Partida Rol por web

Vientos de invierno

Capítulo I: la Fortaleza Roja

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09/10/2015, 17:35
Lord Bryce Caron

-Me alegra escuchar eso hermana, la verdad es que no te veo mal.

Aquellas palabras podían sorprender a alguien como Kailyn pues Lady Odessa, incluso cuando estaba bien parecía enferma, pero seguramente Lord Bryce la miraba con otros ojos más cariñosos. Aquello hizo que se enterneciera por unos instantes. La doncella se dio la vuelta para seguir ayudando a Odessa y evitar que su hermano pudiera verla enrojecerse.

-Después de tanto tiempo sin verte creo que soy capaz de soportar cualquier cosa, solo el llamado del Rey Robert me ha impedido venir a verte antes.
Calló por unos instantes y al ver que su hermana confiaba en la doncella continuó hablando. No hace falta que te diga la precaria situación en la que quedó nuestra familia tras la muerte de nuestros padres y nuestras hermanas. Paró un instante al recordarlos. A mi me consideran un Lord demasiado joven y falto de experiencia y apenas tenemos lazos con otras casas, tan solo la amistad y la buena voluntad de otros Señores, lo que no siempre es suficiente como sabrás. Su hermana era muy inteligente y había sido educada con eficiencia, seguro que estaría al tanto de la situación. Por supuesto mi matrimonio será una de las cosas que tenga que solucionar y por fortuna el próximo torneo me dará la oportunidad de conocer mejor a las herederas de las casas y encontrar alguna que nos pueda apoyar, y si es bonita mejor.

Lord Bryce sonrió al mismo tiempo que Kailyn hacía un gesto de disgusto por lo tonta que se sentía en aquellos momentos. Lord Bryce era un gran Señor de una casa importante y aunque ella fuera la mujer más bella de todo poniente no tenía nada que ofrecerle, tan solo un apellido regalado. La romántica joven se recompuso lo antes que pudo al tiempo que Bryce continuó su conversación.

-Pero de eso ya hablaremos llegado el momento, a no ser hermanita que quieras hacerme alguna recomendación, seguro que durante tu estancia en la corte has conocido a muchas damas.

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12/10/2015, 21:17
Odessa Caron

Lady Odessa sonrió ante aquel cumplido sincero de su hermano. Le agradaba saber que la extrañaba, aunque solo fuera efecto de la idealización de una figura y la distancia con la misma sumado a la soledad que dejaba la muerte de sus familiares. Hecho que Bryce no tardó en recordarle, aunque por distintas razones. De alguna manera, siempre parecía ser tema de interés el extraño caso de las fiebres en los Caron, incluso entre los mismos supervivientes. 

Ciertamente su hermano no era el Lord más experimentado, y su corta edad lo hacía ver en desventaja frente a otros hombres respetables de la corte. Pero estaba segura de que el Rey Robert, quien a pesar de ser un mujeriego ludópata consideraba tenía cierta sensatez, sabría ver a través del rostro lozano de su hermano y entender que quien ha visto muerte de cercanos en una tragedia así adquiere un tipo de sabiduría que la edad no puede comprar. Sin embargo era cierto que sus alianzas eran cercanas a inexistentes, y nadie se confiaría de una casa sin lazos fuertes con otras casas. Lo que al mismo tiempo le hacía preguntarse, ¿Por qué alguien querría casar a su hija con una casa en ruinas? Potencial tenían pero en Poniente el potencial jamás había sido suficiente. 

Estaba tan metida en sus pensamientos que casi no notó el gesto de Kailyn, pero Odessa era una persona observadora. Pobre. Suponía que su disgusto al escuchar de matrimonio de Bryce se debía a que le había agradado o que incluso peor, se había ilusionado. La dama no sería quién le dijera que podía seguir soñando o le daría esperanzas. Jamás podrían estar juntos, y es que en este mundo el amor o los deseos de las mujeres importaban bien poco. Había aprendido eso de bastante pequeña, y lo había aprendido bien. 

Probablemente he estado demasiado tiempo en este lugar para considerar a cualquier dama digna de mi hermano. Pero estaré ansiosa de conocer a quién elijas como tu futura esposa, Bryce. - sonrió, mirándolo a través del espejo. No había mujer decente en toda la fortaleza, ni hombre tampoco. Pocos había en el continente entero, pero aquí ni siquiera intentaban disimular.

