Partida Rol por web

La instrucciones del General Moraldo han sido claras: entrar, recuperar la información, y salir. Rápido y sencillo. Aunque luego os ha dado una larga charla sobre lo que podríais encontrar ahí dentro y de lo que nadie está seguro... eso os inquieta algo más.

Nadie sabe lo que hay dentro del búnker ni su configuración. Se sabe que es bastante grande y que esconde secretos que nunca nadie quiso que viesen la luz. Se sabe que ahí abajo se realizaban experimentos de dudosa ética.

Debéis recuperar un disco duro con información clasificada:

- El disco duro debe tener el tamaño de un maletín, y debe pesar lo suyo. Es frágil, así que deben evitarse golpes y por supuesto la humedad.

- El disco duro está en la unidad AI2021 (un ordenador de grandes dimensiones, como un coche más o menos, que debe estar apoyado en suelo firme y conectado a una red de energía muy potente).

- La sala donde se encuentra el ordenador está en la DICE (División de Ingeniería Científica y Experimental). Que haya divisiones ahí dentro ya os da una idea del descomunal tamaño del sitio.

Os trasladan al lugar en girocóptero, una especie de máquina reconstruida con los restos de un helicóptero, una ranchera, y dos pequeños coches. Ya hay que ser valientes para subir ahí, y más sabiendo que las pruebas que se han hecho han sido muy pocas, dada la escasez de combustible. La piloto tiene una punta de loca que asusta, y durante todo el trayecto no os dirige la palabra, está muy concentrada intentando que su máquina no se deshaga en mil pedazos, e incluso le habla como si de su propio bebé se tratase.

El aparato aterriza en el mismo Monte Pío, frente a la puerta del búnker. El cielo está cubierto y una fina lluvia os empapa nada más salir. La piloto, Ukrain, os esperará aquí. El recinto está vallado y fortificado, y no parace fácilmente penetrable por los infectados, aunque el ruido de "su bebé", os dice, atraerá a miles. Daos prisa.

Hemorragia coloca una carga explosiva en la puerta y la hace volar por los aires. El estruendo es fuerte y retumba en todas las paredes cercanas. Antes de que la nube de polvo se pone, una horda de zombis sale corriendo al exterior, desbocada, descontrolada. Hemorragia y Prime, en primera línea, descargan sus armas contra ellos. Son vuestro escudo. O lo eran, pues dan sus vidas por salvaros.

No queda zombi en pie, pero habéis perdido a puño de hierro del comando, y también a vuestro líder.

Sentada con la espalda apoya sobres piedra de lo que antes habría sido una pared, me encontraba esperando a que todo comenzase. La explosión hizo que activase mis músculos aferrando el casco para comprobar por enésima vez que estuviese bien sujeto. Solo había perdido unos segundos antes de levantarme, los suficientes para que ellos muriesen. Salí de mi escondrijo para completar la misión acercándome a la puerta recién abierta, no sin antes acercarme a los cuerpos caídos y algo mutilados para certificar lo que no hacía falta. tras realizar una mínima comprobación del inexistente latido continué mi carrera agazapada hacía en la interior.
Esperaba no tener que ser la primera en tener que entrar en esas instalaciones en las que sabíamos que había infectados. No era una tropa de asalto, ni una militar de élite, mi función era otra. Respire con sonoridad para seguir los pasos de la primera persona que se adentrase.
El olor que en principio había disimulado la explosión inundó mis fosas nasales antes de cruzar el umbral. Descomposición y humedad, una mezcla que haría levantar a los muertos. Ese pensamiento hizo que sonriese. En una situación tan dramática y jugándose la vida, se le había ocurrido un chiste que no lo comentaría para que no pensasen que era una enferma mental

Despues de casi caer sobre sus hombros gracias a la onda expansiva de la explosion Jesse se vuelve a poner en equilibrio y se sacude el polvo y las gotas de lluvia de sus hombros .-¡Pues eso si que ha sido una gran explosion!-. Dijo Jesse en un tono algo burlesco tratando de quitarle un poco de presión a la situacion, se acerco a sus compañeros caidos y tomando el casco de Hemorragia y las chapas que este habia dejado atras poco antes de perecer.

