Partida Rol por web

- Naivé y Evanthë - dije acercándome poco a poco a los cuerpo que yacían juntos justo al lado del pebeter- ¿Eran amantes?- dije confundida- Esto cada vez se pone más complicado, realmente no sabremos si Naivé decía la verdad, ni tampoco tendremos su supuesto don... -dije mientras miraba a Yidorac, su pupila de nuevo había muerto- , estoy realmente confundida, Yidorac ¿Qué piensas de todo esto?- dije mirando a la bruja-.

JAJAJA, rei, porque Naive tubo lo que se merecia, pues aun que no pareciera una traidora, siempre estubo del lado oscuro con su ingenuidad por escudo, Evante podria ser quien estubiera a su lado como menciona Arë, y quien sabe si no seria el brujo ese que menciono, pues de no serlo  porque tanto reparo en decirlo?

Muerta sea y bien muerta es. Lo siento Yidorac si no te gusta, pero ya dije que algo raro habia, entre vosotras dos, bien tu bien ella, pero no podia ser todo el monte de oregano, pues al parecer el cornezuelo estaba ahi de detras con ella.

Blavadsky... - Entrecierra los ojos y se esfuerza en respirar despacio, conteniendo las furias de mil océanos que bullían en su alma. - Te juro... que si descubro que has sido tú quien la ha matado y no regresa con nosotras... aún cuando este cónclave termine, te perseguiré hasta el fin del mundo. Tu sed jamás podrá ser saciada y te enloquecerás hasta que tus propias células mueran ahogadas. - Cómo te odio...

Gala, gracias por guardar silencio al menos con el poder de mi runa. Por ahora es mejor así.

Alandra... ¿Eres consciente de que Naivé, aún con todas sus reservas, te ha señalado a ti como el Vidente Corrupto? No estoy de humor. Espera, no, no es eso... estoy exactamente del tipo de humor con el que realmente Disfrutaría pudiendo matar a alguien ahora mismo con mis propias manos y beberme su sangre para hacer honor a nuestra fundadora, la gran Shaiya.

Pero te respeto. Siempre te he respetado, así que voy a darte UNA oportunidad para defenderte... Aprovéchala rápido, porque sin duda Gala podrá observarte si no eres lo suficientemente convincente...

Por mucho que le disgustase, la muerte de Naive ahorro trabajo. Pues lo único que estaba creando con su actuación era caos y confusión. Y las únicas beneficiadas de todo ello eran aquellas que poseían la maldición de la licantropía. Ahora habían perdido ese escudo que era Naive y tarde o temprano darían un paso en falso.

Pero había algo que preocupaba a Alandra y eran esas súbitas muertes. Al parecer empezaron a suceder días atrás... de repente sus pensamientos son interrumpidos por las amenazas de una enloquecida Yidorac. Tras escucharla

 - Entiendo tu dolor, pero estamos hablando de la misma Naive ¡¿Aquella que arranco y se comió mi corazón?! Yidorac os comprendo pues no hay nada más doloroso que perder algo querido. En ese momento Alandra se lleva la mano al pecho justo donde tiene el corazón y con una reverencia.

Si me permitís, hare algo que debí de haber hecho hace tiempo. Y es agradecer a aquella hermana de cábala que me resucito de entre los muertos. Tenéis mi eterno agradecimiento, aunque a esa hermana me gustaría pedirle algo. Y es que utilice su poder con sabiduría. Pues no me gustaría que las culpables fuesen devueltas a la vida... confió en vuestro buen juicio.

Dichas sus palabras se encamina hacia el cuerpo tendido de Naive, la observa por unos instantes y con una rapidez endiablada clava su daga en el corazón. Mientras gira lentamente su muñeca en el rostro de Alandra se refleja  odio y satisfacción. - Ahora estamos en paz hermana...

Alandra se incorpora con la daga ensangrentada en su mano diestra y observa al resto de hermanas. Su rostro parece haber recuperado esa calma que la caracteriza. Esto es algo personal y nada tiene que ver con los relicarios robados... Como veréis y a quedado claro... Alandra, de la Estirpe de Arien, sabe pagar sus deudas.

Dicho esto Alandra se retira silenciosa sabiendo que aquel acto la condenaría... pero el sabor de la dulce venganza bien valía su condena.

