Partida Rol por web

- Buenos dias - dije acercandome a el cuando salio de la cama, el desayuno estaba casi terminado y con suerte podriamos tener ese dia para nosotros solos.

-Huele muy bien- dijo con una sonrisa, le carisio el rostro, maravillado de que fuera tan hermosa y estuviera con él-. ¿Dormiste bien?- la miro de costado, mientras le ayudaba con el desayuno-. Parecias que soñabas..

- tuve un sueño fantastico- puse 2 pequeños platos sobre el pequeño marmol que era la cocina de aquel lugar mientras me prepara para poner el desayuno - Soñe que era un pajaro que volaba por el cielo a tu lado, juntos viajabamos por el mundo entero hasta encontrar una pequeña isla que flotaba en el cielo donde nos quedabamos a vivir juntos para siempre -

-Que hermoso sueño- Sirhan decidio decirle lo que habia visto cuando terminaran de desayunar. No sabia como tomaria ella su poder, aunque no creia que tuviera miedo o no le gustara. Lo que en verdad temia, era lo que harian en ese lugar, si la usarian como lo usaban a él-. Me gusta mucho esa idea- la abrazo-. Estar juntos para siempre... ¿Te gustaria volar?

No entendia muy bien aquella pregunta, no sabia que tenia que ver eso de volar - Para que quiero volar si tu ya estas a mi lado-

Que pregunta mas estupida. Sirhan solo le sonrio y la abrazo con mas fuerza. Se debatia entre contarle o no, sin saber muy bien que hacer. Pero llego a la conclusion que no podia mentirle, que ella merecia saber lo que le estaba pasando y que él, como su esposo, debia acompañarla en este proceso.

-Anoche...- empezo en suajili-. Anoche vi que flotabas sobre la cama. No fue un sueño, en verdad volabas...

Agarraro sus manos y la miro directo a los ojos, buscando como se estaba tomando esta noticia..

Lo miro fijamente algo alterada, aunque luego no puedo evitar ponerme a reír, seguro que aquello era un a broma - Soy un pajaro sin alas, pero creo que cuando estas tu mis alas regresan y puedo elevarme por el amor que siento por ti -

¡Pensaba que le jugaba una broma! Sirhan hizo un esfuerzo por sonreir, pero apenas fue un remedo de gesto. Podria seguir con el juego y no preocuparla, habia visto su rostro de preocupacion, pero por otro lado no queria engañarla. Suspiro, tal vez lo que haria seria duro para ella, pero al menos estaria él para acompañarla.

-No es una broma, en verdad te vi flotando- trago saliva-. Estabas dormida, asi que no te enteraste de nada. Tienes una habilidad igual que yo.

La miro directo a los ojos, tratando de tranquilizarla con su tacto, hacerle ver que no era algo malo, sino que algo mas los unia...

- Pero eso no es...- buscaba las palabras pero no me salian no en ese idioma, no sabia qe responderle a esos comentarios, parecia hablar enserio, no era una broma lo decia como si de verdad me hubiera visto flotando aquella noche, queria pensar que solo habia sido un sueño suyo, pero como estar segura de eso, en aquel lugar habia tantas cosas extrañas que eso no seria precisamente lo mas raro, yo habia muerto y habia regresado de entre los muertos, tal vez ahora si pudiera volar - ¿Estas... estas... seguro?-

Bajo su voz hasta hacerla un murmullo tranquilizador, acerco su cuerpo y acarisio con suavidad su rostro. Lo que menos deseaba era alterar a su esposa, asi que trato de mantenrla calmada.

-Escuchame- dijo en suajili, no creia poder hablar en ingles en ese momento-. No es algo malo, siempre fuiste especial y ahora tienes una habilidad especial. Como yo- no concideraba, aun, a su habilidad como algo especial-. Tenemos algo mas en comun. No debes tener miedo, estoy a tu lado y siempre lo estare. No veas esto como una maldicion...- casi dijo "como yo"-. Sino como algo bueno.

