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The Black Company Chronicles: Rastrojo s Misantropy

Día 3 tras la DDE - En las Mazmorras de Palacio

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07/12/2016, 16:15
El Brujo

El Cabo Matagatos, del Pelotón de Hostigadores, y el soldado Preocupado, del Pelotón de Infantería, despertaron en una habitación oscura, solo iluminada por unas velas. En algún lugar se escuchaba el ruido lejano de una gotera, y una macabra mesa con herramientas era la única compañía. Una de esas mesas que bien pueden ser de carpintero, si el carpintero es un asesino en serie que destripa a sus víctimas allí mismo, manchando las herramientas de sangre.

Cuando trataron de moverse, se dieron cuenta de que tanto sus manos como sus pies estaban atados con unas correas atornilladas a la tabla inclinada de madera sobre la que sus cuerpos descansaban, de modo que estaban prácticamente erguidos.

De la oscuridad surgieron dos hombres. Uno era el Brujo. El otro... el otro era feo de cojones. Cojeaba jorobado y bizco, siempre un paso por detrás del mago, no como su igual.

Al fin despertáis...-dijo el Brujo, con una sonrisa de satisfacción.

Lo último que recordaban era haber caído en la plaza de la venta de esclavos, en Puerto Rata, justo antes de que el Brujo extendiera las tinieblas, y todo se volviera oscuro. Debieron perder la consciencia, como mínimo el tiempo justo para ser atados en esta mazmorra y desproveídos de todas sus cosas (salvo su ropa, por suerte el Brujo no es de ese tipo de magos).

Veréis... no sé si sois conscientes del poder y rareza de las espadas que llevábais con vosotros. Eran mágicas. Una magia apagada, antigua, envejecida y debilitada con el paso de los años. Aún así, han llamado mi atención. Así que ahora váis a decirme todo lo que quiero saber sobre vosotros, sobre el lugar del que venís, sobre porqué estáis aquí y cómo llegaron esas espadas gemelas a manos de gente como vosotros.

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07/12/2016, 17:48
Matagatos

Matagatos despertó, tremendamente aturdido. Poco a poco fue recordando lo ocurrido, aquellos monigotes de papel... Y como la misión había quedado en manos del inútil de Rastrojo.

"Oh Diosa, estamos condenados..." pensó, repentinamente aterrorizado por la idea. No es que no fueran a sacarle de allí, es que dudaba siquiera de que consiguieran dar dos pasos sin que el falso chamán hiciera que murieran todos. Entonces apareció el brujo, y aquel otro tipo. No hacía falta ser especialmente inteligente para saber lo que iba a pasar, pero Matagatos lo era. Tortura. Sin embargo, también era muy cabezón.

-Soy perfectamente consciente de lo que son, y también de que son mías-dijo, con una sonrisa que pretendía inspirar confianza-de donde venimos no importa, y nuestra misión es recuperar a alguien que fue vendido como esclavo. En cuanto a esas espadas, me las gané matando cretinos. 

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07/12/2016, 19:13
Preocupado

Preocupado abrió los ojos, se extrañó de la oscuridad que lo rodeaba y observó a su alrededor. Se preocupó de inmediato.

¿Donde estoy? Esto no son las llanuras infinitas.

Lo último que recordaba era haber luchado contra unas criaturas mágicas y como poco a poco había sido vencido, después probablemente había muerto y al despertar esperaba ser recibido por el sol deslumbrante de la sabana infinita donde cazaría junto a sus antepasados por toda la eternidad. Sin embargo lo único que vio fue al Cabo Matagatos atado a una extraña mesa, de la misma manera que él también lo estaba, eso le hizo comprender la situación.

¡Por los espíritus bondadosos! ¡Me han confundido con un Oscuro y no me han dejado ir a las praderas infinitas!

Iba a empezar a protestar, a explicarles que todo aquello era una terrible confusión, que él era un buen K'Hlata y que siempre había respetado y reverenciado a los espíritus. Pero entonces dos figuras, que a lo lejos y todavía sin adaptar sus ojos a la penumbra, le parecieron dos malos espíritus, sobre todo la segunda. Cuando se acercaron y el brujo comenzó a hablar Preocupado lo reconoció y se dio cuenta que no había muerto, que tan solo había sido capturado. Eso también le preocupaba, sobre todo cuando el brujo comenzó a interesarse por las espadas de Matagatos, esas que le había regalado el Señor del Dolor y que estaban malditas, eso no podía traerles nada bueno. Pero como buen soldado se mantuvo callado a la espera de que su superior, ya que ahora Rastrojo ya no estaba con ellos, hablara.