.-Quien lo diria, despues de todo si eras un idiota hemorragia, pero eras mi amigo y eso es algo que llevare conmigo siempre y mas ahora a punto de entrar en este lugar lleno de muerte y oscuridad, ¡gracias por todo hermano!.- Decia Jesse clavando el arma de su compañero en la tierra y colocando su casco en la punta en señal de respeto y tratando de hacer una tumba improvisada a la vez que guardaba las chapas en su cuello agregandola de acompañamiento en su bufanda .-Ahora si chicos, de ahora en mas tener cuidado y a cuidar nuestras espaldas, entramos juntos y salimos juntos, formación piramidal y preparados para el ingreso.

Con la onda expansiva de la explosión caigo golpeandome todo el cuerpo contra el piso y los escombros. Me levanto aturdido por la misma, escucho solamente un fuerte pitido en mis oídos mientras veo a mis compañeros muertos. En ese momento me doy cuenta de la gravedad de la situación y de lo realmente peligroso de la misión.

Veo a Nathalia caminando hacia la puerta que habíamos volado y me acerco hacía ella, no iba a dejar que ingresé sola.

La primera sala es una especie de garaje. Hay vehículos, cajas apiladas sobre palés, y mucho desorden. Al parecer los que trabajan aquí intentaron salir pero no lo consiguieron. Se quedaron muy cerca. Llevaban décadas en este lugar, esperando, en letargo, en la penumbra. Ahora al fin se les ha dado paz.

En la pared del fondo hay dos puertas iguales. Una junto a la otra. Son puertas grandes, blindadas, por las que cabría un vehículo. Pero no están abiertas. Están selladas.

Junto a cada una hay un pequeño teclado, sin energía. No veis mucho más por ahí.

El lugar está sumido en la más completa oscuridad. El silencio es sobrecogedor.

Ingreso a la habitación y noto que hay dos puertas blindadas cerradas y ambas tienen un teclado. Se que podría abrir las puertas si lo intentará, empiezo a analizar ambas puertas y veo que están desactivadas, por falta de energía o por una avería en el circuito  ​​​​​voy a intentar abrir la puerta de la izquierda. Les digo a mis compañeros y me pongo a trabar.

Intento seguir el circuito hasta encontrar el inconveniente, los cables están cortados....intento conectarlos pero no lo logro.

Empiezo a pensar que esto no es para mí, no puede ser que no pueda abrir una maldita puerta.

Sin emitir sonido alguna dada mí frustración me dirijo hacía la puerta de la derecha.

Esta vez reviso con más detenimiento y noto que el teclado tiene dos cables desconectados. Analizo por un buen rato como co deberían conectar.

Transpirando por el nerviosismo conecto los cables y veo que el teclado se activa, sigo revisando las conexiones y realizó unos cambios para intentar forzar que la puerta se abra.

Luego de un rato creo que logré destrabar la puerta.Creo que logré abrir la puerta les digo a mis compañeros con una sonrisa en mí rostro.

Veis a Román trastear con los controles de las puertas, en principio sin éxito. La de la izquierda en un momento dado parece que va a abrirse, y algo hace un ruido extraño, pero nada. El experto en infiltraciones parece darse por vencido con esta, pero lo vuelve a intentar con la de la derecha.

Aquí parece haber dado con la clave. Al conectarla, las luces de emergencia del acceso en el que os encontráis se encienden. No es que esté todo tremendamente iluminado, pero al menos intuís los bordes de los muros. Vuelve a haber otro ruido extraño, y la puerta se abre, deslizándose hacia arriba lentamente.

Al otro lado, lo que parece un almacén, hay muchos palés cargados con cajas, suministros... También hay dos camiones y varios barriles amarillos con el símbolo de biohazard en color negro pintado sobre ellos. No hay zombis.

Aquí también están las luces de emergencia, y otra ámbar que gira frenéticamente anunciando algún peligro. A la izquierda hay una puerta de tamaño normal. Al fondo otras dos, y a la derecha parece haber un hueco.

Eran manos- No dije mucho más sobre las muertes que se acababan de producir. No habían sido las primeras que había presenciado ni serían las últimas, quizas, con un poco de suerte, pueda examinar sus cadaveres más a fondo al salir de este búnker. Eso es lo que pensaba en aquellos momentos mientras se abrían las puertas, continuar con mis investigaciones sobre la propagación del virus. Las luces hicieron que volviese a la realidad y moviese mi culo dentro para ver la cantidad de cosas que se encontraban -¿Tenemos tiempo de echar un ojo?- Nunca se sabe que se podía encontrar en un lugar como aquel.
Entre la multitud de elecciones, tuve que empezar con las cajas marcadas, las más peligrosas a primera vista y las que más curiosidad me generaban ¿Que ocultarían en su interiror?

