Partida Rol por web

El droide vuelve a pitar como coordinado con la caida de la piloto y

Sujeto: Aelena Cassan. CHECK

Identidad confirmada jefe Alfort. Atención, presión baja. Desmayo inminente... Advertencia extemporanea BIP BIP

Recién en ese momento, los clones bajan sus armas. Sly sin embargo, parece recuperarse inmediatamente, cual si solo se hubiera tratado de un desvanecimiento...

Cherry, atenta en todo momento al Bothan, al nervioso robot y a la pobre Sly, se anticipa al desmayo y, tras ver que se recupera, la ayuda a reincorporarse.

-Toma, chupa esto, te ayudará. Le dice a la vez que le ofrece una piruleta, típica gominola que Lyllian lleva en el bolsillo, aunque la gente no sabe a ciencia cierta que es ni de donde lo saca.

Tras entregarla, se da cuenta de que su bolsillo está vacío. -Vaya, era la última. Tendré que pedir más después de la reunión y de paso llamaré a mi maestra para explicarle lo del incidente. Se recuerda en voz alta.

El bothan parece algo avergonzado -de cumplir con su deber- y se calma al ver que Cherry atrapa y asiste a sly con premura.

Sin embargo, su rostro muestra que la interpelación de Gon no le ha hecho ni un poco de gracia...

Señora, está confirmada su identidad. Le ofresco mis disculpas por el exceso de "precaución" del droide. Ha debido ser un fallo en sus protocolos de escaneo retinal... Le recomiendo pasarse luego de la reunión que les espera por la sala médica. Yo por mi parte, nada más tengo que hacer en relación a ustedes. Sargento, puede escoltarlos hasta el puente de mando. 

El bothan abandona a los pilotos sin darles más explicaciones que su espalda. Lo siguen el droide y TODOS los clones de asalto, menos el Ralf que asiente a la orden del Jefe, y encara a la compuerta izquierda.

Ya en el turboelevador Ralf espera a que esten todos en su interior.

El habitáculo cilíndrico parece tener una enorme capacidad, pudiendo transportar en un solo viaje a un escuadrón* completo.

Vamos a demorarnos cerca de tres minutos. Ahora mismo estamos en los niveles centrales del Cazador... Y nos dirigimos a los niveles superiores... Es decir, al "techo" de la nave. (Silencio) ¿Se encuentra bien señora?

El resto de los pilotos parece guardar silencio tras los incidentes cargados de tensión que vivieran la bahía de embarque...

El cereano se habia mantenido callado durante todo el trayecto, y durante la situacion de tension que conlcuyo con el leve desmayo de una de las pilotos. El sabia que habia cumplido su mision al pedir los holocrones de los pilotos que pudo encontrar, pero tras los inconvenientes que habian tenido los demas pilotos considero acertado el accionar del jefe de seguridad. Era una lastima que aquella mujer tuviese tan poca resistencia fisica... ya que si de verdad queria ser piloto, tendria que aprender a soportar cosas mucho peores que una simple aguja en el brazo.

Tras ingresar en el turboelevador que los llevaria al techo, el cereano verifica que esten todos y les dice unas pequeñas palabras.

- Por favor tratemos de mantener la calma, ahora ya estamos todos reunidos y seguros.

El Jedi miro a su alrededor para contemplar a sus compañeros, y se detuvo un segundo de mas en Aelena, para ver si estaba recuperando el color. Tras confirmar que todos estaban algo mas relajados, el jedi volvio a mirar al escolta del grupo como confirmando que sigamos adelante.

Mientras mantiene la mirada del bothan, Aelena nota que le fallan las piernas y se le va la cabeza, mientras observa como la sangre (SU sangre) entra en el receptáculo de análisis. Se tambalea y se lleva la mano a la cabeza, mientras se apoya en Lyllian, que ha acudido a sostenerla. Con una sonrisa ladeada, anuncia en voz baja, sin dirigirse a nadie en particular "Estoy bien" Casi como un autómata, acepta la chuchería que la aprendiz Jedi le ofrece con un "gracias" apenas formulado... "Una Jedi con estimulantes... joder, que grupo" Mas repuesta, sigue a sus compañeros hasta el turboascensor. En su rostro se puede ver claramente que esta muy azorada por la situación y bastante enfadada por su debilidad.