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13/10/2015, 16:23
Lord Bryce Caron

No pudo evitar sonreir ante la respuesta de su hermana, a veces no sabía cuando hablaba en serio o cuando estaba siendo sarcástica, esa era una de las veces.

-¿Así que para mi hermana cualquier dama es digna para mi? No se si me quieres menos de lo que yo creía o que eres demasiado ingénua. Creo que ninguna de las dos.
Se giró ligeramente hacia Kailyn y le sonrió. ¿Monrom? Discúlpeme si no atendí demasiado a las clases de mi maestre, siempre fui más presto a la espada, ¿Donde se encuentra su casa? Quizás me decida a visitarla.

Si cualquier dama servía para su esposa Kailyn era una muchacha graciosa y hermosa, eso ya era un buen comienzo.
La doncella se tocó el pelo nerviosa y bajó la mirada algo avergonzada por la situación.

-Mi Señor yo... nosotros... ya es tarde y su hermana debe abrir el banquete con sus canciones, todos la estarán esperando.

Bryce lo dejó por el momento, estaría por desembarco una temporada mientras llegaba el torneo y tendría tiempo de sobra de conocer a Kailyn y al resto de damas que residían allí. Durante el torneo llegarían otras acompañando a sus familias, sería un evento al que acudirían los nobles más importantes.

-¿No quieres saber que quería decirme el Rey Robert? ¿Desde cuando has dejado de ser tan curiosa? Porque quería hablar de ti. Sí, de ti, no pongas esa cara. Parece que le ha entrado en la cabeza que ya tienes edad de casarte e incluso me ha propuesto un nombre.
Bryce se quedó callado durante un segundo que para las dos mujeres fue una eternidad. Robert Frey.

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18/10/2015, 07:40
Odessa Caron

La interpretación de su hermano le sacó una sonrisa divertida. Por supuesto que no consideraba cualquier dama digna para él. Nadie de aquí lo era. Pero el interés de su hermano no le pasó desapercibido a Lady Odessa, y sonrió aún más al verlo coquetear con Kailyn. La sirvienta parecía más que halagada, y luego de la decepción que se había llevado recién volvía a estar nerviosa y avergonzada. Si es que no se casaba con ella, esperaba que lo hiciera con alguien que también reaccionara así a él.

Lamentó que la chica no se atreviera a hablar más de sí misma. Odessa hubiese esperado gustosa, y le importaba bien poco atrasar el banquete. Pero si en algo conocía a Bryce, sabía que este no sería el último intento de llegar a conocerla, así como seguramente no sería a la única que intentaría conocer. Por eso, cuando él se resignó a no obtener una respuesta en aquel momento, ella lo hizo también. En el peor de los casos, los obligaría a pasar tiempo juntos al pasar tiempo ella con él. 

Quizás por un descuido, se había permitido creer que el asunto por el que el Rey había hablado con Bryce era por el matrimonio de este, pero por supuesto, aquello no tenía sentido alguno. Así que, cuando su hermano confesó que habían conversado sobre ella y su futuro casamiento, se giró hacia él, mirándolo de frente con curiosidad, aguantando la respiración hasta que soltó el nombre que se rehusaba a decir. Y apenas lo dijo, solo dos palabras salieron de la boca de Odessa. 

¿Que respondiste? 

Para ella, los Frey eran una raza aparte, una especie despreciable y asquerosa, descendientes del más repugnante de los hombres si es que se podían llamar tal. Sin embargo, aquel Frey en particular le había agradado. Era mucho más que tolerable, era buena compañía. Y estaba convencida de que podría servir a su propósito. La pregunta era: ¿Serviría más que Marton Arryn? ¿O acaso sería más inteligente apuntar a la familia de la Mano, enemigos naturales de su enemigo? Si optaba por Robert, podría acercarse más, matar a Walder Frey ella misma, pero no sabía cuanto tardaría. Y si conseguía el apoyo de los Arryn... si conseguía el apoyo de ellos, entonces era imposible que cobrara su venganza por mano propia. Pero ya había esperado bastante, podía esperar más. Odessa era una mujer paciente. Y realmente quería ver a quién la había ultrajado perder el brillo de sus ojos.