¿Que habrá sido de Rastrojo y el resto? Creo que pudieron haber huido, ya estaban más lejos la última vez que los vi.

Su preocupación aumentó cuando Matagatos admitió saber que sus espadas estaban malditas, eso seguramente supondría que los matarían. Preocupado, a pesar de sus ataduras, movió las muñecas y agitó las manos, no con intención de aflojar los nudos como podía parecer, si no para ahuyentar a los malos espíritus que se cernían sobre ellos.

Estamos perdidos, ahora si que estamos perdidos. Buenos espíritus, ayudadnos o vuestro más leal servidor no verá la luz. Al menos llevadme con vosotros a las llanuras infinitas.

Le hubiera gustado morir en una batalla, como el guerrero que era, pero los espíritus le habían negado ese honor por alguna razón. Ahora solo podía preocuparse y confiar en que el Cabo Matagatos pudiera sacar la situación adelante.

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10/12/2016, 22:44
El Brujo

La contestación de Matagatos logró dibujarle al Brujo una sonrisa sádica en el rostro.

Por supuesto... Te agradezco, Oscuro, que respetes los tiempos y no me prives de la diversión. Primero la tortura; después, las respuestas. Ese ha de ser el orden natural de las cosas.

¡Rouya! A partir de ahora, los prisioneros son todo tuyos. Somételes a los sufrimientos que estimes oportuno. Aquel que colabore primero merecerá nuestra simpatía y recibirá un mejor trato que el que se empecine en guardar silencio o contestar con vaguedades.

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10/12/2016, 22:55
Rouya

El jorobado se acercó, frotándose las manos.

Sus deseos son órdenes, su Eminencia. Jijijiji...

Su torturador dió vueltas a una manivela, y los tablones en los que estaba Matagatos se fueron inclinando hasta alcanzar una posición horizontal, como si el Cabo estuviese ahora tumbado sobre una mesa de operaciones. Rodeando a los prisioneros, llegó hasta la manivela que bajaba la "cama" de Preocupado. Ambos Hermanos Juramentados terminaron boca arriba.

Después, Rouya cubrió sus ojos con una venda, privándoles del sentido de la vista. Lo último que vieron fue al Brujo, pero a partir de ese momento no sabrían si seguiría presente, o si se ausentaría.

Escuchadme ambos. Voy a taparos los oídos con algodón, de modo que no escuchéis ni los gritos ni la confesión de vuestro compañero. Después de eso, os someteré a la primera tortura. Después vendrá el receso, quitaré el algodón del oído de uno de vosotros, y le repetiré las preguntas del Brujo. Si no obtengo respuestas satisfactorias, proseguiremos con la segunda tanda de tortura. Así hasta que alguien hable. ¿Lo habéis entendido? ¿No? Pues da igual, jijiji...

Notaron la presión en sus orejas, terminando con el ruido de la risa de Rouya. A partir de ahora no podían ver ni escuchar.

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10/12/2016, 23:11
Rouya

Tras un rato en el que Rouya preparaba sus utensilios, empezaste a sentir cosquillas en la planta del pie izquierdo, como si alguien te estuviese pasando una pluma por la piel. Tras varios minutos riendo, el cosquilleo cesó.

A continuación notaste cómo quitaban el algodón de uno de tus oídos, volviendo a oír.

¡Y esto es solo el principio! Jijiji... Tú puedes elegir. Dínos todo lo que quiere saber el Brujo, y en la segunda tanda, en lugar de una nueva tortura, te daré de beber un poco de agua. Podrás salvarte tú, mientras tu compañero recibe un serio correctivo... o un poco de agua, dependiendo de qué haya elegido él. ¿Qué me dices? ¿Hay algo que me quieras contar?

Notas de juego

Esta primera tortura es muy leve, y no impone penalizador. Torturas posteriores aumentarán en +1 (acumulable por cada tortura recibida) las CD's necesarias para superar las pruebas de habilidad. Es decir:

Si no hablas ahora, la CD para tus éxitos en una tirada pasará de CD 8 a CD 9, y los posibles críticos pasarán de CD 11 a CD 12).

No marques a Preocupado.

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10/12/2016, 23:25
Rouya

Tras un rato en el que Rouya preparaba sus utensilios, empezaste a sentir cosquillas en la planta del pie izquierdo, como si alguien te estuviese pasando una pluma por la piel. Tras varios minutos riendo, el cosquilleo cesó.

