Bien, está claro que los malos siguen disparando. Innara, tienes que decidir qué haces, si disparas, te escondes, intentas convencerles de que no ataquen... tú decides. Si disparas, tira dados.
Motivo: Disparar 4
Tirada: 1d10
Resultado: 10
Motivo: Disparar 7
Tirada: 1d10
Resultado: 9
Uy, de un tirón.
Motivo: Disparos enemigos
Tirada: 5d10
Dificultad: 6+
Resultado: 4, 2, 3, 5, 8 (Suma: 22)
Exitos: 1
Motivo: Disparos seguridad
Tirada: 3d10
Dificultad: 6+
Resultado: 7, 6, 9 (Suma: 22)
Exitos: 3
Vamos a ver qué tiros tienen vuestros enemigos:
Enemigo 1 - FALLO
Enemigo 3 - FALLO
Enemigo 4 - FALLO
Enemigo 6 - FALLO
Enemigo 7 - ÉXITO
También tiro los vuestros:
Seguridad 3 - ÉXITO
Seguridad 4 - ÉXITO
Seguridad 7 - ÉXITO
Y ahora veré los efectos de todos, junto con los disparos de Innara ;)
Las palabras del diplomático y mediador no sirvieron absolutamente para nada, porque los disparos continuaron produciéndose. Uno de los disparos impacta directamente en Kepaar, que cae al suelo instantáneamente. Los dos disparos de Innara logran reducir a dos de los adversarios (6 y 1) y los de los oficiales de seguridad a otro de ellos (3) [El enemigo 2, el pobre, recibe tres disparos, así que cae muerto en lugar de quedar solo inconsciente].
Motivo: Acertar a...
Tirada: 1d10
Resultado: 8
Motivo: Acertar a...
Tirada: 1d10
Resultado: 2
Motivo: Acertar a...
Tirada: 1d10
Resultado: 3
Motivo: Acertar a...
Tirada: 1d10
Resultado: 7
Motivo: Acertar a...
Tirada: 1d10
Resultado: 7
Motivo: Acertar a...
Tirada: 1d10
Resultado: 5
Siguiente turno. A ver qué hacéis, porque aquí no se rinde nadie. Son unos extremistas.
Innara, te has quedado sola y al mando.
-¡KEPPAR! -gritó la joven álfarez al ver como este caía en combate- ¡Seguid disparando, joder!
Esta vez a la joven álfarez le costó más atinar. Y más sabiendo que al número 7 apenas le hizo daño, la bala le pasó por al lado. Ningún rasguño.
-¡JODER, JODER! ¡CUBRIDME!
Motivo: Disparar 4
Tirada: 1d10
Resultado: 8
Motivo: Disparar 7
Tirada: 1d10
Resultado: 2
Jo, direct, ¿ya me has quitado a un compañero? ¡JODER!
En medio del fragor de la batalla, Innara decide comunicarse con la lanzadera. Aunque no hay nadie en ella, sabe que la computadora podrá enviar una señal para que vengan a ayudarles.
+Lanzadera Tibirium, aquí la Alférez Halskin. Envía un mensaje de auxilio a la Flota Estelar. Código tres-nueve-tres-ocho-tres. Nativos hostiles. Personal herido. Necesitamos evacuación urgente.
La insignia hace un zumbido y la voz fría y femenina de la computadora, responde a los pocos segundos.
+Mensaje enviado.
Los disparos de Innara impactan contra la protección, por lo que el kointinariano todavía está en pie... y devolviendo el fuego. Igual sucede con el otro, que sigue disparando sin rendirse. Por desgracia, al recibir tu disparo, él y el otro enemigo se giran hacia ti y te disparan.
Notas el impacto de dos disparos de energía que hacen que salgas impulsada hacia atrás. Cuando finalmente tocas el suelo, estás ya inconsciente. Para ti, la batalla ha terminado....
Motivo: Disparo 4
Tirada: 1d10
Resultado: 7
Motivo: Disparo 7
Tirada: 1d10
Resultado: 10
Motivo: Disparo 7
Tirada: 1d10
Resultado: 4
K.O , mientras no me devore un dinosaurio, no cometa un suicidio con cristales/veneno, muera por querer ser la diosa del mundo, me pique un escorpión que haya surgido de la nada (jujujuju) y no me violen... puedo morir de la manera que quieras xD
jajajaja buen resumen, pero solo estás inconsciente, tranquila.
Despertáis en una especie de sótano, una mazmorra, vamos, con una jaqueca terrible y sin saber si es de día o de noche ni cuanto tiempo ha pasado. Ambos estáis tumbados en el duro suelo de piedra, solos. No sabéis lo que ha ocurrido con el resto del equipo ni tampoco si vuestro mensaje de auxilio llegó a alguna parte.
