Partida Rol por web

Llueven.
Las piñas llueven.
Las piñas y las patadas, también los cabezazos.
Lucas soporta la lluvia de golpes cubriéndose como puede, esas mierdas con patas no se cansan nunca, tampoco parece aburrirles el estar dándole mazazos a una estatua de carne.
No los culpo.
Si yo estuviera en su lugar, también lo pasaría igual de bien.
De alguna forma logro recuperándome valiéndome de la vitae como Yasmila me enseño.
No es que ahora pueda bailar un cuarteto con la gorda del Sargento Cabral ni mucho menos, pero voy a intentar correr como pueda.
Correr es la única opción, si no logro hacerlo ya me puedo ir despidiendo de todo.
De una puta vez.

Dos de las criaturas van en tu persecucion y pronto estan tras tuyo, a punto de alcanzarte... Las piernas todavia pesan. 

Al menos una se ha tropezado y queda atras, pero dos siguen siendo dos. Un poco mas , un poco mas...

Correr correr correr.
Mierda como pesan las piernas, vamos Lucas corre.
Poco lugar queda en mi mente para otro pensamiento.
Tengo que alejarme de las criaturas correr hacia adelante lo más rápido que pueda.
Mientras aun pueda.

Otro de ellos se detiene, jadeante!! Aun queda uno mas, pero poco a poco le empezas a ganar unos mas... Un ultimo esfuerzo, un esfuerzo plis plis... Ya estas casi en los ranchos de nuevo, donde te alcanzaran la ultima vez. Falta poco para volver a estar con Yasmila, con las guachas, ya casi... Señora Oscura, no lo abandones!

Se me desgarra la mente por la tensión y el cuerpo frío y muerto esta a punto de partirse en mil pedazos.

Pero me obligo de todas formas a seguir, correr es lo único que puedo hacer; Otro día vendrá la venganza, otro día podre reírme de esto, quizás esto sea una prueba mas de la Yasmila, o tal vez, solo tal vez.

No he dejado de ser un moquero en la no - vida, como lo fui vivo.

Finalmente, el ultimo empujon te aleja del mas tenaz de tus perseguidores, como si tuvieras alas en las piernas... Las luces pasan rapido al lado tuyo, una tras otra, haciendose mas comunes a medida que te adentras en las casitas. Y entonces, ves el pilar de Yasmila, a tu derecha, un faro de esperanza. 

Si tuvieras lagrimas quizas te saltarian ahora. Llegaste. Llegaste! El corazon esta muerto, pero la emocion rebota en tu cabeza, de haber salvado el pellejo para volver junto a tu cruel pero adorable ama...

Solo al llegar frente a la puerta te realizas que estas cubierto de la mierda de las cañerias todavia, de pe a pa, y si entras asi puede enojarse muchisimo... Tenes que limpiarte. Por suerte hay una manguera atras, junto al galpon del rebaño, que usan para limpiarlos sin desatarles...

No lo puedo creer, me salve de pedo, no lo puedo creer.
Si necesitara respirar seguramente estaría sin resuello, bufando como una vaca empastada con la boca bien abierta en busca de aire.
He olvidado cómo hacerlo, lo que se sentía ver subir y bajar el pecho propio, ya no sudo, ni tengo olor a patas, ni siquiera mocos en el naso.
Soy un puto fiambre pálido y depresivo, recién lo descubro ahora mientras el agua congelada – que tampoco siento -, me cae sobre el cuerpo desnudo.

Las ropas hechas un bolla y al tarro de basura que hay en el patio, no va a haber forma de recuperarlas luego de su odisea cloacal.
Mientras el agua me cae desde la cabeza como si fuera una cascada limpiándome poco a poco por fuera, por dentro las cosas son muy distintas, por dentro estoy muy sucio y las manchas que poco a poco comienza a ensuciarme el alma, estoy seguro no van a salir con agua.

Hoy he matado una mina.
Hoy he sido reprendido por una muerta que habla.
Hoy he paseado por las cloacas.
Hoy he peleado por mí no vida con criaturas de pesadillas.

¿Qué es esto Dios?, ¿Cuánto horror me espera en los días por venir?

El agua y jabon blanco te ayudan, aunque un residuo de peste ha quedado impregnado en vos de todas maneras. Esto va a necesitar mas que un buen baño para salir. Solo por hablar de la mierda externa claro... La interna, es otra cuestion muy distinta. Filosofar o meditar nunca fue mucho lo tuyo. Ahora, de golpe, tenes tantas cuestiones nuevas que asimilar, terribles e insolitas. Seguramente incluso personas mucho mas inteligentes o cultas estarian aterradas de vivir cosas como las que te han tocado en estos ultimos dias.... Y lo que falta.

