Las luces de todas las casas y las calles están encendidas. Todos los magos están en las calles, algunos revisando sus libros, otros murmurando y unos cuantos empinando el codo. Extrañamente no se ven soldados por los alrededores aunque podéis escuchar como éstos salen en tropas de los cuarteles del castillo.
Estás delante del Concilio. Hay un montón de gente entrando y saliendo y en las escaleras que dan acceso a las puertas. Todos hablan de magia y de sucesos sobrenaturales pero no consigues distinguir nada interesante.
Nadie parece percatarse de tí ni levantas sospechas.
A partir de aquí eres libre de hacer lo que quieras. Habla, investiga, roba, mata... yo me aseguraré de que llegues a donde yo quiero así que por eso no te preocupes.
Estás delante del Concilio. Hay un montón de gente entrando y saliendo y en las escaleras que dan acceso a las puertas. Todos hablan de magia y de sucesos sobrenaturales pero no consigues distinguir nada interesante.
Nadie parece percatarse de tí ni levantas sospechas.
A partir de aquí eres libre de hacer lo que quieras. Habla, investiga, roba, mata... yo me aseguraré de que llegues a donde yo quiero así que por eso no te preocupes.
Estás delante del Concilio. Hay un montón de gente entrando y saliendo y en las escaleras que dan acceso a las puertas. Todos hablan de magia y de sucesos sobrenaturales pero no consigues distinguir nada interesante.
Nadie parece percatarse de tí ni levantas sospechas.
A partir de aquí eres libre de hacer lo que quieras. Habla, investiga, roba, mata... yo me aseguraré de que llegues a donde yo quiero así que por eso no te preocupes.
Estás delante del Concilio. Hay un montón de gente entrando y saliendo y en las escaleras que dan acceso a las puertas. Todos hablan de magia y de sucesos sobrenaturales pero no consigues distinguir nada interesante.
Nadie parece percatarse de tí ni levantas sospechas.
A partir de aquí eres libre de hacer lo que quieras. Habla, investiga, roba, mata... yo me aseguraré de que llegues a donde yo quiero así que por eso no te preocupes.
Normalmente, se tardarian cinco dias de largo viaje desde mi aldea natal, el pueblo de Darnagal.
Yo lo he hecho en apenas tres. He llegado empapado en sudores, y ayer por la mañana, fue la bendición de Hildegar la que me hizo calzarme las botas y continuar el viaje. Ha sido un gran esfuerzo, pero siento que merecia la pena.
Llego un tanto cansado, apoyandome en un palo que cogí por el camino, un bastón de viajero. Y de esta guisa, un tanto ojeroso y polvoriento, es como he llegado a Millpond.
Mi objetivo es claro: Debo encontrarla. Pero... bueno, antes que enfrentarse al enemigo, uno debe de tener una base: Busco a algún local (Gente de edad, que no tengan pinta de viajeros) y les pregunto si conocen alguna posada, o mejor, algún templo de Hildegard el Grande.
Lo que sea, por tener algún lugar donde soltar esta pesada mochila, y dejar la tienda de campaña y el saco de dormir, que ya pesan y mucho
Actualizo el nombre de tu aldea. Cuando escribas ve paso a paso. Si lo que quieres es buscar a alguien y preguntar, describe como buscas a alguien, te acercas y haces la pregunta. Despues yo te contesto, si hay interaccion pues extendemos la conversacion y sino pues te despides y sigues tu movimiento.
Miras a tu aldedor y ves una casa que tiene la puerta abierta. Te asomas por la puerta y te encuentras un viejito sentado en una cómoda que te está mirando fijamente. Das un paso al frente y antes de que digas nada te dice con una sonrisa:
- "Acercate jovencito, dime que te pasa"
¡Este anciano parece más viejo que las mismas rocas del lugar! Pero tambien parece una persona atenta
"Buenos dias, caballero. Acabo de llegar a Millpond, y ando un perdido ¿Sabe si hay algún templo de Hildegard en la Villa?"
En caso de que diga que no, preguntaré por alguna posada.
-Llevo ropas de viajero, los ropajes ceremoniales de clérigo los llevo bien doblados en la mochila-
. "Siento mucho decepcionarte jovencito, pero no se admiten templos en esta ciudad. El rey los prohibió porque hay demasiados dioses y muy poco espacio" dice y suelta una carcajada bien grande.
- "Entiendo" dices, "pero y hay alguna posada?"
"Sii, hay muchas. La mas cercana se encuentra dentro del Consorcio, sino tendrás que alejarte un par de calles hacia el sur. No tiene perdida. Que tengas mucha suerte!" te dice con voz dulce y una sonrisa.
"Pues tanto gusto, anciano. Mi nombre es Razar, y si necesita un par de brazos fuertes que le ayuden, cuente conmigo en lo que sea"
Me dirijo en la dirección que me ha dicho el Anciano, mientras me extaña... ¿Prohibidos los templos? La inmensa mayoría suelen dar servicios a la comunidad, ayudar a los pobres, a los heridos... Y aunque hay muchos dioses, no todos reunen bastantes seguidores en una zona como para justificar un templo
Algo raro, sin duda ¿Que clase de persona será este rey?
