Partida Rol por web

Cuando ya anochecía el posadero se acercaba a la mesa con las bebidas demandadas por los aventureros, les miraba con reservas puesto que habían sido partícipes de una refriega en su local, pero parecía que se lo había tomado mediana mente bien.

Deja las jarras en la mesa y con una sonrisa algo forzada dice.

 - Espero sea de vuetro agrado, haréis noche aquí, tengo algunas habitaciones libres...

La palabra habitaciones la trae de regreso a la realidad. Necesitaban un descanso bueno y calido, despues de todos los diasa la intemperie, y esta posada no era mas ni menos propicia que muchas otras.

-eh...+sacude su cabeza, despejando los ultimos humos del sueño+ si, desde luego, seria bueno... Cuanto cuestan las habitaciones, señor? Supongo que para cuatro, no? +pregunta, mirando a sus compañeros. No seria educado dejar al pobre monje solo...

El camarero acabado de entregar las bebidas asiente con la cabeza...

 - Bien, cada habitación son dos monedas de oro, por persona... Al ser cuatro os puedo hacer una oferta, si os quedáis os cobraré 8 monedas de oro y tendréis el alojamiento de esta noche, más las bebidas que tenéis pagadas, aparte de la cena de esta noche... Creo que es un precio razonable...

Sireon no sabe si es un precio razonable o no. Pero con ese dinero podrían contratar otra caravana. La taberna le agobiaba, la ciudad se le quedaba pequeña y casi deseaba poder salir de la ciudad a dormir bajo las estrellas, pero el viento areciaba ahí fuera y Velvet parece desear dormir en una cama antes que en el duro suelo a la interperie.

Se encoge de hombros mirando a la gnoma dejando que sea ella la que decida.

-Señor...+dice la pequeña, abriendo exageradamente los ojos al escuchar el precio+... seguramente el servicio en su posada vale eso y mucho mas... Sin embargo, tenga a bien comprender que no somos ningunos acaudalados para pagar esa cifra, sino simples soldados y viajeros...+hago un gesto abarcativo a los integrantes de la mesa. Luego me incorporo, parandome junto al hombre y mirando desde abajo con expresion dulce.+ Ese dinero esta fuera del alcance de nuestros bolsillos... Tendria a bien considerar rebajarnos un poco el precio? De por sentado que consideraria un favor personal el devolverle su generosidad...+pestañea un poco como una niña, antes de añadir+... Ademas, en vez de una cena muy elaborada podemos alimentarnos con algun menu sencillo, y creo que no habria inconveniente si compartimos todos una sola habitacion, lo que sumaria para reducir un poco el costo por nuestra parte...

El tabernero mira con cara extraña a la gnomo, y con cara de algo de pena, por lo visto había confundido a los viajeros por unos aventureros que se ganaban bien la vida, pero por lo visto se equivocaba.

 - Una habitación para los cuatro... Y una cena escasa para todos, mmmm. - Parecía hacer cálculos con los dedos de la mano mientras miraba el techo...

 - Está bien, serán seis monedas de oro con una cena muy simple, y esta ronda de cervezas la consideraré pagada. Así que un total de 6 monedas de oro... Se pagará por adelantado por supuesto...

-Mmm... un segundo..

Mira a sus compañeros.

-Estem... como estan de dineros para 6 piezas, chicos?

El enano estaba apurando la cerveza mientras miraba las negociaciones que parecían haber llegado a un punto muerto, finalmente lanza un eructo de satisfacción y empieza a manipular un saquito que llevaba en el cinto. Después de unos segundos saca una moneda de oro y 5 de plata...

 - Si no ando equivocado toca a una pieza de oro y cinco de plata por barba, no? - Acto seguido las deja encima de la mesa y saca una amplia sonrisa...

 - Venga muchachos, que el posadero no tiene todo el día...

El monje asiente con la cabeza y hace lo propio, parece estar recapacitando todo lo sucedido hasta entonces pues parece muy pensativo cuando deja su parte al lado de la del enano...

 - Aquí está mi parte... A que hora partimos mañana?

Sireon deposita el dinero con desgana encima de la mesa mientras mira despistado hacia otro lado.
Parece un poco ausente y perdido en sus pensamientos

Junta las monedas de sus compañeros y añade las suyas propias al grupo. Un ligero suspiro surge de sus labios... pero bueno.

-Señor, nuestra modesta paga. +indica, entregandole el rejunte de efectivo+ Cual sera nuestra habitacion?

