Partida Rol por web

Una nueva oportunidad

Segunda cita

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21/09/2013, 19:00
El narrador

Aletheia tenia ganas de vovler a ver a Markel, preguntó al posadero donde tuvieron el encuentro, este le dijo que se lo haría saber a sus conocidos para concertar una cita. Tuvieron que pasar algunos días pero por fin, la avisaron de que esa noche estaria de nuevo en la posada, en la misma mesa donde estuvieron. Como no, Aletheia se arregló para el encuentro y fue para verle.

Notas de juego

Todo vuestro :P

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21/09/2013, 19:15
Alétheia

Alétheia entró en la taberna, jugando al mismo juego que el día que conoció al misterioso Markel. Llevaba la capucha puesta y la capa sobre los hombros. Caminó unos pasos, lo suficiente para que la luz de las antorchas y velas del lugar la iluminaran con sus luces titilantes, y se quitó la capa de un sólo movimiento. Agitó la cabeza, dejando que su pelo rojizo llamase la atención de los parroquianos. Llevaba un vestido rojo sangre, escotado, adornado sólo con un collar del mismo color. El contraste era similar al de la sangre sobre el campo nevado que era su piel y sus ojos azules, gélidos, como el hielo. En el pelo, entre sus bucles de cabello rizado, tan sólo se enredaba una flor, una petunia recién cortada. La flor se la había llevado Stiven, al que estaba muy agradecida.

Cuando vio a Markel, sentado de nuevo al cobijo de las sombras, tuvo que contenerse para que el corazón no se le desbocara. Tras tratar con Kitsu y Lekion, cualquier hombre le parecería interesante, pero es que éste además lo era. O eso creía, para eso estaba allí, para corroborarlo. Se sentó en frente del hombre encapuchado y sonrió.

- Buenas noches hombre misterioso. Es imperdonable hacer esperar a una dama y más aún hacerse de rogar.- La mirada de Alé era entre pícara y enfadada. Los días que había estado esperando la respuesta del tabernero le parecieron eternos. Llegó a pensar que, quizás, el hombre no quisiera verla de nuevo.- ¿En qué situación me deja a mi eso?.- Como mujer, no era de las que  eran remilgadas o esperaban a un príncipe azul que llevara la iniciativa. Si quería algo, solía cogerlo. Su vida había sido dura, y aún lo era, así que tenía claro que quería sacar todo el jugo posible a la vida ya que no sabía qué le tenía preparado el Destino.  Esperó a que el hombre contestara, con una fórmula de cortesía caballeresca. 

 

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21/09/2013, 20:36
Markel Rekkut

Markel escuchó con porte relajado a la joven Alétheia para después apartar la capucha que cubría de sombras su rostro. El gesto reveló una nueva máscara. Roja, en esta ocasión, de un color tan parecido al pelo de la chica que difícilmente podría atribuirse a la mera casualidad, sobre todo al considerar los flecos ondulados que decoraban su frente.

He de ofreceros mis más humildes disculpas, mi bella dama. Desde luego no ha sido cortés haceros esperar de esta forma. La sonrisa que se dibujó en sus labios dejó ver que estaba más interesado en la picardía que en el enfado, y sus siguientes palabras vinieron a confirmarlo. No obstante, habréis de admitir que un poco de expectación previa hará de nuestro encuentro más interesante, al igual que las flores en zonas desérticas crecen con más fuerza al recibir lluvia tras un periodo de sequía. ¿No estáis de acuerdo?

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21/09/2013, 21:49
Alétheia

- No puedo estar más de acuerdo.- La mujer pidió una botella de vino y dos copas al camarero.- Que esta botella de vino sirva para demostrarle que acepto sus disculpas. - Alé se humedeció los labios con el vino para después beber un sorbo,  dejando que el líquido elemento inundara sus fosas nasales. No quería desmadrarse demasiado pero estaba disfrutando de la velada.- No sabe qué ganas tenía de distraerme un poco.  Lekion resultó ser un hombre terriblemente aburrido y rodeado de un mal fario que no he podido aún desentrañar. - Sostuvo su mofletuda cara con el brazo cuyo codo apoyaba en la mesa, mientras con la otra mano jugueteaba con la copa de vino.- Y las dos semanas que llevo aquí no han ido mucho mejor. Mi mentor es un hombre sabio y culto, pero arrugado y seco como una uva pasa. Así que brindemos por la grata compañía. ¡CLINC!- Levantó la copa de vino y al beber no dejó de mirar a los ojos de su interlocutor.- ¿Cómo le han ido sus negocios?- Se acordó de que la última vez que se vieron el hombre misterioso se fue repentinamente a arreglar unos asuntos.

