Partida Rol por web

Goro no quiso perder tiempo en ponerse con la apertura de la caja. Era una caja fuerte, pero que en lugar de tener cerrojo de combinacion, tenía un teclado de ordenador conectado. La caja también tenía una nota en ella que decía lo siguiente:

Soy algo singular...

En lo más alto me encuentro...

El frío es mi ambiente...

Soy quien diferencia al pequeño del mayor...

Y en el hombro de un cazador encuentro descanso...

¿Cual es mi nombre?

Por otro lado, Aer no tuvo dificultades para encontrar la llave del techo. Colgada de un hilo pegado al techo, estaba una llave... a muchos metros de distancia, lo suficiente incluso para que por lo menos una torre de dos personas no fuera suficiente.

El chico moreno se acercó a la mesa para leer la nota y coger uno de esos auriculares. Parecía estar bastante cabreado y hacerlo de mala gana.
-Garret...- Después se quedó mirando a aquella chica fijamente y suspiró- ¿De verdad nos ha tenido que tocar con esta canija? ¡Me gustaría ver como consigue la llave del techo!- Garret comenzó a reírse a carcajadas mientras le daba palmadas en la espalda a Goro.- Bueno, cuatro-ojos. Te confío lo de la caja. Seguro que se te da bien.

Axel se dio una vuelta por la ordenada y pulcra biblioteca, echando un vistazo por encima a las estanterías, las mesas, los lomos de los libros... por desgracia, no encontró nada fuera de lugar, o que pudiera indicar que alguien hubiese escondido nada.

La chica de la bufanda se acercó a la mesa y tras leer su nota se puso el auricular bastante emocionada.
-¡Hola! ¡Soy Tsuku! ¡Encantada!- Tras eso se puso a buscar por el techo la llave junto a Trini- ¡Oh, oh! Yo me encargo de la del techo. Con mis técnicas ninja ya veréis que lo consigo en un momento.

Ambas mirasteis el techo en búsqueda de la llave -¡Ahí está!- señaló entusiasmada. Colgada de un hilo atado al techo, estaba una llave... a muchos metros de distancia.

La chica dejó sus bártulos en el suelo con cuidado y se dispuso a leer la carta. Luego de eso puso una cara de interes mientras se ponia su auricular encantada.

Rio con dulzura y sin malicia cuando vio la escena de la cola de Simón -Jiji, encantada Sr Flemming- le dijo con tono simpático acompañada de una reverencia. Se acerco a Nyoko y repitió el proceso -Encantada Nyoko, yo me llamo Elize- se presentó ante la gemela pelirrosa con una sonrisa. Luego miro a la peliazul desde su posición -¿Como se llama tu gemela? Nunca había conocido a unas...- preguntó con curiosidad.

La chica pequeña tuvo ciertas dificultades para coger el auricular traductor... ya que le habíais dejado el que más en medio de la mesa estaba, y con su altura y sus bracitos le costó alcanzar el cacharro. Y se lo puso justo a tiempo para escuchar "canija" de los labios de Garret.

Sin decir absolutamente nada ni siquiera presentarse, y con una mirada verde asesina, se acercó a las piernas de Garret -¡Hyaaa!- y con ese grito, le pegó un gancho de derecha a sus partes.

Del golpe, el chico abrió los ojos con fuerza y cayó de rodillas derrotado con las manos cubriendo sus partes -¿Alguien quiere volver a llamarme canija?- preguntó con tono desafiante, crujiendose los nudillos.

El chico, una vez con la carta leída y con el auricular puesto, recibió el beso en las mejillas de Trini... Y se puso un poco rojo al no esa clase de saludo -Ho-hola... soy Xue...- se presentó en voz baja algo cortado y un tanto descolocado.

Luego de ello, Tsuku y Trini visualizaban la llave del techo, y Axel fue explorando la biblioteca en busca de la llave... dejando a Xue algo sólo al lado de la mesa rascando su brazo confundido -Su... supongo que yo... ¿me encargo de la caja?- preguntó... aunque tampoco sabía quien le iba a responder.

