Partida Rol por web

Anteriormente en Fairy Tail...

Tras una misión en la que Kai logró llevarse el primer premio de un concurso de caza - y comida para cuatro semanas que quedaría agotada casi al instante de llegar al gremio- Kai regresó a su casa, Fairy Tail. Allí se encontró con que una chica nueva había llegado al lado de Natsu. Su nombre era Lucy y la habían unido al grupo. ¡Ya pertenecía a la familia!

La primer misión de la semana de Lucy consistió en acompañar a Natsu, Kai y la temible Erza Scarlet a salvar el mundo y al consejo mágico - aunque esto no lo sabían- de acabar muertos a causa de una extraña flauta perteneciente al libro de Zeref. Una magia oscura y mortal. Por suerte todo salió bien, y aunque a Kai le costó muchísimo traspasar una barrera mágica de viento y ayudar a Erza también, finalmente todo salió como se esperaba. Eso sí, muchos daños tuvieron que caer en cuenta del gremio. Pero eso ya es tradición.

Una vez llegados a casa, Kai se ofreció para compartir casa con Lucy, quien muy agradecida por el detalle se mudó junto a él. Desde entonces la casa huele a flores y está limpia y fresca. Fue una gran idea. No obstante, había que seguir pagando el alquiler y por ello había que llevar a cabo misiones.

En esta ocasión fue Elfman, el gran amigo de Kai que casi era considerado su hermano, quien le acompañó. ¡Y no fue una misión sencilla! La petición de ayuda les hizo llegar a una playa en la que solo había mujeres. Mujeres tomando el sol, mujeres pescando como si nada... en cuanto vieron a los dos... ¿cómo lo diría Elfman? "¡¡¡HOMBRES!!!" les advirtieron de que existía un gran peligro. Y así fue, una gran bestia surgió del interior del lago. Kai y Elfman sonrieron pero dicha felicidad les duró poco. ¡Fue la más feroz y difícil batalla a la que se habían enfrentado! Acabaron engullidos en el interior del gran animal y solo lograron salir a la fuerza y con mucho esfuerzo. Por suerte salieron vivos y la misión quedó finalizada; además, Kai pudo hacerse con un arma nueva. A pesar de estar para el arrastre, no había ido nada mal...

Actualmente en Fairy Tail...

Tras dos días de descanso, Kai pudo quitarse todas las vendas del cuerpo desde la lucha contra aquel monstruo terrible y se dispuso a regresar al Gremio. Lucy no se encontraba en casa, por lo que era de suponer que se le habría adelantado.

Kai, tras quitarse las vendas, se dispone a realizar unos estiramientos para comprobar que sus heridas han sanado bien.

- Bien bien… Todo parece estar en su sitio -penso con una sonrisa.

Se dio una buena ducha, se vistió y salió camino al gremio. Tras esos días de descanso, se sentía con ganas de salir y vivir nuevas aventuras ¿Qué nuevas misiones le esperarían? No podía esperar a llegar para verlas.

Al llegar al gremio, Kai pudo comprobar que se encontraba bastante más tranquilo que de costumbre. Quizás fuera porque Natsu no estaba por allí liándola... Aún así, la calma era algo a darse cuenta.

Mirajane saludó al chico con una amable sonrisa. Lucy tampoco estaba, lo que querría decir que posiblemente se hubiera ido con Natsu y Happy a hacer alguna misión. ¡Pero Gray tampoco estaba! ¿Dónde se había metido todo el mundo?

Mirajane:- ¿Qué tal? ¿Más recuperado de la aventura del otro día?

En ese momento apareció Erza con relativa prisa:

Erza:- Se me olvidó avisar al maestro de que nos íbamos. ¿Te vienes, Kai?

Kai se sorprendió de la tranquilidad ¿Dónde se habrían ido todos? Aun así se acercó a la barra y saludó a Mirajane, tras la pregunta de esta respondió:

- ¡Por supuesto! Ya estaba cansado de quedarme descansando en casa, es hora de hacer algún trabajo y divertirse un rato. Por cierto, ¿Dónde está todo el mundo?

No hubo tiempo para que Mirajane respondiese a su pregunta, pues erza apareció de pronto y aunque se estaba sentando con intención de charlar un rato con Mirajane, se incorporó de golpe en acto reflejo por la actitud de Erza.

- Pero… ¿Qué pasa? - Preguntó Kai algo aturdido por la inesperada situación - Y claro, voy contigo, pero acabo de llegar y no sé qué está pasando.

Sin esperar a la respuesta de Erza, ya se estaba acercando a ella para acortar distancia, suponía que si tenía prisa, ya le contaría la situación por el camino.

Tras escribir una nota rápida se giró y salió junto a Kai para salir en dirección a los muelles.

