Partida Rol por web

-Bien, le explico. Tengo una traduccion encargada, un tratado bastante llamativo de la vida en la epoca colonial. Pero me adelantaron el plazo de entrega, del viernes a mañana. Estuve con esto a full pero aun no termino. Asi que si le interesa la oportunidad, nos quedariamos esta noche despues de clase, en la biblioteca. Va a venir tambien una colega del Seminario, asi que calculo entre los 3 lo podriamos adelantar muchisimo. Valoraria su asistencia en buena medida, en un sentido academico. 2 puntos extras, directo en la nota final, para ser concretos.

En el sistema argentino, la nota va de 0 a 10. Se toma el promedio de las 3 o 4 evaluaciones del periodo, y se promociona con 7 o mas. 2 puntos extras significan que hasta con un promedio 5 pasarias el curso... Por otro lado, esta el tema de Angela. Luciana tiene que estar en su turno a las medianoche. Queda ese margen de 22 a 24, en el que podrias estar con ella o comer algo y descansar.

- Está bien, pero... me temo que a las 23h debería salir, tengo algo urgente que hacer más tarde, ya le comentaré más en privado... es un buen motivo, ayudaré en lo que pueda mientras, de veras.

Dicho esto esperé la respuesta del profesor para alejarme seguidamente y esperar a que terminase la clase. 

Frunce la boca en una media sonrisa.

-Mire, Lindemann... En una hora no lo vamos a terminar, para nada. Necesito un poco mas de compromiso, si quiere el beneficio que le ofrezco. Si tiene una situacion personal, le sugiero que sopese que vale mas, lo que sea que tenga que hacer o su carrera...

Lo ultimo queda pendiente con un extraño tono, no una amenaza pero si una insinuacion de posibilidades... Latin es una que no podrias recursar el proximo semestre. Si llegaras a no pasarla, eso equivale a demorarse un año mas en los estudios. Por otro lado, los buenos promedios son lo primero que se mira al elegir candidatos de pasantias laborales...  Y en la otra esquina de la balanza esta Angela y Luisa.

Miré al profesor bastante seria.

- No es agradable estar en un hospital ¿sabe? Discúlpeme, pero prefiero pasar las posibles últimas horas de una persona a su lado. Por la nota, me esforzaré más de lo normal, no tema. Y si tiene otro trabajo más adelante no dude en preguntar. En cualquier caso, gracias por haberme prestado la oportunidad.

No esbocé ni siquiera una sonrisa, no podía ni quería fingir. Me fui a mi asiento antes de que dijese nada más.

Entrecierra los ojos simplemente. No es muy probable que vuelvas a tener una chance. Algo te dice que desde ahora, sera la mas ardua de las 3 para vos... En cambio, llama a Belen, la cual al parecer accede.

La clase termina poco despues. La mayoria entregan apesadumbrados y los murmullos de que se van a comer un "bochazo" , es decir una baja nota, son bastante frecuentes. Noelia y Yuliana apenas alcanzaron a completar 2 ejercicios. Blas hizo 4, una minima mejoria. Belen los mira con aire de suficiencia, ella se paso la ultima media hora simplemente tarareando algo. Al terminar la clase, es quien se queda como habian acordado con el profe Nitri, con grandes muestras de amistad. 

Blas te acompaña afuera. La noche es agradablemente fresca. Viene una humeda brisa desde la cercanisima laguna, que adormece el cuerpo cansado despues del largo dia.

-¿Que-quequeres qque te-te lleve? +pregunta, solicito. A pesar de lo de esta tarde, sigue portandose timido y amable como siempre, aunque esboza una pequeñisima sonrisa.

Suspiré, al fin había terminado la clase... se había hecho demasiado larga para mi gusto.

- Claro, me harías un gran favor. - dije con una leve sonrisa.

Solo tenía ganas de volver a casa, preparar las cosas e irme hacia el hospital para ver cómo seguía Ángela. Llamé a Lu para saber si todo iba bien y en nada y menos iba a irme a pasar las dos horas antes de que se fuese.

Lu te comunica que al fin la trasladaron. Estan en un ala diferente, habitacion de terapia, segundo piso, puerta 204. Si no te ubicas llamala en la puerta, asi viene a buscarte.

