Partida Rol por web

La interrupción del cocinero, al comandante Silky le pareció de lo más inapropiado, pero tenía la costumbre de primer escuchar a los subordinados y sus quejas, y luego, si fuera necesario meterle un bofetón para encarrilarlos. Ante los comentarios, quedó sorprendido, más bien maravillado por el arma. Todo el equipamiento siempre le fascinaba. Él mismo había codiciado una pistola antigua, con munición de cartuchos de dextrosa de notrocelulosa, pero era demasiado cara.

Nada más finalizar este, y a punto de empezar a reir por haber "escondido" el cuerpo, salgó el adorador de Visnú, al cual de dirigió una mirada de asco que no pudo contener. Sacudió la cabeza para espantar los fantasmas que le atormentaban y comentó: - ¿Este es uno de los faltos? Claramente se refería a uno de las bajas, dado como desaparecido. De todas maneras no podía contener una sonrisa maliciosa que contenía a duras penas, y parecía burlona.

La doctora llegó justo a tiempo para presenciar una escena que solo podía considerar como extraña: el cadáver refrigerado de un Gorn se encontraba tirado en el suelo ante la ira del Primer Oficial y el asco de la andoriana, cuyo color había pasado de azul celeste a convertirse en azul hielo. No acababa de comprender cuál era el razonamiento que había llevado a un tripulante a ocultar el cuerpo en un congelador (pues dudaba profundamente que el reptil hubiera decidido suicidarse en una nevera), pero lo cierto es que contar con una muestra muerta y bien conservada de sus enemigos podía resultarles útil. 

-Disculpe, capitana, mis deberes en la enfermería me han impedido reportarme hasta ahora.- Se excusó fríamente, tomando asiento en la mese junto al resto. -Desconocía que estuviéramos tan necesitados de recursos como para tener que devorar a los mercenarios abatidos pero, si hay alguna alternativa alimenticia, me gustaría trasladar los restos del Gorn al laboratorio con el objetivo de realizar un estudio sobre posibles vulnerabilidades de su organismo. Dado nuestro estado, cualquier ventaja, por ínfima que resulte, puede resultar esencial.- Solicitó, con una calma helada. Por lo demás, permaneció en silencio, a la espera de que alguien la informara de lo que se había discutido hasta el momento.

Permanezco sentado mientras espero las órdenes de la capitana, cuando de repente el cocinero abre una nevera y cae un cuerpo de lo que parece ser un gorn.

No puedo evitar cierta risa ante los comentarios de mis compañeros sobre si tenemos que comernos eso.

-¡La verdad es que con el hambre que tengo, me comería ese bicho con escamas y todo!- exclamo.

Cristina devolvió la mirada a Isathaa cuando esta la miró a los ojos.

- Me parece buena idea señora Isathaa. Señor Ollander me temo que se le va a acumular el trabajo, pero debemos agotar todas las posibilidades. ¿Puede hacer lo que ella ha pedido?

Después sonrió al ingeniero cuando este le manifestó su lealtad, teniendo en cuenta el excelente trabajo que había realizado hasta el momento, su valor y entrega estaban fuera de toda duda, algo muy de agradecer.

- Gracias señor Ollander- le agradeció con una inclinación de cabeza. Entonces apareció el cocinero mostrando el nuevo ingrediente secreto del arroz de las fiestas... lagarto congelado- Si todos los tripulantes de la Excalibur son como usted señor Donalson los gorns no nos van a servir ni para entretenernos-bromeó de Alba, tan admirada como divertida por las agallas del cocinero-señor Ollander, cuando pueda échele un vistazo a la cocina o terminaremos todos en el refrigerador de nuestro cocinero... por el lagarto no se preocupe, la doctora se hará cargo de él- miró a la señora Walker para darle su consentimiento- Me parece una excelente idea señora Walker, así podremos combatirlos mejor, también puede comprobar si porta algún tipo de localizador- ante la intervención de Sirril añadió- Es cierto que nuestras posibilidades de sobrevivir a un nuevo ataque son muy escasas y que nuestra misión ahora es informar sobre el destino de la Valiant. Pero dadas nuestras condiciones ignoro si tendríamos éxito. Teniendo en cuenta la existencia de este planeta, propongo reañizar un escaner para determinar si podemos proveernos de lo necesario para emprender el viaje de regreso. Además hay una mínima posibilidad de que los tripulantes de mayor rango de la Valiant continúen con vida

