Partida Rol por web

Aunque Templario esperaba a que la Esfera de Guerra actuase, la estaba apuntando no fuese que le diese por ponerse violenta. Cosa que hizo.

Se acercó hasta estar a un par de metros y antes de que el villano héroe blindado actuase, esta disparó a bocajarro. Por fortuna para Templario atravesó su armadura. Por desgracia para él había notado que no disparó con toda la potencia que podría haber puesto.

El plan era una buena idea, pero yo desde luego le veía lagunas a eso de que Obscure se hiciera pasar por un repartidor cuando yo iba a su lado. Sentí unas intensas ganas de darle una colleja cuando dijo aquello de que traíamos un paquete para su jefe, más que nada, porque cualquiera en su sano juicio se preguntaría qué hacía yo ahí. 

- Bueno, venga, no traemos un paquete pero queremos hablar con vuestro jefe. - Los demás ya estaban en sus puestos y era una estupidez andarse por las ramas. - Venimos desarmados y en son de paz. ¿Podríais avisarle?

Lo primero era intentarlo por las buenas. 

- Y no me digáis eso de que no quiere recibir visitas, que está muy visto. 

En honor a Videshee, o por algún otro motivo, no dijeron que su jefe no quería recibir visitas. En cambio dijeron.

Habéis sido advertidos, ahora seréis eliminados.

El acento seguía quedando muy mecánico, pero muy entendible. Al igual que lo que pretendían, que estaba claro que iban a empezar a disparar.
No obstante Videshee ya se lo esperaba, por lo que estaba preparada.

En lo alto parecía escucharse también algo de jaleo. Alguien se debía estar divirtiendo.

Si hubiera imaginado que nos iban a dejar pasar sin problemas no hubiera dicho a los demás que entraran por otra parte que no fuera la puerta principal. 

- Nadie se toma en serio esto de que sólo quiero hablar. Luego que si eres una villana y que no se qué... 

Yo tenía la sensación de que estaba hablando con dos robots que alguien controlaba, al menos, su voz tenía ese deje, pero no creía que fuera posible encontrar el "Off" para desconectarlos en aquel momento. 

- Que sepas que lo que les pase a tus juguetes es sólo obra tuya, por borde. - Dije pensando que su dueño me estaría escuchando. 

Así, antes de que fuéramos nosotros los que nos comiéramos el primer golpe, traté de usar lo que mejor me venía en aquel momento, que era precisamente la puerta que los "vigilantes" tenían a su espalda. 

Templario decidió jugar un poco con la esfera, y disparó sin dudar a los repulsores o a los propulsores o al cacharro que hacía que flotase, con un poco de suerte podía argumentar que el armatoste "se cayó" accidentalmente de las alturas. 

—Es que no quiero que me echen la culpa otra vez de fastidiar la infiltración...— murmuró entre dientes. 

El clon se asomaba cautamente por el recibidor, mientra el original empezaba a subir las escalera, cuando ambos escucharon ruido como de metal y cristal degarrandose, seguido de un algo parecido a un gran peso cayendo al suelo, para acabar con lo que sin duda eran disparos. Todo eso en la dirección en que debería estar la entrada al edificio. Por lo que sabían Videshee y Obscure estaban allí.

Roxanne estaba extrañada de no ver a nadie dentro del edificio. Pero mientras se pensaba si entraba a mirar más detalladamente o no escuchó ruido en las alturas, al parecer Templario se estaba divirtiendo, y justo ato seguido escuchó también jaleo abajo.
El tema de entrar de manera sigilosa y sin violencia parecía no haber salido muy bien.

El ataque de Videshee casi coge por sorpresa a los drones, pero estos fueron rápidos al escuchar arrancarse la puerta de sus goznes y evitaron que les aplastase. 

Sin pensárselo abrieron fuego, cada uno de ellos a uno de los Omegas. Pero los héroes estaban también preparados y esquivaron las ráfagas mortales.

La pelea había empezado, aunque no parecía haber dudas sobre el resultado.

