Sin perder la sonrisa escucho al niño.
Sigo pensando en que no hay nada amenazador en el. Que lleve todo el dia esperandonos me conmueve y respondo.
-Pues claro que te ayudaremos. Vamos a la madriguera de tu amigo y veamos cuales son las cosas raras de las que hablas.
¿cosas q bajan por el río?¿Qué diablos puede serConfiemos en el instinto de Ludovica.
-Vamos entonces
Bajo mi arco y me relajo.
Tanto el niño como la nutria dan saltos de alegría.
-¡Seguidnos y os llevaremos hasta la madriguera!
Y así, mientras el Abuelo cuida del bote, comenzáis a caminar río arriba entre aguas estancadas y vegetación. Los insectos zumban por todas partes y vuestros cuerpos se llenan con todavía más picaduras de las que el viaje os había proporcionado, pero por suerte la madriguera no está lejos de donde estais.
Se trata de un agujero excavado cerca del cauce del rio y por lo que podéis deducir, éste se inundará con las crecidas. Según os explica el niño, en la última marea "algo" se coló en la madriguera y por ello su amigo no puede volver a su casa. Por lo que deducís, ese "algo" podría ser o mismo que lleva afectando a los pescadores.
La parte negativa es que la madriguera, aunque no está inundada en estos momentos, es muy estrecha. Solo una persona muy delgada y sin ningún tipo de armadura podría entrar, y aún así la maniobrabilidad en el interior sería nula.
A efectos de juego, solo alguien con Fortaleza 2 o inferior podría meterse por el agujero. Alguien con 3 podría hacerlo pero con una alta probabilidad de quedarse atascado si lo hace sin ayuda. Por supuesto el interior está oscuro, húmedo y con un "algo" esperando.
Sigo al pequeño con la decision de ayudarlo, pero al llegar a la madriguera me doy cuenta de que va a ser dificil entrar en ella. Hago una mueca y suspiro antes de hablarle al niño.
-No has probado a entrar tu en ella? Tu cuerpo es mas pequeño que el nuestro, tal vez si te atamos una cuerda puedas meterte tu, que te parece? Nosotros desde fuera te ayudariamos.
Si Greyreed no quiere entrar nos quedan pocas opciones, yo soy una mujer y por tamaño podria, pero tambien esta Takeshi a quien miro de reojo, el es delgado y menudo, el tambien cabria en el agujero.
El niño no podria entrar con nuestra ayuda?
Y Takeshi esta operativo o hay que penejotizarlo? Porque si el enano no entra, es el o yo, esta claro.
Podríais meter al niño y quedaros fuera esperando a que le pase algo, pero seriais unos héroes de chichinabo, la verdad.
Takeshi entraría igual que Ludovica, pero si no responde en un par de dias habrá que penejotizarlo y se quedará fuera de la madriguera.
Hago una mueca de disgusto. Esto sobrepasa mis expectativas.
- Yo no metería al chaval ahí, Ludovica. De hecho, no metería a nadie, pero si alguien se presenta voluntario, puedo lanzarle algo de magia encima y sugiero que hagamos todos lo mismo. Ya que solo uno puede entrar y hacer algo ahí adentro, por lo menos que esté lo más fortalecido posible.
-Yo no quepo ahí ni en trocitos. Seguro que nuestro ágil amigo Takeshi que se interpuso entre el tiburón y yo se presta sin problema
Miro directamente al que admirable Takeshi, esperando su respuesta afirmativa.
¿hay posibilidad de excabar en la madriguera, sí ya sé que romperíamos la madriguera, pero somos humanos, ¿cuando le ha importado a la humanidad la animalidad??? ;-P
A ver si el chinito responde.
-Bien, no dejaremos que el niño entre ahi. Supongo que sere yo quien entre en la madriguera, quien sabe..., tal vez encuentre algun tesoro..- sonrio nerviosa, se que la posibilidad de encontrar algo bueno es muy remota, pero confio en mi instinto y mi destreza, y soy una elegida, no tengo que olvidar eso.