Isathaa se cruzó de brazos sin decir nada, no parecía que saliese nada productivo de esa improvisada reunión, sin duda salirse del manual nunca era provechoso, además había descubierto gracias a Donalson cuan asquerosos podían llegar a ser los humanos, aun sentía retortijones solo de pensar que había comido algo preparado por él.

Primero el jefe de ingenieros que se dedica a intentar seducir enfermeras cuando esta de servicio, luego el alférez sin modales que no save cumplir ordenes y los MACO quitándole el trabajo a su personal de seguridad para seguir con la doctora con falta de confianza en su equipo que por ello la retuvo injustificadamente más de una hora en la enfermería y ahora una capitana que no escuchaba a su oficial de seguridad o por lo menos no parecía tomarla en consideración ya que había ignorado por completo sus preguntas y propuestas iniciales. Empezaba a plantearse si haberse alistado en la flota había sido la mejor decisión de su vida.

El primer er oficial ignoró los comentarios jocosos y algunos gestos de la tripulación, especialmente el señor Silky, el cual parecía tener que ver con él. Ante las palabras de oficial Sirril Aakesh sonrió irónicamente.

-Señor Sirril debería prestar más atención. Duval en su diario comento que intentaría jugar u a última carta en este planeta, por lo que es posible que quede alguien vivo de la Valiant o restos de la nave. Si bien su propuesta es....¿como dicen ustedes? Lógica, hemos de explorar antes el planeta.

-Señor Ollander, ¿tenemos suficiente deuterio para cumplir la misión y volver a casa?

La capitana estuvo bien en su discurso, acertada e inspiradora, pero no despertó el entusiasmo desmesurado que por ejemplo había mostrado Ollander. No me puse en pie, ni me cuadré, tan solo asentí asegurando que podían contar conmigo, con mi lealtad y empeño en hacer las cosas bien.

Después di un pequeño bote en mi asiento cuando vi lo que guardaba el cocinero en su cocina entre los congelados. Del susto inicial no negaré que la situación hasta me hizo gracia, en especial al ver la reacción de algunas. 

Coincidía con lo expuesto por Sirril y estuve tentada de darle mi apoyo. Seria el recurso fácil de completar la misión y salvar el pellejo, o al menos hacer todo lo posible para ello. Pero no dije nada. Puede que no fuera el curso mas lógico de acción, pero sentía que debíamos seguir adelante en el empeño de dar con los supervivientes de la Valiant tal y como había expuesto de Alba.

- Me ocuparé de ello de inmediato, en cuanto regrese al puente Capitán. Aunque habrá que pensar como compensar las anomalias gravimétricas que genera el planeta o será casi imposible tomar lecturas desde nuestra posición.- Los escáneres y las transmisiones eran cosa mía, bueno, y del oficial científico, así que en cuanto hizo mención de ello me pronuncié -

Mantuve mi atención a lo que se hablaba. Por lo visto las cosas estaban bastante calientes, en la enfermería había pasado de todo. Supongo que el hacinamiento de tantos rangos elevados de la tripulación en un espacio como ese y en una situación de tensión como la vivida había provocado ciertos roces.

se trata de que todos estamos en el mismo barco

Unos roces que la capitana quería mitigar, no podría hacer otra cosa que darle la razón, todos los tripulantes debíamos actuar como uno solo y el ataque había revelado que todavía no éramos un equipo lo suficientemente cohesionado. Limar las asperezas sería cuestión de tiempo, había caracteres muy fuertes y discutiendo sin sentido no avanzaríamos.