La abrazo con fuerza, no sabia como tomaria todo eso y comenzaba a creer que se habia equivocado al contarselo.

Me quedo paralizada en sus brazos, envuelta en ese abrazo suyo, no entiendo nada de lo que esta pasando, no se por que tengo ahora una habilidad ni que extraña locura era aquella, pero el estaba a mi lado, sus brazos me tenia sujeta y su amor era lo que cimentaba mi seguridad, no necesitaba nada mas, habilidades o no todo eso no cambiaria por nada.

-No pienses en eso, no es nada grave, pero tenia que decirtelo, sabes que no puedo mentirte- aunque en realidad si lo habia hecho al no contarle los trabajos que tiene que hacer. De repente sintio otra vez miedo a perderla-. Por ahora esto quedara entre nosotros, no lo comentes con nadie de aqui. ¿Esta bien?

- De acuerdo- no se lo contaria a nadie, pero no pensaba que ese precisamente fuera el problema aquella gente sabia sobre habilidades mucho mas que nosotros, tal vez incluso pudiera ayudarme con ello, pero si le prometia algo lo cumpliria yo jamas le fallaria a el.

-Gracias- le dijo besando suavemente sus labios. No sabia que pasaria de ahora en mas, pero buscaria protegerla contra todo, sea esa organizacion como o cualquiera que quisiera dañarla. No importaba si debia sufrir una muerte horrible, por ella lo haria-. Vamos, desayunemos y olvidemos los problemas.

Desayunais olvidando de todo, estando tramquilos por que os tenis el uno al otro que es lo realmente importante, y por suerte tambien teneis el dia libre, no tienes nada en teoria que hacer y ella tampoco asiuqe podeis moveros libremente.

-¿Que te parece si salimos? Caminamos y vemos un poco la ciudad- hablar en suajili le era mas facil, asi que dejo el ingles para mas tarde. Su esposa parecia mas tranquila, asi que lo ideal seria darle un dia solo para ella.

- hace tiempo que no disfrutamos de un agradable paseo - de hecho ni recordaba cuando habia sido la ultima vez, seguramente antes de caer muerta o que sabia yo, apenas si recordaba lo que habia pasado antes.

Sin perder tiempo, se cambio de ropa y se preparo para salir. Mientras la veia, contenta y sonriente, recordo que antes siempre estaba trabajando, ocupado, buscando un mejor futuro para ella... aunque claro, no podia compartirlo. A veces habia que hacer sacrificios, dejar de lado cosas por alguien.

-Vamos, hoy me dedicare enteramente a ti- salieron de su habitacion, Sirhan hecho un vistazo a su alrededor, quizas vea a Fenix, no sabia nada de él desde la mision. No. Hoy nada de eso, solo existia su esposa. La condujo rumbo a la salida, estaba ansioso por ver la luz del sol y sentir el viento..

En el edificio nadie parecio lanzarte una mirada, algunos te saludaron en recección la chica que estaba alli atendiendo te despidio en cuanto salisteis pero nadie puso pega alguno nitrato de impedirte salir, eras libre de ir y venir cuando quisiera, por lo menos hasta que ellos te mandaran una misión, el problema es que sabias que aunque quisieras seguramente no podrias ignorar una orden directa fuera cual fuera.

No tenia planeado nada, solo queria caminar, con el brazo de su esposa rodeando el suyo, charlar y distraerse. Una vida normal, sin poderes, sin misiones, sin muertes. Verla sonreir y hablar, olvidarse del tiempo en el que ella no estuvo, casi parecia un sueño. Aferraba su mano, entrelazando sus dedos, como lo hacian cuando eran mas jovenes e inocentes. Parecia que habian pasado siglos desde eso.

-¿Te gustaria hacer algo en especial?- le pregunto con ojos soñadores, estaba dispuesto a bajarle una estrella si se lo pedia.