Partida Rol por web

 señor Deibhem. Esperemos que salga todo bien. 

El andoriano observa todo con atención y siempre que puede asesora al equipo de ingeniería para que la sonda de lo mejor de sí. Sucede que él conoce como la palma de si mano el torpedo y sus componentes.

Muchos de los torpedos tienen inscripciones en su idioma nativo (generalmente insultos) que hacen referencia a los Romulanos. Muchos tienden a susurrar que Deibhem tiene un problema personal con el enemigo desde el incidente denominado como La crisis de Babel.

Espero que esto sirva para patear los traseros de nuestros enemigos y verlos morir bajo nuestro pie. – respondió ensimismado en sus recuerdos.

El comandante MACO hablaba con su compañero de cuerpo. Ingnorando a los demás, aunque fuera a aparentar que los dejaba trabajar tranquilos, es que no le interesaba lo que estaban haciendo. Estaba demasiado ocupado en prepara la misión que tenía en breve que cumplir.

Siempre podemos preparar dos pelotones de avance, así cubriríamos más terrenos y siempre está el otro para poyo. Con unos 6 ó 7 por grupo, además de nosotros dos, sería más que suficiente, y así dejaríamos compañeros aquí, sobre todo por si tienen que reaccionar ante algo o por si hubiera que intervenir con el prisionero.

Al llegar a la armería pude ver como trabajaba el ingeniero Ollander y me sorprendió comprobar su habilidad montando la improvisada sonda. Gaunt y yo nos pusimos, la misión de desembarco era muy delicada y había que dejar todo atado, un cabo suelto por pequeño que fuera podría desembocar en alguna baja, no podíamos perder mas hombres.

- Gaunt no creo que nos dejen llevar más que una lanzadera, al menos espero que nos asignen a un piloto hábil, por muchos datos que recojan con la sonda y los escáneres no sabremos con total seguridad lo que nos vamos a encontrar. La oficial de comunicaciones está interesada en venir, no me gusta la idea de hacer de niñero pero en caso de encontrarnos con alguien puede que sean necesarios sus conocimientos. Con lo que nos quedan cinco plazas libres, podríamos bajar tu y yo con unos buenos soldados. Aquí podremos dejar a al cargo al sargento Chandler. Debemos equiparnos para lo peor pero, por el bien del futuro de la Excalibur, que no tengamos que echar mano de los phaser. El objetivo es encontrar posibles supervivientes de la Excálibur y material para las reparaciones de la nave.

Me volví hacia el atareado ingeniero.

-Disculpe Ollander, si es posible me gustaría que alguien le echara un ojo a esa lanzadera, no queremos llevarnos sorpresas. Gracias.

-Disculpe Ollander, si es posible me gustaría que alguien le echara un ojo a esa lanzadera, no queremos llevarnos sorpresas. Gracias.

Me volteé ante las palabras de Jankowsky, mientras trabajaba con Silky para preparar los equipos de desembarco.

-Los chicos aquí están un poco ocupados -respondí, levantando mi intercomunicador-, pero con gusto les diré a los encargados de la Bahía que hagan una segunda o tercera revisión del aparato.

-Bahía -dije, tras haberse escuchado el pitido del intercomunicador, que acerqué a mis labios-, aquí Ollander. Hagan una revisión total de último momento de ambas lanzaderas, por favor. Quiero un informe completo para dentro de una hora. Gracias, señores.

Suena el intercomunicador desde el puente

-¡INGENIERÍA, CORTEN LA ENERGÍA DEL PUENTE, RÁPIDO!, ¡PRIORIDAD 1!

El tono de voz no deja lugar a dudas, algo gordo está pasando en el puente (Aakesh).

El intercomunicador estuvo a punto de caerseme de las manos cuando escuché la vehemente orden del Primer Oficial.

-¡De inmediato! -respondí, desde la armería donde me encontraba.

-¡Ingeniería! -solté, cambiando el receptor de la comunicación para la Sala de Maquinas- ¡Corten la energía del puente ya! ¡Ahora mismo! ¡Señor Tse! 

En tanto, me dirigí hacia la pantalla donde observaba la Oficial de Seguridad.

-¿Qué demonios está pasando? -espeté, confundido.

- Joder ¿Sólo una? Pensó desilusionado.

Esta orden le pareció super extraña, y temió algo que no estaba planeado: - No será otra invasión. Voy a ver.

Dejar al alma y cerebro de la nave sin suministro eléctrico solo se le ocurría que hubiera algún tipo de incendio tipo "ECHO", así que esperaba que eso fuera, porque ... podrían ser otras muchas cosas. Agarró su arma y al MACO que se encontró por el camino le hizo seguirle. Esperaba que Jan organizase el descenso y demás, ya que por sus explicaciones parecía tenerlo bastante claro.

Podes hacer tu entrada al puente.

No quiero entrar a saco. Quiero antes, ver o intentar averiguar/escuchar lo que está sucediendo.

Ok!

¿Qué demonios pasa ahí, Gaunt?, ¿Seguimos con la misión de desembarco?. Supongo que se refiere a Urmoz, ahora mismo se lo mando, pero por el amor de Dios ¡manténgame informado!.

