Partida Rol por web

Sin que nadie dijese nada mas Emily estaba con las palmas de las manos en la pared apoyadas y el culo en pompa, tal y como la habían acostumbrado ya en la calle.
 

-Vale madero, simplemente miraba si habían robado a los cadáveres al asesinarlos, o fue algo por vicio, y mas bien fue por vicio. -le di otra patada para poner el cuerpo boca abajo- Ahí lo tienes tal y como estaba al principio, pero un poco mas limpio.

Caminé y di un tirón del brazo de Emily:

-Nos vamos, aquí huele muy mal y paso de que nos enmarronen otra vez.

William intentó pedir refuerzos, pero las comunicaciones fallaban allí. La situación era muy tensa, tres muertos en la casa, y cuatro sospechosos, los cuales afirmaban no haber tenido nada que ver, por la sangre en la moqueta podía ser verdad, pero aun no habían dicho que hacían allí.

Adam cansado de la situación agarró a Emily y se la llevo, pero al abrir la puerta de la cocina por la que habían entrado se dió cuenta de que estaba cerrada y no se podía abrir, la puerta principal tampoco se abría, intentó abrir una ventana, pero como si todas las ventanas estuvieran atrancadas no consiguió abrir ninguna

-Que no cunda el pánico. -esta misión va a acabar conmigo.- Y por favor, no nos separemos como en una mala película de terror americana. Buscaremos una salida todos juntos. ¿De acuerdo? Y no toquen nada, a menos que quieran ser verdaderamente sospechosos de algo. ¿Podrían hacerlo o sienten la inevitable tentación de mandarlo todo a la puta mierda? Porque empiezo a estar cansado de tener que encontrarlos a cada paso.

Empezaba a estar muy mosca, y me costaba controlar mi temperamento. 

-Señor White, su explicación, por favor. Y rápido antes de que decida que caminar con esposas sería lo más adecuado para usted.

Mientras, empecé a caminar. Esta casa era enorme y parecía vieja. Seguro que tenía un sótano de esos con salida, como los de la películas... O eso esperaba, porque no tenía ganas de quedarme allí más tiempo.

- Lo siento mucho, inspector. - le dije con una pausa, ya más calmado. - Como ya dije, vimos como era atacado por esas... esas bestias, y agarré el "arma" que tenía más a mano para defenderme. - miré hacia el pobre chaval en el suelo. - El atizador clavado en la cabeza de ese chico.

Así que estábamos encerrados aquí. Genial. Fuera esto la obra de un loco o algo sobrenatural, el caso es que estábamos en un aprieto. Aunque si sobrevivía tendría la historia de mi vida en mis manos. Eso si alguien se lo creía, claro está.

Tras pensármelo un poco, volví a recoger el atizador del suelo. Pensaba que, ahora mismo, contaminar la escena del crimen sería el menor de nuestros problemas. Tal y como estaban las cosas, lo mismo acabábamos formando parte de ella

-Creo que no me he explicado lo suficientemente bien con respecto a no tocar nada, señor White. Nada es nada. Suelte eso ahora mismo. Está borrando las huellas del que usó el arma antes que usted. O al menos tenga la suficiente sesera para coger un cuchillo de la cocina que esté sin usar. -me puse rojo de furia. Y realmente, enfadado no era la mejor manera de estar conmigo-Ya no hay más... Animales o lo que fuera. A menos que hayan escondidas más sorpresas. Yo entraré primero con el arma a la habitación, ¿de acuerdo? Si me pasase algo, busquen la forma de salir, sin separarse. ¿De acuerdo?

Madam Luvie se llevó los amuletos al corazón mientras negaba con la cabeza. No dijo nada para no hacer enfadar aún más al policía, puesto que una explicación apelando a lo paranormal sólo haría que perdiera los estribos. Era un escéptico.

Así que se acercó a los demás como había mandado y permaneció quieta y atenta, lista para seguir al grupo.

-¡A la mierda! -dije mientras cogía una silla y la tiraba contra la ventana -Quiero salir de aquí ya.

-¡Adam!, tranquilízate cariño, seguro que encontramos alguna puerta y no hace falta qu elo destruyas todo como siempre.

Intenté calmarlo auqnue sabía que podría llegar a ser imposible, cuanto mas le dijese sería peor.

Suficiente. Saqué las esposas y me preparé porque sabía que éste me iba a dar problemas.

-Estate quieto. No quiero tener que usarlas. -y menos sin saber lo que había tras la puerta.- Pero si hace falta que te rompa la cara para que te estés quieto y calmado, lo haré. Deja de hacer el gilipollas. Estamos más seguros dentro que fuera. Si nada puede salir, menos probable es que nada pueda entrar.

Adam en un impulso agarró una silla y la lanzó contra la ventana, pero ésta rebotó, saliendo impulsada hacia Adam, por suerte el chico consiguió agacharse antes de que la silla le diera en la cabeza.

Empezais a revisar las habitaciones pero todas estan vacias, no hay nadie ni nada sospechoso, ningún teléfono funciona, las luces no van, pero es aún de día y la luz solar entra por las ventanas por lo que podéis ver perfectamente, todas las puertas y ventanas de la casa que dan al exterior están cerradas, impidiendoos que podáis salir.