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21/09/2013, 23:47
Markel Rekkut

El misterioso hombre aceptó la copa y compartió el brindis con la joven. ¡CLIN! Con un lento sorbo degustó el vino, manteniendo la mirada de Alétheia.

Los negocios fueron muy provechosos. Comenzó a hablar mientras bajaba la mano con la que sostenía la copa. Establecí relaciones con nuevos asociados de los que espero operaciones muy provechosas. Y recientemente he adquirido un cargamento importante con el que espero hacer un buen negocio. Volvió a alzar la copa para dar otro sorbo del aromático líquido. Y por lo que me decís habéis encontrado al hombre que buscabais en nuestro anterior encuentro. Espero que el Débil esté satisfecho por ello. Dejó la copa en la mesa y juntó las manos cruzando los dedos para luego apoyar en ellas la barbilla ¿Puedo preguntaros cómo fue el encuentro?

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22/09/2013, 09:04
Alétheia

-Bien.-La cara de Alé palideció un poco al recordar aquellos ojos maléficos que la miraban.- Creo que ahora tengo más claro el por qué he sido traída aquí, a Aglate. Obviamente no era Lekion el objetivo final, sino el medio por el cual El Deforme quería que encontrara algo.- Metió la mano entre sus ropajes, sacando un pergamino ajado por el uso. Lo extendió en la mesa, delante de Markel, no sin antes comprobar que nadie miraba alrededor.- ¿Le suena haber visto esto? Lo encontramos una misión rutinaria que nos fue encomendada.- El pergamino tenía dibujado el símbolo que atormentaba a Alé. Un círculo con un octógono contenido en su interior.- Esta es la razón por la que estoy aquí. Un nuevo culto demoníaco, si no me equivoco.  He estado  investigando sobre ello pero aún no he encontrado nada de utilidad. Me gustaría que te lo quedaras. Si me hiciera el favor de andar con los ojos abiertos por mi, mientras yo esté fuera,se lo agradecería.  Tiene contactos de los que yo carezco aún.- La mujer pretendía abrirse camino en Aglate, pero para ello necesitaba ser ciudadana. Acercó sus manos y tocó las de Markel.- Pero sea prudente, aún no sé hasta donde se extienden las raíces de dicho culto. Por supuesto dependiendo de la información puede haber una recompensa económica, aunque yo no lo hago por el dinero, sino que es algo personal para mi, mi vida depende de ello.  No puedo escapar de mi Destino ...- Alé parecía asustada pues lo que había sentido en sus sueños proféticos era realmente aterrador. Pero la temblorosa mano del Débil había cruzado su línea de vida con la de aquel monstruoso ser maligno, y hasta que esclareciera el Misterio no podría abandonar ese camino. 

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22/09/2013, 12:42
Markel Rekkut

La expresión parcialmente cubierta de la cara de Markel perdió de inmediato cualquier muestra de ligereza y una sombra de gravedad se instaló en sus rasgos mientras contemplaba el pergamino ante sus ojos. No conozco el símbolo, pero si es de cultos demoníacos de lo que estamos hablando deberíais ser muy prudente. De hecho creo que habéis confiado en mi demasiado pronto. Rápidamente levantó la mano e hizo un gesto negativo para inmediatamente clarificar lo que había dicho. No quiero decir que estéis en peligro por habérmelo mostrado, pero por lo que me conocéis yo podría formar parte del culto que comentas. A no ser que vuestro Dios os indique la gente en la que podéis confiar, os pediría que no confiarais tan rápido en la gente en adelante.

No obstante y ya que hemos destapado esta situación, sí que tengo dos asociados que podrían saber algo de este símbolo. Y ya que me lo ofrecéis voy a aceptarlo para pedir que lo examinen. El hombre tomó el pergamino, lo enrolló cuidadosamente y lo guardó bajo la capa. Me llevará unos días, pero volveré cuando obtenga alguna información. Podremos volver a encontrarnos entonces. Puso su mano sobre la de Alétheia antes de añadir. ¿Tenéis donde refugiaros mientras tanto?