A la pregunta del sargento clon, responde con un poco de severidad, pero sin animo de ofenderle. "Si sargento, me encuentro bien, gracias por su interes." Mantiene una mirada indiferente ante las palabras del jedi cereano.

Las compuertas se cierran con todos dentro, y la palabra del Sargento clon de que las pertenencias de los que fueran desviados del punto de recolección serían traídas.

Ralf opera su intercomunicador y se lo escucha decir con voz seca Estamos en camino señor.-

Ante vosotros se abre una basta estancia, llena a rebosar de naves, pilotos y personal militar. Aunque ya lo conociais por ser el lugar donde abordasteis la nave, ahora lo veis desde el punto de vista opuesto, desde el punto de vista de la tripulación. Vuestros uniformes de vuelo, recien estrenados, os causan cierta incomodidad... que tambien puede ser achacada al nerviosismo.

Frente a vosostros varias hileras de relucientes astronaves y cazas estelares, tanto monoplazas como biplazas. Durante unos minutos, esperais a que os den instrucciones... El Sargento Ralf, siempre diligente, os avisa de que un oficial se aproxima a vosotros, con su marcial estilo.

"¡Atentos!¡Fir-mes!"

Avanzando con paso calmado y tranquilo, el capitan Paora, su segundo y el instructor jefe se reunen con vosotros. Mientras sus subordinados esperan, Paora se acerca a vosotros y os pasa revista con una mirada critica... Solamente se detiene en tres ocasiones: Frente a Lannister, Williams y Rammius.

Satisfecho con su inspección, vuelve junto a sus oficiales, que cruzan unas palabras con él. Seguidamente, el Segundo Rammius se acerca a un terminal de datos, comenzando a dar ordenes. Mientras, el Instructor da un paso al frente, hablando a la vez que  consulta una tableta de datos...

"A continuación voy a pasar a leer las asignaciones de las tripulaciones de vuelo mono y biplaza..."

Aymee aguardó ansiosa el momento de la inspección, una de esas cosas que ella odiaba pero que sabía perfectamente que tenía que consentir y acostumbrarse a ella. Así que simplemente dejó que por su cabeza pasaran los momentos de entrenamiento, más que nada porque no quería olvidar ningún detalle.

-Parece ser que es verdad...

Miró a sus compañeros, todos parecían ansiosos por comenzar aquello y ella, aunque no estaba muy segura, una cosa era cierta: a algo había ido a allí y no sería ésta vez como la anterior, no claudicaría aunque perdiera la vida en ese intento. Estaba parada muy derecha, sus apéndices se movían suavemente como el viento ligero que mueve una cabello humano, quizás el único indicio de que estaba un poco nerviosa. Observó los cazas y se dijo que alguien iba a necesitar compañía y sin duda esa era ella.

Cherry llegó para formar justo a tiempo, acabando de subir la cremallera en el momento en el que el capitán entra en escena.

Haciendo el saludo reglamentario, el nerviosismo del momento invade a la jedi y empieza a inquietarse por dentro. La aproximación e inspección del oficial sólo hace que agudizar ese nervio del cual casi no puede contener.

Cuando ve que el capitán pasa de largo, logra calmarse un poco y concentrarse. "Que demonios te pasa, Lyllian? Es que no puedes esperar ni unos minutos a subir a una de esas naves?"

El instructor Venom da un paso al frente y parece que va a anunciar de una vez que nave le toca a cada piloto.

Ligeramente más alegre, la corelliana espera oír su nombre y asignación. "Al fin, al fin!"

Aelena templa el paso cuando las puertas de la cubierta de vuelo se abren para recibirla. Con un ejercicio de autodominio excepcional, recupera el aliento, alisa se uniforme y avanza a la formación marcando el paso... Sin embargo, sus ojos lanzan destellos grises en todas direcciones, mientras analiza y toma nota mental de todo lo que ve a su alrededor...

"Es... es increible... ¡Que cantidad de naves! No sabia que un Destructor Estelar tuviera esta capacidad... Si la Republica tiene muchos como estos, la guerra terminara pronto..." El rostro de la piloto traiciona sus emociones, mientras se coloca en la fila, en posición de firmes... "Sin embargo, la Federación de Comercio y los Separatistas tienen una ingente cantidad de naves droide... y la Armada Republicana es relativamente novata en estos lares..."