Todo se habia vuelto tan confuso, un torrente de información y muertes, resurecciones y nuevos blasones...A quienes habran bendecido esas muertes...Mi alma lloraba, por la muerte de Naivé, pero Evanthe le acompañaba, por lo menos no se habia ido sola...Miro atentamente los movimientos de Alandra...si mal no recordaba, la unica bruja que habia comido del corazón de otra habia sido Yidorac...por que ese gesto con la pequeña...en un principio confiaba en ella, ahora ya no...mi voto debia continuar su camino, pero esta vez lo cambiare...

Miro a Gala...Sera posible que tu muerte haya sido ocacionada por la daga de Alandra...En silencio continue observando...pero me acerque al cuerpo de Naivé, quite la daga de Alandra y se la arroje directamente al costado derecho de su rostro, corto algunos cabellos y se clavo en el tronco de un árbol tras ella...Cuidado Querida...mientes tando como lo hacen las traidora...Abiertamente mi voto es para ti...no eres la misma, no la misma espia...

-Culpa a quién te dé la real gana Ángel, pero la venganza es algo inherente en nosotras. Observa al grupo Si me quitáis eso, la dulce venganza, entonces no tiene sentido ser quién soy Sonríe  Ángel, yo no he matado a Naive, otra ya se ha ocupado de hacerlo... Solo he clavado una daga en su muerto corazón.

Más muertas en mitad del día - dije en voz alta, realmente reflexionaba, y la voz de Eowin llegó a mis oídos, no era del todo disparatado, aunque podía haber sido cualquier.

Todas sabéis que Navié no era precisamente la bruja que contaba con mi simpatía, pero cierto es que su muerte en el momento en el que sus palabras podían ser tan reveladoras deja qué pensar. Como dice Yidorac, el echo de que Navié te señalara no hace más que fijar nuestras miradas en ti, pero, ¿y si fuera una trampa?

De repente miré a Gala  - De las presentes tu eres la única a la que creeré cuando hable, así que te escucho.

Naive había caido, y con ella otra compañera de casa. El amor era una unión demasiado fuerte para romperse incluso con la muerte...Y todas esas faltas de respeto con el cuerpo le resultaban odiosas. Sin embargo no lo reflejo de ninguna forma que no fuese mirar con desprecio a Alandra, pues seguía habiendo cosas más urgentes, aunque no importantes, que honrar a los muertos.

- Aunque creo que Grunhilda se equivocaba en sus acusaciones, dudo que esto sea culpa suya.- añadió la bruja, pensativa, intentado eliminar las cizañas que había surgido a raiz de la bruja. Al aprecer, la magia de Seren había afectado y trastocado todo y, para gusto o disgusto, todo había acabado. La propia Naivé reveló su naturaleza hace tiempo, para las que confiabais en su don. Sin embargo y teniendo en cuenta que la muerte trastoca a cualquiera, no negaré que comprobarlo fuera a ser un alivio.

- DIN DIN DIN- dijo, con cierto sarcasmo muy poco propio de ella. Correo desde el inframundo~. Se llevó la mano a la sien, con un incipiente dolor de cabeza. La gente ultimamente no podía estarse calladita...Yidorac, guarda tu ira, pues tu discipula dice que no guarda rencor ni a Grunhilda ni a Madame. Intuyo que era consciente de que su muerte no es cosa suya, pero no puedo asegurarte nada.

- Gala. Se quedó un segundo callada, como si intentase recordar algo especialmente complicado. Si el dragón no se levanta de la tumba no adquiere la sabiduría del oceano. O algo asi. Sin embargo, creo que teneis un nombre que darnos para las acusaciones, hermana. Dejaré que sean tus labios quién lo digan, no sin antes hacer petición. dijo, con una sonrisa un tanto sádica.

-  Y al Aire, de quién no quiere desvelar su identidad, pide que levante de entre los muertos a Evanthe. Miró de reojo a todas las presentes. No soy quién para meterme en los asuntos de cada una, asi que haced lo que creais conveniente, y yo haré lo mismo.

Vikonia estaba en segundo plano, observando cuando ocurrió todo.-Naivé fue asesinada por alguien fuera del circulo de las ladronas y asesinas, eso lo tengo claro pues ellas no actúan de día. Alguien de nosotras a echo lo que Gunhilda gritaba a los cuatro vientos, alguien que la apoyaba, por lo que su asesina, de mostrarse, no creo necesario darle muerte, fuera aparte si ha obrado bien o mal. Buscar culpables en su muerte no sirve mas que de ayuda para las traidoras.