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22/09/2013, 13:08
Alétheia

Alé no esperaba que la cita se hubiera convertido en esto, una serie de reproches hacia ella. Es verdad que podía ser algo consentida y caprichosa, y...¿confiada?. El problema es que confiaba demasiado en su fe ciega hacia el Débil y consideraba, por tanto, que pocos podrían ocultarle algo. 

- Si quisiera, podría ver a través de ese antifaz, el rostro del hombre misterioso.- Dijo sonriendo dulcemente, y pasando la palma de la mano por la cara áspera del Markel. - Pero a veces ...- Los ojos de la mujer parecían brillar con los reflejos del líquido salino que se acumulaba en ellos. Su rostro, que solía ser jovial y alegre, ahora mostraba una profunda tristeza. Parecía una niña a punto de hacer pucheros. Pero era una mujer hecha y derecha- ...A veces desearía ser normal...El Débil me otorga visiones, presentimientos, sueños... todo puede ser muy confuso...y sé cosas que no desearía saber, es difícil de explicar para los profanos en sus Misterios. Pero tiene razón, es un asunto delicado y debería ser más prudente. Ahora que no estoy rodeada de sus acólitos corro más peligro. No había recapacitado sobre mi seguridad hasta ahora. Le doy las gracias por su preocupación.- Le sorprendió la última frase de Markel.

- ¿Refugiarme? Bueno , no sé. Duermo en los barracones donde Lekion me instaló cuando llegué. Ando estudiando y ganándome unas monedas como Pitonisa. Nada del otro mundo. No sé cuanto tiempo estaré en la ciudad. Cuando Lekion requiera de mis servicios partiré en misión, si quiero ganarme la ciudadanía. Pero perdóneme por haber sacado este tema tan inapropiado . No hubiera deseado estropear así esta agradable velada.- Alétheia volvió a ser la de siempre, risueña y picarona. - La  verdad es que ha acabado asustándome. No dormiré tranquila esta noche si me quedo sola.

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22/09/2013, 16:14
Markel Rekkut

Markel pareció encogerse ligeramente por casi haber provocado las lágrimas de la chica, así que volvió a animar su tono de voz para restar preocupación a la conversación. Bien, si Lekion se ocupa de vuestro alojamiento no deberíais tener nada que temer. Por muy aburrida que pueda ser su conversación, sin duda sabe lo que se hace a la hora de proteger a la gente. Volvió a tomar la copa en su mano y la movió en pequeños círculos haciendo bailar el líquido en su interior. Olvidemos este momento y retomemos una conversación más agradable ¿de acuerdo? ¿De modo que comentabais que estáis ganándoos la ciudadanía?

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22/09/2013, 18:14
Alétheia

- Ajá.- Bebió otro trago del delicioso vino.-. Cuando encontré a Lekion me asignaron a un grupo ...peculiar, llamémoslo así. Si cumplimos con peligrosas misiones,  aquellas que nadie quiere hacer, podremos ganarnos la ciudadanía. Me temo que de nuevo fui demasiado confiada, pues por  unirme a Lekion, como me había insinuado el Débil, ni negocié las condiciones. Pero bueno, está claro que era lo que tenía que hacer. Ahora estoy entrenando para hacerme más fuerte, pues  tenía un poco olvidado el tema de machacar cráneos con mi maza, ¿sabes?. En el templo siempre me llevaban en palmitas pero ahora...- La mujer extendió la mano derecha para enseñar a Markel la palma de su delicada mano, de piel blanca y ante suave.-¿Ves? Ya hasta tengo callo jiji. 

- ¿Y vos? No sé nada de vos como bien decís. Quizá es que hablo demasiado, es un defecto de profesión . Dicen que antes de entrar al servicio del Deforme era prácticamente muda. Al Viejo le gusta la gente charlatana pero también que sepa escuchar sus batallitas jaja. - Le guiñó un ojo.- Cuénteme ¿sus planes son establecerse en Aglate o sólo está de paso?. 

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22/09/2013, 22:22
El narrador

De repente, un desaliñado hombre, bastante sucio y desnutrido entró en la taberna.

¡¡El fin de la existencia se acerca!!, Los demonios vendrán a deborar nuestras almas, nadie se salvarán, no lo escuchais, ¡¡HACED QUE SE CALLE!!, ¡¡QUE DEJE DE REI....