Sly cierra los ojos momentaneamente, para alejar los pensamientos de su cabeza. Cuando los abre de nuevo, lanza un par de miradas a su derecha y a su izquierda, sonriendo francamente a todos sus camaradas... y disimulando antes de que el Capitan Paora se de cuenta...

"Cherry esta tan nerviosa como yo... y parece que Aymee y el resto de los jedi no son inmunes a ese sentimiento... Excepto, quizas, el cereano... que no ha  abierto la boca todavia..."

Cuando el instructor pasa lista y asigna los destinos, la piloto de Naboo cruza los dedos, mientras entorna levemente los ojos... para abrirlos como platos y sonreir de oreja a oreja al saber cual es su asignación...

Tristán esperaba que todo fuera una maniobra de prueba para ver cuanto tardaban en ponerse los pantalones, pero no lo era, parece que por fin iban a poder volar, el lugar era impresionante, ya había estado allí antes pero ahora parecía todavía mejor, no podía dejar de mirarlo todo.

- Guau, esto es genial

Camino a paso firme, tranquilo y calculador. Miro a los pilotos desacostumbrados a tamaña mega estructura de combate que el Cazador representa.

Veo, sin animosidad, por curioso que parezca a la piloto de naboo... ¿Mi nemesis como comentara mi padre? Nah, niego levemente con la cabeza. Mis habilidades de vuelo son superiores.

Me auto tranquilizo.

Cuando pasan lista de inspecciòn, miro a un punto ciego al frente, sin reparar en mi capitán. Casi es màs padre que el mio propio... Medito, y al pestañar borro cualquier idea absurda de mi cabeza.

Admiro la cubierta de vuelo del "Cazador". Ha sido mucho tiempo anhelando y esperando este momento, como siempre la vida nos plantea elecciones y decisiones. La Fuerza nos guía y nos ayuda a tomar esas decisiones.

Cierro los ojos durante unos segundos. Aunque el sonido sigue llegando me concentro en la cuestión, sopeso mis pros y contras, escucho mi instinto y decido. Vuelvo a abrir los ojos, expreso una leve sonrisa y por fin me pronuncio.

Por esta vez el asiento de piloto podrá esperar, me ofrezco para un biplaza.

La voz del instructor es clara y precisa, dando la entonación justa y apropiada para que se le preste la debida atención:

"Equipo Verde: Cassan, verde 5; Finder, Verde 2; Sebue, Verde 4; Elaridan, Verde 3; Argus, Verde 6. Lider Verde para Stout y Dalmant."

Venom lanza secas miradas a medida que lee los nombres y hace indicaciones sutiles hacia los cazas que esperan pacientemente a sus pilotos...

"Equipo Cian: Lannister, Cian 5; Ke, Cian 3; Mad, Cian 2; Vandam, Cian 4. Lider Cian Williams y Rammius. Bien. Para esta misión pilotaran los nuevos cazas Z-95 Headhunter y una versión biplaza; el Z-95B Hammerhead. Supongo que ya los conocen... o, por lo menos, han oido hablar de ellos."

Con los brazos cruzados a la espalda, el Instructor se yergue, toma aliento y os grita:

"¡¡A vuestras naves!!. Vuestros droides de astronavegación ya tiene programadas las coordenadas de salto y los parametros de vuelo. Recibiries instrucciones y objetivos en vuelo. Buena suerte"

Una vez asignados los vehiculos y con estas ultimas palabras, Venom se encamina tranquilamente hacia el Puesto de Control desde donde se supervisan los despegues y aterrizajes, cerrando el cortejo de oficiales que se dirigen a sus puestos.

Junto a cada una de vuestras naves, un equipo de tecnicos y mecanicos pone a punto los sitemas de la nave y hace las ultimas comprobaciones pre-vuelo. Al punto, os ayudan a instalaros en la cabina y a ajustaros el equipo, mientras la unidad R2 asignada a cada naves os saluda con su carcteristica jerga de pitidos, silbidos y luces parpadeantes.

