Partida Rol por web

Al volver a tu habitación notaste algo realmente extraño, al abrir la puerta, pudiste comprobar con espanto que en la taquilla donde tenías guardada a aquella criatura, se encontraba abierta de par en par, y no solo eso; aquel delicioso tentempie estaba desaparecido y no parecía estar por ningún lado de tu cuarto.

Oh no. Oh. No. No. Ahora sí que se la iba a cargar. Si alguien descubre que esa cosa estaba conectada con ella, se acabó su trabajo. Y si entraba en algún lugar en llamas, no iba a ser nada bonito.

Fuera el dsecansar. La prioridad máxima era encontrar el Chokity antes de que otra persona lo encontrara. No estaba escondido por aquí, ¿verdad? Buscó otra vez en la habitación, por si acaso.

Ah, pero antes tiró la botella a la basura, que ya no le servía de nada.

Ok, si el bicho este no estaba en su habitación, ¿dónde podía estar? Lo mejor será ir de cerca a lejos.

Ronte fue puerta por puerta, a ver si alguien se la había dejado abierta. A lo mejor el chokity estaba por ahí y no tenía que irse por toda la nave.

No parecía haber nada en la habitación, más allá de un rastro de babas verdes en el panel de apertura de la puerta a ella. Probablemente, aquella cosa se estampó contra él, y la abrió. - En el pasillo no había rastro alguno, por lo que era inútil quedarse ahí.

Ronte sale de la estancia.

Corey llegó frente a la puerta cerrada del camarote de Erika Johnson.

La puerta se abrió.

"A-atención, tripulación. Código... código... ¡N-ni siquiera tengo un código establecido para esto! L-la Jefa de Seguridad... Erika Johnson... Erika Johnson acaba de... a-acaba de suicidarse... saltando al vacío del espacio desde el Compartimento Estanco.

Código Rojo: Tripulación en Peligro. ARC-77, por favor, asegúrese de que nadie, repito, nadie trata de abrir la puerta de acceso al Compartimento Estanco. La puerta del mismo que da hacia el exterior está abierta. La sala está despresurizada porque Erika... ... V-voy a intentar cerrar la puerta exterior desde aquí para recuperar la presurización, pero por favor, que nadie entre hasta que sepamos qué ha pasado."

Corey cerró la puerta de un portazo para luego rápida y agitadamente trancar la puerta.

—¡Mierda!

No podía creerlo, había estado tan cerca... Si Erika se había suicidado no habría duda de que ella era la culpable, y la necesitaba con vida. Maldijo en voz baja una vez más mientras fruncía el ceño. De pronto se quedó inmóvil. Había una única y última posibilidad, una esperanza, era sin duda poco factible pero no imposible. Se apresuró a acercarse al interfono de la sala, dispuesto a enviar un mensaje al resto de salas.

—¿Quién acaba de hablar por el interfono? Identifíquese de inmediato.

CHOOOKIIIIITYYYY

Corey intenta esquivar el impactrueno rayo láser.

Las luces de la estancia comienzan a parpadear, en un instante, las luces de la nave se apagaron al completo, dejando tan solo un leve rastro de iluminación en los pasillos y suelo en una tonalidad rojiza, apenas iluminando el entorno de su alrededor, envolviendo en sombras a todos los presentes.

Corey no solo logra tirarse al suelo, sino que además logra cerrar la puerta con éxito. Una luz verdosa inundó la estancia cegando al Capitán por unos instantes; cuando este volvió a poder ver con normalidad se percató de algo, la puerta de acero tenía un agujero y goteaba la aleación del metal fundido lentamente. En el interior de la habitación no estaba la criatura.

Corey intentó hablar por el comunicador, pero no había luz. Debía avisar cuanto antes al resto del peligro que corrían pero no podía perder la oportunidad de revisar la habitación de Erika. Con suerte, habría algo relevante allí dentro.

En aquel lugar no había nada extraño más allá de las cosas que uno vería en cualquier otro camarote. Lo único que cabría destacar, serían trozos de galleta mordisqueadas levemente por, probablemente, aquella criatura que había escapado. Por lo demás, la habitación parecía no haber sido usada en absoluto.

Otro de los elementos a destacar, sería una lata de aceite de máquinas.

Corey se guardó las galletas y el aceite, para luego salir y dirigirse al Salón-Comedor.

Aún en la oscuridad, el Nuevo Capitán logró salir de la estancia.