Partida Rol por web

No sé, ... , me gustaría eliminar a unas cuantas ratas más, pero probablemente tengáis razón, no ganamos nada si nos matan a medio camino. En fín, lo que no debemos hacer es quedarnos quietos, vamos a organizarnos y a empezar cuanto antes.

A Urgk tanta duda y tanta vacilación le ponían nervioso. Por él, irían a saco, sin más. Pero lo suyo no era la estrategia, de eso estaba convencido. Así que dejaría a los que pensaban más y mejor que él las decisiones.

Se centró de nuevo en su espada, y dejó escapar una especie de mezcla de suspiro-rugido.

-ARRRGGGHHHH!!!

Durante un par de días unos y otros jugáis a este estúpido juego: se acercan a distancia de tiro, tiran unas flechas, vosotros hacéis fuego de contrabatería, ellos se retiran, y al cabo de unas horas vuelta a empezar. Como bien dice el padre Jeffrey, el hecho de disponer de un pozo ayuda a tener agua disponible para apagar cualquier flecha incendiaria que alcance su blanco.

Finalmente, parece que veis movimiento en el campo contrario. Es como si alguien les estuviera arengando porque todos están en círculo a respetable distancia de vosotros. Algo se prepara.

A media mañana veis que los incursores tratan de formar unas filas más o menos marciales, y avanzan sobre vuestras posiciones como un ejército a la carga.

Al cabo de unos instantes, la melé se traba en vuestra primera línea.

Malditos no podran escapar-les grita a los enemigos-.

Sulthalas, vas tu primero, seguido de Selkin.

Después van los xvarts, el padre Jeffrey, Benbow, Urgk, Oskar y luego todos los demás.

Observando cómo las huestes enemigas se nos vienen encima, espero hasta que estén a alcance mientras me voy concentrando y finalmente suelto un proyectil mágico contra la rata más próxima.

Cita:

Ya no quedan ratas, es una carga de infantería. A tu alcance hay lo que ves en el tablero.

Tras concentrarme un momento fijo mi mirada en la primera línea enemiga, y les envío un proyectil mágico dirigido al punto donde veo a los atacantes más apiñados.

Cita:

Tu proyectil tumba a uno de los dos xvarts que atacaban al padre Jeffrey.

Le toca el turno a Selkin.

Conforme se acerca podéis comprobar fácilmente que se trata del líder de los incursores, por la deferencia (rayana en el temor) con que los demás le tratan.

Es un humano alto y fornido, equipado con una cota de bandas, y armado con una espada larga, que blande con facilidad. En su aspecto hay algo que os parece raro, pero que no acabáis de situar.

Se coloca frente a Urgk, y tras estudiarle unos segundos, lanza un tajo con la espada, que impacta fácilmente en el cuerpo del semiorco.

Atacan los xvarts.

El del padre Jeffrey falla lastimosamente y está a punto de pincharse con su propia espada.

El que tiene Ilkar por la izquierda le da: 3 pg.

Los demás fallan con diversos grados de penosidad.

Actuáis vosotros y para cerrar el turno el padre Jeffrey y Benbow.

El maldito humano... o lo que sea... le ha herido con su espada con tanta soltura y tranquilidad como si estuviera entrenando. Urgk se revuelve, enrabiado, ¡no va a ponérselo tan fácil, por todos los dioses!

También él sabe usar su espada, también él tiene soltura...

El selkin se vuelve para esquivar facilmente el ataque de Urk pero no se da cuenta que con esa maniobra ha quedado muy cerca de Oskar que sin pensarlo dos veces ataca con su martillo de guerra.

¡¡POR MORADIIIIN!! -grita mientras desgarga un poderoso golpe de su martillo contra el enemigo-.

El martillo de Oskar impacta en la piel de Selkin, que se duele del golpe con un grito más animal que humano, pero continúa en pie haciendo molinetes con la espada.

Sulthalas, actúa tú por Ireth. Escoge entre proyectil mágico y rayo de debilitamiento.

Ireth se yergue en su sitio dudando sólo un instante entre atacar a los xvarts o a selkin, el líder,y finalmente opta por esto último. En su cara aparecen pequeñas arrugas por la concentración,que desaparecen al mismo tiempo que un proyectil mágico abandona sus manos yendo a impactar en el cuerpo de Selkin.