Después de oír los nombres, lo primero que hice fue Axel, Tsuku, Xue, me acordaré. Axel,Tsuku, Xue, Axel alto, Tsuku ninja, Xue tímido, Axel alto, Tsuku ninja, Xue tímido... Cuando Tsuku mencionó lo de que podría conseguir la llave del techo con técnicas ninja, ya me empezó a motivar un poco la nueva situación. Me sentí un poco tonta, desde que me informaron de que tendría que hacer el insti especial y todo eso, no me había parado un momento a pensar en la cantidad de gente interesante que conocería, como una chica que sabe técnicas ninja. Me dio curiosidad que otras cosas geniales sabrían hacer los otros, y hasta me dio curiosidad saber si algo de lo que hacía yo se podría considerar genial. 

Me moría de ganas de ver las técnicas ninja, pero tampoco quería quedarme sin hacer nada, y entre que Axel no había tenido suerte con su búsqueda y Xue parecía necesitar un poco de ayuda para empezar a socializar, se me ocurrió una idea. Hmmm... y si... Caminé hasta la mesa más cercana a la llave del techo... Nosotros tres nos subimos a la mesa. Dibujé un círculo en el aire para referirme a Xue, Axel, y yo, y efectivamente, con un par de zancadas que compensaban su falta de feminidad con un exceso de infantilismo, me subí a la mesa. Como Axel es alto, Xue y yo te ayudamos a subir a los hombros de Axel, y desde los hombros de Axel subes hasta la lámpara. Y a partir de ahí técnicas ninja - sonreí como niña con un juguete nuevo hacia Tsuku, intentando transmitirle con mi cara lo genial que me parecía -, y así lo hacemos entre todos, y ayudamos en el aterrizaje. Y luego vamos a por las otras, seguro si nos repartimos por la sala para buscar entre todos encontramos más rápido la llave escondida.

Todo el mundo sabe que el roce hace el cariño. ¿Eso lo puedo decir en voz alta? Ah, ya sé. Convencida de que lo que hacía tenía sentido, me quité un momento el auricular, así lo digo pero no me entienden. El roce hace el cariño. Me volví a poner el auricular, y me enjarroné decidida encima de la mesa. Como un segundo después me di cuenta de qué no era así como funcionaba el cacharrito, y que eran los otros los que se tenían que quitar el auricular para no entenderme, y que entonces todos me habían entendido perfectamente, y me dio muchísima vergüenza y me puse colorada como un gazpacho, y me entró algo de risita por el ridículo que debía estar haciendo, y bueno... hihi, ¿qué os parece?

La suerte bendice a Kukiko al encontrar con cierta rapidez aquella caja mientras el resto se presenta y hace algún que otro gesto. Ciertamente la peliazul no presta demasiada atención a su entorno, así de esta forma puede descubrir cuál es el método para abrir la caja. 

Una vez que lee aquella adivinanza, muerde su labio inferior mientras alza la mirada buscando a su hermana, al parecer encontró la llave y el resto está ahí, simplemente haciendo "sociales". Seguramente ha quedado como una parca al no presentarse, así que aprovecha a presentarse mientras escribe una respuesta. No sabe si es la real, está algo perdida. 

RIFLE

- Hola, soy Kukiko... ¿Alguno es bueno con las adivinanzas? -  pregunta esbozando una media sonrisa. 

Al menos las hermanas han adelantado un poco, esto es trabajo en equipo, así que no estaría mal pensar en una posible respuesta por más que Ku se lo toma como un desafío personal. 

Tras las presentaciones de todos y me puse a revisar un poco la biblioteca. Pasee por cada uno de los pasillos revisando los libros por su faltaba alguno, estaban mal colocados, no estaban bien cerrados, cosas mas o menos obvias ya que tampoco se me ocurría mucho mas sobre como esconder un llave pero fue en vano así que volví a donde estaban todos. Y al igual que Trini parecía muy ilusionado con la idea de ver a Tsuku usar sus "tecnicas ninja".

Escuche como Trini exponía su idea sobre como hacernos con la llave del techo la verdad es que era buena y si no llegaba podía intentar usar mis poderes para elevarla un poco mas o mejor aún...

-Si ves que no llegas puedo sujetarte de los pies y levantarte con las manos -mire al techo intentando vagamente calcular si entre mi altura y la suya sería suficiente para llegar teniendo en cuenta el salto obviamente fui incapaz y desistí.

Subí a la mesa junto a Trini y me puse agachad o apoyando un rodilla en la mesa.