A continuación notaste cómo quitaban el algodón de uno de tus oídos, volviendo a oír.

¡Y esto es solo el principio! Jijiji... Tú puedes elegir. Dínos todo lo que quiere saber el Brujo, y en la segunda tanda, en lugar de una nueva tortura, te daré de beber un poco de agua. Podrás salvarte tú, mientras tu compañero recibe un serio correctivo... o un poco de agua, dependiendo de qué haya elegido él. ¿Qué me dices? ¿Hay algo que me quieras contar?

Notas de juego

Esta primera tortura es muy leve, y no impone penalizador. Torturas posteriores aumentarán en +1 (acumulable por cada tortura recibida) las CD's necesarias para superar las pruebas de habilidad. Es decir:

Si no hablas ahora, la CD para tus éxitos en una tirada pasará de CD 8 a CD 9, y los posibles críticos pasarán de CD 11 a CD 12).

No marques a Matagatos.

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11/12/2016, 11:37
Matagatos

Con lágrimas en los ojos, y el final de las carcajadas, el oscuro respondió.

-Me muero... De miedo-dijo, logrando serenarse un poco-no vas a lograr nada, personajillo. Ni siquiera eres capaz de ensuciarte tú las manos, ¿cómo se puede respetar a un hombre así?

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12/12/2016, 16:02
Preocupado

Esto va mal, muy mal.

Como se imaginaba la respuesta de Matagatos no había agradado a sus captores. Era la primera vez que Preocupado se enfrentaba a algo así, siempre había supuesto que moriría en una batalla o de alguna herida pero ser capturado y torturado nunca había sido algo que tuviera en cuenta. Y para mayor problema debía intentar preservar la vida del Cabo Matagatos.

Y todo esto por Elefanta. Las mujeres siempre dan problemas, siempre dan problemas.

Aguantó las cosquillas como pudo, aunque le supuso un gran esfuerzo pues no estaba acostumbrado a reirse mucho por sus múltiples preocupaciones. No había entendido muy bien de que se trataba todo aquello, pero cuando el viejo torturador le quitó el algodón comenzó a comprender. ¿Porqué les tenían prisioneros? No habían hecho nada, quizás simplemente los habían confundido con otros.

-No podéis lastimarnos. ¿Acaso no sabéis quienes somos? Somos Hermanos Juramentados de la Compañía Negra, los mercenarios más temibles. ¿Creéis que vuestra ciudad estará a salvo cuando nuestros hermanos se enteren? Además no hemos hecho nada, tan solo estamos buscando a una mujer peligrosa, es mejor que nos liberéis para que podamos buscarla y no termine haciendo daño a nadie más. Tiene un demonio dentro y solo nuestro chamán puede ayudarla. Yo que vosotros estaría muy preocupado.

Esperaba que solo nombrar a la Compañía Negra fuera suficiente para que los dejaran. Además tampoco estaban de incógnito y no era ningún secreto que tuviera que guardar. Y si esos tipos les ayudaban a encontrar a Elefanta podrían irse antes y olvidar todo aquel estúpido viaje.

- Tiradas (1)

Motivo: Tortura

Tirada: 1d10

Dificultad: 8+

Resultado: 7 (Fracaso)

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15/12/2016, 06:35
Rouya

Aaah... perfecto. ¿Te gustan los trabajos sucios, entiendo? Entonces el siguiente nivel de desesperación te encantará. Voy a untar con mermelada la planta de tus pies, y voy a soltar un puñado de hormigas rojas para que te arranquen pequeños bocados de piel con sus mandíbulas.

¿Qué me dices entonces? ¿Colaborarás? ¿O he de ponerte de nuevo el algodón en el oído y empezar con las hormigas? Ten en cuenta que tu compañero podría haber hablado ya. ¿No sería innecesario que sufrieses por nada?

Notas de juego

Penalizador -1.

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15/12/2016, 06:42
Rouya

¿Tu no me mentirías, verdad? Sabes que tu compañero puede estar dándome otra información. Si decís cosas contradictorias, lo sabré, y proseguiré con más torturas. Y nadie quiere eso, ¿verdad? Jijijiji... bueno, yo sí.

Rouya ofreció un cuenco de agua y dió de beber a Preocupado.

