Me sorprendí ante las palabras de Azrael.
-¿Un líder? ¿Para qué necesitamos un líder? A ver, no me lo toméis a mal hermano, pero este no es el momento para jugar a los jefes y los súbditos. Debemos trabajar todos juntos y unidos. Además, cómo bien has dicho, un líder es una presa fácil... Y ya somos lo suficiente... - Pensaba decir "dianas sin derecho a defenderse" pero me detuve y cambié mi discurso - Ya está la cosa muy complicada aquí.
-Sencillo, hermano Jeliel, aunque tan sólo era una sugerencia: toda vuestra existencia ha sido jerárquica. Como dijo Imamiah, tan sólo yo me alejé de ello, y fué el precio a pagar. He pasado mucho, demasiado, tomando decisiones, aprendiendo a ser... libre. Pero no es así en vuestro caso. Sois más eficaces que yo, pero necesitáis organizaros. También respondía a la pregunta de la hermana Mebael.
Una pausa y extiendo un dedo.
-Es necesario que alguien conozca nuestros dones para poder organizarnos. Expongamos el siguiente caso: entre nosotros se hayan tres ángeles con capacidades protectoras de diversas índoles. Expongamos también lo siguiente: Yuriel será la próxima en ser atacada. Si los tres protectores, de diversas índoles, protegen a Yuriel y uno de los malvados decide que, haciendo uso de su arma más poderosa, es bueno eliminar, exponiendo un caso posible, a uno de los ángeles con dotes de protección... Nos hallaríamos ante el caso de que, la falta de organización y de diversificación ha facilitado la caída de un hermano que podría protegernos. Así mismo con los ángeles que puedan ver en el ánima de otros ángeles, si dos observan al mismo individuo, estaremos gastando un tiempo precioso.
Bufo y cierro mi mano en un puño.
-Es por eso que hice esa sugerencia. Ante la pregunta. Quizá así podamos averiguar quién dirige nuestras voluntades ante la Muerte. O si alguien puede traer de regreso el inocente alma del hermano Imamiah. O si alguien puede proteger a otro capaz de traer a un hermano de la muerte. O un sin fin de posibilidades.
Dicho lo cual, me cruzo de brazos y asiento con la cabeza.
-Es tan sólo mi opinión. Haced como gustéis.
-estoy contigo azrael, si somos libres aqui es por que lucifer asi lo quiere, el es libre pero a tenido tiempo para aprender caemos como moscas y como tal creo que ser libres nos hace dudar es lo que no sabemos hacer no guimos creados para ello-paro de hablar y digo:
-¿a quien deberíamos elegir?
-Exponer tal cosa, no es más que hacer perder nuestra única carta triunfal. -Niego con la cabeza- Mostrar las habilidades que podáis tener no hará más que volveros objetivo de los emisarios de Lucifer... ¿Soy el único que piensa que desvelarse implica una muerte segura? - Miro a Azrael y Chariel con dureza - Pensar que mostrarnos así, habiendo traidores entre nosotros, puede ser una ventaja para todos, no es más que un pensamiento muy... -Mi intención no es parecer demasiado tajante - Bueno, muy segura...
Sabía que cualquier tipo de comentario aparte del que había hecho, podía interpretarse como una acusación. Pero no era el momento de hacerlo, aún me pesaba la muerte de Imamiah.
Miro a Azrael asintiendo. -Me parece buena idea que los ángeles protectores hagan su trabajo con Yuriel ya que sabemos que ella no es el demonio... pero ahora ya sabrán estos que no deben atacarla a ella.
"Intentaré que mi poder sea útil para mis compañeros, aunque no las tenga todas conmigo" pienso según veo acercarse la noche
-Si es cierto que me parece inútil que digamos nuestras habilidades... eso solo dará más pistas al enemigo de lo que se puede encontrar.
- Yo tampoco creo que saquemos nada bueno al decir las habilidades que nos ha dado nuestro Señor Padre. Aún si nos organizásemos mejor sabiéndolos... también lo harán los emisarios de Lucifer y entonces, definitivamente nos llevarán ventaja. -Miré a Azrael con cierta desconfianza. ¿En qué estaba pensando para decir algo así?
-vuelvo a estar de tu lado compañero me parece un suicidio tal obrar-digo pensando en las opciones y en las deventajas de tal acto
Los que estuvieron implicados en el accidente de la planta, sienten un ligero dolor en las zonas afectadas, y cuando los que pueden, miran que sucede, pueden observar como la semilla guarda las raíces dentro de ella y se desprenden, cayendo al suelo, y antes siquiera de que alguien pueda llegar a reaccionar, las semillas, como si de pequeños animales se trataran, se entierran en el suelo, siendo ya imposibles de encontrar.