No me esperaba encender las luces a demás de abrir de la puerta. Cruzo del otro lado y escucho a Nathalia y le respondo Revisemos el lugar, pero tratemos de que sea rápido. No nos olvidemos de porque estamos aqui.

Veo que ella se acerca a unas cajas por lo que decido revisar los camiones, para ver si están cargados y con que.

Hay gran variedad de cajas. De madera, de metal, de plástico. Las hay que se pueden abrir con facilidad y otras con sistemas de apertura complejos, con dispositivos de contraseña y lector de huellas y tarjetas.

Encontráis suministros de oficina (papel, bolígrafos, carpetas...), también comida (latas, legumbres, cajas de cereales, agua, café, bebidas...), y también material quirúrgico y sanitario (alcohol, jeringuillas, batas, viales...). Las cajas cerradas y protegidas siguen siendo una incógnita.

Las dos puertas del fondo albergan grandes maquinarias. Presumiblemente para reciclado de aire y agua del complejo, para ventilación y control de habitabilidad. Están apagadas, pero un cuadro de mando permitiría reiniciarlas si hubiese energía suficiente.

El hueco de la derecha deja entrever luz por unas rendijas, pero no hay mecanismo alguno para abrirlo. Parece ser un acceso bloqueado desde el otro lado. Un acceso oculto.

La puerta de la izquierda da a un pequeño espacio, en comparación con los hangares de carga por los que habéis pasado hasta ahora. Se trata de una especie de recepción, con un mostrador, varios ordenadores, dos sillas y varias macetas con plantas muertas. Hay dos puertas de ascensores y un pequeño letrero que indica "Nivel 0".

No encontré nada interesante en las cajas y en ningún otro lugar, quizás si tuviésemos más tiempo podríamos obtener un botín jugoso -No encuentro nada- Hice señas con la cabeza para que avanzásemos. Estar en movimiento podía evitar algún ataque de los infectados -¿Por donde vamos?- No quería ser la primera, no estaba preparada para ser asaltada por esos monstruos, así que me mantuve en mi fan habitual segundo plano para que otro abriese la marcha.
Un escalofrío me recorrió la espalda como si fuese un aviso de los peligros que nos podíamos encontrar más adelante. El silencio me ponía nerviosa, era como si nos estuviesen preparando una emboscada. Solo de pensar cómo podían saltar sobre mi, derribarme y sufrir el dolor de los dientes al clavarse sobre mi piel, desgarrando la carne, músculos y tendones mientras se quebraban huesos... Sacudí la cabeza para olvidarme de esos pensamientos. Llevaba unos pocos minutos en aquel lugar y ya tenía ganas de abandonarlo volviendo a la seguridad de mi hogar

Jesse estuvo callado y pensante por gran parte del inicio en la intrusión al bunker, se habia limitado a mover algunas cosas y asentir con la cabeza si era necesario pero ya era momento de hablar .-Basura y mas basura,¿como puede ser siquiera posible no encontrar absolutamente nada en este lugar? llevamos caminando un buen rato y lo maximo que hemos logrado es oir el sonido de una puerta chirriante y ver a Roman fallar en tratar de abrir otra.- Dijo Jesse con un tono de enojo con frustracion por no poder lograr nada hasta ese momento, se notaba en su rostro y en su seño fruncido que no era el momento mas feliz de su vida .-Bueno, creo que lo mas factible seria tomar algunas provisiones que puedan servirnos para el futuro y tomar el camino de la izquierda, Nat tu ve en el medio no queremos que sufras un ataque frontal si es que llega a haber uno y tampoco quiero que en caso de ataque por la retaguardia salgas herida, todos somos pieza fundamental del equipo y debemos mantenernos en uno con el otro asi que...Yo ire en frente.

¡En fila y avanzamos al terminar de recolectar y al estar preparados! ¿Entendido?

Reviso los camiones y no encuentro nada interesante, nada de lo que veo nos serviría.

Escucho que Jesse me nombra y se lo ve bastante molesto, quizás por la situación en la que nos encontramos. Decido no darle importancia a sus comentarios, pienso que somos un equipo y no tenemos tiempo para pelearnos entre nosotros.

Estoy de acuerdo con Jesse, avancemos por la izquierda, cubro la retaguardia.

Me parece una buena idea la Jesse, por lo que decido aceptarla.estamos de acuerdo en que debemos avanzar y no perder tiempo. Necesitamos encontrar lo que vinimos a buscar.