El buenito de Blas te lleva a tu casa sin titubear, entre tanto. La noche va cayendo en la ciudad, y la gente sale a disfrutar el fresco. Por suerte Candioti es uno de los barrios mas tranquilos, asi que todo esta en bastante silencio a comparacion de la Costanera. Es relajante.... Al dejarte en la puerta, sentis la mano del rubio acariciando tu siniestra. 

-¿Pu-pu-puedo ha-acer algo mamas por vos? +pregunta, mientras sus dedos buscan entrelazarse con los tuyos titubeantes.

Con el rostro ya serio por la preocupación negué con la cabeza ante la pregunta de Blas, le dejé un suave beso en la mejilla y subí a mi piso. Me duché de nuevo, me cambié, preparé las cosas y ya estaba lista para marchar al hospital. Al llegar busqué la sala siguiendo las indicaciones de Lu, aunque al final acabé preguntando a una enfermera para llegar. Finalmente vi a Lu y le di un abrazo.

- Ya estoy aquí... ¿Cómo fue la tarde? ¿alguna novedad? ¿Ocurrió algo? Estaba muy preocupada, aun estando en clase no dejaba de pensar en esto y... bueno... al menos la trasladaron  y supongo que eso es buena señal ¿no?

Despues de toda la movida, Luisa se ve algo ojerosa, pero se las arregla de alguna manera para sonreir levemente.

-Se ha estabilizado y dejo de sangrar internamente, pero todavia no recupera la conciencia. La... la entubaron, para ayudarla a respirar. El daño cerebral parece que ha sido serio. Esta noche se vera. +murmura en tono quedo, apesadumbrado. Refugia la cabeza en tu hombro, cerrando los ojos, fatigada fisica y emocionalmente+... Te juro que no se que hacer, Eli... Tengo ganas de seguir llorando pero hasta para eso estoy cansada. Encima tener que ir a la comisaria... 

Podes sentir como su brazo se mueve para mirar el reloj. Las 23 pasadas deben ser, mas o menos. El hospital esta tranquilo, al menos en esta ala. Aparte de ustedes, solo hay un par de enfermeros y 2 o 3 personas mas con pinta de estar en la misma que ustedes. Al cabo de unos instantes, sin embargo, ois un suspiro, como si el abrazo le devolviera fuerzas, y se separa de vos.

-En fin... si ya estas aca, yo parto. Cuanto antes arregle esto, mejor. ¿Necesitas algo?

Suspiré y la abracé con fuerza. Sabía que estaba agotada, pero no había nada más que hacer que esperar... era triste, pero cierto, todas las esperanzas quedaban en las horas, los minutos y los segundos que pasaban terriblemente lentos... llegando casi a desquiciar por su lentitud. Cuando pensabas que había pasado media hora mirabas el reloj y... ¿5 minutos? Era espantoso... Finalmente me despedí de Lu.

- No, tranquila, aunque tengo que cenar y tal... ya veré cómo me las arreglo. En todo caso, ten el teléfono preparado por si hay alguna urgencia y debo llamarte ¿de acuerdo? Y ya sabes... cualquier cosa importante, sea lo que sea, me avisas. Si hay algún avance en el caso, cualquier cosa ¿me oíste? cualquier cosa, me avisas. Intenta relajarte un poco... estaré yo con ella, no te preocupes.

Froté sus brazos con las manos, tratando de animarla un poco. Finalmente se fue y decidí quedarme en la habitación, esperando que algún enfermero o médico llegase para preguntar dónde ir a cenar o si podían traerme algo, por poco que fuese, para no tener que alejarme mucho tiempo de Ángela. En aquel estado era muy triste estar ahí... viendo cuan mal estaba... me partía el corazón y me desgarraba el alma... Quien fuese que había hecho eso debía pagar... sobretodo debía sufrir... mucho... 

Lu se va. Al irse primero entra en la pieza, donde besa la frente de Angela suavemente. Luego la deja en tus manos.

Angela es un espectaculo tristisimo. Las vendas siguen alli y la tez no ha variado su color, quizas incluso esta mas palida. Incluso parece haber enflaquecido un poco durante el dia. Su cuerpo menudito y usualmente de curvas muy apropiadas, parece fundido con la sabana de la gran cama. 

