Partida Rol por web

Después de que vuestros antepasados tocaran la gran roca, comprendieron que debían emigrar, ya que no sería posible la coexistencia de muchos líderes naturales. En concreto, vuestras almas emigraron al norte, y allí es donde os encontráis en la actualidad.

MÁS ALLÁ DEL MAR DEL NORTE, 60000 AÑOS DESPUÉS (aprox)

Lleváis aquí desde siempre. Como dirían los que tienen más de 40 años, "de toda la vida". No obstante existen algunos contratiempos. Uno de ellos es el frío, pero para eso tenemos ropas de abrigo. Otro contratiempo es que el alimento escasea: el frío hace que pocas plantas germinen, de las cuales no todas son comestibles, y además los animales también son más fuertes.

Pero sin duda el más importante son los intrusos. Esos monstruos de caras planas y entrecejo prominente. No son inteligentes, pero sí astutos. No manejan las herramientas tan bien como nosotros, son forzudos y tienen manos feísimas, parecen monos. Además, se llevan a nuestras mujeres para reproducirse y a nuestros hijos para ser más numerosos. Son una plaga a extinguir.

Además, en una partida de caza os los habéis encontrado. No de repente, pero sí de frente. ¡Y os han visto también!

MÁS ALLÁ DEL MAR DEL NORTE, 60000 AÑOS DESPUÉS (aprox)

Lleváis aquí desde siempre. Como dirían los que tienen más de 40 años, "de toda la vida". No obstante existen algunos contratiempos. Uno de ellos es el frío, pero para eso tenemos músculos fuertes y cuerpos grandes (aunque no somos muy altos). Otro contratiempo es que el alimento escasea: el frío hace que pocas plantas germinen, de las cuales no todas son comestibles, y además los animales también son más fuertes.

Pero sin duda el más importante son los intrusos. Esos monstruos con bultos por toda la cara, en especial debajo de la boca. No son inteligentes, pero sí astutos. No son tan fuertes como nosotros, son larguiruchos y tienen manos de espectro. Además, se llevan a nuestras mujeres para reproducirse y a nuestros hijos para ser más numerosos. Son una plaga a extinguir.

Además, en una partida de caza os los habéis encontrado. No de repente, pero sí de frente. ¡Y os han visto también!

El odiado enemigo se ha enfrentado a nosotros en más de una ocasión. Ahora era el momento de ser inteligente. De ser consciente de la situación. Con un gruñido sonoro, les hago una señal a los compañeros para que me sigan.

El terreno es liso para todos los jugadores. Abunda la maleza, pero no de tipo selvática, más bien arbustos y dehesa. También hay árboles por la zona, pero no a todos podéis trepar, lo veréis automáticamente. Aunque no estais en uno de ellos, la zona está plagada de bosques.

Los neandertales nos han visto y se aproximan. Es hora de la batalla.

Ellos son más fuertes, pero nosotros somos más ágiles y más inteligentes.
Nuestra mejor arma es la capacidad de hostigarles. Debemos aprovecharla. Nuestras armas a distancia son más precisas, más ligeras, más sofisticadas y admiten más de un uso. Esa debe ser nuestra táctica: La vegetación nos servirá de escudo. Dividamonos en dos grupos para no perder nunca distancia de tiro y si es necesario cada grupo deberá disparar contra los atacantes del otro grupo.

Mierda, nos han visto. Creo.

Instintivamente, Rukk se agacha, y hace un gesto a los demás para que hagan lo mismo. Esos animales son fuertes y agresivos. La tribu lleva todas las de perder si estalla un conflicto cuerpo a cuerpo. Mira a los otros, ansioso, intentando averiguar sus intenciones, dudando entre alejarse de la forma más discreta posible o... ¿o qué?

Sois y son 4. Contando a los PNJ, podéis ser tantos como queráis, la idea es que lo que vais a vivir está pasando en todas partes.

Asintió Clugg a las palabras de la mujer, esta tenía algo de seso y servía para algo más que montarla. Sonrió mientras ponía una flecha en su arco de cuerno, hoy iban a poder matar a unos cuantos de esos infames seres. Hagamoslo así, Rukk quedate aquí y haz que te vean, arrojales piedras mientras retrocedes. El resto nos moveremos entre la hierba por los lados y cuando los tengamos a tiro los abatiremos por la espalda. 

Sonrió con un punto malvado Estarán desangrandose antes de saber que pasa.

Si nos dividimos en dos grupos para dispersarnos, Komut viene conmigo y Rukk retrocede sin alejarse demasiado de Clugg.

No nos conviene dividirnos más. En un uno contra uno no tenemos nada que hacer

Mi intención es separar el grupo en tres, para que si persiguen a uno, los otros dos grupos puedan apoyar, sea con proyectiles o acosando con ataques al enemigo, mientras el grupo perseguido hace de cebo/señuelo.

Asiente el cazador y se despide con una última sentecia No dejeis a ninguno vivo, su sangre será el festín de nuestros dioses.

Y agachandose con el arco presto corre a esconderse entre los matorrales.

Komut sigue a Byla ... ella es buena en esto y no tiene sentido contradecirla. Además, con su personalidad, las cosas se ponen dificil si uno no le hace caso. Mientras se mantiene todo lo agachado que su columna le permite, va seleccionando la mejor piedra y la coloca en su honda, por si es necesario.

Antes de que Rukk pudiera negarse, Clugg había desaparecido tras unos matojos, impetuoso como siempre. El resto parecía dispuesto a hostigar a aquellos odiosos seres. Nada que ver con lo que Rukk hubiera preferido: una retirada discreta, recolectar unas cuantas bayas y raíces y de vuelta a la seguridad de su gran cueva.

Tragó saliva con sonoridad. No le gustaba el papel que le habían otorgado, en absoluto. Ni siquiera quería haber participado en aquella partida de caza. Era demasiado viejo para todo aquello...

Tras unas hierbas altas asomó una cabeza, cautelosamente. Un hombre se irguió casi completamente, mirando en dirección a los corpulentos seres que tanto detestaban. Parsimoniosamente, cargó una piedra en su honda y comenzó a voltearla sobre su cabeza, destinada al primer enemigo que osase moverse. Mientras, da lentos pasos hacia atrás, intentando alejarse del lugar.