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18/10/2015, 18:55
Lord Bryce Caron

Como se imaginaba su hermana había reaccionado de inmediato, pocas veces le pillaba algo por sorpresa pero esta parecía una de ellas.

-Me quedé callado al principio, no me espera algo así y el Rey Robert parecía entusiasmado con la idea, que le habían dicho que os habían visto juntos últimamente. ¿Que querías que le dijera?
Bryce estaba visiblemente enfadado. No quería arriesgarme a que la conversación llevara a preguntas incómodas que no quería contestar. ¡De entre todos los nobles de los Siete Reinos tenía que ser un Frey! Encima le hacía gracia que se llamara como él. ¿Y que significa eso de que os han visto juntos? Espero que esto no sea cosa tuya. No, no puede ser... ¿De los Frey? ¿Intentan obligarnos contando lo que pasó? ¡Por encima de mi cadáver! No pienso dejar que te casen con un Frey!

Lord Bryce apretó los puños y se mostró decepcionado e irascible. Kailyn prefirió no decir nada, pues no entendía muy bien lo que estaba pasando, tan solo que los Caron no se llevaban nada bien con los Frey. Tras tomar algo de aire Bryce pareció algo más calmado.

-No te preocupes, se como es Robert. Lo que hoy le hace gracia mañana ni lo recuerda. Podemos arreglarlo, vamos a hacerlo.

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21/10/2015, 04:07
Odessa Caron

Le costaba imaginarse a su hermano estupefacto frente al Rey Robert, pero suponía que la sugerencia del hombre no era para menos. ¿Y por qué se entusiasmaba tanto de todas maneras? No podía entender que el Rey, quien apreciaba tanto sus talentos y su belleza, se empeñara en casarla con una casa de tan baja reputación como eran los Frey. Si valoraba tanto su presencia y sus servicios, ¿Por qué no la ayudaba a conseguir la mano del caballero de las flores? ¿O el de alguna casa de importancia, como los Stark? ¡Incluso podría intentar casarla con un primo de su mujer! Pero no. La quería con uno de los dos mil millones de hijos de esa bestia asquerosa de Frey. 

Cuando escuchó a Bryce hablar "de lo que pasó", tuvo que reprimirse para no señalarle con la mirada a Kailyn, frente a la cual no sería prudente hablar de tales materias. Lo que sí hizo fue abrir levemente los ojos, en señal de advertencia. Se le pasaba un poco la mano con las confianzas que se tomaba frente a la sirvienta. 

Si nos vieron juntos es porque me estaba escoltando a una reunión que tenía con Marton Arryn. Conversamos un poco, me habló de historia y de la familia de los Arryn, y de lo mucho que le gustaba escribir. Si es que lo del enlace es culpa mía, debo haberme perdido esa parte de la conversación. - contesta, con una tranquilidad imposible - Es un buen chico. Un Frey, sí, pero solo de apellido y no de mentalidad. ¿Tú que solución tienes en mente?

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21/10/2015, 18:45
Lord Bryce Caron

Bryce no entendió del todo los gestos de su hermana, pensaba que la dama de compañía era de confianza pero parecía que no de la suficiente, así que sería más prudente medir sus palabras en su presencia.

-Será mejor que hablemos luego, no quiero que llegues tarde a tu gran noche, todos están esperando que aparezcas y les muestres tu talento. Si me permite, Señorita Monron, acompañaré a mi hermana.

Bryce le tendió el brazo y ambos hermanos salieron juntos hacia la cena con Kailyn siguiéndolos de cerca.

Notas de juego

No hace falta que postees ahora, vamos a actualizar la escena.

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21/10/2015, 23:57
HACEDORA

El Salón de baile de la Reina

 

 

Tras unas grandes y robustas puertas aparece la sala con una espectacular bóveda con motivo floral, de grandes ventanales y candelabros colgados iluminando la hermosa estancia. A parte de los marcos de las ventanas, tallados también con motivos florales, el resto de las paredes lisas se visten con tapices que cuentan historias lejanas y precios desorbitados. En comparación con el Salón Principal éste es más pequeño, pero adecuado para las cenas que habitualmente se hacen para los nobles que residen en la fortaleza, algo más de cien distribuidos en mesas paralelas encabezadas por la familia real al completo y protegidos de primera mano por Jaime Lannister.