El posadero llama  a la camarera en cuanto recibe las monedas...Esta tarda un poco en llegar pues parecía estar entretenida con algún noble de alguna mesa, finalment ellega hasta vosotros murmurando entre los dientes...

 - Narta lleva a estas buenas gentes a sus correspondientes hospedajes...

Narta asiente con la cabeza, os echa una pequeña ojeada y se gira para marchar por delante...

 - Seguidme por favor, os llevaré a vuestras habitaciones...

enseguida empezó a caminar sin esperar a ver si los la seguiáis.

Sireon avanza cansino y algo disgustado. espera poder charlar luego con ams calma con el monje.

Los aventureros acompañan a la joven camarera por unas escaleras siguiendo el movimiento de caderas que esta ejecutaba provocando las delicias de algunos clientes de la posada. En el piso superior un pasillo recto enseña puertas que sin duda da a algunas habitaciones, finalmente se para en la última puerta.

 - Esta será vuestra habitación, es una de las más grandes, pero solo dispone de dos camastros, los demás tendréis que acomodaros como mejor podáis, espero que esté todo correcto, que pasen una buena noche...

La joven al ver que no pedían nada más se marcha rápidamente para atender a sus clientes...

El monje que parecía algo consternado ve como la chica se marcha, de repente parece acordarse de algo, y antes de que la camarera empiece a bajar las escaleras la detiene con su voz.

 - Espere!! Señorita, un momento por favor!

El monje corre ágilmente hasta donde se encuentra ella, y le empieza a decir algo, la mujer va asintiendo las palabras que este va diciendo...

Finalmente acaba de hablar y se reúne de nuevo con el grupo que ya empezaba a entrar en la habitación...

Observo los dos camastros y la pieza en general...

*6 piezas por esto? Es un robo!... uff... pero bueno, no queda de otra.

Inmediatamente dejo mis cosas bajo una de las camas, y luego me yergo, mirando a los hombres. Con una sonrrisa picara les dice.

-Bueno, seria injusto que un par durmieran en el suelo... todos pagamos lo mismo. Asi que tendremos que sortear quien sera el afortunado que comparta cama conmigo, y los otros dos, al otro camastro... Prefieren jugarlo entre ustedes o yo los selecciono de tin marin?

El monje mira a la curiosa gnomo, nunca había visto nadie de los de su raza, y le parecía algo peculiar que una joven con ese cuerpo fuera de aquella estatura, pero prefería guardarse sus pensamientos para si, no sabía como podía reaccionar ante aquello, no obstante vio obvio que no podían compartir todos los dos camastros, así que lo tuvo muy claro.

 - Yo dormiré en el suelo... Estoy mas que acostumbrado...

Enseguida en un lado de la habitación se preparó con alguna manta un improvisado camastro en el duro y frío suelo.

Sireon no puede sino sonreir ante la afilada lengua de la joven gnomo.
Se encoge de hombros. Sabe que ansía dormir en compañía masculina y que no cejará en su empeño hasta conseguirlo. Pero conoce a Velvet desde hace tiempo como para escandalizarse por sus actos.

Todos estamos acostumbrados a dormir en el suelo. Aunque sin duda el precio es bastante abusivo. Por este precio podríamos conseguir otra caravana, o alquilar mas guardaespaldas. Bajemos a disfrutar de ese frugal ágape que nuestro anfitrión tiene a bien concedernos esta noche. En realidad no se sentía hambriento, pero cuando estás en el camino nunca sabes a ciencia cierta cuanto mas podrás comer y cuando lo harás, con lo que los alimentos que esta noche consumirían les proporcionarían una energía que les podría ser imprescindible en el camino. Y se da cuenta de que nadie ha respondido al monje cuando este preguntó a que hora saldríamos poco después de pagar sus monedas.

Y saldremos poco antes del alba. Iremos a la fortaleza de los escudos rojos al amanecer. dice dirigiéndose al alopécico norteño.

-Bueno, entonces despues de cenar, veremos como es el acomode, que mañana hay que madrugar. +acuerda, sonrriendo. Como esperaba, tendria cama calentita, sus caballerosos compañeros no le dejarian dormir en el suelo... Una lastima sobre todo por el monje, no sabia de lo que se perdia, pero en fin... Luego añade maliciosa, mirando de reojo al enano+... Eso si, esperemos que no debamos arrastrar a cierto borrachin a la cama...jajaja... bueno, vamos a comer.!

Diciendo esto les hace un guiño, instandolos a salir, ya que le bloquean el camino...