En ese momento, la puerta metálica se abre y entra Dn'vengar.
-Buenos días, federales. Me alegra comprobar que os encontráis bien.
La oscuridad se cernió ante Kepaar con el último recuerdo de un dolor intento al ser alcanzado por un disparo. No lo creyo posible, pero sus ojos volvieron a abrirse, de nuevo el agudo dolor se hizo presente recordando al consejero el último recuerdo.
La voz de Dn`vengar no era lo que más quería escuchar sin duda pero allí estaba, aquel viperino ser.
Tomar juicio con lo que los ojos ven no es más que la muestra de un necio.
Keepar se incorporó mientras se llevaba la mano a la profunda herida.
uff muerto en el prologo, me voy haciendo ya otro PJ? XDD
No estás muerto, hombre. solo has sido atrapado.
era por darle darmatismo a la escena jaja
El joven líder sonríe ante las palabras del diplomático.
-Si hubiésemos querido mataros, ya estaríais muertos. Os avisamos. Os pedimos que os marcharais. Ahora sois nuestros prisioneros.
Detrás de Dn'vengar hay dos soldados con sendas armas... ¡¡¡que se ve claramente que son Cardasianas!!!
¿Prisioneros?
dijo Kepaar esbozando una media sonrisa irónica mientras miraba a su captor.
Crees que tienes el control de la situación y no tienes nada. Sabes que la federación vendrá a buscar a sus hombres y entonces tendrás que dar explicaciones... Has corrompido lo que representas para los hombres, haciendo oscuros tratos con cardiasianos... pero pero es la corrupción de tu alma derramando sangre en terreno sagrado.
El consejero apuntó directamente con su indice a Dn'vengar con la firmaeza de un arma
Aun estas a tiempo de arrepentirte y doble será tu pecado si no aprovechas esta oportunidad.
Entiendo por tu forma de ponerlo, que esas armas cardasianas es extraño que esten en su poder.
Es la todopoderosa Federación quien ha corrompido nuestros ideales, pero eso ahora no viene al caso. Lo único importante es que estáis bajo nuestro poder. En cuanto a que vendrán a buscaros, ¿quién os dice que no es eso lo que precisamente deseamos?
Dn'vengar miró a Kepaar y a Inara con desprecio.
Es correcta tu apreciación, querido pacifista.
Inara despertó con un gran dolor en la sien. Tras decir un : ¿Dónde estamos? reconoció fácilmente, es decir, intuyó que aquella no era su nave.
Y ,entonces, apareció aquella repugnante boa.
-¡Me cago en toda tu especia, sabatija e incompetente rata callejera!
Se abalanzó sobre la reja, aquella de hierro, y la zarandeó por un segundo.
-No tienes nada en tu poder. La Federación vendrá a por ti y cada uno de ustedes... Y tu cuerpo... ¡Oh!, tu querido cuerpecito de gelatina se verá desintegrado en el cosmo y en el espacio.
La pobre echa humos...
El rostro de Dn'vengar es poco menos que maligno, pero no responde a Innara. En lugar de eso, se gira hacia sus guardianes.
-Poned en marcha el dispositivo -ordena.
Uno de los guardias, encapuchado, saca un dispositivo parecido a un tricorder, que es en realidad un grabador-emisor. Dn'vengar se coloca delante, dejando en segundo plano a Innara y Kepaar.
-Saludos, Federales. Mi nombre es Dn'vengar, consejero espiritual de los seguidores de nuestro dios, A'ng'ovar. Durante años hemos sufrido los continuos agravios por parte de la Federación y ya estamos cansados. Nuestro mundo necesita una única idea, y no falsos ídolos basados en una protección que no existe. Estamos a millones de kilómetros del Centro de la Galaxia y nadie nos protegerá, salvo nosotros mismos. Estos dos blasfemos y otros dos oficiales más han sido apresados destruyendo nuestra ciudad sagrada. Os pedimos que abandonéis nuestro territorio y que os llevéis a vuestra gente, o de lo contrario, sufriréis nuestra ira. Y para demostrároslo, dejaré que A'ng'ovar guíe mi mano.
Dn'vengar se da la vuelta, apunta a Innara y le dispara sin contemplaciones.
El cuerpo de Innara es impulsado hacia atrás antes de desintegrarse y dejar solo a Kepaar. Después, Dn'vengar se gira de nuevo.
Tienen 12 horas para llegar hasta nosotros y transportar a todos los miembros de la Federación, o haremos lo mismo con todos ellos.
El guardia cierra la transmisión y Dn'vengar mira a Kepaar.
-Veremos si ahora nos toman en serio. ¿Usted qué cree?
Algo así, para que os lo imaginéis.