Partida Rol por web

La moto se movia a gran velocidad entre los arboles, el bosque nevado era bastant agradable a la vista, pero dejaba intuir que podria ser peligroso por la noche, en especial para alguien que no lo conociera, el cual no era el caso de Manuel. El hombre responde a la chica:

- Vaya que interesante, pues si podria ayudarte si, pero ten en cuenta que a lo mejor no es tu unico poder, aun asi te ayudare en lo que pueda, pero si has sido capaz de hacerlo es profundizar en ello.

Sonrie y dice:

- Bueno tanto como nosotros tres solos no, el jefe es el que es fuerte en realidad, pero Janet, bueno eso es caso a parte, le llaman la artilleria, ummm sabes lo de Basora cuando bombardearon la ciudad para sacar a alguien de alli? pues no fue el ejercito fue ella la que fue saco a los VIPs y casi destruye la ciudad, si le das tiempo es un monstruo con su magia y si, con su caracter tambien jajajaja

Mientras iban a gran velocidad la chica se da cuenta de algo, puede ver con unos prismaticos que le habia dado Manuel una estela de humo no muy lejos de alli no asciende desde el suelo, sino que esta en el aire, al seguirla se da cuenta que es el helicoptero que habian usado para llegar, parece que uno de sus motores esta hechando humo

-Este sitio es increíble ¿hm?- comentó más para sí  misma que para Manuel, quizá incluso cuando se acostumbrase a su nueva naturaleza emergiente podría permitirse pasear por el bosque sin problemas-¡Si yo lo tengo en cuenta!A saber qué habilidades tengo. Me fío de ti para mantenerme a raya- comentó siguiendo la conversación sin poder evitar una expresión de suprema perplejidad al tocar el tema de Jeanette- ¿ella sola?... joder con la madrastra de Mulán, vamos, que nos puede borrar del mapa a la mayoría- entornó los ojos inclinándose hacia delante- ¿eso de ahí no es humo?- señaló- ¡Los hemos encontrado!

Manuel sonrie y dice.

- Bueno su magia es mas lenta que los que somos mas de accion, asi que en cierta forma podria decirse que se compensa un poco, aunque claro, nunca la he visto luchar.

Cuando la joven señala este mira y dice.

- Mira, el helicoptero

Efectivamente mpuede verse el helicoptero que iba a gran velocidad, parecia que estaba estrellandose, tenia un motor dañado y por fortuna o desgracia se dirigia a gran velocidad hacia el castillo.

- Mierda, tenemos que llegar pronto, ahi tienes una radio, usala para comunicarte con Janet, esta en la frecuencia 25, dile que el helicoptero es de los nuestros, que lo detenga, porque lleva a los nuestros no?

Decia meintras giraba la moto de nieve y se preparaba para dirigirse hacia el castillo de nuevo

-Si me lo preguntas no me das ninguna seguridad- se quejó medio en broma y tanteó hasta agarrar la radio, aferrándose a Manuel con la mano libre cuando la moto viró y la inercia amenazaba con tirarla al suelo.

-Frecuencia... 25-nunca se le había dado especialmente bien esos cacharros y su vida habitual no requería su uso frecuente así que tardó unos instantes en hacerse con él- ¿Hola? ¿Janet? Aquí Nyara y Manuel desde la moto de nieve...cambio.- hizo una pausa hasta que oyó respuesta- Janet, el helicóptero es de los nuestros, tienes que detenerlo o se estrellará contra el castillo. Repito. Detenlo o se estrellará con el castillo. Es posible que haya gente herida en el interior, necesitaremos al doctor. ¿Lo tienes?, cambio - hizo una nueva pausa, Janet era una mujer bastante aguda (o al menos punzante) seguro que había captado lo que había dicho aunque la estática habitual que enturbiaba el audio se lo pusiese un poco difícil- Volvemos al castillo,cambio, digo corto.

Se agachó refugiándose detrás de Manuel aunque lo hizo más por instinto que por pura necesidad.

-¿Así ha valido?- preguntó esforzándose en hacerse oír como hasta el momento, dejando la radio en su lugar y volviendo a agarrarse a Manuel de un modo menos "agresivo" al usar ambas manos.

Manuel sonrie y dioce:

- Si, ahora agarrate fuerte y no pierdas de vista el helicoptero, vas a ver algo increible ay lo veras.

La moto se desplazaba a gran velocidad, cuando de repente puede verse como una masa nubosa se comienza a crear alrededor del helicoptero, el viento alrededor del aparato parece que comienza a sostenerlo y a detner su movimiento

- Mira eso es magia, esta controlando el viento, con cierta concentracion y practica alquien que domina el viento puede hacerlo tambien.

Entonces el helicoptero practicamente se queda parado en el aire y una nuve de color morado lo rodea fornado una cupula a su alrededor que hace descender el aparato hasta el patio de armas

Nyara obedeció aumentando la fuerza con la que se agarraba a Manuel, quizá en otro tiempo habría disfrutado del momento, quizá aún lo hacía pero fuera como fuese, no era su prioridad. Estiró el cuello al asomarse para seguir viendo al helicóptero soltando una maldición cuando se vio envuelto en esa especie de burbuja mágica en la que las leyes de la física no existían.

-Madre mía, ¡Manuel, es imposible!-replicó a su comentario sobre el control elemental del viento pero estaba claro que era posible y que era cada vez más posible y real según se acercaban al castillo-¿Qué puedo hacer cuando lleguemos?- le dio una palmada en el torso a modo de regañina-¡tío, te van a echar la bronca por mi culpa! ¡Se supone que guardaríamos el secreto!

