Partida Rol por web

SS Era Mitológica: La Guerra de Ares

A:S01E07 - ¡Apúrense guerreros! El cosmo de Eleas se debilita

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10/06/2011, 15:16
Director

El ciervo los miró a ambos, sus ojos dos pozos negros. Soy un ser primordial, soy el espíritu del invierno... soy aquel que trae la renovación de la tierra a través del frío, dijo con palabras que sonaron llenas de sorpresa. Seguramente aunque fueran dos niños, deberían conocerlo...

Dió un golpe con la pezuña en el suelo, que se llenó de símbolos arcanos. Cubrieron todo el suelo, como grabados en un fuego celeste en la roca. El robo de una armadura de Atenea no debe ser tolerado, es cierto. Pero no sé si este es el mejor camino, si es así. Poderosas energías guardan mi descanso; podrán ustedes llegar al otro lado? 

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10/06/2011, 16:49
Acacia Solo

Acacia seguia con muchas dudas respecto a su pasado y algo le decia que seria mejor aclararlas antes que fuera demasiado tarde. Pero aquel no era el momento oportuno. El encuentro con la Nayade no era casual, sin embargo tenia, junto a Harjas, otras prioridades.

El joven aprendiz intentaba tranquilizar su mente y espiritu como su compañero hacia, pero la vibracion de la montaña y el oscilar del Cosmos de Shimi, lo sacaron de su breve trance. Acacia se levanto bruscamente y procurando no faltarle el respeto a tan magnifica criatura le dijo con aprension.

-Disculpa, pero no hemos llegado hasta aqui para dudar respecto al camino que debemos tomar. Seguiremos adelante, sin importar los obstaculos. Nuestros compañeros estan dando todo de si mismos y nosotros no podemos quedarnos atras. Por favor, indicanos el camino a seguir y si los dioses asi lo desean llegaremos a nuestro destino.

 

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10/06/2011, 17:02
Director

El ciervo los miró, dio un paso al costado, y dejó el camino despejado frente a él. Los símbolos se iluminaron nuevamente. Den un paso adelante; y yo los llevaré allí donde el destino los requiera.  

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10/06/2011, 17:04
Acacia Solo

El Pisciano no dudo. Simplemente miro hacia su lado, donde Harjas aun estaba sentado, con el semblante tranquilo y un aire de divina paz irradiaba de el. Acacia cerro los ojos y sonrio. Maestro... no es mi intencion dudar de ud... pero seguire buscando respuestas a mis preguntas. Ahora, dare un paso mas que me acercara a los dioses que debo proteger.

Volvio a abir los ojos y se acerco pausadamente hacia los simbolos arcanos que manejaba el ser del invierno.

 

Notas de juego

Perdon el doble post, pero esque estamos algo retrasados (segun el Master) y nuestro titulo incluso dice que nos apuremos! XD

PD: La imagen no se, la vi y se me antojo ponerla.

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11/06/2011, 23:01
Harjas

Harjas se incorporó lentamente. Su cabello, largo y negro, se movió con dinamismo y su cuerpo parecía responder a los mandatos de su mente, y a ningún instinto. Abrió los ojos, y cruzó la mirada con el ciervo. 

"Hibernum, eres un ser lleno de sabiduría y te agradezco por ayudarnos en nuestra búsqueda. Algún día nos cruzaremos de nuevo, estoy seguro."

Lentamente dio un paso hacia los símbolos extraños en el suelo. 

Notas de juego

Perdon por no postear ayer, los viernes son realmente complicados para mi.

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11/06/2011, 23:22
Director

Acacia se acercó, observó los símbolos. Definitivamente eran antiguos; nunca había vista nada igual.

Harjas dio un paso en el círculo. Acacia lo acompañó. Y la cueva se sumió en la oscuridad, como si nunca hubiera existido.

Algo suave y blanco, frío, les rozó la mejilla. Harjas levantó la mano, extrañado: pequeños copos de nieve se derramaron sobre ellos. Movieron los pies, los símbolos desaparecidos, y dejaron una marca en la suave en el suelo. Una capa fina de nieve, inmaculadamente blanca, cubría el suelo.

