Partida Rol por web

Este enorme edificio está construido en mármol blanco. Numerosos pilares tallados rodean sus patios, y su fachada está engalanada con intrincadas tallas. Una puerta de hierro colado controla el acceso al edificio en sí; permanece abierta durante el día, pero se cierra durante la noche. En la piedra que hay sobre la entrada se lee la inscripción "Museo de Tormentos Cristalinos".

A diferencia de muchos otros museos, todo lo que está a la vista está en venta, por el precio adecuado. La mayoría de los objetos se vende por unas 100 po, pero algunos se acercan al límite de 3.000 po de la villa. Cualquiera que solo desee pasear por el museo y admirar sus numerosas vitrinas, podrá hacerlo por la mísera cantidad de 1 po.

A cualquier hora del día hay patrullas de soldados vigilando la zona.

Era la primera vez que Zarus visitaba este sitio, parecía un lugar algo lujoso -Así que este es el museo... Debe haber muchas cosas bonitas a allá adentro. algo de curiosidad se despertó en el joven acróbata, se imaginaba cosas que pudieran estar a allá adentro, su imaginación voló un poco, hasta cuando recordó que su acompañante había llegado hasta aquí por una razón. -Y bien... Por donde empezamos?- le cuestiona para disponerse a entrar en acción.

Observó de reojo la cantidad de guardias que habían cuidando el lugar, seguramente cosas muy valiosas se encontraban en el interior de aquel edificio, pero también podría esconder algunos secretos. En todo caso, parecía un lugar muy interesante.

Tam pronto como llegaron al museo Tirk penso que podria estar haciendo Aire, "se habria metido en el museo sin permiso? O estaria por los alrededores?" Eran las preguntas que se hacia a si mismo. Su compañero le saco de sus pensamientos.
- sin duda tiene que haber cosas bonitas dentro, pero también cosas horribles si ese mago malvado esta convirtiendo a seres en piedra.- luego Tirk miro en varias direcciones y tras.colver a mirar a su compañero decidio.- miremos por los alrededores a ver si la vemos, y si encontranos a alguien tal vez la haya visto pasar por aqui, si no, tal vez este dentro o en otro lugar, pero ya decidiremos que hacer despues de buscar, te parece bien?

Zarus no entendía bien eso de que un mago andará por ahí transformado a la gente en piedra, pero el chico se veía bastante angustiado, así que lo menos que podía hacerse era tratar de encontrar a Aire. Bien! Busquemos entonces. dice con un tono neutro, aunque por lo visto a los únicos que encontrarían a los alrededores serían a los guardias, con una tormenta encima, nadie en su sano juicio estaría merodeando por ahí y, al mismo tiempo, aquello de ponerse en esa tarea sería algo que no verían bien los guardias, sin embargo, Zarus no dijo nada para no estresar al chico rubio.

Efectivamente, que un par de hombres anduvieran merodeando por el museo a altas horas de la noche llamó la atención de la guardia que vigilaba el local. Uno de ellos se acercó a ellos y les saludó. Buenas noches. El museo está cerrado, hasta mañana por la mañana no abre. ¿Podemos ayudarles en algo?

Tirk miro al guardia contento de encontrar ayuda.- si, por supuesto, estamos buscando a una Amiga llamada Aire, es tarde y llueve a mares, pero ha desaparecido, no la encuentro, creo que ha podido venir al museo, Estamos investigando a un mago malvado llamado Desthen que convierte a seres y personas en piedra y las trae al museo como estatuas, buscamos pruebas para acuasarlo ante vostros la guardia, tal vez la hayais visto, viste con vestido negro,siempre va acompañada de un sapo con el que habla, es su mascota, es morena y lleva el pelo recogido en un moño.- Tirk miro al guardia con preocupación- por favor, estoy preocupado, la habeis visto.vosotros o alguno de vuestros compañeros?

Ante la aparición del guardia, Zarus se detuvo pausadamente, mientras dirigía au mirada a Tirk, curioso de lo que diría a continuación.

-Pero vaya que es directo este chico! no pudo evitar dejar ver en su rostro algo de asombro, pues el ir diciendo por ahí que un tipo anda transformado a la gente en piedra, es una acusación que mas que grabe, es difícil de creer. Aunque también estaba dentro de lo posible que gente de la guardia estuviese involucrados en todo eso, en todo caso, era una información que había que manejar con cuidado.