Las heridas de los ángeles, gracias a su esencia divina, comienzan a cerrarse casi al instante. Parece que no queda ninguna repercusión en sus cuerpos
Reiyel impresionado por lo que acaba de pasar con las plantas y habiendo escuchado las conversaciones de sus hermanos se levanta del suelo y le dice a azrael, -Podria funcionar partiendo de la base de que todos nosotros digamos la verdad, y que el jefe que elijamos no tenga el alma corrompida, a mi parecer seria arriesgarse mucho-
Me dirijo a Azrael y le digo. -Yo tampoco creo que debamos decir las habilidades que tenemos. Eso nos daría algo de organización y una estrategia a seguir, pero como toda estrategia tiene un punto debíl y teniendo en cuenta de que el enemigo está entre nosotros lo incluiriamos dentro de la estrategia y no tendriamos ninguna oportunidad de contratacar. Sin embargo, creo que elegir un lider sería algo que si podemos hacer para que este elija que hacer en momentos de duda y así no perder tanto tiempo discutiendo entre nosotros. Aun y todo, esto me hace preguntarme, ¿Quién es el candidato adecuado para que sea nuestro lider? Yo no me veo a mi misma como lider. Y en cuanto tengamos el lider, me preguntaría tambien haber si puedo confiar plenamente en el. ¿Azrael, podrías ser tu nuestro lider?.- Le digo preguntandole directamente, pero no en forma de propuesta, sino para que el recapacite.
Miro calmadamente a mis hermanos cuando hablo -yo no le veo mucho sentido a eso de buscar un líder. Creo que mientras actuemos en equipo codo con codo como hermanos que somos las cosas nos irán bien. Pero bueno, eso ya tiene que ser hablado y valorado por todos. Por cierto...- me giro instintivamente hacia el lugar del que hemos salido -...¿os parece bien haber dejado el espejo allí? Lo he pensado durante un tiempo, y parece que su aparición ha sido como un aliento de nuestro Padre para seguir adelante y que sepamos que está preocupado por nuestro bien.-
Guardo silencio tras tanta palabrería al ver el extraño comportamiento de las plantas "menudas plantas más extrañas... pero me alegro de que por lo menos ya no estén en los cuerpos de mis hermanos".
Seguía la conversación con cautela, pues no sabía en qué punto iba a converger: escoger un líder, no elegirlo, revelar sus dones... Al final Gisiel decidió hacer pública su opinión:
- Pienso igual Sheldenpon y que el resto de los que han sentenciado que elegir un líder no acarrearía sino más problemas. Al igual que revelar nuestros dones, que nuestro Padre nos ha otorgado con su gracia... No haría más que aventajar al enemigo.
Se para en seco cuando Sheldenpon pregunta acerca del espejo.
- No sé de donde procederá el espejo, pero si viene de Padre quizás sea un método efectivo para podernos comunicar con él... en el caso de que eso sea posible-, dice dubitativa mientras mira de reojo al espejo, algo atrás en el camino.
- ¿Qué hacemos pues, hermanos?
Medita unos instantes antes de hablar.
- Si Azrael dice la verdad, y hay más de un ángel protector, les recomiendo que uno de ellos proteja a Vasariah, que ha revelado su poder de forma precipitada. - Observa a Vasariah, y luego a Yuriel - Y que uno de ellos proteja a Yuriel. De esta forma, estaríamos asegurando la vida de dos de nuestros hermanos, cuya esencia podemos suponer es la de un ángel, y no la de un demonio. -
Luego observa a todos, manteniendo el vuelo junto a ellos. - No creo que el espejo se mantenga alejado de nosotros... Confío en que nos va a seguir allí donde vayamos. -
Me alegre al ver que aquella semilla abandonaba mi cuerpo y dejaba de picarme. Pero asuntos más importantes requerían mi atención. Escuche a mis hermanos debatir distintas formas de enfrentar la situación en la que se habían visto envueltos.
- ¿Y qué funciones tendría ese líder? ¿sería quién sentencia por todos nosotros? ¿quién orienta hacia que fin debemos dirigir nuestras habilidades? Creo que deberíamos confiar plenamente en quien sea propuesto, su inocencia tendría que estar más que probada. Y aun así no me veo capaz de responsabilizar totalmente a uno de nosotros de la muerte de otro hermano, al concederle todos nuestros votos. No lo veo productivo. - hice una pausa para cambiar al segundo punto. - En cuanto a mencionar nuestras habilidades, tampoco me parece buena idea. Daría unos objetivos más claros a los... traidores - mencione casi dubitativo la palabra que nunca hubiera querido tener que utilizar...- Creo que lo mejor es que cada uno muestre sus cartas cuando pueda dar con uno de ellos y que no se exponga en vano. Los necesitamos vivos el mayor tiempo posible para acabar con esto cuanto antes y con el menor número de bajas posibles.
Las flores del bosque se abren, soltando una fragancia que os incita al sueño, y finalmente, caéis dormidos