Avanzaron extrañados buscando un sentido a todo esto. Acacia fue el primero en descubrir un detalle extraño: No hace frio... murmuró.

Algo allí delante rompía la monotonía del suelo.

Uno de ellos se inclinó a tomar la rosa, pero su mano fue detenida por una melodía que llenaba el aire. Un zumbido que subía y bajaba, rodeándolos. De a poco el manto nevado comenzó a brillar.

- Bienvenidos a mi Jardín. Agradecería que no tocaran esa rosa; es un regalo del Caballero de Piscis, Santo de Atenea.

- Mi nombre es Otis, Espíritu del Invierno. Miró a ambos con la cabeza ladeada. Llevan la marca del Señor del Invierno... y yo soy aquella que no puede permitir que Hibernum salga a la superficie. Este camino... no es para mortales. 

 

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12/06/2011, 18:02
Harjas

Harjas se sobrecogió ante la hermosa presencia de la mujer. Frunció el entrecejo. "Que..." dijo, con voz algo áspera "¿Cuántos... cuántos espíritus del invierno nos cruzaremos?" 

Dio un paso adelante y le ofreció la mano a la mujer "Otis, si esa rosa fue un regalo de un caballero de Athena, entonces no somos enemigos. Somos aspirantes a caballeros y estamos buscando una armadura robada. Tal vez tu puedas decirnos algo al respecto..." hizo una pausa "Estamos buscando a Altieon el rojo."

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13/06/2011, 15:07
Acacia Solo

Al llegar al circulo con extrañas inscripciones, Harjas y Acacia fueron llevados a otro sitio. Desconocia si seria en mente y cuerpo, pero lo cierto es que parecian estar en lo que podia ser un jardin congelado, y aunque nevaba y el hielo predominaba, no sentian frio alguno. Asi se lo expreso a su compañero, mientras sus sentidos lo hacian vislumbrar una hermosa perla en el fondo de aquel oceano congelado. Una rosa roja yacia alli solitaria, emanando algo de color y amor al sitio, asi como vida y perseverancia.

El joven se sintio profundamente atraido y conectado a ella, pero al acercase, fue interrumpido por una doncella. Resultaba aquel especimen floral un regalo de uno de los Santos Dorados del Santuario, Piscis.

El Caballero de Oro de los Peces estuvo en este sitio y obsequio una Rosa Roja. Tengo sabido que estas flores son particularmente peligrosas, pero aun asi hermosas y poderosas.

En su ensimismamiento Acacia no podia pronunciar palabra alguna. Aquella Rosa le parecia la mas bella que nunca antes habia visto, pero al mismo tiempo, le producia cierto pesar al verla entre aquel desolado y aburrido paisaje.

Escuchaba lo que Harjas decia, acerca de la Armadura de Plata roaba y el Caballero Rojo, pero sus deseos de conocimiento reprimidos, ultimamente eran mas dificiles de contener.

-Agradezco sus advertencias. Aun siendo tan hermosa, debi haber sido precavido con dicha Rosa. Y aunque el camino sea peligroso, si por aqui estuvo el Santo de Piscis de Athena, significa que es un sendero que sus Caballeros y futuros Santos pueden permitirse atravesar. A pesar de que podria quedarme aqui mas tiempo, para recorrer y disfrutar de tan majestuoso jardin, llevamos prisa, el Cosmos de Eleas se debilita.

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14/06/2011, 02:18
Director

El Cosmos de Otis se encendió mientras el espíritu tocaba planos inaccesibles para los muchachos... y los extraños símbolos volvieron a rodearlos.

- Puedo indicarles el camino de salida de aquí. Puedo dejarlos directamente en el camino de ese... Cosmos agresivo que puedo percibir. Pero es un camino diseñado para elementales, para espíritus de las estaciones, un camino para Hibernum. No sé si vuestros frágiles cuerpos humanos puedan resistirlo...

Esperó un momento, buscando duda en los ojos de los aprendices. Al no encontrarla, cerró las manos. Así sea, entonces.

Una ráfaga helada los envolvió, cegándolos.

