Partida Rol por web

El Imperio de Gurbad II

Camino hacia la sanación...

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03/12/2010, 19:40
Siomorang el brujo

Oh, vaya...

Mira con tristeza la fogata que se apaga. ¡Esta noche tocará dormir al frío!

Maglubiyet, ¿qué pruebas nos pones? Vale que mi cuerpo sea duro como el metal... ¡pero mi piel flácida no lo es! Es un pellejo que resiste mal el helador filo de la sombra. Yo te entiendo... sin condenarlo ni aprobarlo, lo entiendo. Tienes que curtir a estos hijos descarriados tuyos. Es ley de vida. Pagan justos por pecadores, y yo que te he sido fiel desde... erhm... desde hace poco la verdad. ¡Pero te he sido fiel, por las heces de las ratas, fiel! Y tengo que aguantar el frío como toda esta pandilla de ignorantes ateos y prosaicos laicistas. ¡Justicia! ¡Justicia es lo que te pido!

...

¿Pues sabes lo que te digo, Maglubiyet? ¡Que ahora te jodes y te quedas sin mis oraciones! Hala. Convalido esta discusión a la categoría de rezo. Puedo hacerlo porque soy tu ministro en la tierra. Y como ya te he rezado, me voy a dormir.

A la mierda con todo. Me voy a dormir.

Y con esos malos modos, el snaga devorador de corazones se tumba y se hace un ovillo tratando de conciliar el sueño.

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03/12/2010, 19:56
Akrate Burrísimo

Akrate hacía rato que se había ido a dormir, por lo que poco pudo atender a la conversación que se desarrollaba junto a él.

El enfermero yacía plácidamente entre ronquidos y bufidos, mientras soñaba con su llegada triunfal a la aldea portando el remedio que curaría a todo su pueblo. Una sonrisa se dibujó en el rostro dormido de Akrate.

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04/12/2010, 00:49
Director

 Las horas pasan, el reducido grupo de snagas logran dormirse e incluso descansar un poco, pues pueden dormir de una sola tirada mientras los otros snagas se dedican a montar guardias.

 Finalmente el alba llega, con la brisa fruto del campio de temperatura acariciando la yerma tierra que circundaba en varias millas el poblado de los snagas.

 Tras comer unas magras provisiones de viaje, el desaliado grupo de pielesverdes reanuda la marcha hacia el poblado. Los componentes de la expedición están más que magullados, pero pueden mantener el ritmo de los otros enclenques. Tras un largo día de marcha, hacia el atardecer, el grupo puede ver, a la lejanía, los muros que protege el poblado, con las cubiertas del Templo Oscuro y del Gran Salón recortándose por encima de estos.

 Finalmente el grupo alcanza la seguridad de su hogar, entre los gritos de algún vigía, y las miradas de los curisos que vienen a ver a los trasgos que traen el remedio. El aspecto que muestran es lamentable, escualidos, desnutridos, todo piel y huesos. El poblado apesta a vómitos y diarrea.

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04/12/2010, 09:56
Thok Greystone

- Por fin en casa! - Pensé al ver de lejos mi hogar y eso que aún me dolía tanto el cuerpo que tan sólo por una milésima de segundo pensé en que me apetecía descansar, aunque cuando recordé a las hembras esa idea desapareció de mi cabeza y de lo que me entraron ganas fue de sus atenciones, como siempre.

- Espero que nos dé el premio como la otra vez y sin que venga Pringo a interrumpirnos de nuevo, porque le pienso dar tal paliza si lo hace que tendrán que remendarlo como a una manta..

Mis pasos se hicieron más rápidos, incluso más alegres entrando a mi hogar, pero cuando lo hice hasta yo arrugué la nariz, pues hasta el bosque aquel que no me gustaba olía mejor que este estercolero.

- Si no te pones enfermo porque te contagias te pones enfermo por el olor..

Me hubiera puesto hasta verde si no hubiera sido ya de ese color.

- Vamos a llevarles esto rápido..

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04/12/2010, 12:22
Siomorang el brujo

Siomorang se tapó la nariz con la manga para mantener el olor alejado de sus narices, pero la tarea era un imposible. ¡Y eso no era nada! ¡Menos mal que se salvó de participar en la anterior misión y descender a un pozo infestado de animales en descomposición!

Puaj...

Lo ves, Pringo. Los trasgos nacimos de una espada, pero también de la mugre. Este olor es la prueba. La enfermedad no los puso así, tan solo desenmascaró su verdadera esencia. ¿Ahora crees en mi relato? ¿Crees en la providencia de Maglukatán, la espada desposada?

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06/12/2010, 20:08
Akrate Burrísimo

- Si... Dijo Akrate en respuesta a las palabras de Thok. - Será mejor que nos demos prisa.

Akrate parecía algo decepcionado, y aunque intentó enmascarar el tono de su voz, era evidente que había esperado un recibimiento más... triunfal.

Había soñado con el momento de la llegada a casa, de que todo el mundo reconociera su labor y liderazgo en aquella empresa. Ahora ya no estaba tan seguro de que nadie reconociera sus méritos.

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07/12/2010, 09:10
Grolm

Si que ha empeorado rápido la situación, espero que tengamos seta suficiente para todos... Aunque con un poco de suerte, ya no se acordará de las cabras con todo este jaleo jijiji

Cuanto antes mejor.. no parece que vayan a durar mucho.

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07/12/2010, 09:56
Instructor Hups

 Un grupo de snagas, encabezado por el gran trasgo instructor Hups, fue en busca del grupo de trasgos expedicionarios.

 - Veo que las señoritas llegaron de su paseo por las montañas. Ya era hora de que llegaraís.- Su mirada os contempló desde su altura, brazos en jarras.- Venga, moveos y acompañadem hasta Lerb, tiene todo preparado, esperando tan solo el potingue que traeís.

 Empezaís a seguirle hacia el centro del pueblo, donde se encuentra el hogar del erudito cuando se gira y ve a los trasgos que os salieron al encuentro como también van con vosotros y les medio ruge.

 - ¡Vosotroso no! ¡Vosotros id a relevar a los centinelas, VAMOS!

 Sin dudarlo, obedecen desapareciendo rápidamente de vuestra vista.

 Finalmente llegaís al centro del pueblo.

Notas de juego

Continuación