Menos mal que tengo a mi “amiga” siempre conmigo

Había llegado con hambre pero el maldito cocinero consiguió que se me pasara sin darme ni un bocado, tenía un maldito lagarto en la nevera ¿que clase de cocinero?... Interrumpí mis pensamientos - y esa ¿thompson? ¿era una thompson?, ¿acaso había más tripulantes con armas no declaradas?¿o sí estaba declarada? - si ese viejo trasto había llegado hasta ahí oculto estaba claro que teníamos una pequeña brecha de seguridad. Sin embargo a la capitana no pareció impotarle, al fin y al cabo había sido efectivo contra otro gorn no detectado por los sensores. ¡Mierda, ese cacharo tenía más de doscientos años y funcionaba perfectamente!, ¡cocinero del demonio!

no sabemos que patógenos Gorn podrían haberse propagado por los alimentos (Isathaa)

Estaba con Isatha en que no era en absoluto higiénico pretender comer algo salido de esa nevera, por suerte se me había cerrado el estómago.

Con todo esto lo más sensato, sería regresar al punto más cercano donde podamos comunicar nuestros avances con la flota a fin de que esten al tanto de la situación. (Sirril)

hay una mínima posibilidad de que los tripulantes de mayor rango de la Valiant continúen con vida (de Alba)

Estábamos en una clara disyuntiva, quedarnos y buscar posibles supervivientes o volver atrás y comunicar los sucedido a la Tierra. Aunque parecía que de Alba ya había tomado una decisión. Si los escaneos no detectaban peligro, debería bajar un destacamento a verificarlo, y creo que nos tocaría a nosotros ir en vanguardia.

recomiendo que los hombres de Ollander se centren en reparar el armamento (Isathaa)

Por otro lado también teníamos que tomar en consideración las palabras de Isatha y poner en funcionamiento las defensas activas averiada cuanto antes. Pero las decisiones ahora las tomaban otros cargos, mi deber era escuchar, dar mi opinión si me la pidieran y cumpli órdenes

-Señor Ollander, ¿tenemos suficiente deuterio para cumplir la misión y volver a casa?

Lo suficiente para alcanzar los territorios Vulcanos y Andorianos sin desviarse ni un solo año luz. 

Desde luego que la exhibición del “trofeo congelado” del cocinero puso de malas a más de uno. La primer persona en verse afectada por el lagarto fue la jefa de seguridad, quien abandonó brevemente la estancia para vomitar. A su regreso Darek le responde escandalizado - ¿Acaso usted piensa que voy a quebrantar las reglas de salubridad y con ello enfermar a la tripulación? Pues nada que ver. ¡Venga y mire! – Expresa con ganas el cocinero en jefe al mostrar que la cocina tiene siete refrigeradores de alimentos - ¿Ve? Este de aquí jamás fue utilizado para almacenar alimentos. Pensaba utilizarlo para conservar cosas exóticas como por ejemplo verduras Vulcano y frutas de Tellar Prime, pero jamás llegaron a tiempo para el despegue. – y al terminar su explicación patea al Gorn para que ruede fuera del refrigerador y pueda cerrar la puerta. Luego Darek presiona un botón del panel de control de los refrigeradores. El botón dice: “Desinfección”.

Luego llegó el resultado que Darek esperaba. La refacción de los sistemas del salón comedor. Entonces el cocinero en jefe sonrió satisfecho por su treta de almacenar el alíen en el refrigerador.

Luego, con gran cortesía, responde las alteradas palabras del hindú - ¡Por supuesto que lo hice! Pero nadie me contesto. Hable directamente al puente. Puede revisar los registros si desea y tampoco puedo abandonar mi puesto. ¡Mire si saquean las reservas de alimentos! El pánico podría cundir y la cosa terminaría en actos de canibalismo. Comandante puede estar plenamente seguro que le avisare si otro alíen llega a mi cocina, Vulcano, Andoriano o lo que sea esa cosa. – el cocinero responde exagerando la situación pero todo lo que llega después apenas le afecta. Su plan salió redondo y por ello no puede ser más feliz.