Cuando abrieron los ojos, ya no estaban en una cueva.
 

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14/06/2011, 02:18
Director

El prado era verde, interminable. El horizonte solo era una línea borrosa en la que el cielo, azul profundo, se mezclaba con el pasto en el infinito.

El cesped estaba salpicado de estrellas blancas, diminutas. Florecillas no más grandes que el pulgar de un bebé, con pequeñas gotas de rocío que resplandecían bajo una luz que, ambos constataron de inmediato, no provenía de ningún sol que colgara allá arriba.

Solo un árbol se observaba, allí delante. Y pronto los aprendices corrieron hacia él.

Bajo la sombra del árbol, un hombrecillo con un curioso sombrero, ancho y cónico, los recibió.
 

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14/06/2011, 02:19
Xian

- Deteneos. Mi nombre es Xian, Guardián del Paso del Invierno.

Levantó una mano, con la palma hacia adelante. Llevan la marca del invierno, y Otis los ha enviado a mi presencia. Es mi decisión llevarlos al otro lado; o devolverlos.

Un aura blanca comenzó a envolver al anciano. Dicen los astros, los espíritus, que grande cosas les esperan. Grandes y... difíciles. Este mismo camino no se abrirá a no ser que obtengan la iluminación.

Suspiró. Los humanos solo se enaltecen de dos formas: con la contemplación, o con el desafío. Cual eligen? El largo camino de la contemplación, o el corto y peligroso del desafío? 

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14/06/2011, 16:02
Acacia Solo

Luego de haber pasado por el encuentro de una bella, poderosa y sabia Nayade, en el cual Harjas habia podido despertar gran parte de su Cosmos y que Acacia parecia cada vez menos apto para controlar las dudas de su pasado, habian llegado al encuentro con una criatura fascinante, Hibernum. Aquel ciervo de hielo, apenas si les habia avertido lo que les depararia y sin dudar los jovenes aprendices habian aceptado el caminoa a seguir. Llegaron a un helado jardin, donde nuevamente una hermosa criatura los recibio. Pero aquella no era lo unico bello del lugar, sino una Rosa, roja, proveniente del mismisimo Santo de Oro de los Peces.

Acacia hubiese deseado quedarse mas tiempo en aquel sitio, con aquella Rosa, aunque en verdad hubiese preferido apreciarla en un entorno mas colorido, vivo y readeante.

Pero ahora se encontraban en un sitio completamente diferente. Era una suerte de jardin, extraño y majestuoso, donde un arbol alli se encontraba y a sus pies un anciano de rara apariencia.

Harjas y Acacia corrieron hacia el, y este, como antes habia ocurrido, ponia a prueba la determinacion y fe de los aprendices. Pero esta vez, tenian la opcion de elegir, entre el camino largo y el corto.


-Acacia, como te he explicado antes los Santos de Oro del Santuario, no son mas que rayos del propio sol materializados por medio de sus Armaduras. Representan los Doce Signos Solares, y el ultimo de ellos, Piscis, es el mas poderoso. Pero no me mal interpretes. No me refiero a poder, fuerza, cosmos, habilidad ni nada de todo eso. Sino que es el Santo con el Destino mas poderoso.

Los Dos Peces del Firmamento Celeste representan la union del Principio y del Fin, Acacia. Afrodita y Cupido, la belleza y la inocencia, unidos en un solo ser. Por eso es la Ultima Casa, el Ultimo eslabon antes del Fin Universal, antes del comienzo. Todo muere en Piscis. La muerte misma, la muerte esperitual, esta representada por esta Signo. Por ello, apesar de las bellas apariencias, el mas mortal de todos es el Santo de los Peces Dorados. Porque bien sabe, que en el todo muere, incluso su propio espiritu. Si te contienes, si esperas el momento adecuada, si luchas en silencio y aprendes de la soledad y la exclusion. Si sobrevives como la unica rosa en un jardin helado, Acacia, algun dia, podrias llegar a ser el Santo Dueño del Destino Final de todos. El Santo de Piscis.