-Vamos, no podemos dejar que los demás no ganen -dije para picar un poco a lo demás

Mientras estaba agachado Trini dijo lo de que del roce nace el cariño quitándose el auricular y yo la mire extrañado, estuve a punto de decir algo pero ella misma vio su error e intento que pasará por alto para los demás.

Desde su privilegiada posición Aer tan solo pudo ver con claridad las consecuencias de su osadía. Quedaba claro que la chica de pelo morado tenía la mecha tan corta como lo era su estatura.

- No, ningún problema -dijo Aer sin disimular una sonrisa graciosa por tan cómica escena. - Y seguro que Goro tampoco tiene ningún problema, así que ya puedes presentarte, si así lo deseas.

- De todas formas Garret, en cuanto te recuperes del golpe quizá podríamos cooperar para coger esa llave - dijo ahora señalando la llave que se encontraba en el techo. - Quizá puedas impulsarme a ver si llego y la atrapo. Si no movemos un par de mesas, les ponemos unas sillas encima y pan comido.

- No creo que a los de la academia les importe demasiado si desordenados esto un poco - comentó por lo bajo con tono jocoso. 

“Mh… el cazador”, reflexionó Aki en voz alta, tan sumergido en el problema que no se dio cuenta de esto, “es la constelación de Orión, pero no hay Mayor y Menor en él, salvo los dos perros que lo siguen, Can Mayor y Can Menor… y sobre los hombros de Orión, Bellatrix y Betelgeuse… pero aquí no hay nada con lo que diferencian entre mayor y menor...”

Apenas reparó en que el chico que aún no se había presentado le dio unas palmadas en el hombro. Sólo escuchó “Cuatro ojos” y contestó, pero con la cabeza en otra parte: “No, me llamo Aki.”

No advirtió nada de la pelea.

Se frotó la frente. “Bueno. Ahora vamos por partes… ‘Algo singular’... por supuesto, como una estrella es algo único, y sólo hay una llamándose… ‘en lo más alto’, es decir, en el cielo… ‘el frío es mi ambiente’, el frío de la eternidad del universo… ‘pequeño y mayor’… por supuesto, La Osa Mayor, o el Carro Mayor… aquí tengo una duda, porque tales acertijos suelen resolverse con la estrella polar, la más notable del Carro Menor… pero.. sólo hay una estrella descansando sobre el hombro de un cazador, y está en la constelación del Carro Mayor. Según una leyenda india de Norteamérica las tres estrellas de la cola de la Osa Mayor no representan una cola – los osos, después de todo, no tienen colas tan largas -, sino a tres cazadores que van en pos de un oso. Según la leyenda, el segundo cazador, la estrella Mizar, lleva una gran cacerola para cocinar al oso en su hombro – la estrella Alcor.”

“A ver….”

Aki tecleó “Alcor” en el teclado y esperó la reacción.

El chico consiguió que Nyoko frunciese el ceño, no soportaba ese tipo de comportamientos, no en ese lugar, pues a fin de cuentas era un igual. Ahora no había categorías, ahora solo era un joven con poderes, al igual que ella. Sin dirigir palabra se giró con suavidad hacia la otra chica, escuchándola hablar. Con una efímera sonrisa miró a su gemela unos segundos.- Kukiko, y sí mucha gente le pasa eso mismo.-Respondió con tranquilidad. 

En su reconocimiento vio donde estaba la otra llave, esa era difícil de conseguir... O al menos eso pensó ella. Se giró levemente y alzó la cabeza mientras hablaba.- Allí está la otra...-Tras eso se acercó a la mesa con su gemela, leyendo el acertijo. Cuando vio la respuesta de su igual asintió, cómo dejando entender que ella también había pensado en algún tipo de arma.

¡BTZZZZZ!

La caja emitió un pitido agudo que duró un par de segundos. Y después de eso... nada. La puerta no se movió ningún milímetro, hecho que aunado al molesto ruido que ha emitido, significaba que habíais introducido una respuesta incorrecta.

La chiquilla rompebolas miró a Aer, teniendo que subir mucho la mirada debido a su escasa estatura y a la altura a la que estaba el neogriego... ya el simple hecho de tener que hacerlo le hacía poner cara de molestia... pero tambien podria ser que esa fuera su cara de serie -Hmph... Me llamo Laura...- se presentó sin muchas ganas con una voz suave y agudo (voz de niña), antes de volver a enfadarse -Ni Laurita, ni Lauricilla, ni Laurinina... Laura. Ya veis que pasa si me lo llamáis- dijo con tono intimidante crujiendo sus nudillos.