Tampoco podrían faltar Jon Arryn, Pyrcelle, Petir Baelish, Varys y Renly Baratheon como los integrantes del Consejo Privado quienes, a boca pequeña, manejan los asuntos del reino. A la mesa del Consejo, los más cercanos a la familia real, se sientan también la esposa de la Mano y su hijo, así como Stannis Baratheon.

Una vez los miembros más relevantes de la Fortaleza Roja toman sus habituales asientos el resto se sienta según más le convenga, acompañados algunos por sirvientes personales o doncellas quienes de forma discreta se mantienen atentos a las necesidades de sus señores. Mientras, la música alegre de un cuarteto de cuerda tiene por propósito amenizar la velada.

De forma calculada comienzan a servirse diversos tipos de panes y bebidas seguidos de suculentos platos dignos de un banquete real: crema de champiñones; sopa espesa de cebada y venado; ensalada de hierbadulce, espinacas y ciruelas con frutos secos por encima; empanadas de queso y cebolla; trucha horneada en barro; carne de uro asado con mantequilla y hierbas; cangrejos cocidos con picantes especias orientales... Así como deliciosas manzanas asadas con canela y pastelillos de limón bañados en azúcar entre algunos de los postres.

 

(Vladislav hall, Prague castle)

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26/10/2015, 01:19
Odessa Caron

Entrelazada por el brazo con Bryce, y seguida por la sirvienta, entra al enorme salón dispuesto para el evento de esa noche. La belleza del lugar la había tomado por sorpresa en su primera visita, y había dedicado la mayor parte de dos horas a observar con detalle la obra de arte plasmada en sus paredes, ventanales y candelabros, fijándose con entusiasmo en cada grabado y tapiz. Su mirada va a continuación hacia el mayor desperdicio de material casadero, Jaime Lannister, y tras él al famoso Consejo Privado. 

Cuando es pertinente va a sentarse junto a su hermano mayor en una de las mesas, acompañada también por Kailyn, mientras sus oídos analizan críticamente las dotes musicales del cuarteto de cuerda. Son fantásticos, pero como todos, tenían errores atribuibles a los mortales. No habían nacido con un don como el suyo, una voz tan perfecta y peculiar que sería un crimen revelar a todo el mundo. La única capaz de hacer justicia a la muerte de sus seres queridos, y la única que podía imitar los más dulces sonidos oídos por dioses y hombres. 

Aún libre de hambre por la reciente noticia, solo se limita a remojar sus labios en el agradable vino servido por la realeza, mientras busca caras conocidas entre el montón. Caras que hubiese visto ese mismo día más temprano, idealmente. Quería saber si él también había recibido alguna noticia al respecto.

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26/10/2015, 18:08
Robert Frey

En una de las mesas, una de las más informales por la juventud de sus integrantes se encuentran sentados la mayoría de jóvenes nobles, escuderos y mozos de alguna importancia en el castillo. Entre ellos se encuentra Robert Frey y sus amigos, de vez en cuando notas como alguno de ellos se gira a mirarte y luego se vuelve a hablar con sus compañeros, parece que esperan ansiosos el momento en el que el Rey de comienzo el tiempo de música, canciones y actuaciones.
Robert Frey se encuentra sentado casi frente a ti pero permanece más serio que sus compañeros, como pensativo, aunque casi nadie parece reparar en su presencia. Notas como te busca de vez en cuando con la mirada pero rehuye encontrarse directamente con tus ojos.

¿Se lo habrán dicho? Seguro que no me quiere ni ver.

Notas de juego

Editado:
Parece que en la mesa de la mano está pasando algo. ¿Te interesas por ello o intentas averiguar que le pasa a Rober Frey? ¿O por el contrario te concentras en lo que está pasando en tu propia mesa?

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26/10/2015, 19:12
Robert Arryn

Desde luego aquella cena no era el mejor lugar para llevar al pequeño Robert Arryn, lo mejor hubiera sido dejarlo en la torre, pero en ese caso probablemente hubiera sido Alyssa la que se tendría que haberse quedado para cuidarlo así que tuvo mucho cuidado de que no fuera así para no perderse el evento.
Por supuesto el niño apenas comió, los platos pasaban ante él sin que se inmutara, probando algún pequeño bocado, escupiendo gran parte de lo que comía y estropeando casi todo lo que le ponían enfrente. Parecía solo interesado en una comida que su madre no estaba dispuesta a darle entretenida como estaba con la conversación en su mesa, en casa le daría todo lo que quisiera.