Acacia observaba sus pies, mientras los recuerdos aislados de las lecciones de su Maestro aparecian en su mente si su permiso, pero con mucha mas logica y entendimiento que antes.

Desde que llegue al Santuario no he podido poner en practica la contencion de la que me enseño mi Maestro. Aqui todos buscan explorar y explotar su Cosmos a todo momento. Y parece funcionarles. Pero si mi Maestro esta en lo cierto... si algun dia pudiera portar la Armadura de Piscis... entonces

-La muerte es el unico camino -dijo Acacia hacia el exterior sin siquiera darse cuenta de ello.

El joven seguia observando sus pies, en donde parte de la sombra del anciano se veia. Levanto la cabeza y acepto su destino. Volveria al entrenamiento que su Maestro le habia dado.

-Yo... aunque apuro tengamos... considero que la contemplacion me sera mucho mas util. Aunque le falle a Eleas... seguire los mandatos de mi Maestro. Hay cosas que debo comprender pero no apresurar. Desconozco el tipo de entrenamiento al que se refiere, pero... las respuestas que busco no las encontrare sino meditando y observando, hasta que el momento sea adecuado. Algun dia sere el ultimo eslabon de la vida y pretendo estar listo.

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15/06/2011, 16:58
Harjas

Toda esta situación se tornaba cada vez más extraña, pero a la vez (por más contradictorio que suene), cada vez más clara. Mientras más se internaban en los contradictorios laberintos de las realidades, más claro estaba en su mente su misión. Harjas se dio cuenta de que pensaba como un Santo de Athena. Qué tenga o no armadura, que sea o no un caballero pasaba a un segundo plano, porque su compromiso con la Justicia y con la diosa de la tierra era total. 

El pichón había comenzado a volar. 

Las palabras de su amigo fueron inesperadas. Harjas abrió los ojos, sorprendido. "Acacia, yo..." comenzó a decir, pero se calló. No supo como completar la frase. 

Se aproximó al extraño viejo llamado Xian y se quedó reflexionando unos minutos sobre las palabras de su amigo de pelo celeste. El silencio se impuso en la escena y el persa se sintió de alguna manera contenido por ese silencio. "Yo también creo que la Contemplación es el camino para enaltecerme. Pero creo que la urgencia del momento nos condiciona. Al menos a uno de los dos."

Dio la espalda a los dos y bajó la cabeza "Yo... tengo una duda antes de contestar. No se por qué creo que estamos lejos ya del Santuario. Creo que el tiempo corre de otra forma aquí. Si disponemos del tiempo necesario, me gustaría recorrer la senda de la contemplación. De lo contrario, no me quedará otra alternativa más que seguir con el camino para recuperar la armadura sagrada. No me importa sacrificar mi propia superación personal, con tal de cumplir una misión para Athena."

 

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15/06/2011, 18:58
Xian

El anciano se sentó en el suelo. Inclinó la cabeza, y tras él, a un lado del árbol, surgió una puerta de madera.

Una puerta, en el medio del prado. Hacia nada.

- Ese es el camino. Pero el camino, como les he dicho, no es para mortales simples. Al llegar hasta aquí, con la protección de Hibernum y Otis, ustedes han recorrido un camino normalmente vedado... pero más allá de esa puerta las fuerzas que los mantendrán en pie serán solo las propias.

- El tiempo... es relativo. El camino de la contemplación es una sabia elección.

 

Notas de juego

Oookey, bueno, cambio de planes (que no se diga que no soy flexible).

Tienen 3 oportunidades de Comunión Espiritual. Luego, de Sexto Sentido. Si tienen exito en Comunión Espiritual, recuerden reducir la dificultad de Sexto Sentido en 1.

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15/06/2011, 19:19
Acacia Solo

Notas de juego

Ya hay que hacer las tiradas? No entendi bien. Que roleamos? O el rol lo haces tu dependiendo de los resultados? Que alguien me traiga miel! No entendi!

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15/06/2011, 19:21
Director

Notas de juego

Rolea la "meditación" y hacé las tiradas, el resultado final lo narro yo.

Vamos que se terminan los episodios!!! 