Clavo los ojos en Takeshi para ver si al menos respira, parece estar en trance y no da señales de prestarse voluntario para meterse en el agujero.
Espero un par de dias por si Takeshi aparece, si no lo hace que el master me haga una señal y posteare los preparativos y la entrada en el agujero asqueroso.
La entrada a la madriguera es muy estrecha, aunque Greyreed asegura que una vez en el interior se ensancha e incluso hay cuatro salas más amplias que su amigo Lunadeplata ha excavado para vivir confortablemente.
Después explica a Ludovica en cual de ellas está esa cosa, ya que parece ser que será ella quien acabe metiéndose por el agujero.
Podéis postear qué clase de preparativos hacéis y vamos empezando con la increíble aventura de meterse en la madriguera de una nútria.
ME contraría que Ludovika entre, pero pensándolo mejor, fue ella quien se fiaba más del niño, así que no está tan mal que sea ella quien se meta. Vamos a ver como podemos ayudar.
-¿Tenemos alguna cuerda?No sé que profundidad tiene eso, pero seguro que te da seguridad
Me gustaría ver si por los alrededores hay algún peligro y utilizar mis conocimientos de caza y exploración, si sirve de ayuda. Si no hay nada y no merece la pena, pues vamos a ver que hace nuestra amiga Ludovica. La verdad es que es muy raro eso de meterse en un agujero, pero seguro que sacamos la famosa cimitarra de plata de TIMUN MAS, libro que estoy leyendo con mi hija...
Respondo a la pregunta de Abdala con un gesto y le enseño una cuerda que traje de la barca del abuelo.
-Voy a atarme esta cuerda al cuerpo, una vez dentro si tengo algun problema dare un tiron, si no regreso haya tiron o no, tirad de la cuerda. Espero que "la cosa" que hay en la madriguera no sea peligrosa-el tono varía ligeramente y sigo hablando -Voy a desnudarme y a untarme el cuerpo con fango del rio, si hay insectos no quiero que me piquen, tampoco quiero que mi ropa se enrede con nada, si ahi hay humedad el barro no se secara y podre deslizarme mejor. Si os dais la vuelta...- señalo a los hombres con el dedo y los advierto -No quiero miradas fuera de tono.
Me acerco al agua y despues de desprenderme de la tunica unto mi cuerpo con barro de los pies a la cabeza, me pongo el cinturon y ciño una daga a mi cintura. Luego me ato la cuerda y me acerco a la madriguera dispuesta a entrar a rastras.
-Alla voy! Estad alertas por favor.
Me arrodillo junto a la chica maldiciendo su cabezonería ¿meterse de cabeza en un agujero así?
- La daga es una buena opción ahí adentro -asiento- pero no sé si tendrás sitio para desenvainarla. Es posible que prefieras llevarla ya en la mano. Con la otra podrás avanzar. Y lo de la cuerda es muy buena idea, si tuvieras algún problema podrías tirar de ella para avisarnos. Si la tienes atada podríamos sacarte de ahí relativamente rápido.
"Si no te enganchas en ningún sitio, claro", pienso para mí.
Y al segundo murmuro rápidamente un par de oraciones tocando su daga y su hombro. Cuando termino me encojo de hombros y murmuro, algo molesto.
- ¿Qué pasa? ¿acaso pensáis que un viejo soldado va a ir por ahí sin un poco de magia a cuestas?
Pues eso, Cuchilla Afilada y Protección, para que te ayuden un poquito. Suerte!
Tras escuchar a Fiddler, recapacito.
-Segun el niño, solo la entrada es estrecha, el resto de la madriguera es mas amplia... Pero seguire tu consejo, llevare otra daga y la llevare en la boca. Dos dagas mejor que una. Necesito las dos manos para avanzar.- sonrio ligeramente -Gracias por tus oraciones.
Ludovica se mete en el agujero no con pocas dificultades y comienza a arrastrarse hacia el interior. En unos pocos segundos sus pies desaparecen de vuestra vista y se pierde en la oscuridad.