-Vete a jugar con Alyssa pequeñín, luego te daré la cena.

El niño aceptó aunque no de muy buen grado y se acercó enfurruñado a la dama de compañía lanzándole una patada con tan pocas ganas y tan poca fuerza que Alyssa no se hubiera dado cuenta de no haber estado mirando.

-Eres tonta... Protestó pagando su enfado con ella. Miró hacia arriba y abrió mucho los ojos cuando reparó en algo en lo que nunca se había dado cuenta. Comenzó a tirar de la falda de Alyssa hacia abajo con "todas sus fuerzas". ¡Dame de cenar! ¡Dame de cenar! ¡Tu también tienes cena!

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29/10/2015, 15:12
Alyssa Arena

La mirada de Alyssa, aunque atenta al muchacho, parecía mucho más interesada en lo que ocurría a su alrededor: los colores, los fastos, el bullicio de las discusiones, las risas de los chistes... Todos celebraban, bebían y engullían entre carcajadas. A nadie le importaba lo que había pasado en el castillo, los crímenes que se habían cometido contra inocentes niños hacía no tanto. Todos fingían olvidar buscando con ese olvido el favor de los nuevos señores. Del Usurpador, de la reina Lannister...

La sirvienta se interrumpió y bajó la vista ante una leve molestia que sintió en la pierna. Allí encontró a un niño contra el que no le importaría cometer un crimen.

- ¿Cóm...?

La pregunta, formulada casi en un susurro, se le atragantó en la garganta tan pronto comprendió a qué se refería el crío. Llegado aquel momento su cara pasó por diferentes tonalidades del rojo, desde un pálido incredulidad hasta un bermellón enojo, no sin antes pasar por un intenso carmesí vergüenza.

- ¡Se... señorito Robert!- dijo, intentando calmarse mientras intentaba evitar que con los tirones a su vestido el crío dejara al descubierto ante todos aquello que anhelaba.- Yo no tengo cena. Esa cena solo la tiene su señora madre, y si se la pide a otras se va a enfadar y le va a castigar sin cena. No querría eso, ¿verdad?

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30/10/2015, 13:32
Robert Arryn

-¡Si tienes cena! ¡Ahi tienes cena! Dijo visiblemente alterado mientras señalaba con su dedo índice a sus pechos.

Algunas personas comenzaron a volverse ante los gritos del pequeño Robert, aunque la mayoría ya estaban acostumbrados a las excentricidades del niño. Jeofrey señalaba hacia vuestra posición mientras se reía. Al ver que había captado la atención de la gente el niño salió corriendo hacia la mesa en busca de su madre para esconderse, pero aprovechó que habían dejado unas fuentes con frutas para agarrar un limón y tirárselo a Alyssa.

-¡Mala! ¡Mentirosa!
Tras desahogarse miró con cara de lástima a su madre. Me dijo que si no me portaba bien no tendría cena. ¿A que es mentira mami?

El limón apenas llegó rodando para chocar contra uno de los pies de la chica.

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30/10/2015, 13:34
Lysa Arryn

Lysa Arryn arropó entre sus brazos al niño protegiéndolo de las miradas e intentando calmar aquel disgusto que se había llevado.

-No te preocupes pequeñín, claro que tendrás cena, pero en cuanto lleguemos a casa.
Acariciaba la cabeza del niño buscando tranquilizarlo. Y solo tu mami puede darte de comer, nadie más ¿Comprendes? El niño asintió contento. Y ahora pórtate bien, dentro de poco saldrán los saltinbanquis y los músicos, eso te gusta mucho ¿A que si? Además va a cantar Lady Odessa, tienes que portarte muy bien y escucharla.

Con su hijo más calmado Lysa Arryn se giró levemente hacia Alyssa y le hizo un gesto con la mano para que se retirase de momento. Eso le daría la libertad para moverse con algo de soltura por el banquete, quizás pudiera ver o escuchar algo interesante.