Sigo en mis pensamientos, mientras camino las dos calles hacia el sur, fijandome en los edificios. Busco la posada, si... pero no por ello dejaré de estar ojo avizor.
Caminando hacia el sur te topas con más gente en túnica y algún que otro ciudadano. Nada del otro mundo. Una vez cruzas las dos calles llenas de gente, un cartel muy grande con la foma de un jamón te llama la atención. Hay más carteles, con libros, varas, pergaminos y alguna que otra joya.
Si te diriges hacia la casa con el cartel del jamón para la narracion al abrir la puerta.
Tras la extraña explosión en el cielo Thalatos habia sido enviado en su primera mision. Debia averiguar lo que conocian los Hechiceros Humanos sobre los extraños sucesos sobrenaturales que estaban sucediendo a lo largo de todos los reinos. La luz del cielo tambien habia pasado por el Reino Elfico de Nolorum,
Los Altos Magos elficos sabian que el extraño objeto de luz habia caido en el reino humano de Rondar, pero todos sus intentos de adivinacion magica habian fracasado inexplicablemente.
Thalathos habia llegado rapidamente gracias a un caballo magico convocado por Tholorgrin, un Alto Mago de gran poder y status, pero una vez llegado a las cercanias de Millpond el caballo se habia desconvocado. Acabando su trayecto a pie ahora se encontraba en las puertas de Millpond.
Thalatos se preguntaba porque se le habia elegido a él, cuando habia gente más cualificada pero los designios de los Altos Magos eran muchas veces inexplicables.
Se dejó llevar entre la multitud, a ver si veia o escuchaba algo interesante que le pudiese guiar por el laberinto de la cuidad de los hechiceros humanos
No se si en vez de ser un James Bond elfico, voy a tener que derivar a ser Anacleto Agente Secreto, pero bueno, intentaré ir a lo primero por el momento.....
PS: Editado por director.
¡Este sitio está hasta arriba de magos!
En serio, estoy más acostumbrado a ver comerciantes, mercenarios que van de duros... y sin embargo, está lleno de magos y más magos.
Normalmente, ver a un lanzador de conjuros hecho y derecho es algo raro de verse: La mayoría son unos quiero-y-no-puedo, pero da la impresión de que o bien están regalando libros mágicos, o si no... algo raro ha pasado
Sin dudarlo, arrimo la oreja a ver si me entero de que están hablando
Luego, me dirijo hacia el Jamón, pongo la mano en el pomo...
Motivo: Percepcion (Pegar Oreja)
Tirada: 1d20
Resultado: 8(+8)=16
Nada más pegar la oreja a la puerta...
Tira reflejos
La conversación a la que he pegado la oreja no parecia interesante. Eso, o estarían hablando en otro idioma...
Motivo: Reflejos
Tirada: 1d20
Resultado: 9
Tirada: 9
Todos las conversaciones de la ciudad parecen ser la misma: Qué es la luz? Es magia? Hechicería? Fenómeno natural? Te pierdes unas cuantas calles entre la multitud pero no consigues escuchar nada interesante.
Cuando te paras un segundo a mirar alrededor ves una calle hacia la izquierda en la que hay un monton de carteles colgados, con diferentes formas. Uno es un jamón, otro es un libro, hay varitas, varas, pergaminos...
Al otro lado solo se encuentra el río y la muralla.
Termina tu ficha en tu pestaña de personaje si quieres continuar la historia.
He cambiado el nombre de tu ciudad élfica.
Justo cuando te diriges hacia el pomo, se abre la puerta y un cuchillo volador la atraviesa. Pur puro instinto más que reflejo agachas la cabeza lo justo como para que solo te corte dos pelos de la coronilla.
Desde dentro suena una voz muy grave y cabreada:
- "Como rompáis una sola taza del bar os juro que os diseco y os cuelgo de decoración!"
Trás ese breve comentario un un silencio de una fracción de segundo, una música suave se reanuda en la sala y la gente vuelve a hablar y murmullar.
Joer un 9... por los pelos xD
- Estas agachado así que aún no ves nada de lo que hay dentro. Reincorpórate y lanza percepción.
"Por este tipo de cosas, siempre debería de echarme algúna bendición, protegiendo mi pellejo" pienso.
Luego caigo en la cuenta de que gracias a mi limitada capacidad , mis hechizos duran como mucho unos cinco segundos.
Recojo mi sombrero del suelo (llevo un sombrero, y al agacharse se habrá caido) y me incorporo, echo un vistazo al interior...
SI la daga se ha quedado cerca, se ha clavado en el dintel de la puerta o algo así, le doy un golpe y la recojo. Tengo intención de devolversela a su dueño.
Motivo: La capacidad de Percibir
Tirada: 1d20
Resultado: 12(+8)=20
Percepción: 1d20(12) + 8 = 20
No puedo acceder a la ficha. En cuanto pincho me va directo a leekspin.com.
Me podrias quitar el avatar de la imagen. En vez de usar un fichero use una imagen de umbria y creo que por eso me esta dando problemas. En el peor de los casos borra el personaje y me vuelvo a apuntar a la partida.
Voy a pasarme el antivirus, pero solo me pasa en esta partida
Listo, te he cambiado la imagen y te he quitado la que tenias en descripcion. Mira a ver si ya puedes y sino hacemos lo otro.