Ante el escándalo de los presentes que expresan tener hambre, Donalson lleva hasta la mesa central una bandeja con botanas y bebidas diversas, como por ejemplo jugo exprimido de frutas.

AL final el hombre regresó a su cocina a continuar trabajando. – Con permiso. Debo preparar el almuerzo para la tripulación. – Darek se disculpó y se alejó de la reunión.

-Aquí el primer oficial -no decía su apellido, ya que comprendía la dificultad de pronunciarlo por aquellos que no estaban acostumbrados- Realicen escaneos intensivos de la órbita y la superficie del planeta. También de nuestra nave. Infórmenos del inmediato si se detecta algo

 La respuesta tardo en llegar pero fue contundente. Fue el Alférez Picard quien paso las novedades a todos los reunidos en el Comedor. – Comandante, tenemos novedades. Paso las imágenes al monitor del salón comedor. – entonces una imagen aparece en pantalla. Cualquier humano diría que es una imagen de archivo, de la tercera guerra mundial, cuando miles de millones murieron.

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Nos encontramos a cinco minutos del planeta y los sensores captan las imágenes que estoy transmitiendo ahora. Al parecer el planeta 104 estuvo habitado pero ahora es un mundo post apocalíptico.  Detectamos grandes centros urbanos en ruinas con cientos de kilómetros de tamaño, además de que poseen edificaciones subterráneas que los sensores apenas detectan.

Hasta aquí es lo básico porque hace un instante detectamos una gran concentración de energía en una de las ciudades, específicamente en una gigantesca pirámide ubicada en una ciudad del hemisferio norte. La concentración de energía es tan grande que anula los sensores y las comunicaciones a medida que nos acercamos; es posible que la interferencia que detectamos al llegar al sistema B Sygnus provenga de esa misma estructura.

Picard hace una pausa para mostrar otra imagen. Es una imagen de los sensores de larga distancia, los cuales tienen complicaciones para funcionar correctamente por la interferencia emitida del planeta. La misma tiene poca definición, pero es bastante clara en lo que respecta a identificación de objetos.

Esta imagen también es actual. Corresponde a la firma visual de la nave atacante. En estos momentos se encuentra sobre nuestra anterior orbita del gigante gaseoso. Al parecer nos siguen desde la distancia pero por algún motivo no se acercan.

Para finalizar Picard transfiere al panel del comedor los controles auxiliares del puente para que el alto mando pueda hurgar en toda la información recabada y realizar los exámenes que crean necesarios sin necesidad de ir al puente. – Listo, desde allí pueden operar mínimamente. Quedo a sus órdenes. – Picard se despide y cierra la comunicación.  

- ¿Acaso usted piensa que voy a quebrantar las reglas de salubridad y con ello enfermar a la tripulación? Pues nada que ver. ¡Venga y mire!

-No gracias, ya he visto suficientes cadáveres congelados en mi vida. le respondió antes de volver a la mesa ignorando las explicaciones del cocinero. antes del informe del Alferez Picard

-Son listos... Comentó frunciendo el ceño a su vez que se le tensan las antenas -Otro ataque podría dejarnos sin soporte vital o derribar la nave y si su objetivo es raptar parte del personal, como creemos, eso les interesa tan poco como a nosotros. Eso o quizás esperan a que su objetivo salga de excursión a 104 donde sin duda nuestra capacidad de fuego será menor. 

Durante unos segundos la oficial de seguridad se queda pensativa hasta que finalmente golpea la mesa -Capitana! debemos aprovechar ahora la oportunidad y escanear la nave enemiga, con suerte descubramos alguna debilidad o la manera de contrarrestar lo que fuese que nos dispararon Dijo poniéndose en pie lista para comunicarse con McTagger.