Un grupo de feligreses se abalanzó contra el desaliñado hombre propinandole algunos golpes y echándole a patadas de la taberna, el pobre echó a correr a buscar un lugar donde esconderse.

El resto de los feligreses ni se inmuto, las peleas eran frecuentes y no solian ser muy violentas, salvo por esa en la que estuvo un Gnomo involucrado.

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22/09/2013, 22:28
El narrador

En el momento en que entró el desaliñado, una visión pasó por la mente de Markel, un hilo de color rojo salia de Aletheia y avanzaba raudo por el espacio, por el camino se unía a otros hilos de diferentes colores haciendo un hilo más fuerte y resistente, daba vueltas, iba y venia hasta que en un momento dado llegaba a una elfa que corría por un bosque, una elfa que Markel ya habia visto antes en sueños anteriores.

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23/09/2013, 00:06
Markel Rekkut

Markel quedó momentáneamente ensimismado cuando entró el hombre, pero al poco volvió a mirar a Alétheia. ¡Qué espectáculo más bochornoso! No se que locura afligía a ese pobre hombre pero creo que han sido demasiado rudos con él. Espero que este evento no entorpezca nuestra velada. Aunque considerando que vuestra deidad es el Débil, me pregunto si eso os conduce a algún deber respecto al hombre que se ha marchado.

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23/09/2013, 13:06
Alétheia

Alé frunció el ceño ante la brutalidad de los hombres. Algunos parecían más animales que otra cosa.  Pero entonces escuchó los últimos gritos del apaleado, y sus palabras se le quedaron clavadas en los más profundo de su mente.

- ¡Basta ya!Dejadlo ir en paz.- Alé se levantó y se dirigió al supuesto loco. Lo tranquilizó y le plantó un beso en la frente antes de dejarlo marchar. Si necesitaba consuelo sabría cómo encontrarla, pues realizaba trabajos de pitonisa de vez en cuando en la taberna.Le susurró palabras de ánimo. - Hay esperanza para todos aquellos que se cobijen en los huesudos brazos del Débil. Él lo ve todo, lo que los demás aún no se esperan. No estás solo, yo también las oigo.- Alétheia oía las risas también pero no diría nada pues la podrían tomar por una loca idiota y charlatana. Aún debía avanzar en sus investigaciones. Volvió a sentarse con Markel en la mesa.

- Pobre hombre, sé que no son las formas , pero a veces los locos me parecen los más cuerdos. Continúa, háblame más de ti.

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24/09/2013, 00:12
Markel Rekkut

Por donde iba. Musitó Markel pensativo mientras volvía a tomar la copa. Un nuevo sorbo de vino y retomó la conversación. ¡Ah sí! Queríais saber más de mi. Me temo que Aglate es para mi tan solo un destino comercial. En realidad paso la mayor parte del tiempo en un pequeño asentamiento hacia el oeste desde el que dirijo mis actividades comerciales.

Me temo que llevo una vida por lo general bastante rutinaria - comentó mientras se inclinaba ligeramente hacia delante, excepto por afortunados encuentros como el que estamos celebrando ahora. Volvió a reclinarse mientras volvía a humedecer sus labios con la bebida. Negocios: mucho trabajo y poco placer. Se volvió a acercar a la chica. Por lo visto no como vos, formando parte de una especie de grupo de aventureros - empezó a mover las manos con una cierta excitación casi derramando el vino por los bordes, tal vez hasta realizando heroicas gestas por las que los bardos cantarán en los años venideros. El hombre quedó de pronto un tanto ensoñado, como fantaseando con la idea, hasta que de pronto preguntó ¿Cómo es la aventura?

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24/09/2013, 13:13
Alétheia

- Será rutinaria pero pero seguro que agraable. Creo que yo necesitaría un poco más de rutina y quizás vos algo más de aventura. En en equilibrio está la virtud. O al menos eso creo yo. Le vendría bien un poco más de placer y menos trabajo jiji.- Bebió también otro trago de vino para animarse a contestar a su pregunta.- La vida de aventurero no es tan atrayente cuando la vives en tus propias carnes. Te olvidas de las comodidades, lo cual no es fácil. Y por supuesto es peligrosa. Hay muchas alimañas ahí fuera y no me refiero sólo a kobolds. Lo más heroico que he hecho es pringarme las manos de sucia y viscosa sangre de artrópodo. No sé si estoy hecha para esto, hasta rompí mi maza porque soy torpe en combate.-Parecía realmente frustrada por sus habilidades para la lucha.- Pero si quiero la ciudadanía no me queda otra.  - Las palabras de Markel sobre un asentamiento en el oeste habían llamado su atención por lo que continuó la conversación por esos derroteros.- ¿Un asentamiento en el oeste? Eso sí que suena interesante, me gustaría visitarlo alguna vez. No será muy numeroso porque sino aquí ya se sabría y te aseguro que la gente hablaría sobre ello. La gente cuenta de todo a una Pitonisa del Débil.  ¿No tenéis problemas para defenderos de las alimañas?