Notas de juego

Podemos dividir el banquete en varias zonas:
-La mesa real, donde están el Rey, la Reina y sus hijos, escoltados por la guardia real, puedes intentar acercarte si quieres pero lo más probable es que no dejen pasar a nadie cerca.
-La mesa donde están Jon y Lysa Arryn que sería la más importante tras la del rey, donde se supone están los personajes más relevantes.
-Mesas con nobles de importancia intermedia, donde estarían Lady Odessa Caron y su hermano Lord Bryce entre otros.
-Mesas con jóvenes nobles y escuderos o con damas de la corte que no estén sirviendo a nadie en aquel momento (separados en sexos aquí).

Puedes probar suerte en cualquiera de ellas a ver.

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04/11/2015, 00:29
Odessa Caron

Odessa observa con curiosidad a la mesa de los jóvenes. Había notado como más de alguno había mirado en su dirección, y no estaba segura si sería porque ya se habían enterado o porque algo en ella les llamaba la atención. Quizás tenía que ver con que había prometido deleitarlos con una pieza, y de alguna manera aquel compromiso había permanecido como algo importante en su agenda. Sin embargo, el por qué su mirada se mantenía en esa mesa no tenía que ver con ellos. Había visto como intentaba hacer contacto visual con ella, arrepintiéndose siempre a último momento, y la seriedad en su rostro le parecía casi ofensivo. A menos que no le hubiesen informado aún, ¿no debería estar celebrando la posibilidad? Mientras hablaban había estado segura de su interés en ella... ¿Por qué no parecía feliz con la noticia?

Mirándolo fijamente, le dedicó una sonrisa cordial, una invitación implícita a acercarse, para luego mirar hacia la mesa de la Mano para ver que pasaba. A propósito, ¿Dónde estaba Marton Arryn?

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04/11/2015, 08:07
Alyssa Arena

Por fin, por fin se había librado del crío. Ese era el momento que esperaba que llegara todos los días de su vida desde que había entrado al servicio de Lady Arryn. Atesoraba esos momentos de paz y sosiego de igual modo que los Lannister atesoraban su oro, sus traiciones y sus maquinaciones pues, después de todo, ya fuera tras unos minutos o unas horas, llegaba el momento de soportar al niño de nuevo. Tendría que hacerlo así hasta que el niño desapareciera, ella fuera despedida o...

-" Que me descubran..."-  El gesto de Alyssa se torció pensando en aquella terrible posibilidad.

Tras apartar tan funestos pensamientos de su cabeza volvió a centrarse en su trabajo. Su verdadero trabajo. Permanecería atenta, abriría bien sus ojos y oídos y, para ponerlo en práctica, empezaría por la mesa en la que se sentaba Lady Odessa. La de los jóvenes nobles y escuderos no le interesaba demasiado, seguramente no escuchase nada más que bravatas sobre las gestas amorosas y no amorosas de unos y otros. Aunque si tenía tiempo quizá se pasase más adelante... O no, mejor lo hacía en ese mismo momento. Los escuderos, como ella, podían estar al tanto de lo que hacían sus señores y seguramente el alcohol empezaría ya a soltarles la lengua.

Así pues se dirigió a la mesa donde menos llamaría la atención esperando escuchar algo de interés. Una vez avanzara la cena, cuando la música lo inundase todo y la mayoría no tuviese atención más que para las cabriolas de los saltinbanquis, Alyssa se dirigiría a la mesa de la mano, donde los nobles más importantes comían, o a la de Lady Odessa, si es que de los escuderos y sirvientas obtenía algo interesante.

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04/11/2015, 18:23
Robert Frey

Cuando Lady Odessa mantuvo la mirada fija sobre Robert Frey este no pudo evitar encontrarse con sus ojos el tiempo suficiente como para leer el mensaje que la muchacha quería transmitirle. Un segundo después miró hacia abajo y tamborileó nervioso con los dedos en la mesa, parecía que estaba pensando. Finalmente se levantó despacio y sin llamar demasiado la atención y se dirigió a una zona intermedia entre su mesa y la mesa de Odessa, allí se paró como distraído y comenzó a mirar al exterior en una gran ventana. Alguien que se pusiera en el otro extremo de la ventana podría parecer que también observaba casualmente afuera y estaría lo suficientemente cerca para susurrarle algo y que el otro lo escuchara sin llamar demasiado la atención. Un salón atestado de gente no es el mejor lugar para ciertas conversaciones, pero aquella posición podría servir para intercambiar algunas palabras.
No falta mucho para que se de por concluida la cena y comience la fiesta propiamente dicha, durante ella Lady Odessa tendrá una parte importante y le será imposible hacer otra cosa. Después su hermano ya le anunció que la acompañaría a sus aposentos cuando todos terminaran de felicitarla.