Por ejemplo, ahora, confrontar a Yasmila. La analogia de los huevos en la garganta sigue aplicando, aunque ahora parece que los tenes mas de adorno que otra cosa...

Desnudo al completo y ya seco me dirijo hacia la puerta trasera de la casita, llevo la mente en blanco, cansada y vacía.

Seguramente la Yasmila sepa que estoy aquí, no he intentado pasar desapercibido para nada.

Apoyo la cabeza en la puerta mientras recuerdo brevemente todo lo que ha pasado, ¿Qué carajo eran esas cosas?, seguro vampiros no.

Y  ¿qué hacen tan cerca de la casa de Yasmila?, ella sabía a dónde me mandaba, lo sabía porque se altero mucho cuando supo donde había dejado el cuerpo de la mina muerta.

Ósea.

Que me mando fresquito al muere sin importarle un carajo lo que me pasara, pero no importa, se lo perdono todo.

Sea como sea.

Ella lo es todo.

Yasmila esta sentada en el sofa, mirando la tele con aburrimiento. Gira la cabeza al verte entrar desnudo. Hay un toallon blanco sobre la mesa del comedor, junto a una botella de "jugo".

-Tapate y repone fuerzas. Supongo que ahora entendes mejor porque odio ir abajo, o siquiera hablar de lo que mora en las alcantarillas. ¿Mataste alguno?

¡Vaya casualidad!, pienso ni bien entrar y ver tanto la toalla como el juego y por supuesto a Yasmila.
Quizás no estaba del todo equivocado en mis pensamientos.
Camino sin responder aun, mientras me ato la toalla a la cintura, y me bebo el “jugo loco” en dos tragos.
Ahhh bella sensación de plenitud.
Ya mas reconfortado me siento al lado de la chica mientras respondo.
Al menos dos con seguridad, herí a otros tantos, pero los malditos no se terminaban más.
 

¿Qué cosas son esas?, ¿Por qué están tan cerca de esta casa? Y aun más importante ya que veo que sabias que eso estaba allí, o al menos lo suponías, ¿Por qué me enviaste tan por libre Yasmila?

-No hay mejor experiencia que la practica. Y si no eras capaz de sobrevivir a ellos no me servirias de nada... +responde con simpleza, recostandose en el sofa hacia atras y estirando las piernas.+ Minimo tenes que poder lidiar con unos cuantos mojados. 

Mira el techo de la casa. La ultima palabra suena a nombre casi. 

-Sobre lo que son, es evidente. Personas. Humanos, aunque algo ahi abajo los cambia, los deforma... Se vuelven absolutamente horrendos a la par que depravados.. Comen cualquier cosa que cae en sus manos, aunque prefieren sobre todo la carne, de cualquier clase. Y no es que ronden mi casa, sino que viven por todo el cordon Oeste. En estos barrios pobres pasan mas desapercibidos... ellos y sus mañas. La policia apenas les da bola a las denuncias por robos o asesinatos. ¿Quien se creeria de unos monstruos en la alcantarilla?

Se abraza suavemente, negando con la cabeza, con expresion asqueada al pensar en esas cosas tan activamente...

No puedo dejar de aceptar que al menos es sincera y sus palabras ciertas.
Así que esto ha sido una “practica”, ¿una práctica para qué?, me pregunto.

Yasmila, porque te interesa tanto que pueda matar a esos “mojados” como les decís vos, ¿hay algo que quieras hacer allá abajo?, la decoración no es muy agradable la verdad, y hacen falta más de una media docena de pinitos aromáticos.
 

¿y ahora qué?, le pregunto mirándola.

Enarca una ceja levemente, gesto que es aun mas extraño dado sus ojos...

-A veces me pregunto si eres tonto... ¿Se te ocurre un lugar mas oscuro y protegido del sol? Las alcantarillas pueden convertirse en el mejor refugio para un vampiro. El aroma es un detalle menor e insignificante comparado con la supervivencia. Ademas, vos paseaste por las de cloacas. Estan tambien las otras, para el agua de lluvia. Por desgracia los mojados rondan en ambas. No hay manera sencilla de preparar un refugio con esa clase de visitas durante el dia... Seria un horrible despertar hacerlo en sus manos.

Considerando lo que vos viste le hacian al fiambre, no hay duda que tiene razon. Se cruza de brazos.

-En fin, ya lidiaremos con eso mas tarde. Por ahora, no queda mas que continuar el trabajo. Me llamaron los niños del grupo anarquista... quieren charlar. Ahora que te tengo, me atrevo un poco mas a ir a su base...+sus dedos acarician tu mejilla suavemente+... mi valiente explorador.