Prosigamos. La siguiente tortura incluye mermelada, una brocha y unas hormigas rojas antropófagas. Después de pasar la pluma, los nervios de las plantas de tus pies están más sensibles. Será muy doloroso. Dime, "Hermano Juramentado", ¿hay algo más que quieras decirme o puedo empezar?

Notas de juego

No puedes hacer tiradas, aún tienes vida 0. Te has librado del penalizador gracias a que has hablado.

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15/12/2016, 09:21
Preocupado

Las hormigas con mermelada era un auténtico manjar en la sabana, pero le preocupaba que esos extranjeros no supieran combinarlas bien, porque las hormigas negras estaban excelentes con mermelada de fresa, pero las rojas estaban mejor con mermelada de naranja o de limón. Y sobre todo le preocupaba que no las iban a utilizar como premio por haber sido sincero si no como alguna macabra tortura que se le hubiera ocurrido a aquel viejo chiflado.
Bebió el agua con un poco de reticencia pues le preocupaba que estuviera envenenada o contuviera algo dañino, pero verdaderamente tenía mucha sed y ya que estaba a merced de aquellos extranjeros tampoco tenía mucha capacidad de decisión. Negó con la cabeza ante las palabras de Rouya.

-No se que quieres saber. ¿Acaso no te digo toda la verdad? Pero no hagas daño al cabo, es muy apreciado en la Compañía Negra y os podéis meter en un buen lío, yo contestaré todas las preguntas que necesites.

¿Que querían saber aquellos hombres? ¿Acaso eran parte del Triplete? De ser así hubieran conocido la ubicación de esa ciudad y no habían acudido allí de incógnito si no de cara y con una misión muy concreta que nada tenía que ver con la guerra.

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15/12/2016, 15:15
Matagatos

-Ni me gustan ni me disgustan, pero si he de hacerlos, los hago yo. No hago que otro lo haga por mi. Vuestro "temible" brujo parece más bien un pusilánime incapaz de conseguir nada por si mismo-respondió Matagatos, desafiante. Al fin y al cabo, el dolor no había empezado aún, y no estaba dispuesto a vender a nadie ni a contarle secretos a aquel condenado. 

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20/12/2016, 00:05
Rouya

Sin embargo, para ser alguien incapaz de conseguir nada, ya tiene tus espadas. Jijijiji... Aaaah, espera un momento. Es muy inteligente por tu parte. Insultas al Brujo para buscar su reacción; no hay reacción, y con ello acabas de averiguar que el Brujo ya no está en el interrogatorio. Sin embargo, sigues estando atado, y bajo tortura. Prosigamos...

El despreciable Rouya volvió a dejar sordo a Matagatos reponiendo el algodón en su oído. Sintió el cosquilleo de la brocha en la planta de los pies, y el tacto viscoso de la mermelada, miel, o alguna de esas mierdas exóticas que los Nyueng Bao echan a la comida. Luego, el dolor: docenas de hormigas rojas devorándole la planta de los pies.

Al cabo de un rato, Rouya le arrojó un cubo de agua que arrastró a las hormigas hasta ahogarlas en el charco resultante. De nuevo, Rouya quitó el algodón de los oídos, pero esta vez, además, también retiró la venda de los ojos del Cabo. A su izquierda, Matagatos pudo ver a un Preocupado con una tela tapándole los ojos y otra amordazando su boca.

No lo mires a él, mírame a mí. Te voy a presentar a la herramienta que usaré en la tercera ronda de torturas...

¿Estás dispuesto a hablar ya o puedo comenzar la tortura?

Notas de juego

Penalizador -2.

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20/12/2016, 00:26
Rouya

Tranquilo, primero lo primero. ¿Tienes hambre? Tengo aquí unas ricas uvas para ti.

Rouya acercó una bandeja de fruta. Arrancó una a una las uvas del racimo, y las fue metiendo servilmente en la boca del prisionero. Luego trajo un pai-pai y empezó a abanizar a Preocupado para que no pasase calor.

Cuéntame más sobre ese chamán vuestro. ¿Cómo se llama? Descríbemelo. Quiero conocerlo todo sobre él. Jijijiji...

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20/12/2016, 12:28
Preocupado

Miró con suspicacia al viejo, no terminaba de fiarse de él, solo se quedaría tranquilo cuando los soltaran y volvieran al campamento principal, así que rechazó las uvas.

-No gracias, no tengo hambre, desayuné mucho hoy.

Su preocupación fue en vano pues su extraño anfitrión comenzó a meter uvas en su boca sin que Preocupado pudiera impedirlo.