Después de aquello sólo quedaba la violencia gratuita, así que Obscure transformó sus brazos en cuchillas y los alargó el par de metros que le separaban de los drones. Pero a pesar de sus intentos, aquellas cosas eran bastante ágiles. Por lo que evadieron su ataque con insultante facilidad.

Mierda. Esto van a recordarmelo durante mucho tiempo. Me lo veo venir.

No había mucho más que hacer salvo seguir peleando.

Templario tuvo buen ojo a la hora de disparar. No es que hiciese mucho daño, pero al menos logró incapacitar el sistema de levitación de la esfera de guerra. La cual perdió su capacidad de volar que no fuese dirigiendose hacia abajo. Claro que estando a aquella altura, el abajo estaba...muy abajo.

Un poco más abajo de la azotea Roxanne seguía subiendo por la pared del edificio cuando vió pasar una Esfera de Guerra a toda velocidad. A toda velocidad que le permitía la gravedad, claro esta. Al mirar hacia arriba pudo ver a Templario encogerse de hombros de manera inocente. Muy inocente.

Mientras abajo, sí el muy abajo que comentábamos, Videshee y Obscure se las veían con dos drones. O al menos lo hacían hasta que una Esfera de Guerra, casi con toda seguirdad la que habían visto merodear por la terraza, cayó de repente encima de uno de ellos. Aplastando sin remedio tanto al drone como a la propia esfera.

Ya sólo quedaba un enemigo. El cual no parecía nada impresionado con lo que acababa de suceder.

El tremendo estrépito les pilló por sorpresa.

–  Vaya. Pues si que son rápidos estos montado fiestas. – Fue lo primero que pensó el verdadero Worm, con una mezcla de admiración, sorpresa y molestia.

Suspiró, echando el aire de manera sonora por la nariz. Su clon esperaba paciente instrucciones y no tardó en recibirlas. Ambos se pusieron en marcha en la dirección de donde les había llegado aquel ruido, con las armas preparadas para descargar su potencia mortal.

La copia iba delante, mirando al frente, atenta a cualquier posible enemigo y haciendo de avanzadilla. El original iba detrás, mirando a su alrededor y procurando evitar así encontrarse con alguna sorpresa inesperada.

Si sus nuevos compañeros necesitaban ayuda, estaría allí para echarles un cable. Pero no por altruismo o camaradería, si no más bien por un instinto de supervivencia que le decía, que tendría mejores cartas para salir de allí con vida con ellos que solo.

Filthy Worm era un tipo pragmático.

Los Worm llegaron justo para ver como uno de los dos drones que estaban protegiendo la puerta de entrada, puerta que había sido arrancada y estaba estallada en el suelo por cierto, había sido chafado por una Esfera de Guerra, el otro guardia estaba disparando a Obscure y Videshee sin éxito aparente.

Templario y Roxanne estaban en lo alto.

En el momento de llegar los dos Worm a la entrada del edificio, quedo claro quien era el enemigo.

– Pues si que han tardado mucho en dejarse descubrir. Todo un record. – pensó al ver a Videshee y Obscure en medio de una pelea contra un drone.

En el suelo, la enorme esfera que hasta hacia poco había visto flotando en el aire, parecía haber descubierto de golpe los nocivos efectos de la fuerza de gravedad. Al menos alguien había hecho algo bien.

Filthy Worm y su copia no perdieron el tiempo pensando en que es lo que había pasado. Los cañones de cuatro pistolas apuntaron al drone y descargaron su virulento contenido en forma de lluvia de plomo contra el guardián metálico.

La aparición de los Worms acabó con el drone que quedaba. Y como la puerta estaba "abierta" Videshee y Obscure podían entrar sin problemas. Uno de los Worms les informó que había tanto escaleras como un ascensor para subir.

Por su parte Roxanne se dió prisa en subir hasta la terraza que estaba enfrente de Templario sin ningún problema como hasta ahora.

El drone cayó al suelo de manera más bien poco grácil, deshaciéndose en trocitos metálicos poco mayores que las pelotas de un macaco. Habían hecho falta unas cuantas balas para desactivarlo, pero ya no era una amenaza.