La respuesta agresiva de Yasmila me resbala, en mis años de vida he recibido cientos de peores insultos en verdad.

Con esta mujer vampiro, las cosas serán así me digo, ella la perfecta yo la imitación rota y mal armada.

No importa en verdad, puedo soportar eso.

El hecho de saber que pretende buscar refugio entre los recovecos de las cloacas me hace pensar en que voy a convertirme en alguien que visite el lugar a menudo.

Me estremezco internamente solo de pensar en volver allí, hundido en la mierda y acechado por esas cosas, las cuales han de tener algo infinitamente peor como señor o señora.

Pero no hay tiempo para pensar en esto, pues Yasmila me indica su próxima movida, juntarse con los anarquistas.

Poco se de este grupo pero sin dudas la “charla” terminara siendo como mínimo…intensa.

Cuando lo ordenes Yasmila le digo con frialdad pensando en otros tiempos mejores en donde podía decidir por mí mismo.

-Seguro que si. +se incorpora de un saltito, estirandose. Lleva unos leggins negros y una remerita azul ceñida, zapatillas y nada mas. Deportiva, tirando a ropa de correr+ Tengo un regalito para vos, por cierto...

Va hasta el mueble del frente, sacando un libro y abriendolo, antes de pasartelo. Es un libro falso. Adentro hay un espacio hueco, donde esta oculta una pistola, y un cargador extra.

-Lo podemos necesitar... Las balas no sirven de mucho contra nosotros, como ya sabes. Pero si hace falta los podras retrasar, o encargarte de sus amigos humanos. Despues de todo vamos a los Fonavi. Gente estupida que les siga por drogas y dinero nunca falta... 

Espero no tener que precisarla pronto me digo a mi mismo mientras miro la pistola que me acaba de dar.
voy a cambiarme digo mientras rebusco entre las ropas que encuentro por ahí, voy a tener que buscarme ropa y calzado pronto me digo mientras me cambio.

El resultado final dista mucho de lo que suelo usar, pero poca cosa hay para elegir.
Una camisa blanca, jeans celestes y gastados y unas zapatillas deportivas que han visto días mejores.
Guardo el arma bajo la cintura del jean, el cargador en el bolsillo delantero y salgo nuevamente en busca de Yasmila.
 

Cuando quieras, le digo, estoy listo.

Armado y listo, salen a patear calles. Es raro pero Yasmila no tiene vehiculo propio todavia, aunque igualmente solo van a unas pocas cuadras. El lindo Fonavi del que te habian advertido... bien. La noche no hace mas que mejorar.

Visto de cerca, los edificios dan una impresion sosa. Pero se oye la cumbia, los gritos, los villeros rondando... Se traspira la miseria pero tambien el abandono, la degradacion. Gente que no le importa matar por unas zapatillas, si estan lindas y no las trae alguien "del palo". Hasta Yasmila se torna seria. Por fortuna, suele bastar con que mire fijamente con esos ojos dispares, para apartar el interes. Aunque su ropa ajustada realza los modestos encantos que tiene, solo necesita eso para calmar a cualquier infeliz que trate de lucirse con un piropo. 

El lugar de destino se hace patente de improviso. 3 muchachos estan hablando con otro subido a una moto, mientras una chica espera algo mas atras. Todos visten de cuero negro, incomodisimo con el calorcito, lo que les hace resaltar. Y mas aun resaltan al tener todos algun arma en su mano, pistolas o escopetas recortadas, no juguetes.

Lo observo todo con atención, miro las calles por las que vamos, los recovecos para esconderse, las tapas de las cloacas, los edificios que nos rodean, los ranchitos más modestos, la gente, todo.

Este lugar es jodido, pero los tiros y las puntas dejan de asustar cuando uno está muerto, pero son las cosas que no se ven, las que reptan por debajo de la tierra.

Estos que ahora me rodean son bolsas de sangre, ¿pueden dañarme?, claro que sí, pero yo puedo lastimarlos aun mucho mas.

Miro sin interés a los negros que tengo por delante sin decir nada, después de todo soy el monigote que acompaña a Yasmila y hasta que ella no me diga lo contrario me toca cerrar la jeta.

El de la moto se baja. Es un morochito medianamente armado, con pinta relajada y confiada...

-Buenas noches, Yasmila. +saluda con parquedad, apoyandose en su vehiculo+ Gracias por venir. 

Te mira entonces tras los lentes, cruzandose de brazos. Los otros se apartan, dejandolos solos, salvo por al chica que se queda viendo con una sonrisa rara, los ojos muy fijos en ambos. 

-Asi que este es tu pollo... +dice finalmente en tono pausado+ ¿Ya lo estrenaste?