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15/06/2011, 19:25
Acacia Solo

Aun conciente de sus propias palabras, Acacia escucho a Harjas. Y lo hizo sentir diferente. No le habia importado tanto la recuperacion de la Armadura de Eleas, sino su propio crecimiento. Eso era inadmisible.Tenia mucho por aprender y ahora entendia porque el destino habia llevado a Harjas a elegir su propio comino. Con una energia esperitual diferente a la suya, con una manera de proceder distinta, el pequeño podia aprender mucho del comportamiento de su compañero.

Cuando se abrio aquella abertura en el arbol, el joven ingreso sin dudarlo. Adentro la oscuridad era suprema. Inundaba todos los sentidos, pero no se dejo intimidar. Se sento en el suelo, aunque sentia mas bien como si flotara y apesar de no necesitar de la vista, cerro los ojos. No oia nada y tampoco sentia la presencia de su compañero. Estaba seguro que lo seguiria, pero adentro, probablemente estar tambien solo.

Asi esta bien. Sera mas sencillo concentrarme. Siempre conmigo mismo, y nadie mas. Como aquella rosa en el jardin helado. Como las espinas que no permiten a nadie acercase. Solo. Como mi padre.

Entonces el sonido del Oceano se escucho, al principio lejano, pero luego cada vez mas cerca. Incluso Acacia pudo sentir la humedad en el aire y su piernas mojarse. Su cuerpo, aun sentado, se balanceaba a los lados con el chocar de pequeñas olas. Pero al mismo tiempo, sabia que no estaba mas que en el interior de aquel arbol.

El agua se sentia de marivlla, ni fria ni caliente, en la temperatura ideal para Acacia. El joven se permitio mover las manos y sentir en sus palmas el liquido. Sonrio. Pudo sentirse conectado con el fluir del elemento. Creia poder controlar el agua que lo rodeaba. Imaginaba olas crecer a su alrededor, bañandolo, pero sin mojarlo. Protegiendolo. Sabia que con su Cosmos podia controlar aquel pequeño espacio inundado de la sustancia de la vida y en su interior, tambien creyo que con el entrenamiento adecuado, la determinacion necesaria y la fe propia de los seres humanos, algun dia podria llegar a controlar otras cabidades mucho mas grandes de agua.

Las historias fantasticas de un universo submarino, grandioso y poderoso, gobernado por una sola entidad, se manifesto en la mente del joven, casi por una voluntad externa a la suya. Creyo ver una infinidad de templos y santuarios adornados de corales, almejas y algas con un cielo acuoso verde y azul tan extenso como el planeta mismo. Se vio a si mismo recorriendo aquellos paisajes con porte, sabiduria y poder. Y todo aquel ser que estuviese en su presencia le temia y adoraba al mismo tiempo.

Prosiguio caminando y llego a un templo, mucho mas grande e imponente que nunca antes hubiese visto. Y Acacia supo, que fue, es y seria suyo.

El joven se veia impulsado a entrar en aquel templo. Algo o alguien lo llamaba. Sabia que el amor de todos los evos del universo se encontraba alli. Y siete seres mas lo apremiaban a ingresar. Pero al mismo tiempo, el sol, mas alla del mismo cielo, comenzo a brillar y a interrumpir los deseos de exploracion de aquel sitio que parecia su hogar. Acacia levanto la vista y pudo vislumbrar una pequeña hada bajar hasta el. La misma le hablo, pero el no escucho sonido alguno. Esta se limito a sonreir, mientras que en el templo sumerguido parecian impacientarse. El hada le tendio una mano y Acacia, aunque aun tenia deseos de entrar en aquel santuario, la tomo suavemente. Entonces el sol brillo con mas fuerza, hasta cegarlo por completo. Y quedar sumido en una completa oscuridad. Pero no estaba solo. Una figura se encontraba tambien alli mismo. Una figura de piedra, pero llena de vida y poder.

-Athena... balbuceo Acacia. Y entonces desperto.

