Partida Rol por web

Claire se acercó a husmear en las bicis. Tamaño, ruedas infladas o no, con o sin candado.

A cada instante alzaba la cabeza por si aparecían los dueños.

Un vez analizada la situación buscó la puerta para poder hablar con los dueños de la casa.

Si tenían teléfono quizás podrían avisar a la policía para que fueran a socorrer a los ancianos.

No es una casa grande, podriamos decir que es un bongalow alargado y algo mas grande, como un barracon...de las 5 bicis hay 2 que estan bien pero son de niños demasiado pequeños, aunque a malas podrias usarla, incluso una de ellas va sin pedales...pero claro seria mas comodo que andar y rapido. Pero por suerte hay dos grandes que estan en un estado aceptable.

Finalmente te quedas delante de la puerta blanca valorando las opciones.

Intentó ver si había alguien através de alguna ventana y luego llamó a la puerta con decisión mientras intentaba pensar que les diria a los que allí vivieran.

En este lado hay dos ventanas normales y una triple al lado de la puerta, las dos pequeñas no llegas al ser una construccion sobre unos cimientos elevados medio metro. Subes por los peldaños de madera para llegar a la escalera y sacas la cabeza por la ventana triple, no ves practicamente nada al estar completamente oscuro en el  interior, pero poco a poco se adapta, pero no ves nada que te llame la atencion.

Sin apenas tiempo un golpe suena a la puerta, pero no un golpe de alguien que pica como el tuyo, mas bien como si algo se hubiera golpeado o mas bien estampado contra la puerta, incluso pegas un salto por no esperar esa reaccion...seguido de golpes mas leves pero intensos.

Claire hechó un pie atrás quedando en esa postura, con el rostro demudado por la confusión y por cierta desazón que comenzaba a germinar

¿Qué había sido eso? Allí pasaba algo raro...

Terminó de dar el paso y luego otro. Esperó un poco por si alguien abría la puerta, pues no quería pecar de paranoica pero aún así mantuvo el palo bien sujeto en su diestra

los golpes se repitieron constantemente, incluso se unio otro golpeteo en otro ritmo...aunque no fue el ultimo un golpe mas leve golpeaba entre los otros dos....la puerta habia momentos que se movia, pero dudabas bastante que llegara a ceder.

Aquello no estaba bien. Aquello no era normal. Desandó el camino hacia el lugar donde había visto las bicicletas y cogió una de las dos que servían a su tamaño y que tenía pedales. Tenía que salir de allí lo antes posible. Intentaba casar en su cabeza las piezas del puzzle pero había muchas cosas sin sentido. Y solo podía pensar en los ancianos que había dejado en manos de aquellos majaderos.

Pedaleó todo lo que pudo siempre alerta, por si encontraba un coche policia, o un puto coche cualquiera.

"Joder!"

La bici fue un acierto...tu velocidad era mas del doble y sin tener que hacer mas esfuerzo, aunque las piernas estaban cansadas...la bici era un transporte silencioso y rapido.

No paso ni 5 minutos en bici que pasaste por delante de otra casa, cuando empezaste a frenar para tomar el camino de desvio los frenos chirriaron un poco, del medio del jardin delantero de las casas viste que una persona levantaba la cabeza y empezaba a correr hacia ti...es como si despertara de un sueño al escucharte, su "correr" muy parecido a los que viste corriendo hacia la casa de los viejecitos....

Con un grito asustado Claire volvió a pedalear más rápido intentando no salirse del camino pero lo más alejado posible del jardín.

- Porque me persigues?! Yo no he hecho nada?! - gritó sin entender porque aquellas personas les estaban dando caza. Menos mal que el miedo no había dado paso al llanto si no lo tendría jodido para ver.

Continuas tu camino a cierta velocidad 5 minutos mas tarde te encuentras que hay una casa practicamente a lado y lado del camino y al frente a un lado otra, miras atras y ese maldito loco continua persiguiendote lo tienes a un par de minutos a su ritmo pero esta claro que son ostinados....quizas sea mejor ocultarse o continuar hacia adelante y buscar ya un refugio por la noche.

Claire no podía creerlo. El tío seguía detrás de ella y no parecía cansarse. Tampoco había respondido a sus preguntas.

Sentía las fuerzas flaquear así que decidió arriesgarse y frenó de golpe para dejar la bici a un lado y meterse corriendo a la derecha. Bordeó la casa para acabar en un lateral y de mantuvo atenta al ruido para irse moviendo con sigilo hacia la parte de atrás cuando el tipo girase