Vais hacia la última puerta de la casa que no habéis revisado, el sótano, William saca una linterna para iluminar las escaleras y que así no caigais, en el sótano encontrais un circulo de velas, con unos intrincados dibujos alrededor y en el interior un libro sobre el suelo. En el libro se redacta un supuesto conjuro de invocación de un tipo de demonios que conceden deseos a cambio de almas de mujeres. Algo realmente extraño pero que puede encajar con todo lo que sucede. En el libro también pone que este tipo de demonios debe de ser invocado en un cementerio antiguo. Afortunadamente viene descrito que el demonio, un Devorador de Almas esta ligado al frío, de modo que el fuego puede dañarlo gravemente.

Una luz tras una puerta entreabierta en el sótano os llama la atención, la habitación es fría, está llena de ordenadores, al parecer es el puesto de seguridad, pues en los ordenadores vienen las cámaras que graban en todo momento

Sabéis de inmediato que el cementerio mas antiguo de Londres es el cementerio de Highgate

Este cementerio tiene mas de 52000 tumbas, y esta dividido en dos partes, la este y mas moderna tiene tumbas como la de Karl Marx, y es mas discreta que la Oeste, lugar donde es preferible llevar al Demonio, esta zona tiene muchísimas tumbas y esta cerrada al publico durante la noche. Tiene una exuberante vegetación que tapa mausoleos enteros y en cualquier parte aparecen estatuas, rostros de querubines y piedras con tallados fantasmagóricos.

Madam Luvie lo observaba todo con la mano en el pecho y el rostro sombrío. "Lo sabía", se repetía a sí misma. Un demonio.

- El cementerio más antiguo que conozco es el de Highgate, y quizá al zona más apta para la invocación sería la oeste, que es la más antigua y discreta.- se estremeció.- Me pregunto qué clase de gente estaría dispuesta a invocar a una criatura tan malvada y oscura...- negó con la cabeza, consternada.

Se agachó para observar mejor el círculo de invocación. Quizá podría averiguar algo más si lo analizaba con cuidado.

Me rasco la nuca.

-Esto me parece... Extraño. -confesé, pensativo.- Pero si eso es cierto, podría haber otra mujer que pudiera ser la víctima de ese ser... Y no voy a permitirlo. Si el ser es débil al fuego... Bueno, ¿cómo podríamos hacerlo? Porque, sinceramente, los lanzallamas no crecen en los árboles. -me crucé de brazos.- Un cóctel molotov, por ejemplo. Seguro que en esta casa tiene que haber las cosas suficientes para hacer uno... Y quizás un lanzallamas improvisado con un mechero y algún tipo de spray.

Saqué un pitillo.

-Imagino que, ya que el libro está aquí, fue el señor Oswell o quizás alguien de su círculo. Querrían algo e invocarían al... Demonio. Posiblemente él los haya matado. He leído varios libros, ninguno especializado, sólo novelas, pero... Cuando un demonio mata al invocador, puede vagar libremente por la tierra. O así pasa en una serie llamada las Crónicas de Belgarath. -no sabía si se aplicaba a la vida real, pero aquella situación no era normal en absoluto.- En otros libros, son seres ladinos que buscan cualquier recoveco para desobedecer a su "amo" y que malinterpretan sus órdenes. Pero lo sabrá mejor la señora Luvie.

-Tu, poli, ¿y no puede ser un chiflado que esté fuera y nos haya encerrado aquí? porque los cuerpos de los supuestos chuchos muertos se han levantado, pero los de los tipos de ahí arriba continúan criando malvas.

Dije bastante mosqueado. Aquel no era el grupo de personas con el que hubiese soñado quedarme encerrado en una casa.

Me hacía cruces ante lo que decía Adam, aunque tuviese cierta lógica. Igualmente me gustaba ayudar:

-Para hacer cócteles molotov lo mejor es gasolina o aceite mezclado por partes iguales con algo que contenga alcoholo de lata graduación, una botella de cristal fino y cualquier trozo de tela que pueda hacer de mecha, pero con este suelo de madera y la altura de los techos no lo aconsejo, ya que se han de tirar bombeados.

Mis años ne las manifestaciones estaban dando sus frutos ahora...

Miré a Emily extrañado. Colaborando con la policía, quien lo hubiese dicho...

-Oh, claro que podría... Si me das una explicación lógica y racional al hecho de que me han atacado unos perros que llevaban por lo menos dos o tres días muertos, estaré encantado de apoyarte. Hasta entonces, una señorita puede estar en peligro, y no me voy a arriesgar. Y no soy "poli". -fui a rebuscar en la cocina y el salón en busca de alcohol.-Ahora la duda es cómo llegaremos al cementerio. Quizás haya alguna puerta o ventana que se pueda abrir. O quizás haya algo que impida que se abran y esté dentro.

-Tu, POLI-casi escupí la última palabra- los tipos de arriba verifiqué que eran fiambres, pero los perros no, y podría ser que tuviesen la rabia. Un perro rabioso lo puedes destrozar antes de que se muera.