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24/09/2013, 23:53
Markel Rekkut

Ja, ja, ja - Markel continuó la conversación con una confortable risa. Coincido en la idea del equilibrio. Sin embargo no penséis que por llevar una vida rutinaria no me mancho las manos. El trabajo de adquirir, almacenar y transportar mercancías puede deparar también algunas sorpresas desagradables. Además algunos suministros son bastante peligrosos de conseguir, por eso en el asentamiento tenemos varios hombres de armas, lo cual ayuda ciertamente con las alimañas. El hombre hizo un gesto pensativo llevando la mano al mentón y continuó mientras lo frotaba ligeramente. Creo que sois de la segunda llegada, ¿verdad? Por lo que no lleváis mucho por aquí y por tanto seguramente no sepáis de Evada, otra ciudad al oeste, cerca del Bosque Antiguo. La verdad es que mi asentamiento es más próximo a Evada, por lo que supongo que es normal que por aquí solo me conozcan los pocos con los que hago negocio.

Tengo entendido que últimamente son más severos con la concesión de la ciudadanía - comentó cambiando de tema. ¿Ahora os hacen formar grupos para ganarla? ¿Cómo funciona eso?

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25/09/2013, 00:09
Markel Rekkut
Sólo para el director

Notas de juego

En vista de que puede salir Evada en la conversación, necesito que me digas lo que se de la ciudad.

Gracias de antebrazo!

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25/09/2013, 17:32
Alétheia

- ¡Ah, claro! En los tiempos que corren cualquier trabajo que implique salir de las ciudades puede ser peligroso.- La mujer jugueteaba entrelazando los tirabuzones de su cabellera entre sus dedos.- Suena emocionante. Lo tendré en cuanta si en alguno de mis viajes encuentro alguna rareza. Así podríamos salir los todos ganando.- Le extrañaba no haber oído hablar de la la ciudad pero, por otro lado, había estado tan desorientada y ocupada.- No he oído hablar de tal ciudad. ¿Es bonita?- Alé cruzó las palmas de las manos y apoyó el mentón en ellas y miró A Markel ladeando un poco la cabeza, lo que la hacía parecer algo felina.-Mi vida ha sido una completa locura desde que salí del templo donde me crié.  Voy de aquí para allá siguiendo los sagrados caprichos del Débil, aunque parece que ahora me estabilizo un poco. Por eso no puedes fiarte mucho de lo que te cuente sobre la ciudadanía.  Estoy acostumbrada a no hacer muchas preguntas y acepté ir con Lekion pues me había visto con él en un sueño. Eso era lo único que me importaba. Pensarás que estoy loca...o que soy una atolondrada...- Era evidente que ya se había sentido así alguna vez en su vida.- Entiendo que sí, que conseguiré la ciudadanía a cambio del servicio a  Aglate.  Pero no me digas cuántas más misiones debo hacer pues no lo sé. - Ahora frunció el ceño, airada.- Pero pienso preguntárselo a Lekion la próxima vez que lo veo jaja.

Cargando editor
25/09/2013, 17:50
Alétheia
Sólo para el director

Jefeeee, tengo dudas :)

- ¿Qué beneficios otorga la ciudadanía de Aglate?

- Markel habla de una segunda llegada, ¿es como una especie de migración? Necesito saber un poco de qué zona viene Alétheia y lo que sabe del cataclismo del que se habla en la descripción de la partida (además de lo que ha soñado). Un poco lo que es el trasfondo general de la partida.

- Soy consciente de que me habías comentado algo sobre un asentamiento en el oeste, que intuyo que es de donde viene Markel. También me gustaría saber qué averiguo de él , de su asentamiento y de Evada durante el resto de mi estancia en la ciudad con la habilidad reunir información. Información general.

Notas de juego

Me parto de risa con Markel, al principio pensaba que era un pnj :)