Seguís explorando el lugar, que parece ser de planta simétrica. Al otro lado de la "recepción" hay otra puerta. Jesse va en cabeza, seguido de Nathalia y Román. Al abrir la puerta unos cinco zombis os asaltan, antes han debido oír los ruidos de Román al intentar abrir la puerta de la izquierda.

Jesse es el más preparado en combate, pero los demás también tenéis armas. Todos podéis luchar.

plano del nivel 0

Jesse no era la persona mas amable en momentos de tension pero al menos pudo controlarse en gran medida para no armar un escandalo mayor, al ver que no encontraba nada volvio a llamar a formacion .-Formacion en fila, como ya he dicho Nat vas en medio,Roman cubre la retaguardia y yo voy a la cabeza ¡Avanzamos!.- Con pasos cuidadosos fuimos avanzando por el lugar hasta que un grito se escucha a la lejania pero acercandose cada vez mas .-Preparados para contacto, esto no es un campo de juegos pero oh si, definitivamente ibamos a jugar.- Jesse puso su arma al hombro, se limpia el sudor de la frente y el momento ha llegado.

¡A machacar algunas cabezas!

Coged lo que queráis, no parece que haya nada interesante- Comenté al ver el interior de las cajas antes de continuar avanzando. Solo quedábamos ya tres y esperaba que fuésemos suficientes. Ya notaba como estaba sudando por la tensión cuando vimos nuevamente a más infectados. Aferré con fuerza el arma apoyándola en el hombro para evitar el retroceso y sin dejar de caminar dispare sin apuntar, pensando que como eran varios les daría sin dificultad.
En mi primer intento había cerrado los ojos porque no estaba aún acostumbrada a este tipo de misiones. Lo mío es los hospitales, las vendas, y los microscopios, las armas no estaban echas para mi

Decidimos caminar hacia la puerta de la izquierda, yo voy cubriendo la retaguardia para que cualquier cosa que pueda haber aquí dentro no nos agarre desprevenidos.

Mientras camino se empiezan a escuchar ruidos por delante cada vez más cerca, cuando logro divisar a los zombis saco el arma, me concentro en mí objetivo, doy unos pasos hacia atras y disparo hacía los desagradables muertos vivientes. Si bien no tengo mucha experiencia con armas de fuego tuve algunas pruebas en mis etapas de entrenamiento militar.

Conseguís eliminar a todos los zombis de ese otro muelle de carga. Jesse, tras el sobresalto del primer zombi se hiere en el brazo. No tiene importancia, y se recompone muy rápido, luchando con una soltura pasmosa y ayudando a Nathalia a escapar de una muerte horrible. La doctora había sido rodeada por tres infectados, pero Jesse acaba con ellos. Román sabe valerse por sí mismo y lo demuestra destrozando a otros dos.

Este hangar es igual que el otro, al menos en apariencia. Está lleno de cajas y material, barriles sellados y palés hasta arriba de algo. ¿Os animáis a inspeccionarlos?

Después de que el polvo se disipara y la ráfaga de balas cesara Jesse se recompuso y sacudiéndose un poco dijo .-Estos gajes del oficio, en serio a veces me pregunto porque sigo en todo esto pero luego de sentir esta adrenalina la respuesta me la termino dando yo mismo. Espero que todos se encuentren bien y Nat por favor nada de cerrar los ojos la próxima vez ya que no quiero y creo que Román tampoco salir heridos por una bala perdida pero bueno cuando use mi arma por primera vez fue algo parecido así que te entiendo.

¡Ahora! procurar que no nos embosquen de nuevo, tenemos que estar mas atentos y preparados para la acción, propongo que investiguemos un poco por aquí y veamos que podemos encontrar que valga la pena o que nos ayude en la travesía que estamos viviendo

No creo que nos puedan emboscar, ya no habrá más ¿no?- Hice una pregunta estupida seguramente por el miedo o la adrenalina. Esa pregunta definía mis ganas por terminar la misión y huir de ese búnker.
Cuando recibí la orden me encontré mucho más cómoda. En las situaciones de combate, cuando no debía utilizar mis habilidades médicas, me sentía mejor. No tenía que pensar y solo me quedaba obedecer. Así que dedique mis esfuerzos a intentar localizar cualquier cosa que nos pudiese ayudar. Si todos poníamos de nuestra parte, antes terminaríamos.
Cuando fui seleccionada había querido aumentar mis conocimientos sobre los infectados y ahora que me habia enfrentado y casi sucumbido a ellos, ya no estaba tan segura. Si mis compañeros no hubiesen estado a mi lado, ahora sería comida de zombi