- A ciertos magos de Fairy Tail les ha dado por ir a hacer una misión de clase S. Se fueron durante la madrugada así que ya habrán llegado a la isla.

Mirajane permaneció tras la barra sonriendo y despidiéndoles.

- Verás en cuanto les pille...- Erza odiaba que las reglas se rompieran y por ello estaba muy enfadada, ¡casi enfurecida! Les haría pagar la insolencia a Natus, Gray y compañía.- A veces parece que no tienen cabeza...

Kai caminó con paso ligero con Erza dirección al puerto cerrando la puerta del gremio tras ellos, aunque después de hacerle un rápido movimiento de despedida a Mirajane con la mano.

- ¿Una misión de grado S? ¿Quiénes han hecho esa locura?

Kai dijo sorprendido mientras escondía su entusiasmo ya que si iban tras ellos... ¿Irían a una misión de grado S? ¿Cómo serían las misiones de grado S? La curiosidad le recorría y su imaginación volaba pensando en enfrentar a criaturas de leyendas.

- ¡Vayamos rápido entonces! ¡No podemos perder más tiempo Erza... ¿Quién sabe lo que nos estaremos perdiendo? Quiero decir… en que problemas se estarán metiendo.

- Adivina quiénes son.

Era obvio. La tranquilidad en el gremio, la ausencia de Lucy, la mala idea de haber cogido una misión de rango S... Según lo iba pensando la cara de Erza se oscurecía más. Pensaba en qué les haría de castigo y el aura maligna empezaba a borbotar s su alrededor de manera peligrosa.

- Cogeremos un bote del puerto, llegaremos a la isla, te llevarás a Natsu y compañía de allí y yo terminaré la misión de rango S.

No era una propuesta, sino una orden.

Cogieron el bote previsto, pero nadie quiso llevarles a la isla porque decían que estaba maldita, por lo que le tocó a Kai remar y remar y remar. Ya era de noche cuando llegaron a la isla. No era muy grande y por ello pudieron orientarse más o menos bien. Además, las voces de Natsu y Happy se escuchaban muy bien.

Kai estaba agotado… ¿Cuánto tiempo habría estado remando? Eso era peor que entrenar con Elfman y sus ejercicios de musculatura.

Mientras suspiraba arrastraba el bote unos metros fuera del agua como pudo

- Lo que nos faltara es que se fuese… además… ¿Quién viajaba hasta una isla en un simple bote? Habría que estar loco…

Al acabar comienza a recuperar un poco el aliento y de pronto escucha a Happy y a Natsu e intenta agudizar el oído para intentar escuchar mejor y poder hacerse una idea de lo que estaba pasando.

-¿Qué estarán haciendo esos dos?

Erza estaba como nueva. La verdad es que el viaje en bote no le había molestado en exceso. Y es que hacía una noche primaveral y la tranquilidad del mar le había sentado genial. Si bien no había suavizado su enfado con Natsu y compañía.

- Son capaces de estar destrozando toda la is... ¡¡LAAAAAAAAAAAA!!

¡Erza había caído en un hoyo justo en la entrada de lo que parecía un campamento! En el campamento había seres como demonios y después Lucy, Natsu, Happy y Gray que se habían quedado de piedra viendo el hoyo donde Erza había caído.

Happy:- ¡Sálvese quien pueda!

Virgo:- Hime, hemos atrapado a quien no es. ¿Tiene que castigarme?
 

Kai se quedó petrificado cuando vió a Erza caer y al ver a los seres que parecían demonios junto a sus amigos tampoco ayudaba mucho, unos segundos después, un grito le salió desde lo más hondo:

- ¡¿Pero que habéis hecho?!

Y lo decía en varios sentidos… ¿Tender una trampa a Erza? ¿Estar con demonios? Y es probable que incluso más cosas.

- ¡¿Y por qué no avisáis para estas cosas traidores?!

Happy se asomó, no sin miedo, a ver si Erza estaba bien. Mientras, Natsu intentaba explicarse aunque las cosas que decía tampoco es que tuvieran mucho sentido:

Natsu:- ¡Ha sido Gray!

Gray enseguida se puso con la frente pegada a la de Natsu, fulminándolo con la mirada:

Gray:- ¡Qué dices pelo pincho!

Natsu:- ¡Mira quién fue a hablar, ojos caídos!

Un segundo después, Erza cogía a cada uno de una oreja y los arrastraba hasta la tienda más cercana mientas los demás gritaban.

Erza:- Kai, entérate de qué pasa y qué han hecho. Mientras yo me encargo de estos.