Zarus pasó su atención al guardia, esperando, sin mucho sorpresa, cual iba a ser su respuesta, pues casi podía adivinar que nada sabía y si algo supiera, se lo guardaría. Fue entonces cuando se le ocurrió tratar de ganarse la confianza del guardia, en caso de que este fuera una persona de bien, les debería ayudar, sino, pues esperaba poder discernir si algo ocultaba.

-Implorar vuestra ayuda! Se que personas como usted, se preocupan por el bienestar de los ciudadanos. Hemos venido desde el templo de Pelor, tratando de poder esclarecer estos hechos funestos y tenemos por la suerte de nuestra amiga, pues se ha aventurado a ir a investigar esto sola. Solo le pedimos nos diga cualquier cosa que nos pueda servir para encontrarla.

El guardia escuchó sorprendido todo lo que Tirk le contó. De hecho hasta le costó seguir el hilo sobre las acusaciones que tan a la ligera soltaba. Tras cerrar la boca, pues se había quedado boquiabierto, negó con la cabeza. Apenas ha venido nadie por aquí en todo el día. Esa tal Aire no ha venido en todo el día, me acordaría de ella perfectamente.

Luego miró a Zarus que parecía nervioso. Me temo que no, no la he visto y no, no os puedo ayudar. Pero ahora es muy tarde para andar buscando a vuestra amiga, está oscuro, lloviendo y hace muy mal tiempo. Lo más seguro es que esté bajo techo durmiendo, y vosotros deberías hacer lo mismo. Si queréis, venid mañana, hablamos y le pido a toda la guardia que trate de buscarla. Si está bien, imagino que alguien la habrá visto.

Zarus miró al guardia con completo interés de la información que iba a suministrar, y este fue claro en asegurar que no había visto a Aire, y parecía no estar mintiendo, en lo absoluto. Entonces desvió su mirada a Tirk y le cuestionó -No pareces tener una clara idea de donde puede estar Aire. No tengo problema en seguir ayudándote a buscarla, pero debes tratar de pensar mejor, sobre en donde podrá estar metida.- dice, dejando escapar al final un suspiro.

Luego de agradecer al guardia por su ayuda, Zarus le indicó a Tirk que debían moverse, aún no sabía hacia donde, pero debían hacerlo, lo que menos quería el joven Lazarus en estos momento, era que su rostro le figurara a la guardia. Vamos Tirk... Seguro se nos irá ocurriendo algo. Si Aire no esta por acá, debe estar en alguna posada llamando la atención. remata con una sonrisa en su rostro, dejando claro que se le vino algo divertido a la mente, una imagen mental de ella diciendo alguno de sus disparates.

Tirk agradeció sinceramente el ofrecimiento de ayuda del guardia- Muchas gracias señor, si mañana usted o alguno de sus compañeros la ve, bastará con que le digan que la busco y que seguramente estare por la catedral de pelor.-acto seguido, tras desear una buena noche a los guardias se alejo del lugar con Zarus.

Zarus era realmente amable estaba bajo aquella tormenta, empapándose para ayudarle a encontrar a su amiga,Tirk lo miro y le puso la mano en el hombro- Si, tienes razón, si no se ha metido en lios puede que este en una posada, yo solo conozco la del bote del lagarto, no llevo tanto tiempo por aqui, si conoces alguna posada podenos ir a vevr si Aire se encuentra en alguna, y dejamos la del bote del lagarto para el final, que esta cerca de la catedral de pelor. ¿ Que te parece amigo mio?

Zarus se pone en marcha junto a su acompañante de cabello rubio, no pudo evitar extrañarse para sus adentros del temperamento de aquel chico, era realmente medido y confiado, y se podía casi apostar a que influenciable.

Una vez se examinó la posibilidad de buscar en una taberna, Zarus no dudó dos veces en sugerir La Pezuña en la Boca, se preguntó si aquel mediano estaría por ahí haciendo de las suyas. No confiaban en él, pero lo necesitaba.

Mientras llegaban hasta la posada del maniático enano, Zarus comenzó a narrar algunas experiencias y objeivos, no sabía si ser completamente abierto con su acompañante, el hecho de que en ultimas, el deseo mas fuerte que le albergara, era el de venganza, no era una información que le vendría bien a alguien como Tirk.

