Partida Rol por web

- Yo observo con cuidado que eres una Puta y que me tienes hasta los cojones. - Cerró el puño metálico. La rifa habia comenzado, y Taylor había corrido a la administración más cercana a hacerse con todas las papeletas que podía. Estaba a muchas putas millas de donde nosotros estábamos. - Bas ¿Como va ese lanzallamas? Y Fénix, no le saques el ojo a esta zorra, si se cantea lo más mínimo le metes un tiro y se acabó el cuento. - Sentenció. - Illanka vigile la zona. Dispare y después pregunte. Después de esto iremos a la enfermería. -

A diferencia de lo que podria parecer, una delgada sonrisa asomo a mis labios ante el comentario de Taylor-Tianto hablarr de los demas y no siabe su prropio idioma. "Más peor". Aprrienda a hablarr. - dije, acabando por ladear mi sonrisa, divertida, al escuchar las reacciones de Fenix y de Price a las estupideces ya habituales de la rubia.

-Fienix, no le des el gusto. Si seguiurro que lo ha dicho porr que se muerre porr verr que tienes bajo la rropa. ¿No has oido eso de las ninias buenas de papa que se rrivuelcan con niegros malotes?  - bromee, guiñando un ojo a mi compañero, mientras acababa por asentir a lo dicho por Price- Entendido, capitan. - dije entonces, poniendome manos a la obra cuanto antes, vigilando todo lo que habia a mi alrededor.

La situación se estaba tensando mas de lo imaginable. Las muertes que habíais sufrido. La tensión de saber que había una criatura de otro mundo deambulando por vuestra nave. Escondida y capaz de matar a juzgar lo que habíais visto. Y mas aun lo que tensaba la situación era la desconfianza. La desconfianza que uno o varios de vosotros pudiera ser un doble agente en este juego en el que Weyland Yutani os había metido de una forma tan gratuita y cruel.

Y de pronto escuchasteis un ruido neumático. Que pronto identificasteis como el cerrar de los mamparos estancos de la cubierta C. Os estabais quedando encerrados en esta cubierta...

Taylor miro con la escena como si no fuera con ella. Todo el mundo volvia a enfadarse con ella como lo hacian los niños en su escuela, por nada.

Reviso mentalmente cada palabra aunque en su cabeza todo iba ralentizado y tenia una sensacion un tanto extraña que no sabria como definir.- No queria ofender a Fenix.... Fenix me cae bien.... yo quiero que Fenix viva y no que un bicho le haga daño solo porque los androgenos que segrega son mas potentes en las personas de su raza y mas perceptibles por el olfato... eso no es malo....solo queria protegerlo... porque me cae bien.... fenix es divertido...

La rubia solto una risita casi infantil, muy perturbadora dadas las circustancias y que podia indicar que el tornillo de su cabeza estaba, definitivamente, fuera de su lugar.- Me llamo tostadora.... jijiji....Fenix es divertido.... no como la rusa mala... o el capitan malo...- añadio ya sin ninguna gracia.

Siguio buscando lo que le habian pedido.- ¿Sabes Fenix? A mi no me quiere mi papa... porque no soy una niña normal... nunca he sido normal.... si hubiera sido solo negra me hubiera querido... pero yo no puedo escoger como nacer... nadie puede ¿Verdad?.

El sonido creo un silencio entre los compañeros que a Taylor no le importo lo mas minimo. Siguio buscando con la mirada mientras susurraba algo para si misma, en un tono tan bajo que era casi como un murmullo impreceptible.

Ay señor!, Miró a taylor y a Fenix, yo ya paso de estos.... como si quieren pegarle un tiro y desparramar sus sesos... Un poco más de tripas por la nave no me vá a molestar....

Levanté la mirada mientras seguí trabajando en el segundo lanzallamas... Taylor, por favor... haga lo que le he pedido y no hable, no articule palabras y mejor aún, no las escriba.... al menos hasta que alguien le pida su opinión. Si eso sucede alguna vez, que lo dudo, ya le avisaremos convenientemente.

Entonces un sonido que conocía perfectamente los interrumpió... los circuitos neumáticos de las exclusas estaban en funcionamiento. ¿Como era posible? La nave había sido configurada en Manual para evitar que un fallo hiciera algo así... Y un gato no puede ser capaz de accionar el sistema de emergencia... no tienen pulgares. ¿Habría sido el bicho? ¿o peor aún seguía habiendo alguien más en la nave que no habían visto?... En todo caso, quedar encerrados en la cubierta C era un grave problema así que salió corriendo con el Lanzallamas acabado en su mano y la pistola en la otra.... había que intentar llegar a los controles de los mamparos antes de que quedaran completamente sellados, al tiempo que gritaba a sus compañeros... RÁPIDO, LOS MAMPAROS, NOS ESTÁN ENCERRANDO!!!!! CORRED!!!!!

