Partida Rol por web

En esta cafetería viviréis muchos de los momentos de la vida de vuestros personajes.

PRIMERA TEMPORADA

Todo comienza un buen día en vuestra cafetería preferida, El Central Perk. Es un local pequeño situado en la ciudad en la que vivís, Manhattan(Nueva York). Está regentado por Gunther, un tipo bajito que no suele ligar demasiado pero que consigue tener siempre llena la cafetería.

Es media tarde y los cuatro amigos estáis sentados en los sillones marrones del lugar, tomando vuestras bebidas favoritas mientras habláis de vuestras cosas.

En la barra está Gunther observándoos desde la distancia y haciendo su trabajo con eficiencia.

Entré en el bar visiblemente enfadado y me senté bruscamente en un sillón.

- No hay derecho -proclamé -No hay derecho. Ya no hay decencia.

Me crucé de brazos ante la curiosa mirada de los demás mientras seguía rosmando por lo bajo.

Miré a Joey extrañada cuando hizo aquella aparición, pasando un brazo por el respaldo del sofá y mirándole con curiosidad.

- ¿Qué pasa, Joey? - pregunté con tranquilidad.

Mónica se interesó por el motivo de mi enfado de modo que procedí a contárselo aún con el gesto contraído por la indignación.

- Verás. Venía hacia aquí tan tranquilo pensando en mis cosas -empecé a contar -cuando una mujer preciosa me paró para preguntarme la hora. Evidentemente se la di -continué con mi característica sonrisa de suficiencia -Cuando ya se iba a marchar me dio y las gracias, yo le pedí su teléfono ¿Os podéis creer que no me lo dio? ¡No hay derecho! Kit por cúo* ¡Ya no hay educación!

- Es una lógica aplastante, Joey... -apunté con una ceja alzada y tono ácido, justo antes de llevarme la taza de café a los labios- ...Lo recordaré para la próxima vez que me pidas el mando de la tele y te niegues a pasarme las palomitas... Aun no te he perdonado lo de la peli de Ron Jeremy... ¡Brrrrr! -un falso escalofrío recorrió mi cuerpo- Me pase 2 días interpretando que la gente me hacía proposiciones. ¡Eso no pasa con el porno casero, por Dios...! Quiero decir... -una expresión de inocente apuro saltó a mi cara- ... Que el altísimo, no permitiría que eso pasara con ese tipo de gravacio... -interrumpiéndome a mi mismo y desviando el tema descaradamente para aslir del apuro- ¡Mónica! ¡Que jersey tan bonito llevas hoy! ¿Es licra o gamuza...?

Hice una mueca al escuchar a Chandler. ¿Qué clase de conversaciones tienen estos dos? Miré mi jersey aunque terminé por ignorar su pregunta y mirar a Joey de nuevo.

- Quid pro cuo - corregí a mi amigo, aunque enseguida me centré en el tema principal - Supongo que la chica tendrá que pensarse el llamarte o no, y por eso no te dio su número... Para que no pudieras agobiarla tú con llamadas - le señalé - Porque todos sabemos que la llamarías en cuanto llegaras a casa - me acomodé mas en el sofá - O eso, o está comprometida y no quiere llamadas sospechosas - bromeo con una risa.

- ¿Que la llamaría nada más llegar a casa? ¿Por quién me tomas? -respondí indignado -La llamaría en cuanto girara la esquina.

Negué con la cabeza echándome hacia adelante para coger uno de los frutos secos que había sobre la mesa que tenía delante.

- ¿Pero sabes qué te digo? Ella se lo pierde. De todas formas le di mal la hora...

Terminé la frase con una sonrisa de resignación e indiferencia mientras me llevaba un cacahuete a la boca.

Negué con la cabeza divertida cuando me dijo que le dio mal la hora, así tan tranquilo.

- Vale, Joey, te he dado una respuesta pacífica para que no te lo tomaras mal pero... ¿Has llegado a pensar qué quizás no le interesaras? - le miré alzando las cejas.

El comentario de Mónica me hizo soltar una pequeña risa. Asentí divertido mientras la señalaba con el dedo y asentía.

- Siempre has tenido un peculiar sentido del humor, Mónica.

Bueno, cuando había hecho el comentario ya sabía que iba a tomárselo así, así que no le di mayor importancia. Solo suspiré y miré un momento a Chandler.

- Creía que el del humor peculiar eras tú.

 Phoebe entró por la puerta del Central Perk, cargando con su guitarra.

-Un té Gunther - dijo al pasar al lado de él.

Se sentó en uno de los sillones con la guitarra a un lado. Y soltó un suspiro.

- Si, y a mi me pones una madalena Geller, jijiji -comentó, graciosillo, al albino camarero del café...

 Gunther sale de la barra llevando entre las manos el gran tazón con el té de Phoebe. Queda atónito mirando fijamente a Chandler con esa falta de expresividad que siempre ha caracterizado al camarero del Central Perk. 

- De esas no nos quedan... pero te puedo preparar un batido Bing... - queda en silencio unos segundos - ... de fresa.

Deja el té sobre la mesa frente a Phoebe y se vuelve hacia ella. 

- Por cierto Phoebe... ¿Te interesa tocar el jueves? 

 Phoebe sonrie a Gunther

-Claro, me encantaria! - dijo con su peculiar tono de voz y cogiendo su té.

-Alguna peticion en especial, o con mi repertorio de siempre? Tengo algunas canciones nuevas - su entusiasmo era patente.

- Oye, Gunther. Me apetece un batido de esos. Pero, ¿puede ponerle una de esas sombrillitas tan monas que...? -Chandler se percató de las miradas que el resto le dedicaba- ¿Que? ¿QUE? -dijo abriendo los brazos- Las sombrillitas molan ¿Habeis entendido? ¡MO-LAN!... -Ellos siguen mirándole igual- ¡Bah, que sabreis vosotros lo que mola?, panda de viejos... Déjalo, Gunther. Yo y mi café tenemos suficiente amargura ya... -Se cruza de brazos con cara de fastidio y se echa para atrás en su asiento.

- Yo quiero un vaso de agua -dije a Gunther - ¡Ah! Con sombrilla, por favor.

- Un café para mi - digo alzando la mano y mirando a Gunther con una sonrisa cordial. ¿Joey acaba de pedir un vaso de agua con sombrilla? - Vaya... ¿Problemas de dinero, Joey? - pregunto por curiosidad.