¡BTZZZZZ!

La caja emitió un pitido agudo que duró un par de segundos. Y después de eso... nada. La puerta no se movió ningún milímetro, hecho que aunado al molesto ruido que ha emitido, significaba que habíais introducido una respuesta incorrecta.

La chica continuó con su sonrisa tonta y feliz mirando a Kukiko -Hola Kukiko. Mucho gusto, yo soy Elize- se volvió a presentar mientras se ponía al lado de la gemela azul y miraba el acertijo para el que ésta pidió ayuda -Humm...- dijo mientras miraba concentrada el papel donde venía la adivinanza, hinchando los mofletes de pura concentración -Hum... no. No tengo ideita de que puede ser. Perdón- término diciendo, disculpandose con Kukiko. Luego, se apartó de una gemela para ponerse con la otra -Vaya... que alta está... ¿alguien tiene alguna idea?- preguntó dubitativa, con el dedo indice paseando por sus labios mientras sus mofletes volvian a inflarse.

¿E-eh?... ¿Que yo ca-cargue a Tsuku?- preguntó desde el lado de la caja, confundido porque ahora le habían incluido en un plan del que había entendido que tendría que aupar a la chica ninja para que llegara a la llave del techo -N-no creo que pu-pueda... no soy mu-muy fuerte ni te-tengo mucho músculo...- dijo excusándose rascándose la nuca -Y-y me d-da ve-vergüenza... co-con esa mi-minifalda...- balbuceo apartando la mirada a un lado poniéndose algo rojo, seguramente de imaginarse el riesgo de pasar la vergüenza que sería verle por accidente las braguitas a Tsuku... Y la frase de Trini de que "El roce hace el cariño" no ayudaba -Y-Yo tra-trabajo en l-la caja...- término diciendo.

El chico dejó de agarrarse la cola y se acercó al teclado con aires de superioridad.

-¡Dejadme a mi! Esto seguro que lo resuelvo enseguida.- El chico se quedó mudo leyendo el acertijo mientras su cola seguía moviéndose de un lado a otro. Tras eso se apartó de nuevo y le puso una mano en el hombro a Kukiko.- Sigue así, seguro que lo resuelves.

Tras eso y haciendo como si no hubiera pasado nada se quedó mirando la llave del techo junto con Elize. Después miró a un lado y a otro sin mucho éxito.

-Vaya... No hay nada para subirse. ¿Si nos subimos unos encima de los otros creéis que llegaríamos?

Mientras Garret se retorcía de dolor en el suelo, se agarraba sus partes con sus manos. Trataba de murmurar algo pero por aquel golpe sus palabras no lograban salir. Finalmente algo se pudo escuchar de sus labios.

-¡Maldita bruja...!

Tras un rato de recuperación, finalmente Garret volvió a incorporarse apoyándose en una de las mesas completamente malhumorado. No apartaba sus ojos de Laura con una mirada que podría matar a cualquiera.

-De acuerdo. Vamos a intentarlo. Así al menos alguien hará algo productivo...- De nuevo volvió a dirigir la vista a Laura tras soltar aquella indirecta.

-¡Sí, sí! ¡Venga, venga!- Tsuku fue corriendo hacia la mesa con una energía envidiable y subió ágilmente de un salto. Tras eso Tsuku puso sus piernas alrededor del cuello de Axel, sentándose sobre sus hombros. Después le dio unas palmaditas en la cabeza completamente animada.- ¡Arriba, arriba! ¡Uoooo!

Tras eso Tsuku juntó sus manos imitando a las películas de ninjas y las mantuvo haciendo un gesto con ellas. ¿De verdad tenía que hacer algo así o simplemente se estaba divirtiendo?

Aki sacudió la cabeza, no sabiendo en qué parte de su razonamiento cuidadoso residía el error. “Bueno… siempre puedo intentarlo con el comodín de todos los rompecabezas sobre las estrellas, la Estrella Polar.”

Desde luego, insertó su nombre científico, “Polaris”, en el teclado.

Por lo demás, estaba completamente ajeno a la discusión en su alrededor.