Partida Rol por web

La maestra asiente y, colocandote una mano en el hombro como muestra de apoyo, te responde:

- "No debes temer, D'Angbar. Yo te he entrenado y sé de lo que eres capaz. Debes tener más confianza en ti mismo y confiar en tu entrenamiento. No es relevante nada de tu pasado pues ahora eres un Jedi. Has sido probado en combate con tus hermanos padawan y conmigo, por lo que sé de lo que eres capaz. El miedo lleva al Lado Oscuro y debes evitar ese camino pues es la peor amenaza que tiene un estudiante al conocer el poder que posee y sentir que puede ser más. Cuida los valores de la Orden y confía en ti tanto como yo lo hago y todo saldrá bien."

La Cathar te mira a la espera de si tienes algoque decir.

El Nautolano asiente antes de contestarte:

- "Yo también siento la duda en él pero no debes albergar temor. La Maestra Snaill sabe como entrenar a su padawan. Si ves dudas o desviaciones en tu hermano padawan, no debes ser censurador sino qie debes mostrarle el camino correcto y ayudarle. El camino del Jedi es una senda difícil de recorrer. Todos nos hemos desviado y hemos dudado en algún momento pero eso no implica que sea un Jedi Oscuro. Eres un padawan igual que él y el peligro del Lado Oscuro es tanto para el que se desvía como para quién intenta devolverlo a la luz. Medita acerca de eso."

El maestro te mira y asiente para que entiendas que ese es el camino apropiado.

 Asentí mientras escuchaba sus sabias palabras y las procesaba:

 - Me esforzaré en hacerlo lo mejor posible, Maestro... Ahora, con tu permiso, me gustaría realizar algún tipo de tarea. Tal vez pueda conseguir, en estas 10 horas, el equipo que pueda necesitar para la misión, realizando algún servicio para el templo o para alguien que tu conozcas, ya que no podemos solicitarlo de manera oficial...

- "Sí, Maestra. Así lo haré." -

"Bar de pilotos", el dueño no se rompió la cabeza con el nombre!

Ese lugar era realmente cosmopolita como pocos, ¡y me encantaba! Busqué con mi mirada a algún Duros, eran famosísimos por toda la galaxia por sus peripecias y búsquedas. Sin darme cuenta fui caminando entre el gentío observando el comportamiento del personal.

Bueno hemos venido aquí para ganar algunos créditos... Mmmmm, igual alguna de esta gente nos puede poner en contacto para algún trabajo.

Con desparpajo me acerco a un grupo de pilotos que estaba mirando una carrera e intentando tocar el orgullo piloto de alguno para comenzar una conversación:

- Je! seguro que si pudieramos participar en una carrera podría bajarle los humos a más de alguno. ¿Vosotros no creeis?

- Hola - digo, parcamente, a modo de saludo, cuando llegamos a las puertas del muelle, mientras examino, discretamente, con la mirada, al hombre que se encuentra allí esperando, y mantengo, discretamente, mi mano derecha cerca de mi blaster. Prefiero que sea Lendor el que se encargue de hablar con dicho hombre.

Todos los pilotos miran a Balael de forma no muy amistosa y un gran gamorreano se pone de pie para hablarte en su sucio idioma, entre salpicaduras de saliva y mocos. Uno de los pilotos de al lado se ríe y te traduce:

 - "No le ha gustado nada tu tono, niña. Es él el que corre en la pantalla. Consiguió ese record ayer."

Ves que un par de ellos comienza a sujetar los mangos de sus pistolas blaster, como preparándose a que tu respuesta sea un desafío o una amenaza.

El Maestro Likenr niega con la cabeza a la vez que te contesta:

 - "Siento inseguridad en tus capacidades y preparación. No necesitas nada que La Fuerza no pueda brindarte. Deseo que tomes estas horas en meditar acerca de tu conocimiento en La Fuerza y de como puedes obtener a través de ella todo lo que necesitas. Además, somos Jedi, no mercenarios. No mancilles tu entrenamiento sirviendo a alguien sin otro propósito que intereses materiales. Ese no es el camino del Jedi."

Tu maestro te mira con un poco de desaprobación mientras espera tu réplica.

Tu maestra asiente y te responde con un tono cariñoso:

 - "Sé que así lo harás. Que La Fuerza te acompañe."

Luego de eso la maestra vuelve a juntarse con el Maestro Likenr.

Te paseas un poco para intentar escuchar lo que ocurre, pero son solamente cotilleos sin mucho propósito. Miras y ves grupos indistintos, uno que otro tipo solitario, hasta que escuchas algo que te llama la atención:

- Je! seguro que si pudieramos participar en una carrera podría bajarle los humos a más de alguno. ¿Vosotros no creeis?

Luego ves que uno de los pilotos, un gamorreano con mal aspecto, se pone de pie y escupe sus palabras de forma amenazante. No entiendes sus palabras al igual que la chica wrooniana que dijo las palabras y que ahora mira a un tipo sentado, que le dice algo que no parece amistoso.

Ves como un par de los tipos sentados comienzan a sujetar lo que de seguro son sus blasters. El único wookie del lugar mira de cerca a la muchacha.

El bar completo les mira e incluso parece que la música se detiene a la espera de la violencia.

Wow! Testoesterona en estado puro! Qué fino el orgullo del personal...

Sonriendo, levanto las manos tranquilamente para mostrar las palmas de mis manos:

- ¡Para conseguir esa victoria ayer te veo muy tenso! - Mirando a mi traductor - Puede que yo sea una niña pero me parece que este compañero no se ha bebido las suficientes para celebrar el éxito. Dile que me llamo Balael y que algún día tendré el honor de pelear con él en la pista para quitarle ese récord. Soy una piloto que ha venido a ganarse aquí la vida entre sus iguales.

Bueno si quería publicidad ya la tengo...

Tras hablar con mi Maestra y despedirme de ella con una profunda reverencia, regreso junto al Padawan Ordo.

 Miré confuso a mi maestro, algo dolido por sus acusaciones:

 - Pero maestro, no es eso, es sentido práctico, soy solo un Padawan, cuyos poderes y sentidos no están afinados, que necesitará equipo para compensarlo. Además, incluso los Maestroe Jedi usar cinturones de herramientas Jedi que les ayuda en sus misiones, algo de lo que mi compañero y yo carecemos... ¿Que ocurre si nos encontramos en una situación en la que necesitamos bucear y no tenemos respiradores para ello?. ¿O ganchos de escalada para subir una pared lisa vertical sin lugares para sujetarse?. Tu mismo dices que no debo de confiarme demasiado con mis dones y eso hago, aunque siempre sin perder la confianza en mi mismo, si es lo que temes que está pasando...

 En ese momento vi como se acercaba mi compañero...

 Estaba hablando con mi maestro tranquilamente cuando ví como se acercaba mi compañero, justo cuando dejé de hablar...

Al ver que la situación se tensa y la amenaza de los hombres a punto de desenfudar, intervengo dando unos fuertes y pausados aplausos intentando captar la atención mientras me acerco a la mujer y el gamorreano.

-Ayer estuviste sublime en la carrera amigo mío, fue una gran victoria digna de tu talento.  Sería un honor invitar a una copa al campeón.  Es más pagaré una ronda a todos los presentes en tu honor.

Me giro hacía el camarero haciendole una señal para que sirva una ronda, al tiempo que echó una mirada a la mujer indicandole con los ojos la posición de los hombres que estan preparados para desenfundar.