Partida Rol por web

-Jaja... que pasa putito... solo sabes pegar de escondidas? Diria que peleas como nena, pero una nena soy yo y te escapas de mi. ¿Te mordieron en los huevos cuando te abrazaron, que quedaste asi? Tu sire debe ser bastante gay tambien...

Las palabras de la chica son afiladas y burlonas, asi como el claro tono de superioridad con que las dice. Carcomen incluso mas dolorosamente que la bala que te diera antes. Es dificil luchar con la tentacion de cerrarle el pico de un garrazo...

Entretanto, el hombre tatuado va ganando la puerta suavemente, mientras que Tiago baja de la pila de metal y te cubre el flanco. Ninguno de los dos baja la guardia un apice.

En aquel momento sabia que la mujer realmente estaba deseando su ataque y por eso le provocaba, pero aun asi los comentarios resultaban muy desagradables hasta el punto de no poder tolerarlos. Apreto dientes con furia y se lanzó tan directó a traves de la puerta como un misil teledirigido dispuesto a impactar.

Mientras lo hacia su cuerpo se regeneraba del disparo recibido de forma refleja como una respuesta natural en un organismo biologico debido a la presión del combate. No habria especulación, fintas ni trucos sino la voluntad de destruir cuanto se le interpusiese para así demostrar que era digno del orgullo que como guerrero tribal tenía.

La chica desde luego lo habia provocado adrede, y te recibe con un impacto en pleno rostro, mientras salta hacia atras , apartandose de ti. La bala da en tu pomulo por fortuna, gracias a que estas en movimiento, pero aun asi es un golpe sentido.

-Jajaja... que pobre idiota. +rie burlona+... Sabiendo y todo no te resistis. Machitos que se hacen... +comenta, aguardandote. Sus movimientos son agiles y serpentinos, mucho mas calculados que los del tipo de antes. 

Magocto ya se habia encontrado en una situación parecida anteriormente. Cuando uno se enfrentaba a un guerrero con un conocimiento superior, a este le bastaba con mirar para saber que haria el inexperto después. De algun modo la mujer tenia un don para anticipar el movimiento que deseaba hacer e incluso saber de otras intenciones. 

En su tribu combatian esta superioridad con algo que llamaban: que la lanzada sea tan rapida como el deseo.

Si un combatiente fuese capaz de traducir sus pensamientos en actos con absoluta inmediatez lograba que la posibilidad de precedirlos perdiese su valor al acabar con el tiempo de reacción. Para alcanzar un estilo de combate tan instintivo se requeria mucha practica y los riesgos que suponia en ocasiones perder toda técnica.

Si bien magocto no era tan habilidoso en alcanzar este estado de fluir en la mente su transformación en vampiro le había abierto muchas posibilidades. Ya no tenia que alcanzar ese estado cuando conocía un estado que conseguía lo mismo con absoluta seguridad: El frenesi.

La bestia le había estado acechando desde que aquella mujer decidio provocarle y aunque ella creyese controlar la situación no basta con conocer los pensamientos inmediatos para saber de lo que es capaz un individuo. Magocto entro en sintonia con su pasado y sencillamente se abandono a la bestia que deseaba hacer muchas cosas y pensar poco.

1: Curar daño letal en batalla requiere tirar Supervivencia+Resistencia, dif 8. si fallas pierdes la vitae sin curar y si pifias, tu herida se agrava.

2: No puedes entrar en frenesi autoinfligido, eso requiere ser Sabbat y tener Instintos en lugar de Autocontrol (ademas de un gasto de FV) o el merito Berserker. Sorry. en todo caso, podes forzar las cosas para perder el control. Si seguis siendo humillado por ejemplo, no va a tardar mucho que debas tirar autocontrol, pero mientras sean simples la dif es 4, lo manejas automaticamente dado que es la mejor virtud de tu pj XD. Tiene que ser algo terrible y que suba a 8.

3: Frenesi, yo lo llevo muy simple, cuando alguien cae en el, su ficha es mia y lo uso como me da la gana, en modo kamikaze contra todo lo que halla en el camino, enemigo o amigo :3. Asi sigue por una escena, hasta que muera, quede solo o satisfecho. Lo que ocurra primero. 

Fiel a su idea de alcanzar ese estado mental lanzo sus garras sin premeditación ni tecnica dando dos zarpazos dirigidos hacia la mujer.

La maldita suerte hace que tu ira te haga tropezar con una silla algo salida, y tus garras arañan el aire, mientras ella esquiva hacia atras con habilidad, volviendo hacia la escalerita. Igualmente, queda cerca, lo adecuado para apuntar friamente a tu cabeza y colocar una bala en ella, dolorosamente certera. No parece alarmada porque hallas resistido y sanado buena parte de la primera. 

-Jejeje... Casi, nene, casi... +comenta sobre tus ataques simplemente.