Kai dejó que Erza se fuera y se dispuso a ocuparse de lo que esta le había pedido… no podía decirle que no… y mucho menos estando tan enfadada como estaba pero… Hablar con unos demonios también podría ser problemático en varios sentidos.

Se acercó a alguno que estuviera cerca y, algo asustado… le preguntó.

- eeehh… hola, soy compañero de Natsu, Gray, Lucy y Happy… ¿Han causado muchos problemas por aquí?

La verdad es que no estaba muy seguro de que hacer pero… como no hiciese algo, la ira de Erza caería sobre él.

El demonio más bajito y más anciano fue el que se dirigió a Kai. Era feo hasta el extremo de la horripilancia, pero su modo de hablar resultaba agradable:

- ¡Al contrario! Vinieron a ayudar y estaban dispuestos a ayudarnos con nuestro problema. De hecho espero que la llegada de su compañera y de usted no suponga que no van a destruir la luna.

Toda la gente de la aldea estaba arremolinada alrededor de Kai y del anciano. Ninguno se libraba de aquel aspecto tan horrible.

Kai se quedó más estupefacto aún si cabe por lo que le dijo el demonio… ¿Destruir la luna? ¿Qué clase de locura habían aceptado hacer? ¿Tenían si quiera el poder para hacerlo esos cuatro? Si de por sí, eso fuera poco, el estar rodeado le hacía sentir una presión a su alrededor…

- Pero… ¿Destruir la luna? Eso es una locura… ¿Podéis empezar por el principio y contarme el problema? Quizá encontremos otra forma de arreglar las cosas...

Anciano:- ¡No hay nada que pueda arreglar esto a excepción de destruir esa condenada lula púrpura!

Señaló al cielo. En efecto, esa luna estaba morada. ¡Estaba morada!

Anciano:- Desde que se volvió de ese color, dejamos de tener aspecto humano y cada noche sufrimos esta extraña mutación... ¡debéis destruír la luna!

En ese momento un rayo de luz morada ascendió desde algún lugar de la isla hacia la luna. Aquello no era normal y quizás existiera otro modo de arreglar todo aquel desaguisado. Uno más accesible.

Kai estaba sorprendido por eso… estar cerca de esa luna púrpura… ¿los transformaba en demonios? Pero entonces aquella luz que vió ir hacia la luna despertó sus sospechas, aquello era extraño aunque lo primero era hablar con Erza.

Fue corriendo hacia donde estaba Erza y nada más llegar interrumpió diciendo:

- ¡Erza! ¡Hay un gran problema! Este pueblo sufre una maldición relacionada con esa luna púrpura que brilla en el cielo y quieren que la destruyamos pero… creo que no tiene que ver con la luna pues acabo de ver un rayo de luz morada ascender hacia esta desde un lugar de la isla y tiene que estar relacionada… tenemos que ayudarlos, no podemos dejar las cosas así… además, esta luz púrpura también nos está dando ahora ¡Podríamos transformarnos en demonios en cualquier momento!

Natsu y los demás respiraron aliviados ante la interrupción de Kai y una vez que Erza escuchó todas las palabras del chico, miró a los otros y éstos le asintieron enérgicamente. Entonces suspiró.

Puede que Gray tenga razón entonces.

- Gray dice que esto está relacionado con Deliora y con un grupo de magos que quieren devolverle a la vida...

Gray:- ¡Hay que hacer algo Erza! Sino el esfuerzo de Ur...

- De acuerdo. Pero no os creáis que os habéis librado del castigo. Cuando volvamos al gremio recibiréis vuestro merecido.

Todos temblaron.

- Bien. Gray irá a la zona de Deliora, Natsu se quedará aquí con Lucy para defender el campamento y Kai irá a la zona donde se ve salir esa sospechosa fuente de energía dirigida a la luna. ¿Algo que objetar?

Kai escuchó lo que le dijo Erza, y una duda que dijo en voz alta acudió a su cabeza:

- Y tu Erza, ¿A dónde irás?

Aunque se le escapó la pregunta, ya hecha solo podía esperar para ver la respuesta… y rezar por que Erza no lo considerara una objeción pues lo que menos querría Kai es enfadarla menos.

Cuando Erza le diera la respuesta, Kai partiría en dirección a esa luz… el tiempo iba en su contra y lo peor de todo es que no sabía cuánto tenían.

- Intentaré recabar más información sobre la isla.

Fue toda explicación que dio. Entonces Kai se puso en marcha, alejándose cada vez más de la aldea, guiándose por la luz emitida hacia la luna.

Ello le llevó a la cima de una colina donde había muchos magos encapuchados haciendo una especie de ritual. Un tipo con cara de perro y otro con unas cejas muy gruesas eran los que daban las órdenes. De momento no habían visto al chico de Fairy Tail.