Voy a pasar a una serie de posts privados con Ludovica hasta que salga o de alguna señal.
En cuanto avanzas los primeros metros en la madriguera te das cuenta de algo que no habiais previsto: La oscuridad. Cuando tapas la entrada con tu propio cuerpo quedas sumida en la más absoluta negrura y solo puedes avanzar a oscuras con la esperanza de que una vez se ensanche, pueda entrar algo de luz por la abertura. Pero el túnel parece interminable y lentamente comienzas a sentirte atrapada.
Por suerte llegas a un recodo donde el túnel parece abrirse a cuatro diminutas estancias, lo que te permite girar sobre ti misma y dejar entrar algo de luz.
Entonces descubres que el túnel por el que avanzabas tendría unos diez metros de largo y que cada una de las estancias parece tener una función distinta para la nútria. Las dos primeras están algo elevadas y libres d einundaciones, y parecen ser el dormitorio y algo parecido a una despensa. La tercera parece cumplir una función de almacén, ya que puedes ver ciertos desperdicios como trozos de metal o de cerámica. La última sala, la cual está encharcada de agua, no parece tener más función que la de sumidero, por la profundidad y mal olor.
La estrechez del tunel me provoca una sensacion muy desagradable.
Mentalmente maldigo mi poca prevision, debi llevar algo con lo que poder alumbrarme en la oscuridad. Afortunadamente pronto llego a una zona mas amplia y mis ojos se adaptan a la escasa luz que entra.
Examino el lugar y descubro cuatro salas. Decido inspeccionar lo que debe ser el almacen en primer lugar. Sujeto la daga que llevaba en la boca con la mano y asomo la cabeza al interior para ver si hay algo raro en el agujero o algo que pueda serme de utilidad.
Para que los demas no esperen mucho voy a postear en cuanto me respondas, aprovecho que hoy y mañana tengo mas tiempo. Por mi en dos dias estoy fuera del agujero (viva o muerta, lo se).
Empiezo por el almacen y luego pienso ir a la dispensa.
Por cierto, si grito fuerte desde fuera se me oye seguro, no? 10 metros no son mucho y la madriguera hace de caja de resonancia.
Cuando veo que desaparece lanzo un bufido y me pongo a excavar frenéticamente, intentando agrandar la entrada.
- Habéis oído lo que ha dicho ¿no? - gruño- Más adelante se ensancha, así que podemos intentar agrandarlo para que al menos le sea más fácil salir si hay problemas.
"Además, así no me siento tan inútil".
Pues eso, que mientras tanto... Por si sirviera de algo.
- Perdonad chicos- digo tras recobrar algo mis sentidos- creo haber escuchado algo. Voy a mirar un poco, ahora vuelvo.
Sin mediar palabra, salgo río abajo.
Creo que de esta manera estaré fuera y podéis seguir el ritmo bien. Espero normalizar pronto mi ritmo.
Parece ser que la nutria tiene algo de síndrome de diogenes, ya que esta estancia está repleta de objetos de pequeño tamaño apilados sin orden aparente. Quizás con el tiempo y la luz adecuadas podrías encontrar algo de valor, pero en estas condiciones lo más fácil sería hacerse alguna herida y que se infectara.
La despensa es exactamente lo que parece. En un rincón seco hay raices, crustáceos de rio y peces. El olor no es demasiado agradable, pero todo está bien ordenado y no ves ni rastro de lo que has venido a buscar.
Cuando sales de la despensa y miras hacia la sala inundada del fondo, las runas de tu mano comienzan a brillar, como reaccionando ante la proximidad de tu objetivo.
Cuando menos lo espero mis runas brillan y me pongo alerta, algo en la sala inundada las ha despertado. Con cuidado me acerco a dicha estancia, mantengo la daga en mi mano con firmeza. Deberia gritar hacia afuera y advertir de lo que pasa a los demas? Desecho la idea y sin bajar la guardia observo con atencion para ver que descubro.