Cerré la comunicación ligeramente irritado,- ¿qué les pasa en el puente?. Busqué a Urmoz y le pedí que se dirigiera al puente sin dilación.

Tranquilo, por lo visto se ha escarallado algo del sistema informático, y si no lo consiguen "apañar" la solución, por lo visto, será que le meta unos tiros a no se que consola.

No, si al final, el que va a terminar desguazando la nave voy a ser yo.

La vehemente respuesta de Silky me pilló un poco por sorpresa y me hizo cierta gracia, reprimiento una risa le di mi respuesta:

Está bien, por un momento me había asustado, supongo que aun hay daños latentes en la nave que seguirán dándonos esa clase de sustos. Ya que estás ahí puedes consultarle a la capitana, necesitamos un piloto para el desembarco y convenía ir sabiendo a quién van a mandar.

La comunicación mantenida por la oficial Isathaa desde el puente, que servía para coordinar el ensamblado de la sonda, simplemente termina de forma abrupta y no es posible establecer nuevas comunicaciones con el puente.

En definitiva aquellos que se encuentran en la armería quedan incomunicados con el puente.

-¡¿Pero qué mierda...?! -solté, abalanzándome sobre la terminal más cercana, luego de recuperarme del tirón gravitacional que nos jaló a todos hacia un lado, ante la mirada atónita y temerosa de mis subordinados- Naun, Burgundy: dejen eso -ordené-. Ayúdenme a saber que ha sucedido. No podemos devolverle la energía al Puente sin saber si es seguro, y sin el Puente estamos todos en la más absoluta mierda. -miré a Jankowsky- ¿Un incendio, quizá? No tiene sentido...

Tecleé a la máxima velocidad que me permitían mis dedos. Era una locura, un pianista infernal tocando una sinfonía diabólica ante el mismísimo Lucifer. Las pantallas aparecían y se cerraban, las aplicaciones de la interfaz se ejecutaban y rápidamente corrí un escaneo del sistema: buscaba alarmas de cualquier tipo que se hubieran activado. El software de la nave seguramente tenía un registro en tiempo real, y al quedarse el Puente sin energía podría averiguar desde allí que había sucedido.

-¡Silky! -solté por el intercomunicador, eufórico- ¡Necesito saber YA que sucede allí arriba! ¡Averigua si puedo devolverle la energía al Puente o nos atrapará el campo gravitacional del planeta!

Por el comunicador contestó al compañero: - Creo que es mejor que terminen con un incendio y luego se pongan a pensar en otro. Démosles un instante.

Logras averiguar que lo último fue una comunicación de larga distancia con la nave desconocida y luego el registro se volvió loco, como si fuese hackeado. Al final llego la orden de cortar la energía junto a la desviación del ciber ataque. Ollander creé que podría devolver la energía al puente con seguridad.

La capitana llamó desde su intercomunicador portatil.

-Aquí de Alba, hemos sufrido un ataque cibérnético, por eso hemos ordenado el corte de energía del puente. Revisen la nave por si hubiéramos sufrido algún tipo de daño más, se nos hubiera colado otro reptil o hay problemas con nuestro huesped... restauren la energía de inmediato y manden a alguien para abrirnos la puerta

No había sido un incendio, había sido un hackeo desde la nave enemiga. Creo que ahora no quedaban dudas de que no eran amigos nuestros. En ese momento, la Capitana me habló por el intercomunicador.

- Señor Ollander, aquí de Alba. Hemos sufrido un ataque cibernético. Por eso le pedimos que costasen la energía del puente... el problema es que ahora vamos a la deriva, estamos incomunicados del resto de la nave y no sabemos que está haciendo la nave enemiga. Restaure los sistemas lo más rápido posible.

-A la orden, Capitana -respondí sin titubear.

-Ingeniería, aquí Ollander -dije, hablando a la Sala de Máquinas-. Restauren la energía del Puente, el ciberataque ha pasado.

Entonces, me volteé hacia Naun y Burgundy.

-Señores, sigamos con ese torpedo...

Como si me encontrara en un barco que hacía aguas sentí como si me encontrara sobre un suelo inclinado, el tirón gravitacional de B-Signus no estaba siendo compensado. El ingeniero estaba visiblemente preocupado y, rápidamente, se puso a trastear en una consola para tratar de averiguar qué sucedía y si era posible intentar solucionarlo.

Mientras Ollander hacía su trabajo traté de comunicarme con los hombres que custodiaban al reptil, en la celdas de contención, si había sido un ataque cibernético quizá pretendían rescatar al prisionero, debía asegurarme:

- Aquí Jankowsky, como habrán comprobado ha habido un problema en los sistemas informáticos pero se encuentran en proceso de reparación, quiero saber como está nuestro invitado. - Confiaba en la capacidad de mis hombres pero no estaba de mas hacerles una llamada. Mientras esperaba su respuesta supuse que, pese al corte de energía, los sistemas de contención contarían con algún protocolo de seguridad.