La actitud del cocinero molestó a Aakesh, sin duda había preparado todo eso para pavonearse delante de los oficiales y dejarlos en ridículo.

-Señor Donalson, igualmente guardar un cadáver en un congelador de la cocina de la nave, contenga o no alimentos, inflinge diversas normas, tanto de higiene como de seguridad. Es un organismo alienígena y como tal debe ser tratado. Espero que la próxima vez actúe como dictan las normas.

El intercomunicador les interrumpió y el alférez Picard les informó de la información que habían obtenido. Aakesh se quedó sentado mirando fijamente la pantalla y los datos

Las ruinas de una civilización alienígena....el sueño de todo explorador espacial

Pero no estaban de exploración, estaban en guerra, por lo que Aakesh tuvo que abandonar esos pensamientos románticos y centrarse en los datos, y más al ver que sus enemigos estaban acechándoles

-Todo esto cambia las cosas, si hay supervivientes es posible que se encuentren en algunas de estas ruinas, tal vez dónde se ha detectado esa energía, pero también podría ser un asentamiento enemigo. Coincido con Isathaa, al menos en que si enviamos un destacamento, seremos más vulnerables, pero no podemos dejar la ocasión de explorar el lugar, tal vez encontremos algo sobre los atacantes.

Se quedó pensativo unos segundos

-¿Disponemos de alguna sonda?, podríamos enviarla al menos para explorar alguna de las ciudades en ruinas y así hacernos una idea de lo que puede haber y las condiciones ambientales con más exactitud. Luego, dependiendo de la actitud de la nave enemiga, podríamos enviar un grupo dónde se detecta el foco de energía. Con la información obtenida de las ruinas les será más fácil, en teoría, moverse por allí.

Las pirámides son la única estructura común que une a la mayoría de las civilizaciones antiguas, independiente mente del planeta de origen. Para saber más deben establecer una órbita en el planeta e intentar escanear.
Hasta aquí puedo informar con tu tirada y a esta distancia ;)

Hay sondas pero son radio faros de auxilio y repetidores sin espaciales de comunicación.
Sondas activas no hay a bordo. :(

Mucho hablar y poco actuar... Estas tediosas reuniones me exasperan, siempre he creído que si quieres que algo no funcione, haz muchas reuniones.

- Capitana, me presento voluntario para ir en el destacamento a averiguar si quedan sobrevivientes del Valiant. Puedo pilotar la lanzadera, ya que aquí en la nave hay otra gente que puede pilotar, según me han dicho... No se si tan bien como yo, pero eso ya es otro tema.

Aakesh asintió

-Las actitudes del señor Lightman pueden ser útiles para la lanzadera, aunque en una situación de peligro le echaremos de menos en la Excalibur. No dudo de la capacidad de pilotaje del resto de la tripulación, pero se supone que él es el más apto para esta tarea. Se tendrá que ver dónde es más útil en este momento.

Aakesh carraspeó antes de proseguir

-Acabo de revisar el inventario de la nave y no tenemos sondas, salvo los radio faros de auxilio y repetidores de comunicación. Señor Ollander, ¿se podría improvisar alguna sonda con lo que tenemos a mano? ¿alguien tiene alguna sugerencia al respecto? ¿O nos arriesgamos y enviamos a un grupo a ciegas?
 

Podríamos lanzar a Ollander con un bloc de notas, a ver si consigue averiguar algo... Me muerdo la lengua de hacer este comentario, ya me causó demasiados problemas pensar en voz alta.

-Dada nuestra situación actual, lo último que deberíamos hacer es actuar a ciegas.- Intervino la doctora, con seriedad. -Un planeta post-apocalíptico puede resultar peligroso para toda forma de vida solo por su propia naturaleza; el alférez ha informado de una gran cantidad de túneles subterráneos frente a una superficie en ruinas: tal vez exista algún peligro en el exterior como podrían serlo bacterias o virus resultado de una guerra biológica. No podemos permitirnos perder a más miembros de la tripulación inútilmente.