– ¡Bien! ¿A qué estáis esperando? –dijo uno de los dos Worm antes de darse la vuelta para volver a entrar en el edificio.

– Ahí dentro esta todo más vacío que la sesera de Champion. No sé si nuestro “benefactor” no se habrá equivocado de dirección. –terminó de explicar el otro Worm y se giró también él en dirección a la puerta, que atravesó tras su copia.

Una vez dentro, volvieron a mirar a su alrededor y esperaron a que llegaran Videshee y Obscure para decidir como avanzar. Filthy Worm prefería tomar las escaleras e irse asegurando de que en los distintos pisos no había amenaza alguna. Tener un medio de escape seguro, cubrirse las espaldas contra encuentros inesperados, era para el feo villano parte vital de todo plan.  No le gustaban las sorpresas.

—¡Carambola! —musitó Templario cuando vio que la esfera había machacado a un Drone— menos mal que le cayó a un bicho y no a la rubia. —La mujer tenía escudos de fuerza, pero seguro que le molestaba el peinado y nunca terminaría de escuchar sus quejas. 

Extendió la mano para "ayudar" a Roxanne. 

—¿Subes? —dijo— vamos a ver que hay aquí dentro, sólo hay que dar un paso. 

Tenía curiosidad por si realmente estaba el objetivo o todo era una trampa obvia, como pensaba. 

Roxanne llegó hasta la terraza donde estaba Templario. Al igual que él pudo observar como estaba muy bien cuidada. Con muchas plantas y arbolitos de tamaño pequeño, y un pequeño jardin zen.
La puerta de acceso al interior estaba abierta, Templario sabía que por allí era por donde había salido la Esfera de Guerra que había eliminado, por lo que la opción obvía era entrar por allí.

Al entrar vieron una sala de estar muy agradable y muy amplia. Un sillón y un sofá a un lado. Una tele enorme justo enfrente. Una mesa redonda con un gran centro de mesa con flores. Y en el extremo más alejado una especie de mesa de despacho de madera. Madera que se veía recia. Y justo sentado detrás de ella un V'Sori con cara de aburrido. Detrás del V'Sori había algunas pantallas donde se podía ver la entrada de la calle y como Videshee, Obscure y Worm entraban dentro. En otra camara se les veía llegar a los ascensores pero se paraban seguramente para decidir si iban por ellos o por las escaleras.

Decidles a vuestros amigos que usen el ascensor. Tardarán menos.

El V'Sori hablaba bien el inglés, aunque se le notaba un acento extraño. Y aunque no llevaba una armadura especial como el último que habíais visto, su uniforme daba muestras de ser alguien importante. Se apoyaba con una mano la cabeza, mientras que con la otra tamborileaba sonoramente en la mesa.
 

El grupo de la entrada principal pudo ver como Roxanne llegaba hasta la terraza donde estaba Templario y desaparecían de la vista. Adentrandose a donde quiera que fuese que diera aquello.
Así que optaron por seguir a uno de los dos Worms y entraron también al edificio.

El recibidor no era muy amplio, y llegaron hasta una parte donde había dos ascensores y escaleras que subían. Uno de los ascensores abrió las puertas con el sonido de una campanilla. Como invitandoles a entrar. De dentro del mismo se podía escuchar música, la Chica de Ipanema, y era obvio que cabían todos.
 

Templario pensó lo bien que estarían ocultas unas cuantas minas claymore en el jardín Zen. Pena de no llevar ninguna. 

Una vez dentro se encontró con el V'sori, que parecía estar a todas luces esperando. 

Por supuesto no le hizo caso, pero Templario no hacía caso a casi nadie —¿No tienes altavoces integrados? Bueno, podemos contemplar como vienen. 

—¿De quién era esta casa? ¿O es que te ha dado por la decoración y costumbres terráqueas?

Si les estaba esperando para hablar, no le importaría charlar un poco. O eso esperaba.