- Tiradas (3)

Tirada: 3d20
Motivo: Comunion Espiritual
Dificultad: 19+
Resultados: 17, 19, 8
Exitos: 1

Tirada: 1d20
Motivo: Sexto Sentido
Dificultad: 17+
Resultado: 9 (Fracaso)

Tirada: 2d20
Motivo: Sexo Sentido
Dificultad: 17+
Resultados: 14, 20
Exitos: 1

Notas de juego

Ya me diras Master si se me paso la mano o que, pero no tenia ni idea sobre que meditar XDD

Agregadas dos tiradas de Sexto Sentido mas.

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15/06/2011, 19:43
Director

Notas de juego

3 de comunion, y 3 de Sexto Sentido. La idea es que lo sacen, me cacho en die! 

Cargando editor
16/06/2011, 00:02
Harjas

Harjas no se sorprendió cuando la puerta se materializó de la nada al lado del árbol. Ya nada de la situación lo sorprendía, había aprendido a aceptar las cosas como son. A contemplarlas y admirarlas, pero ya no esperaba que las cosas actuaran de determinada forma en determinados momentos o lugares. Simplemente eran. Y así debía ser. 

Vio como su amigo atravesaba la puerta y desaparecía. Tomó aire y dio varios pasos lentos hacia adelante. Al llegar al portal, cruzó la mirada con el extraño viejo y lo saludó con un gesto. Estaba listo para lo que sea. Atravesó el umbral. 

Lo primero que sintió el joven fue una intensa luz que lo obligó a cerrar los ojos. Dio un par de pasos y sintió el suelo blando, irregular. Tropezó con algo duro y casi se cae pero recuperó el equilibrio, gracias a los reflejos desarrollados en su entrenamiento. No sabía que hacer, la luz aun lo cegaba y si mantenía los ojos cerrados no podía ver por donde andar, qué hacer. Dio unos paso más, lentos, tanteando el terreno. De repente un aroma familiar, dulzón y atrayente, penetró en sus sentidos. 

Entonces comprendió. Se serenó y calmó su mente. Respiró regularmente y comenzó a liberar su cosmos. No de manera rápida, desenfrenada, furiosa, como cuando combatía, sino de una forma más controlada. Poco a poco lo fue liberando y le fue dando forma. Poco a poco, fue utilizando su cosmos para tantear el ambiente. Entonces reconoció donde estaba. El suelo era blando porque era tierra cubierta de pastos. El terreno irregular porque era característico de una zona montañosa y, percibió, estaban en un Valle. El olor dulzón eran las flores de un árbol que había cerca. Un álamo. Harjas sonrió. Estaba en su hogar, en el Valle de Mazda, y más específicamente en uno de los lugares donde vio a su hermana por última vez, antes de que parta. Se sintió a gusto, cómodo. 

Entonces caminando ligero, como si tuviera los ojos abiertos, el persa se dirigió al enorme álamo y se sentó a un lado. Sin darse cuenta, adoptó la postura que había tenido el misterioso Soterio. Era muy cómoda.

Comenzó entonces a pensar en su hogar, en su infancia, en su maestro, en su hermana. Una sonrisa se le dibujó en el rostro. 

Sin embargo, poco a poco, sin darse cuenta de lo que estaba haciendo, fue soltando los recuerdos que lo aprisionaban. El recuerdo de su infancia, del Valle, incluso de su maestro. Su mente se fue poniendo en blanco y comenzó a sentir un estado de plenitud cada vez más fuerte. Dejó que sus sentidos se amplifiquen y entonces percibió mejor el suelo bajo sus pies y escuchó los insectos caminar, junto con el crujir del álamo. Sintió el hermoso aroma a las flores del árbol y dejó que lo embriagaran. Un viento débil acarició su cara y cabellos oscuros. 

El joven no podía darse cuenta, pero su cosmos seguía manando de su cuerpo, y había tomado la forma de un enorme pájaro violáceo de cuello largo. Con las alas y la cola cubría a Harjas y ardía con su espíritu. El cuerpo del persa perdió peso y comenzó a elevarse del suelo.