No entendía nada, le caía bien? Creo que la pobre no ha quedado muy fina después del golpe...

Pero sus pensamientos se quedaron a medias cuando escucho que se cerraban las compuertas.

-Mierda!!- Fénix empieza a correr.

Se hizo el silencio y Price tiró de la corredera de la escopeta cuando Taylor pareció perder el juicio. Se había vuelto loca, no cabía la menor duda. Y si ahora comenzaba a gritar que esa afirmación "no computaba" no se extrañaría lo más mínimo. Pero cuando quiso dejar clara su opinión, los mamparos comenzaron a cerrarse. Aquella situación le sonaba de algo, hacia muchos años, en otra nave mucho más agradable.

Illanka.

El nombre de la rusa le vino a la cabeza. - ¡Corred insensatos! - Les gritó, mientras corría hacia la puerta a grandes zancadas solo para intentar sujetar el mamparo todo el tiempo que le fuera posible para que los demás pudieran cruzar, haciendo uso de su brazo mecánico con tal de sujetarlo durante más tiempo.

- ¡VAMOS! -

La respuesta de Taylor hizo que alzara una ceja, dedicando una fugaz mirada a Price, cuando escuche la corredera. Si, se le habia ido la pinza del todo, y antes de que nos pusiera en peligro a todos, quizas era mejor tomar medidas drasticas. O quizas, como de costumbre, habia mas cosas que no sabiamos sobre la rubia.

Sin embargo, no tuve tiempo ninguno para expresar mis pensamientos en voz alta. De repente, escuche como los mamparos comenzaban a cerrarse y, durante un instante, una imagen, demasiado viva en mi recuerdo a pesar de pertenecer al pasado, acudio a mi mente.

No, no, no. Otra vez no. No.

Casi me bloquee durante un segundo, en los que mi mirada se clavo en Price, a quien mire con el rostro descompuesto, como si acabara de ver a un fantasma.

-¡NO!- fue lo unico que grite entonces, echando a correr de inmediato, como el resto de mis compañeros, con el corazon latiendome freneticamente y aquel amargo recuerdo aun presente en mi cabeza.

No podria volver a pasar por lo mismo dos veces. Sencillamente, no lo soportaria.

Las puertas comenzaron a cerrarse. Ninguno lo menso demasiado todos salisteis corriendo hacia la puerta que daba hacías las escaleras. Nadie quería quedarse atrapado en esta zona. Por muchas armas que pudierais tener. 

Por que ya era malo que esa criatura estuviera en la nave pero lo peor es que algo o alguien había cerrado las puertas. La nave estaba en control manual. No debía de cerrarse desde la distancia.

Fenix demostro por que los hombres de color tenían fama de veloces. Llego hasta la puerta con mas rapidez que nadie. Price como buen Capitan llego a la puerta mientras esta se cerraba. Con su brazo metálico y toda su fuerza y corazón intentaba que la puerta no se cerrara.

Illanka se quedo casi bloqueada por los fantasmas de su pasado. Casi podía ver el fuego a su alrededor. mientras corría.

Bass y Taylor salieron corriendo también mientras veían como la puerta se cerraba. Llegasteis cuando la puerta se cerro delante de vuestro. Los intentos de Price llenos de corazón no había servido para nada. 

Las luces de emergencia se apagaron cuando la puerta se cerro y se activo la luz roja . Que era la señal de que la puerta estaba bloqueada y no podía abrirse. Estabais atrapados. Pero no solamente Illanka , Taylor y Bass. Que estabais en la bodega.

Price y Fenix también lo estaban aunque en un espacio mayor.

Fénix, que de joven había estado en el equipo de atletismo, e incluso había ganado alguna medalla, llego sin demasiado esfuerzo a la salida. El capitán no se quedo atrás y llego al momento. Pero el resto de compañeros no reacciono a tiempo. Price intento aguantar la puerta con el brazo mecánico, pero fue inútil, segundos antes pudo sacar la mano de allí antes de perderla...otra vez.

Tres de sus compañeros se habían quedado encerraos, pero aunque algunos le caían mejor que otros, solo un nombre le vino a la cabeza ese momento.

-Illanka!!!!! Nooooo!!!!- Y es que aun con lo fría que era, con las pocas muestras de cariño que mostraba, Fénix la apreciaba, mucho. Ella y Price eran su familia, desde hacia ya muchos años. Y no iban a abandonarla.

-Joder Price! Desde aquí no podemos abrir, tenemos que ir a madre, ya!-