-Ya sabrás que mis amigos murieron a causa de la terrible enfermedad que transforma en pez. Tu has dicho algo, sobre que quizás esto guarde alguna relación con la misterio secta, yo consideraría que es muy posible y que tal vez lo de la enfermedad no sea mas que una forma mas de crear un caos en la ciudad. Ya muchos templos han perdido adeptos y llegaran a runa si las cosas siguen como van; Hay locos en busca de monedas que encierran poderes mágicos capaces de hacer arder edificaciones enteras; gente transformada en piedra... en realidad, es poco probable que todas estas desgracias ocurran al mismo tiempo por casualidad.- expone con rostro preocupado.

El rostro de Zarus pareció turbarse un poco antes de continuar -No sé que haya que hacer o por donde haya que empezar a buscar, pero hay que parar toda esta locura. No quiero ver a mas gente morir y ver como sus seres queridos se lamentan. No sé si tu y Airen han logrado averiguar algo, pero si tienes alguna información que me ayude a armar este rompecabezas, será de apreciar.- su rostro mostraba una firme determinación, estaba realmente comprometido a encontrar alguna solución ante las desgracias que acosaban a esta ciudad.

Tirk caminaba junto a Zarus charlando de camino a donde quiera que lo llevara.-Escuche de algo sobre el entierro de tus amigos, no los conocia, pero cualquier persona que pueda sentir el amor y la amistad, es buena persona, pues lleva lo mejor de la humanidad en su interior, que nos entristezca la partida de alguien asi de nuestro lado es normal. Cuando deje este mundo y vuelva al otro, ire a conocer a tus amigos, seguro que son tan amables como tu.- Tirk poso su mano en el hombro de su nuevo amigo Zarus, y le dedico una sincera sonrisa destinada a reconfortarlo.
Tirk continuo andando junto a Zarus un rato mas en silencio, hasta que su volatil mente se percató que tenia que contarle todo lo que sabia sobre aquel mal que habia en la ciudad.- por donde empezar..., bueno, cuando se notifico que habia una secta misteriosa en la ciudad, mi amiga lucrecia tuvo la idea de presentarse en la catedral de pelor a gritos y culpando a estos por la muerte de un amigo inventado, porque tenian las puertas de la catedral cerradas a la noche y no lo atendieron, todo un espectaculo, me di cuenta de lo que hacia pero no podia explicarle a Lyda lo que pasaba en la calle, Lucrecia fue dura, hasta la hizo llorar- Tirk sonaba apenado en esta parte- cuando entramos le contamos cual era elmplan de Lucrecia, que queroa que los de la secta la contactarán para infiltrarse y averiguar cosas sobre ella, en este punto Aire y yo fuimos a encargarnos de otro problema mientras Lucrecia se encargaba de la secta, hoy mientras estaba con Raellia la paladin nos encontramos con Lucrecia, la secta la habia contactado, queria saber de la maldad o bondad de la secta, asi que Raellia la acompañó desde la distancia para con su mirada poder decir si la persona con la que se reuniria Lucrecia era una mala persona, lo siguiente ya lo sabes, lucrecia se desvaneció con la otra persona y raellia regreso a la catedral de pelor.

Tirk seguia caminando y pensando si se habia dejado algo referente a la secta, pensaba que no asi que ahora le hablo a Zarus sobre Desthen, el mago malvado.-Aire me dio este escrito.

Cita:

-Aire dijo que la guardia no le hizo caso, decidi ayudar a investigar el asunto, si lo que dice en la nota era o no verdad, necesitamos mas pruebas para llevar a Desthen ante la guardia si de verdad era culpable. Parece que tanto el que escribio la nota como el tan merrin que se menciona están desaparecidos, un joven guerrero llamado Gruguer ,que habia ido a la catedral porque tenia la enfermedad que contrajeron tus amigos quiso ayudarnos, debo decir que en ese momento no sabiamos nada de la enfermedad, ni que era mortal. Nosotros ya habiamos ido a hablar con Desthen de las acusaciones de la nota, pero nos cerro la puerta en las narices enfadado, Gruguer para ayudarnos fue a casa de Desthen contandole que queria ayuda de el para la enfermedad este le dejo pasar a casa, Aire y yo estuvimos vigilando toda la noche por si pasaba algo pero no escuchamos ni vimos nada raro finalmente fuimos a la catedral pues estabanos muertos de sueño, esperando encontrarnos a Gruguer al despertar, pero cuando lo hicimos, Gruguer no estaba alli, y nos enteramos que la enfermedad era mortal, preocupados por Gruguer y Desthen ya que no sabiamos del todo seguro si era culpable o no, fuimos a su casa, tal vez Gruguer habia empeorado, o Desthen se habia contagiado. Al llegar les llamamos a ambos y a la puerta, al no recibir respuesta, preocupados por si les pasaba algo entramos a la casa rompiendo una ventana, seguimos llamando a los dos preocupados mientras explicabamos en voz alta lo que sabiamos de la enfermedad, que era mortal y puede que contagiosa, alli no habia nadie, pero de pronto cuando ibamos a salir para buscarlos en otro lugar aparecio de la nada un ser maligno y demoníaco con garras , y escuchamos la voz de Desthen decirnos que nos mataria, vencimos al ser, pero desthen trajo otro, con mis poderes pude protegernos a los dos y el diabólico ser no pudo hacernos daño, pero ahora estabamos seguros, Desthen es malvado, nadie bueno traeria ese tipo de criaturas a este mundo, Ademas Gruguer a desaparecido sin dejar ningun tipo de rastro, luego lo siguiente que recuerdo es despertar en la catedral sentado en el suelo, supongo que Aire me llevo, me desmayaria ante tanta maldad supongo- Tirk sin duda sonaba sincero, pero muchos habian visto a Tirk en la catedral cuando entro y empezo a contar como ido lo que habia pasado con Desthen, y habian visto una muestra de los poderes que dormian en Tirk, el no parecia recordarlo.

Tirk continuaba su historia- luego fue lo del incendio fuy a ayudar a apagar el fuego y perdi a Aire en ese momento, creo que fue a algun otro lugar,pero no se donde..... estoy preocupado por mis amigas..., por Lucrecia y Aire, es pero que esten bien..- Tirk se veia preocupado.

Las primeras palabras de Tirk activaron en Zarus, un poco de melancolía, pero no fue duradera, pues el deseo de encontrar culpables, era una idea fija. Mostró algo de asombro cuando su acompañante tocó su hombro, aquel tipo era una persona muy singular. Zarus esbozo media sonrisa en correspondencia a la de su interlocutor.

Ya con un tono mucho mas serio y analítico, empezó a escuchar el relato de Tirk. Era bueno saber que habían alcanzado un avance en la investigación de la secta misteriosa. Pero ahora Lucrencia estaba desaparecida y era muy importante encontrarla. Si los culpables de todo esto eran los de aquella secta, Zarus no podía hacer menos que intentar desintégrala y si le era posible, eliminar a su líder.

-Habrá que hacer algo para encontrar a Lucrencia, yo mismo me infiltraría de ser necesario. había mucha información que se podía conseguir estando dentro, valía la pena intentarlo.

Luego, vino el relato sobre el mago que convertía a la gente en piedra. Habían cosas que no se lograban entender a la primera, pero Tirk y Aire habían luchado contra criaturas infernales al investigar en los aposentos de ese mago, era muy probable que estuviese involucrado en algo muy turbio, pero para enfrentarse a alguien así, se necesitaría mucho mas personal y un buen plan.

Zarus solo medito en algunas ideas, pero no dijo nada en relación a aquel mago. Finalmente, Tirk habló sobre la última que vio a Aire. Si, yo también estuve ahí. No logré verla, a decir verdad, apenas surgió el dato sobre un posible responsable, decidí indagar de quien se trataba y creo que Aire tiene algo que ver con ese tal muerde rodillas, de echo, algunos se iban a poner en la tarea de buscarla para aclarar los argumentos que daba ese mediano escurridizo. Bien... Al lugar al que vamos deberá estar a aquel al que llaman muerde rodillas, él está relacionado con unas monedas mágicas, que adonde han aparecido, ocurrieron incendios. No sé si esto se relacione con la secta o con la enfermedad, lo que si se, es que en ese mediano no se puede confiar. declara con completa convicción.