Seguro que están envenenadas, tengo que escupirlas. Pero si no están envenenadas y las escupo pensarán que no quiero colaborar y continuarán con las torturas o quizás maten al cabo.

Siguió masticando y tragando sin mucho entusiasmo, que fuera lo que los espíritus quisieran, no podía hacer gran cosa en sus circunstancias. El viejo parecía muy amable, seguramente convencido de que Preocupado estaba diciendo toda la verdad, pero le preocupaba que pudiera cambiar de opinión, así que siguió siendo sincero, al fin y al cabo no ganaba nada en mentir y tampoco estaba desvelando ningún secreto.

-Se llama Rastrojo. En realidad aún no es un chamán como tal, pero lo será pronto, es el mejor alumno de Caratótem, nuestro chamán principal. Es mestizo, una mezcla entre K'Hlata y Oscuro, alto y delgado, parece poca cosa pero en realidad es un hombre muy inteligente y poderoso pues los espíritus le protegen y le hablan. -Con todo aquello Preocupado esperaba que fuera el momento de dar un paso adelante en la nueva relación que habían entablado.- ¿Ves? Podemos hablar de muchas cosas, pero no tienes porqué tenernos prisioneros. Si nos sueltas buscaremos a Elefanta y nos iremos de aquí para no volver.

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20/12/2016, 13:36
Matagatos

La cosa se había empezado a poner seria. El dolor en la planta de los pies fue bastante agudo, con aquellos malditos insectos perforando su piel. Pero Matagatos apretó los dientes y gruñó, decidido a aguantar como fuera. No le iban a ganar a cabezón, no iba a darse por vencido con aquellos bastardos. Por fin aquello paró, y el maldito torturador le retiró la venda, para enseñarle lo que iba a usar ahora.

-No sabía que os iban esa clase de cosas. ¿Os paseáis mucho por el cañón de los sodomitas? Si lo hubiera sabido, habría tenido la cortesía de traeros a algunos amigos que les va eso, sin duda os lo habríais pasado muy bien juntos conociéndoos más profundamente...

Sin embargo, al cabo no le hacía gracia alguna lo que iba a pasar a continuación. Pero se negaba a decirles nada, mucho menos a darles el gusto de que le vieran flaquear. 

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22/12/2016, 22:09
Rouya

Oh, no tienes porqué preocuparte. Estoy seguro de que todos estos amigos que tienes a los que les gusta "esto" saben que estás en buenas manos. Empecemos...

Dejó el objeto de tortura sobre el pecho de Matagatos, para así poder volver a taparle los ojos con la venda y los oídos con el algodón. Después llegó el dolor. Mucho dolor. Y un poquito de placer. Pero sobretodo mucho dolor...

Notas de juego

TORTURADO 3 (ver en tu ficha).

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22/12/2016, 22:17
Rouya

Ah, eso es muy interesante. No os voy a soltar. Lo que sí voy a hacer es darte otra uva. Sigamos hablando. ¿Qué más puedes contarme? Ahá. Sí. Muy interesante...

Notas de juego

TORTURADO 0 (ver en tu ficha).

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22/12/2016, 22:19
Rouya

Pasaron las horas... Al final todo pasó.

Rouya volvió a quitar la venda y el algodón a los dos soldados torturados.

Awwwwwh... Bueno, ya es tarde. Me voy a dormir. Hasta mañana, muchachos. Os tengo preparadas más sorpresas.

El torturador se fue. Miraron a su alrededor. Estaban solos. Tumbados en aquellas mesas, con muñecas y tobillos sujetos por las correas. No tendrían mejor oportunidad para escapar que aquella.

Las manos del Cabo Matagatos eran hábiles por su práctica con la medicina. Si se esforzaba, podría realizar una gran maniobra de escapismo y liberarse de las correas.

Preocupado era un paranoico. Se preocupaba por todo. Y gracias a eso, por temor a estar alguna vez en esta misma situación, se había entrenado en el arte de deshacerse de unas ligaduras.

Ambos podían hablar, mirarse, escucharse y, lo más importante de todo: tratar de huír de aquella mazmorra.

Notas de juego

Recuperáis 1 punto de vida. Ya podéis volver a tirar los dados. Haced una prueba de vuestra habilidad especial para liberaros de las correas. Si solo uno se libera, puede desatar al otro sin necesidad de tirada. Si no os liberáis ninguno, pasáis toda la noche atados, y a la mañana siguiente volverán nuevas torturas.