El cuarto es una pieza sencilla, con dos camas. La otra esta ocupada por una anciana de tez morena, que duerme placidamente. No hay nadie que la cuide en este turno pero al menos no molesta. Ademas tiene armarios donde meter las cosas, y un baño propio. Hay una tele con la que distraerte, si bien se impone el volumen bajito. Pasa muy poca gente en esta zona y todos lo hacen con cautela, como temerosos... Algun enfermero ocasional que pispea, poco mas.

Las horas corren. Tu cabeza se siente pesada por el larguisimo dia. En eso, en la puerta aparece una linda chica, de ropa oscura y onda un tanto gotica. Se apoya en el marco con soltura.

-Buenas. Se te nota cansada...+saluda como si nada, con voz suave y dulce, algo grave. No te resulta familiar en lo absoluto pero te trata como si fueran conocidas de alguna parte.

Las horas pasaban de tal modo que parecían golpearme duramente, viendo a Ángela tan mal... nada podía conseguir una sonrisa en mi rostro. Tenía miedo por lo que podía pasar de ahora en adelante, solo quería... solo deseaba y rogaba a dios... que Ángela se recuperase y todo fuese bien. Que atrapasen a ese cabrón y le hiciesen pagar por todo. Ahora estaba sola... pasaban más lentos los minutos... De repente entró una chica, que no conocía de nada, y me habló de modo muy cercano, lo que me pareció extraño.

- Buenas... ¿te conozco de algo? - esperé unos segundos antes de contestar - bueno... lo de cansada es normal, supongo... ¿quién podría descansar teniendo que ver a una amiga así? No sabes cuanto me gustaría hacer pagar a la persona que le hizo esto... - apreté los puños mientras observaba el cuerpo de Ángela que me ponía aún más triste.

No te responde inmediatamente, escuchando en silencio. Luego ahoga un bostezo, despreocupada, caminando dentro del cuarto para acomodarse frente a vos. Es una mujer sensual, de curvas algo rellenitas, y eso combinado con su ropa de estilo gotico moderno le dan un aire a prostituta. 

-Te entiendo demasiado bien... Justamente ayer una amiga mia fallecio... mejor dicho, fue asesinada.+dice suspirando. No parece demasiado triste, aunque puede que lo disimule. Su palidez antinatural indica que lleva bastante maquillaje encima...+ No he descansado bien la verdad, con esa cuestion en la cabeza. Lo que mas quiero en este mundo es encontrar al responsable y partirle el cuello con mis propias manos... ¿Porque sera que le pasan cosas malas a la gente mas dulce y bondadosa?

Miré atentamente a aquella mujer. No sabía por qué me hablaba con esa confianza, no me conocía de nada, aunque luego pensé en que quizás simplemente era una chica que buscaba alguien con quien hablar y descansar de su dolor ante la pérdida de una persona querida.

- Lo... lo siento... Realmente... lo que... le ha ocurrido a ella... - miré al cuerpo de Ángela con los ojos húmedos - fue... causado por un cabrón al que le pareció divertido dar una paliza a las enfermeras que intentaban ayudarle... yo... no sé qué hacer... la policía aún no ha encontrado al culpable y temo que no lo hagan... yo también quisiera encontrarme a ese mal nacido y partirle el cuello con mis propias manos... Ella no se merecía esto. Era la persona más encantadora y amable que conocía, siempre se preocupaba por los demás... ¿Por qué? ¿Por qué a ella? 

Dejé un leve suspiro mientras le secaba las lágrimas que caían despacio por mi rostro, intentando ocultarse pero sin lograrlo ni por un segundo. No podía evitar sentir ese dolor en el pecho, solo quería que Ángela se recuperase.

Sentis que se mueve, y en un momento tenes su mano acariciandote la cara. Asiente con la cabeza, comprensiva. Los ojos azules te miran fijamente, ojos como cristales de hielo, o tal vez como fragmentos de cielo. Resulta imposible ignorarlos. En tono suave, reconfortante dice:

-Lo se. Tanta injusticia hay en este mundo... La mano de Dios se ha apartado de nosotros, y por mas que nos esforzamos en proteger a quienes adoramos, al final nos son arrebatados. No podemos hacer mas que lamentar su perdida, enjuagar nuestras mejillas de las lagrimas, y tratar de enmendar por nuestros medios esa cruel realidad... Me agradas. En los sentimientos que expresas por tu amiga se nota que eres una joven dulce, comprensiva. Somos tan similares...