Apenas terminais de acoplaros a los mandos de vuestra nave, el comunicador chirria y en vuestros oidos zumba la voz del Control de Vuelo:

"Atención. Aqui Control de Vuelo. Realicen ultima comprobación de sistemas. Enciendan motores ionicos. Vector de salida: Y-12. Despejado. Repito, despejado. Tienen autorización para despegar."

Los mecánicos y técnicos hacen las últimas observaciones. Los oficiales llaman a sus subalternos a sus puestos de combate, como lo indica el procedimiento de despegue.

Como es costumbre en aquellas ciudades voladoras, la partida de un grupo de cazas hace que parte de la cubierta de vuelo parezca un hormiguero...

Las catapultas no hacen falta en este ejercicio planificado, quizá sì en combate real...

Nuestro turno Maestro Willams. Será un honor tener un jedi de artillero. Vamos a darles! Digo enèrgico arengàndolo y troto hasta nuestra nave a paso resoluto.

Check? Digo al mecànico de mayor rango, haciendo alusiòn a si todo se encuentra en su sitio, esperando un gesto con la cabeza como respuesta.

Luego dar un brinco para tomar mi lugar frente a los comandos y verificar que todo estè como corresponde. Me coloco mi casco y consulto a Ben por el comunicador Listo compañero? Es retòrico. Sè que estarà listo. Luego al resto del grupo Equipo Cìan, preparados?

Pienso en lo curioso de que nos tocara el color azulejo y sonrìo una milèsima de segundo antes de quedarme nuevamente concentrado con el ahora Azul no tan claro como el gris celestino de sus hermosos ojos... Aùn imagino que volaràs a mi izquierda. Mmm... Freno a fuerza de voluntad mi mano derecha cuando intenta buscar en mi pecho el holo pendiente que tantas veces he observado, casi adorado en la oscura soledad del espacio, frente al ventanuco de mi camarote... No. Importa el aquì y ahora.

Chequeo de sistemas completo. Informo por canal a mi artillero y al resto de mi grupo.

Sentado en mi asiento de copiloto examino los controles de armas y sensores mientras Rammius ejecuta las últimas comprobaciones para el despegue. Un despegue por cierto insuperable, yo no sería capaz de hacerlo mejor ni de lejos. De hecho no sería capaz de igualarlo. Val demuestra ser un piloto de primera, probablemente un auténtico as.

Me permito felicitarle por el canal privado del Z-95: Buen despegue.

Inmediatamente después me concentro en lo más importante, empiezo a revisar los esquemas de la nave para conocerla a fondo y me pongo en contacto con el droide para pedir información y valorar sus respuestas, ya se sabe que si no se limpian periódicamente pueden tener problemas. Especialmente los astrodroides que son más "temperamentales".

 Lyllian asiente al oír su nombre, indicador y nave que le corresponde.

Mira a su compañera de vuelo, Aymee, y le guiña el ojo. Una vez empieza la desbandada, la corelliana se acerca a su Z-95 modificado.

-Vaya, había oído hablar de los Z-95, pero nunca de una versión biplaza.

Para cuando se da cuenta, su compañera se está sentando en el asiento del piloto. Cherry se encoge de hombros. "Ya tendré tiempo de pilotar. Vamos a disfrutar del paseo".

La chica se acomoda en su posición y chequea el sistema de comunicaciones.

-Aquí Líder Verde, comprobando comunicaciones. Equipo Verde, reporten cuando salgan del hangar.

Luego echa una mano con lo que puede a Aymee para que pueda concentrarse en pilotar.

-A por ellos Aymee! Exclama Lyllian alzando el pulgar, dando ánimos e indicando a la vez que todo está listo.

Durante la comprobación de los sistemas de la nave, Lyllian conecta la frecuencia de verde 5.

-Nos vemos ahí afuera, Sly. A través del comunicador se nota la alegría que siente la corelliana.

-La leche... se oye con voz ausente y asombrada, coincidiendo con el despegue del biplaza del otro equipo. -Sly! Esta vez la voz suena algo más alarmante, aunque Cherry intenta que no suene tan grave. Al fin y al cabo, confía en las aptitudes de la rubia. -Ten cuidado con Rammirus. Es bueno de cojones...