Manuel conducia y dice:

- No te preocupes, Janet no va a decir nada y con tal de que lleguemos no pasa nada, ademas nadie ha dicho que no podais salir del castillo, no es recomendable eso si de noche, pero podeis salir.

La moto llega rapidamente a la puerta y entra en el patio de armas

Tras dejar la enfermería Nyara fue a su cuarto, tomando una chaqueta y unos guantes más por costumbre que por urgente necesidad y dejó el castillo sin cruzar palabra con nadie. En el patio había visto las motos de nieve pero ella no sabía llevar una por lo que optó por ir andando hacia el bosque, con las manos en los bolsillos de la chaqueta.

La nieve crujía al pisar y hundirse el pie en la misma dejando un sendero de pisadas como si de un caminito de migas de pan se tratase. No tardó en tararear para sí, intentando alejar todas esas preocupaciones y malos recuerdos que la convertían en una amargada, distrayéndose con las vistas y buscando las marcas de la moto de nieve que Manuel había llevado el día anterior con ella como acompañante.

¿Cómo se supone que voy a ver qué habilidades puedo tener?

Nyara camina por el bosque y tras apenas unos segundos distingue algo se acerca y puede contemplar el rastro, parece que es bastante claro para ella, algunas ramas estan rotas y tambien puede ver claramente los surcos, asi que puede seguirlo sin problemas hasta el lugar en donde se detuvieron cuando vieron la aeronave acercarse en llamas

Siguió el rastro de la moto de nieve, pisando las hendeduras en el terreno que la moto de nieve había hecho el día anterior. Cuando llegó a las marcas que giraban en redondo de regreso al castillo. Inspiró hondo dejando que el aire helado llenase sus pulmones y pensó en hielo. Hielo extendiéndose por todas partes hasta convertir su alrededor en cristal, llegando tan lejos como pudiese hasta notar los estragos de forzar aquel poder.

Nyara se concentra en el hielo, en un primer momento unicamente nota un leve escalofrio y poco despues ve como a su alrededor el hielo comienza a formarse, no tarda mucho en ver como todo comienza a congelarse no muy lejos de ella, es como si empezase a extenderse de forma circular justo siendo ella el centro de todo. Tras casi 2 minutos siente como se siente cansada, muy cansada, aguanta un minuto mas pero termina casi sin aliento, al mirar se da cuenta que al menos todo en 10 metros alrededor suyo se ha congelado

Se tambaleó presa del agotamiento y se arrodilló apoyando las yemas de los dedos en la placa de hielo que se extendía de forma increíble varios metros convirtiendo en aquel trozo de bosque en cristal helado.
-...- rió y suspiró al mismo tiempo, una carcajada limpia completamente formada por aire y así estuvo un buen rato, contemplando los resultados de su propia creación. Se miró las manos y tragó saliva, quizá lo de crearse su propio castillo helado no era tan imposible como podía pensar. Complicado, sí, pero no imposible.

Apuntó con un dedo hacia el tronco helado de un árbol y cerró un ojo, abriéndolo casi al instante para sacudir la cabeza consciente de que así no se "encontraría a sí misma".

Unos pasos se escuchan, unos pasos pesados y tras apenas unos segundos aparece un hombre, se trata de Michael, el hombre que llego con los japoneses. Apenas llevaba una camiseta de manga corta bastante ceñida que dejaba entreveer sus poderosos musculos, el hombre llevaba un pantalon negro y unas botas militares, al ver a Nyara se sorprende y la mira:

- Vaya, asi que tu eras la que ha congelado esto...no me imaginaba que entre los nuevos pudierais hacer eso

Se queda mirando unos segundos mientras piensa:

- Si no me equivoco ella es la que llego con Manuel, o era la otra, no lo se, creo que no, que es ella.

El hombre sigue caminando y dice:

- Ten cuidado si vas por el bosque, despues de comer el director creo que quiere que vayais a un sitio donde podreis aprender algo mas sobre vuestras naturaleza, el templo le dicen aunque en verdad solo es una cueva, deberias ir con los demas

El hombre seguia caminando no tenia intencion de parar a Nyara ni decirla nada mas, pero si que atenderia si ella queria decirle algo

Se estremeció sobresaltada por la llegada de Michael y, durante varios segundos, solo pudo quedarse quieta, mirándole con verdadera alarma pero incapaz de reaccionar... igual que un ciervo deslumbrado por un vehículo mientras cruzaba la carretera en plena noche.

Di algo, no te quedes como una idiota ahí parada.

-¿No vas muy fresco?-desde luego no era lo más hábil ni ingenioso que podría haber dicho pero no dejaba de ser una pregunta razonable. Se incorporó y, superando el mareo momentáneo, caminó hacia el extraño tipo. Le había visto el día anterior, pero no se había molestado en preguntarle su nombre entre el caos del accidentado helicóptero... y aunque su curiosidad le empujaba a acudir al lado de él en busca de una forma de ocupar su mente lo que más la atormentaba era la posibilidad de que se chivase sobre lo que hacía en el bosque.

-¿Dónde vas?

Michael sin detenerse mientras camina dice:

- No demasiado, hay que estar preparados para el frio ademas hace un par de minutos estaba mucho as abrigado y a donde voy, pues a hacer un poco de ejercicio matutino, hay que mantenerse en forma.

El hombre seguia caminando y dice:

- No muy lejos de aqui hay unas cataratas que dan a un pequeño lago de agua helada y algo mas escondido hay otro lago mucho mas pequeño de agua caliente, siempre es de agradecer cuando sales de nadar de agua helada calentarte un poco aunque me da que a ti no te importaria demasido el frio