Notas de juego

-Puedes intentar reunirte con Rober Frey en las ventanas y hablar con él directamente, lo que será muy público y a la vista de todos.
-Intentar acercarte al otro extremo de la ventana y disimular como que ambos estáis mirando hacia afuera para intercambiar alguna frase entre susurros. Probablemente nadie le de importancia y si notan que habláis piense que es un simple saludo de cortesía.
-Enviar a Kailyn con algún tipo de recado intentando obtener alguna respuesta o citarte para otro día.

Podemos dividir el banquete en varias zonas:
-La mesa real, donde están el Rey, la Reina y sus hijos, escoltados por la guardia real, puedes intentar acercarte si quieres pero lo más probable es que no dejen pasar a nadie cerca.
-La mesa donde están Jon y Lysa Arryn que sería la más importante tras la del rey, donde se supone están los personajes más relevantes.
-Mesas con nobles de importancia intermedia, donde estarían Lady Odessa Caron y su hermano Lord Bryce entre otros.
-Mesas con jóvenes nobles y escuderos o con damas de la corte que no estén sirviendo a nadie en aquel momento (separados en sexos aquí).

Marton Arryn estaría en el mismo grupo de mesas que ocupan Lady Odessa y su hermano, pero en una más cercana a la mesa del Rey y de la Mano, lo que le confiere más importancia, seguramente sería la mesa donde hubiera estado sentado tu padre si aún viviera.

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04/11/2015, 18:51
Hombre sin rostro

No tienes problema en acercarte al grupo de mesas de los escuderos y damas de compañía, incluso alguna dama te reconoce y te deja un sitio para que las acompañes, mientras no las requieran sus señoras muchas pasan el tiempo allí divirtiéndose y cotilleando un poco. En la mesa la mayoría de comentarios van sobre los vestidos de las damas, quien lleva el más bonito o el que parece más caro, a quien le queda peor... También comienzan a escoger que noble es el más apuesto o el mejor partido, muchas votan por Ser Jaime Lannister, pero es un guardia real y nunca se casará, así que acaban buscando objetivos más asequibles. El hermano de Lady Odessa parece ser uno: Es relativamente apuesto y el heredero de una de las casas importantes, aunque su juventud parece haber hecho perder algo de peso a su familia, por lo que parece en otras ocasiones su padre se sentaba en una mesa más cercana a la del Rey, aún así sigue siendo un buen partido y los Caron son muy amigos de los Baratheon.
Otro de los más solicitados por tus compañeras es Marton Arryn, el sobrino de la mano del Rey. No es el heredero de ninguna casa pero es un Arryn y aunque joven ya tiene fama de ser valeroso y tener un futuro prometedor, además es también bastante apuesto.
Por fortuna, aunque algunos dirían que la suerte no existe, que se la busca una, estás sentada en la parte de la mesa más cercana a la de los escuderos y puedes escuchar parte de sus conversaciones. Ellos hablan de ejercicios de lucha, entrenamientos, aventuras y hazañas de sus señores y como no, también de las damas a las que de vez en cuando lanzan alguna invitación para el baile posterior. La actuación de Lady Odessa tras el banquete parece ser uno de los temas de conversación favoritos, otro es el torneo que anunció el Rey al comienzo de la cena y que traerá hasta Desembarco a un buen número de los mejores caballeros de los Siete Reinos, parece que nadie querrá perdérselo.
En un momento dado una figura casi anónima se levanta de la mesa y pasa cerca de ti, cruzáis las miradas y reconoces a Robert Frey, él parece que no olvidó lo de los limones de esta mañana y por su gesto parece que piensa que tu estabas involucrada en ello de alguna manera.
Sin decir nada pasa de largo pegado a la pared lateral, nadie parece prestarle mucha atención ni echarle de menos. Las veces que te fijaste en la mesa de los muchachos no parecía intervenir mucho y estaba como distraído mirando algo hacia otras zonas del banquete, quizás imaginando el lugar en el que se sentaría su padre si estuviera o intentando encontrar a algún conocido suyo. Se queda quieto en uno de los extremos de una gran ventana mirando distraído al exterior, aunque alguien como tu que lo observa todo con suspicacia podría sospechar que no mira nada, que parece esperar algo o a alguien.