Pero había algo que Harjas no podía dejar de lado, un recuerdo tan puro y tan especial que constituían su propia esencia: su hermana. El joven intentó desprenderse del recuerdo de Nínive, pero pronto se dio cuenta que no podría. El amor que se profesaban, las enseñanzas de ella, lo eran todo para el joven. No podría hacer nada. Una gota de sudor se resbaló por su frente. 

Entonces, una hermosa y dulce voz de mujer retumbó en su cabeza. "Vuela" dijo "Despréndete de todo y vuela"

Harjas no se detuvo a reflexionar de donde había salido esa voz o a quien pertenecía. Solo supo que debía hacerle caso. Debía volar, y para hacerlo no podía tener ningún lastre en el mundo. Se desprendió del recuerdo de su hermana. 

Entonces, por un instante, y solo por un instante, el persa alcanzó a poner su mente completamente en blanco. La gota de sudor en su frente desapareció evaporada por el calor del cosmos que ardía con una inmensa fuerza. Entonces, en un destello de luz, el cosmos que comenzó a manar de Harjas pasó a ser blanco y un disco enorme de energía blanca, con líneas doradas que lo cortaban transversalmente rodearon al pájaro violeta que contenía al joven. El disco comenzó a girar y el pájaro abrió las alas y extendió su cola. El cuerpo de Harjas se elevó varios centímetros del suelo. Su mente estaba en blanco, su espíritu gozaba de la plenitud máxima. 

Entonces, algo quemó ese instante. El recuerdo de Nínive volvió a hacerse presente en la mente de Harjas y toda su concentración se perdió. Su hermana, ¿cómo podría renunciar a su hermana...?. El disco blanco y dorado desapareció y el enorme pavo real cerró nuevamente sus alas y cola sobre Harjas. 

"Nínive" susurró. 

No podía más. Una avalancha de sentimientos comenzaron a manar hacia el exterior y no pudo concentrarse más. Abrió los ojos. El viento movía los pastos del Valle y desprendía alguna que otra flor del álamo. Un tigre blanco descansaba a los pies de Harjas y lo miraba con una pacifica mirada de pereza. Al parecer, la criatura había querido atacar mientras el joven meditaba y la paz de su espíritu convenció al tigre de no hacerlo. 

Harjas mantuvo su posición, contemplando la hermosura del tigre. "Cuando volvamos al Santuario voy a hacerle miles de preguntas a Soterio" pensó. No sabía exactamente porqué, pero tenía la certeza de que aquel hombre era el idóneo para solventar sus dudas. 

- Tiradas (2)

Tirada: 3d20
Motivo: Comunión Espiritual
Resultados: 11, 12, 2

Tirada: 3d20
Motivo: Sexto Sentido
Resultados: 1, 13, 8

Notas de juego

wooow. Pensaba hacer un post rápido porque me tengo que ir, pero prefiero escribir ahora que vuelva, así hago algo decente. 

EDIT: Aprovecho el post y escribo acá mismo. 

Tiradas de Comunión espiritual (19+)

1) 11 (fallo)
2) 12 (fallo)
3) 2 (fallo)

Tiradas de Sexto Sentido (17+)

1) 1 (fallo)
2) 13 (fallo)
3) 8 (fallo)

EDIT 2: aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah! Había escrito un post gigante!!!!! Y se me borró todo!!! Maldita mierda de pc. Vuelvo a reescribirlo. No se como saldrá. 

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05/07/2011, 21:33
Xian

--es una sabia elección...

La voz del hombre resonó en sus oidos cuando abrieron los ojos, como si no hubiera transcurrido más que medio latir del corazón de los aprendices. Ambos podían sentir un cambio en el aire; Acacia brillaba con una luz interior que amenazaba con extinguir al resplandor de este lugar extraño en el que se encontraban.

- Tu Cosmos... el viejo entrecerró los ojos. Arde como un sol. Y sin embargo, algo lo enturbia. Un camino poco claro queda por delante...

Todo alrededor de los muchachos pareció perder nitidez. La misma puerta que tenían delante se disolvió. El mundo colapsó hacia el aura de Acacia, Harjas también se vió arrastrado como si fuera un agujero negro, sin fin... 

Fin del Episodio 7