Esas palabras tienen un efecto muy fuerte en ti, casi narcotico. Los brazos se te aflojan levemente, la tension se relaja, y la cabeza parece liberarse de la presion a la que ha estado sometida. Estas frente a alguien que entiende tu dolor, tu rabia. Cuando se sube a tus piernas y sus labios rojos se unen a los tuyos en un calido beso, no terminas de entender porque no podes apartarla...

Todo pasó muy rápido, esos ojos, esa mirada... quedé inmóvil, aunque relajada ¿Qué demonios me está pasando? Vamos, reacciona ¡Reacciona! no podía moverme apenas, no entendía nada. En un parpadeo se subió a mis piernas ¿Qué hace? ... ¿Pero qué...? sus labios se unieron con los míos pero no me moví, ni le devolví el beso, me quedé cual muñeca, sin pestañear siquiera. No quería herir los sentimientos de nadie, pero no entendía qué estaba haciendo esa chica, me acababa de conocer.

 -  ¿Qué... que haces? Yo... lo... lo siento... pero no... veamos... yo soy hetero... - esbocé una media sonrisa forzada, como modo de disculpa - cre... creo que debería haberlo dicho antes... lo siento. ¿Podrías... volver a sentarte en la silla? por favor.

Abre los ojos y encuentra los tuyos nuevamente. Hay un brillo terrible dentro... Susurra claramente.

-Calla.

Sin poder saber como, tus labios se cierran fuertemente, obediente. Ella te pasa los dedos por encima con una caricia. Al tratar de volver a hablar, notas con malestar que no puedes despegarlos... No los sientes. De hecho toda tu boca parece sellada. Al tratar de respirar o exhalar, notas con horror que ha desaparecido!! Una tira de piel lisa cubre tus mandibulas!!

Ella solo sonrie y sigue besandote, por el cuello, mientras sus brazos te rodean. Sus firmes pechos se frotan con los tuyos, al parecer exitada. ¿Que diablos esta pasando? Que es esto??

¿Callarme? ¿Por qué tenía que callarme? Intenté hablar... ¿Qué es esto? ¿Por qué no puedo...? Mis ojos se quedaron abiertos como platos, no tenía labios o eso parecía... Joder... Joder... intenta relajarte, cuanto menos te note tensa antes terminará todo esto... respiré lentamente por la nariz y cerré los ojos, casi dispuesta a que pasase lo peor. 

Hazlo... total, tampoco es que tenga a nadie en este mundo... Hazlo, estás tardando... Matándome casi que me harías un favor, dejaría de ver a Ángela mal... dejaría de tener que preocuparme por los estudios y ni siquiera me sentiré sola. Lu estará mejor así, aunque la echaré de menos, pero estoy segura de que saldrá adelante, es fuerte... Pero... ¿Tú qué eres? Mi mente recurrió a Drácula... criaturas hermosas con extrañas miradas que provocan atracción y cosas raras... ¿Será posible? No... no creo... aunque sino... ¿Cómo me explico esto? ... no hay modo de... Evidentemente no, Eli, no hay manera de escapar... ¿Cuantas veces te has leído el libro? tantas como para saber que lo que les mueve es la diversión y la sed de sangre... hazlo... mátame o... haz lo que quieras...

En eso golpean la puerta. Ambas voltean... Resulta ser un muchacho de unos veintes, de elegante traje. Tez lampiña, cabello largo y rubicundo... Ojos azules brillantes, como los de la chica.

-Mis disculpas... ¿Interrumpo? +dice con voz rica y modulada, entrando. Examina tu cara, notando lo que te ha sucedido. Con tono calmo, se dirige a la mujer encima tuyo.+ Alexia... ¿Que estas haciendo? Limpiar y salir, no jugar y complicar. ¿Es esta la chica?. 

Suspira, abrazandote y haciendo que mires bien al chico.

-No, es la de la cama... Pero esta es su amiga. Es tan dulce!!! Y mirala, se parece a Betiana tanto... Quiero conservarla!!!! Por favooor, querido... +dice suplicante, para de inmediato cambiar el tono a uno mas astuto+ Asi le compenso lo que el idiota de Lucas hizo, y emparejamos los numeros...