Notas de juego

-Si quieres iniciar alguna conversación con tus compañeras o incluso con alguno de los vecinos de la mesa de al lado puedes hacerlo sin problema.
-Si quieres hacer cualquier otra cosa no tienes más que decirlo XD.

Todos sienten que no falta mucho para que se por concluida la cena y comience la fiesta propiamente dicha. En ese momento habrá más algarabía y será mas factible moverse sin que la vean a una, incluso durante los bailes se puede intentar encontrar una pareja interesante, aunque en vuestro caso tendría que ser algún escudero o joven noble, a no ser que uno de los más importantes os lo pida directamente. No sabes cuanto tiempo aguantará Lysa Arryn en el salón cuando todo eso comience, puede que decida abandonar la fiesta en cualquier momento y volver a sus aposentos con su hijo (y probablemente contigo a no ser que te de licencia).

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07/11/2015, 18:12
Alyssa Arena

- "Oh, por lo siete..."

El tedio por la conversación insustancial no parecía tener fin. Y es que no daban por terminado uno de las temas que trataban cuando pasaban al siguiente, y entonces al siguiente, y luego vuelta al anterior... Si no estuviera siendo testigo de cómo los platos se vaciaban y las bocas masticaban, hubiera dicho que era imposible que probar bocado teniendo la boca tan ocupada en otros menesteres.

Alyssa sonrió y movió la cabeza con aquiescencia a la que hablaba en aquel momento. Luego soltó una pequeña risotada, deliberadamente discreta y avergonzada,  ante el comentario verde de otra de las sirvientas. Y es que eso era lo peor, tenía que integrarse, fingir que le importaba tanta palabra huera.

- Es verdad, es verdad...- confirmó poco después siguiendo con su papel- Tienes toda la razón.- Aunque la verdad que no estaba segura de que así fuera, pero todas las de alrededor parecían estar de acuerdo, así que por qué llevarles la contraria.

Un buen rato siguió así, entre afirmaciones, negaciones y carcajadas colectivas, hasta que Robert Frey se levantó de la mesa. Extrañada le siguió con la mirada hasta la ventana en la que se paró. Y allí, junto a él, quedó parada su atención. De momento esperaría como el Frey parecía esperar. A ver qué ocurría, quién se le acercaba y qué pasaba. Si nada ocurría, más adelante, durante el baile quizá, podría acercársele con la excusa de disculparse por el incidente con los limones y descubrir así algo más. Si es que había algo que descubrir...

- "Si, eso haré."- confirmó tras devolver su atención a la mesa.

Se llevó algo a la boca y sonrió satisfecha.

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14/11/2015, 17:00
Odessa Caron

Siguiendo la sugerencia implícita de Robert, Odessa se levanta de la mesa y camina hacia la ventana, el otro extremo de dónde él se encontraba. Se hubiese disculpado con su hermano pero eso habría sido atípico en una de sus distracciones espontáneas. Era mejor que creyera que como siempre, volvía a tener uno de sus trances, que volvía a meterse en su propio mundo y excusarse con la terrible pérdida de facultades que el duelo y la enfermedad le habían provocado. 

Claro, sí, porque eso había pasado. 

Dejando de lado el pensamiento de lo conveniente que era que tomaran sus excentricidades y única manera de pensar como locura, miró hacia afuera, concentrándose en el paisaje antes de siquiera intentar hablar. Era un momento de colores tenues, y de notas graves, una melodía lenta cantada al viento que se pierde entre la brisa. 

¿Que piensas al respecto? - preguntó, sin cambiar su expresión o dar muestra alguna de su propia respuesta a esa pregunta. Quería ir directo al grano y no quería la desventaja de respuestas a conveniencia.