Partida Rol por web

Primero me sorprendo algo por la respuesta, pero miro a Carlos con cara de indiferencia quizas se esta pasando de listo...
Contesto con una simple negacion con la cabeza.

- Vale, pero que sepas que la oferta sigue en pie. -, le digo con una sonrisa. - Espero que nos dejen jugar al Quiddicht por lo menos. -

-¿Y que vamos a hacer lo que queda de tarde? Todavía quedan un par de horas hasta la hora de la cena. ¿Alguna propuesta?- dice Markel, que ha sacado su varita, aun por estrenar, de la caja y la observa con cuidado.

Raúl se sorprende ante el comentario de Aurora. Clases de vuelo? Uii que miedo me da esto... -suspira al imaginarse la altura y la poca seguridad que debe dar volar con un palo entre las piernas- Yo prefiero ver a otros volar que volar o mismo, pero si son clases obligatorias...

Sobre el sitio donde podríamos ir, y si salimos a los jardines? Se ven inmensos, podríamos dar una vuelta por los alrededores del castillo. -responde a Markel- O quizás por dentro del castillo, seguro que encontramos alguna cosa que hacer.

- Yo me apunto a dar una vuelta en los jardines... -, les digo a mis compañeros. - Un poco de aire nos vendría bien. -

-Ah, genial. ¿Que os parece ir al jardin de Migjorn?-dice Markel, como quien no quiere la cosa.

-algunos de nuestra casa, incluido yo, fuimos a buscar la sala de los menesteres, ¿si quereis hacer otra expedicion?

No seria mala idea ir a buscar esa sala... nosotros la encontramos pero debimos salir corriendo para llegar a clases, ahora... suspira Me arrepiento de no haber faltado a clases para explorarla

La sala de los menesteres? -se pregunta al oír el comentario de sus compañeros- Que tiene de especial esa sala?

-es muy facil, la llamada sala de los menesteres, osea, de las necesidades, aparece en cualquier pasillo del colegio, cuando alguien pasa, deseando con mucha fuerza algo, entonces la sala aparece, y si entras te brinda lo que necesitabas y deseabas.-explica Ita, a la par que mueve las manos

- Yo lo que diga la mayoría... -, les digo pensando en que puedo desear con tanta fuerza para que esa sala aparezca.

Raúl abre los ojos al oír semejante definición, aunque hay algo que no termina que convencerle. Supongo que esta sala será muy difícil de encontrar si no queremos realmente encontrarla... A mi no me importa buscarla, pero con el buen tiempo que hace podríamos echar un vistazo por los jardines. Así veo los alrededores de la escuela.

Cuando ya conozcamos más la escuela podemos ir a buscarla. -concluye- Preferiría buscar la sala entonces, no sea que me pierda el primer día...

-Bueno, podemos hacer dos grupos. Yo voy contigo a los jardines Raul. ¿Que os parece? ¡Si encontrais la sala ya nos contareis como es!- Markel se levanta del sofá- ¿Alguien más viene a los jardines?

- Pues... yo prefiero los jardines... -, les digo a mis compañeros. - Será más divertido que recorrer el colegio buscando la sala... Podríamos llevar las escobas, ¿no creéis? -

-Yo no tengo escoba, y además no estoy seguro de si podemos ir por ahí en escoba, deberíamos preguntar al prefecto... para no perder más puntos.

Markel se acerca al prefecto de Griffindor.

-Oye, perdona... ¿se pueden usar las escobas fuera de las horas de clase?

El prefecto, que estaba hablando muy acaramelado con la prefecta, sentados ambos en el mismo sofá, levanta la mirada algo cabreado... hasta que ve que se trata de Markel.

¡Ay! Hola... mmmm... ¿escobas? Mira a la prefecta y ambos niegan con la cabeza. Me temo que no os está permitido sin la supervisión de un adulto que sepa magia y se haga responsable de vosotros.

-Me lo temía... eh... gracias, perdón por la interrupción- dice Markel algo avergonzado. Después vuelve con sus compañeros.

-Nada Carlos, tienes que dejar la escoba aquí. ¿nos vamos entonces?

- Pues nada de escobas... -, digo negando con la cabeza desanimado. - Entonces... nada... sin escobas. -

Cuando entro les oigo hablar de qué van a hacer, asi que me uno a la conversación:

- Yo me apuntaría a un paseo por los jardines, el otro dia no me dio tiempo. Hablo mirando por la ventana. Empiezo a sentirme un poco encerrada y Betto no ha vuelto aún. O se está tomando un señor descanso, o mis padres no saben qué contestarme.

Sonrio a Carlos y Markel, para ver qué me contestan.

Perdona, pero ha pasado mucho tiempo y no logro recordar... ¿Enviaste una lechuza a casa? ¿Qué ponía?

Lo siento, es que ando liada con examenes... -.-U