Este enorme edificio está construido en mármol blanco. Numerosos pilares tallados rodean sus patios, y su fachada está engalanada con intrincadas tallas. Una puerta de hierro colado controla el acceso al edificio en sí; permanece abierta durante el día, pero se cierra durante la noche. En la piedra que hay sobre la entrada se lee la inscripción "Museo de Tormentos Cristalinos".

A diferencia de muchos otros museos, todo lo que está a la vista está en venta, por el precio adecuado. La mayoría de los objetos se vende por unas 100 po, pero algunos se acercan al límite de 3.000 po de la villa. Cualquiera que solo desee pasear por el museo y admirar sus numerosas vitrinas, podrá hacerlo por la mísera cantidad de 1 po.

A cualquier hora del día hay patrullas de soldados vigilando la zona.

¡La, la, la, la, la! Aire había llegado al museo dando pequeños saltos. Porque si algo sabía la muchacha, es que saltar te hace sentir bien y feliz. Si saltas, no puedes estar triste.

Se asombró como la primera vez del museo, pero no pudo entrar porque no disponía de la cantidad de oro suficiente. Se quedó en la puerta esperando que alguien fuera hacia ella, ¡o incluso que la invitaran a entrar! Pero, tras unos segundos, su paciencia se fue a pique.

¡Señor! ¡Señor guardia! gritó ¡Aquí, aquí! Soy Aire. Quería preguntar por los magos que iban a despetrificar a la gente. ¿Están aquí? ¿Se han ido todos?

El guardia se quedó sorprendido al ver a la mujer llegó dando saltitos. Y tras verla esperar un rato y luego acercarse, se sorprendió aún más. Entonces se acordó de un par de personas que venían ayer preguntando por alguien muy similar a la mujer que acababa de llegar. ¿Usted es Aire? ¿Verdad? Dijo sin responder a su pregunta. Anoche vinieron dos jóvenes buscándola. Era un chico rubio que más parecía un crío, y junto a él iba otro joven de unos 18 años, con el cabello tan oscuro como sus ojos. ¿Le han encontrado? Preguntó. Luego escuchó su pregunta y se quedó sorprendido. La verdad, no tengo muy claro de qué me estás hablando... dijo encogiéndose de hombros...

¡Uy, sí, soy Aire! ¡Ya soy famosa, Aristóteles! dijo a su sapo, dando vueltas con él sobre su propio eje. Es normal, he ayudado a detener a un mago tenebroso horrible. Y muy feo. No tenía nariz y parecía una serpiente aseguró asintiendo con vehemencia.

Pues no, no me han encontrado dijo, pensativa. No sabía quién podrían ser ¿No le dijeron dónde iban o sus nombres? Porque así, con esa descripción, no me suenan. ¡Ah, claro, serán fans! y se puso a aplaudirse a sí misma

Bueno, yo le cuento. Cuando llegué a esta ciudad, descubrí que ese hechicero feo convertía a la gente en piedra y llevaba las estatuas al museo, para que la gente las viera y las comprara. Tras una investigación y eso, pues le han detenido, y hay quien dice que ha muerto antes de ir a la cárcel, por no se qué del jabón que le da miedo, no me queda muy clara esa parte. Pero me han dicho que los magos han venido al museo ha desconvertir a la gente, ya no deberían ser de piedra, vuelven a ser personas. ¿no ha pasado eso?

¡Ah, sí, efectivamente! Así ha sido. Ya vinieron a despetrificar. Lamentablemente la mayoría llevaban tanto tiempo en esa situación que terminaron muriendo. Dijo al recordar que el propietario del museo había pagado por comprar cadáveres petríficados. Una verdadera lástima, pero ahora que Desthen está entre rejas, ya no hay nada de lo que preocuparse. Dijo sonriente el guardia. Puedes estar tranquila. Y los magos ya vinieron anoche, así que no, ya no hay nadie aquí.

Ooh... dijo Aire al escuchar lo de los muertos. Aunque era normal, seguramente no les petrificaba sus funciones vitales. Empezó a imaginarse una cantidad de cosas que haría si ella estuviera petrificada, pero agitó la cabeza para apartar esos pensamientos y dijo ¿Y no sabe si hay alguien que fuera un seguidor de Boccob? En el templo le están buscando, y me da pena tener que decirles que se ha muerto...