Partida Rol por web

Ada al ver a Andreijk tirar a Bobby al suelo e inmovilizarlo sonríe mientras se levanta.

- Buen trabajo grandullón. - dice mientras se coloca el pelo y la falda, intentando estar lo mejor posible. Lanza un vistazo rápido al tren y se acerca rápidamente a Zeke(*). Coge al niño por la mano y lo intenta tranquilizar. - Tranquilo pequeño, ha pasado todo, ya se han ido. - habla con suavidad abrazándolo.

Cuando el niño se tranquiliza, ayuda a curar a los heridos (excepto a Bobby), intentado mantener a Zeke cerca de ella todo el tiempo.

Mientras John y los demás comienzan a atender a Jeb, Isaiah se retira, coge un trapo y empieza a limpiarse la herida de la cabeza.

Todos (menos Isaiah) parecen darse cuenta de que no es lo mejor tratar de curarse una fea herida con un trapo mugriento, pero en cuanto alguno trata de decirle algo, Isaiah los frena en seco.

Tranquilo, ya puedo yo sólo, vosotros atended al resto...

Claro que cuando el insensato vaquero se levante con sudores, fiebres y temblores durante la noche se negará a darle la razón a nadie...

Después se pone con su pistola pero parece que está bastante estropeada...

El predicador recoge su arma del suelo y gira la cabeza hacia Bobby.

---Bueno, bueno, Billy. Ahora te puedo llamar Billy, ¿no?--- le espeta con una mirada desafiante---. Quién iba a pensar que las cosas acabarían así...--- Tras una breve pausa para mantener la intriga, continúa ---Apenas hace unos meses estabas traicionándome y entregándome para que pagara por tus crímenes--- Le dirige una mirada ceñuda...
---Sólo hace unos días, habría dado mi mano izquierda para echarte el guante; hace solo unos minutos has estado a punto de matar a mi hermano--- añade saboreando el instante. ---Sin embargo, hasta es posible que acabe perdonándote---.

El sacerdote se sienta en uno de los bancos del tren, y con calma se pone a meter las balas una a una.

---En verdad, los caminos del señor son inescrutables. Sin embargo, yo no daría un dólar por tu pellejo, Bobby. Estos amigos gastan muy mal genio---, asegura echando una mirada a su alrededor--- y ya has visto que no se andan con chiquitas---.

Bobby se agita entre el fuerte abrazo de Andreijk: ---¡¡Vete a t...!!---
El predicador, sin levantarse, le interrumpe con una patada en la boca.

---Bobby, Bobby... El señor nos manda amar a nuestros enemigos, pero yo no te considero mi enemigo, Bobby--- apostilla a modo de justificación. ---Si nos dices la verdad, salvarás el pellejo. Si no respondes o nos mientes, no esperes clemencia. Y no, no creas que vamos a ser tan estúpidos como para entregarte a un sheriff. A ti te espera la justicia de Dios, no la de los hombres---.

---Cuéntanos, quién te ha mandado a por la caja y qué crees que hay en ella--- y termina con una mirada ceñuda, de estas que dicen "atrévete a mentirme, make my day".

Si nos dices la verdad, salvarás el pellejo. Si no respondes o nos mientes, no esperes clemencia. Y no, no creas que vamos a ser tan estúpidos como para entregarte a un sheriff. A ti te espera la justicia de Dios, no la de los hombres---.

Que vas a hacer, Fisher? Me vas a colgar? Pegame un tiro y acabemos con esto. Yo al menos te deje con pension completa y un techo. Como saliste de alli, Fisher?

estado a punto de matar a mi hermano

Asi que es tu hermano? - Bobby mira el brazo inutilizado de Jeb - Asi que te debio sacar el, eh Fisher? Mira como se lo pagas. Ese brazo ya no podra utilizarlo nunca mas. Siempre nos trajiste mala suerte, Fisher. Lo llevas contigo.

Cuéntanos, quién te ha mandado a por la caja y qué crees que hay en ella

Mandado? Yo soy mi propio jefe Fisher. Los predicadores no entendeis nunca ese concepto. - suspira - 100.000 Dolares. Es una transferencia al banco de Odessa. Pero claro, no podiais dejar que el viejo Bobby se retirase y comprase un rancho, no. Teniais que meter vuestras narices, matar a medio vagon y pegarme un tiro. De verdad, no se a donde se dirige este pais.

Umaekytahp se acerca a Jeb y extiende ante él un viejo paño de piel de ternera, manchado hasta lo inimaginable con tonos de verde y marrón, algún amarillo y algún rojo. En medio coloca varias semillas y hojas de plantas desconocidas para los demás y forma un pequeño montón.

Asiente con la cabeza cuando Ada le trae el agua caliente y vierte un poco sobre las hierbas, dobla el paño y comienza a aplastar la bolsa contra el suelo con todo el peso de su cuerpo.

- Ada, Lava la herida, ¿quieres?

Con la mirada perdida más allá del tren, concentrado en lo que está haciendo mientras le oís susurrar una antigua letanía que produce un efecto relajante en todos vosotros...

- Health ora kabeh
nanging tanpa iku,
kabeh liya punika boten.

A continuación examina con cuidado las heridas, asiente satisfecho ante la meticulosidad de la mujer, extrae de su mochila unas pinzas, las calienta en las brasas y trata de extraer cuidadosamente los fragmentos de metal que pueda haber en las heridas. Luego, abre el paño de nuevo y aplica con la parte de atrás de las mismas pinzas primero y con la mano después parte del ungüento que se ha formado sobre las heridas.

- Quítate la camisa, dice sin mirar a Jeb. Y sí, huele mal. No todo lo que es beneficioso a tu lado huele a rosas...

Rompe en tiras la camisa de Jeb y las utiliza como vendas para poner sobre la herida. 

- Mañana por la mañana, quítate el vendaje y lava la herida con el agua más fría que puedas encontrar. Solo Agua. 

Acto seguido se levanta, recoge sus cosas y los restos de la camisa y se acerca a Isaiah

Tranquilo, ya puedo yo sólo, vosotros atended al resto...

Asiente con la cabeza, le deja una manga de la camisa de Jeb y un poco del agua caliente y continúa hasta arrodillarse delante de Bobby:

- No seré cruel pero seré rápido, hay más gente esperando mis cuidados.

Y realiza algo parecido en las heridas, con precisión pero sin miramientos...

- No seré cruel pero seré rápido, hay más gente esperando mis cuidados.

Bobby apreta los dientes pero no se queja

Ada se aparta de Bobby en cuanto Jhon se pone a curarlo, mientras se va roza el hombro del indio con una mano y le susurra:

- ¿Vale la pena?. De todas formas van a colgarle por esto. - añade señalando a Petunia.

Tras lo cual se sienta en uno de los sitios menos llenos de sangre del vagón y sube a Zebb a su regazo (para envidia de la mayor parte del vagón) y cierra los ojos intentando relajarse mientras acaricia el pelo del niño.

100.000 Dolares.

Las palabras son como magia, apenas Bobby las dice Ada abre los ojos, se pone tensa y aparta la cabeza del niño para poder oír mejor.

Snifff, snifff - Zeke se relaja poco a poco entre los turgentes pechos de Ada. Angelico. - Ada, yo penzaba que laz batallaz eran como en loz cuentoz. Pero he pazado mucho miedo - vuelve a enterrar la cabeza en el pecho de la mujer - Que hare en Odezza? Eztoy zolo y dezamparado. Y la piztola de papa no funciona bien. Dizparaba hacia detraz - dice mientras juega cabizbajo con uno de los collares de la chica y hace pucheritos