maestro que he sido bien entrenado, recuperaré su favor. Ahora solo me queda encargarme de ustedes."

Mira a todos, siguiendo sus movimientos y viendo como desenfundan sus armas y se preparan para la batalla. Mira el suelo y luego levanta la vista, mostrando un semblante muy distinto, un semblante muy agresivo e iracundo. Luego grita:

 - "¡Que así será! ¡Demuestren que son dignos de derrotarme o caigan en el olvido junto a la colonia! ¡POR EL ÚNICO SITH!"

Sus palabras se colorean con el rojo de su sable de luz al encenderse.

Balael presintió que el combate se acercaba, con la mano ya dispuesta en el gatillo mentalmente se aprestó para la pelea.

Ver al SITH encender su sable laser, fue cosa de milisegundos, esos en los que Balael ya había presionado el gatillo, con el misil saliendo a toda velocidad hacia el enemigo...

El misil salio directo al pecho del SITH, la tensión se sentía en el ambiente, el misil iba recto, y si realmente golpeaba al SITH, podria hacerle muchisimo daño.

Balael casi podìa ver el misil impactar en su objetivo, trayectoria perfecta, podría describir si el impacto llegaba donde ella había puesto la mira apuntando...

El sable de luz acaba con el dialogo de la forma que todos más o menos preveiamos, mi arma tranquila y segura la cual ya esta preparada y dispuesta contra el objetivo se activa dejando escapar un rayo directamente hacía el sith.

¡DISPARAR!

Cuando el misil estalla contra el Sith me encuentro preparado para defenderme de cualquier cosa, aunque ciertamente no esperaba una explosión procedente de mis aliados tan pronto.

Antes de que el sith encienda su sable de luz, se por sus palabras que es el momento de atacar, y asi lo hago sin dudar un instante.

El combate inicia cuando un misil vuela desde Balael directamente hacia el enemigo. Habría impactado en el centro de su pecho si no se hubiese inclinado y girado en el último momento, casi de milagro. Luego Haka le dispara sabiendo que la conversación acabó pero falla por mucho pues el tipo se mueve como si de una sombra se tratase.

Sake le da un preciso disparo pero este levanta la mano y la energía se pierde, como si solo lo hubiese iluminado con una lámpara y no con un arma. Sus ojos parecen desorbitarse y de su boca comienza a gotear saliva como si de un enfermo psiquiátrico desatado se tratase, sus músculos comienzan a hincharse mientras su respiración se agita.

Luego de eso levanta su mano izquierda y Balael es elevada en el aire para luego ser lanzada violentamente sobre Roogbor, golpeándose ambos muy fuertemente. De forma súbita, extiende la misma mano apuntando con sus dedos a Nina. Poderosas ráfagas de electricidad oscura vuelan hacia la exploradora y la electrocutan cruelmente mientras sus gritos de dolor resuenan en toda la sala.

Da un paso hacia los Jedi, sabiendo que ambos le atacarán con sus sables, preparado para hacerles frente.

La tormenta se desata, las palabras dejan paso a la acción en medio de rafagas de dolor y odio. Aquel ser parece tener un gran poder y no soy capaz de entender como ha podido evitar el misil de Balael y el disparo de Sake.

La situación se sucede tan rápidamente que resulta aturdidora, los rayos de energía, sus movimientos electricos contra el grupo son muestras de un gran poder que quebrantaría el alma de cualquiera... pero no de nosotros.

Podrá herirnos, derribarnos e incluso doblegar nuestros cuerpos... Pero jamás podrá doblegar nuestra determinación y nuestra voluntad... ¡POR SENESFRA ATACAR!

Gaheris ve que el combate comienza y enciende el sable de luz que tenía en la mano para avanzar cautelosamente hacia el enemigo, cuidándose de no bajar la defensa.

Nina deja de gritar cuando los rayos desaparecen pero se demora un momento en regularizar un poco su respiración, deteniendo gran parte de los espasmos que sacudían su maltrecho cuerpo.

Luego de eso dispara con su rifle pero no consigue impactar.

Paso de mi posición defensiva cerrada con el Sable de Luz de mi Maestra a dar un cauto paso atrás, seguidamente extiendo la mano izquierda hacia el frente y hacia arriba. El Poder de la Fuerza agarra al Sith con una fuerza monstruosa y lo estrella violentamente contra el techo, cuyo metal cruje y se agrieta ligeramente.

El misil iba directo al pecho del Sith, y repentinamente, como si de una mano gigante se tratase, el Sith se dobló sobre si mismo hacia adelante y esquivó su misil.

Balael quedó estupefacta el tiempo suficiente, para hacer que los ojos violentos e inyectados en sangre del Sith se posaran en ella...

Repentinamente se sintió levantada por los aires... intentó resistirse pero eso que ellos llamaban la fuerza, era mas que ella.

Con velocidad vertiginosa sintió el equivalente a una mano gigante que la tomaba y arrojaba encima de Roogbor con ímpetu.

Sintió el pelo del Wookie en el rostro aun antes de darse cuenta donde estaba, afortunadamente no había soltado su arma...

Intentando reponerse tomó un poco de aire y empezó a recargar su lanzamisiles. Si este demonio pensaba que Balael caería presa del pánico, se llevaría una gran sorpresa...