Supongo que como bien decís Evanthe a muerto por comunión con la chiquilla de Yidorac, pero mientras no sepamos su poder o bando, no me parece correcto revivirla, por mucho que lo pida Naivé, pido a quien trae de regreso a las caídas que por el momento al menos, no lo haga.-Dicho lo cual giro su melena hacia su hermana Lethalia.

-Has estado mucho tiempo callada hermana, ¿No tienes nada que decir?

Que me tranquilice, dice... - resopla, negando con un gesto mientras se coloca nuevamente el guante de frío metal de su casa. Detestaba aquello. ¿cuantas veces más debía sentirse la última de su sangre y linaje? - Si esto sigue así... - Entonces, quizás para calmarse, quizás como parte del ritual ya innumerables veces reempezado, las aguas del lago de alzan para recoger a su benjamina... llevándose también en esta ocasión el cuerpo de su amada, negándose a separarlas en la muerte. Tanto la una como la otra aún podrían resucitar y permitir que cualquiera se tomase venganzas imaginarias sobre sus cuerpos no estaba en los planes de la bardo. Entonces se gira hacia Neblaleth - Puedes decirle de mi parte que estoy calmada, calmadísima... - casi podía escucharse cómo rechinaba los dientes - y que a pesar del error de una y el desprecio que siento por la otra, en el fondo yo tampoco creo que haya sido ninguna de ellas quien la ha matado. Más bien... - Girándose hacia Alandra. - Más bien estoy convencida de que la han matado por estar demasiado cerca de la verdad. Por ser... "inapropiadamente certera"

Da un para de pasos hacia Alandra - Ella siempre fue inconstante... cabeza hueca, desesperante e incluso odiosa, pero era inteligente. Poseía una sagacidad digna de comparación con las mismas Fundadoras, y eso, en este preciso momento, solo había una persona a la que podía hacerle daño. 

No trates de ocultar tu gesto como una revancha. Ya sabemos sin lugar a dudas que Cassie era una defensora oscura, así que cualquier cosa que ésta dijese carece de toda validez, incluida la forma en la que supuestamente te atacó. Y lo sabes... de modo que sólo estás actuando. 

Alandra, en este día mi voto será para ti... y si sigues con vida, mañana también votaré por ti. Eres escoria y como tal regresarás a donde perteneces. Solo lamento haber estado tan confundida contigo.

Yidorac, lo que dices tiene poco sentido, pues si Naive se acercase a una verdad que nos quisiera contar, no habria sido asesinada por atra hermana, solo en el abrigo de la noche habrian actuado las asesinas para eliminarla y no fue asi, por lo que murio por ser sospechosa, y mas recelo ahora de Evanthe, que claman por su vida, pues puede a efectos ser la corrompedora de Naive a la que creo, habria que dejar ahi abajo

Diriguiendose a Yidorac. -Tus palabras me demuestran que eres una estúpida necia. Pero estas de suerte pues tu ciega camarilla  obedecerá sin rechistar tus palabras y quizá esta noche me veas muerta.

Aunque no estaría de mal que Gala hiciese uso de su tan preciada Videncia y te demuestre lo necia y ciega que eres. Alandra sonrie Si es que puede, ¡claro esta! Aunque seguro que alguna escusa tiene para no hacer gala de su videncia.

Ahora bien, comparto la opinión de Viconia. Aquella de nosotras que ha sido bendecida por el don de la curación y quién sabe qué más. Una sonrisa de complicidad se esboza en sus labios. No debe de hacer uso de su don hasta que no se sepa quién es realmente... y eso me incluye a mí.
 

¿Entonces a parte de las ladronas y las asesinas, hay alguien más que nos quiere muertas? Cada vez este conclave se corrompe más...

Preguntó la joven Eowin que cada día que pasaba menos entendía lo que sucedía.

Habrá que estar más alerta.

Pensando en todo esto, no estoy muy segura de que eso sea cierto. Porque se puede matar a alguien sin tocarla, ni siquiera sin levantar sospechas ¿Verdad? si no, no hubiéramos estado aquí más de una. Así que opino que las haya matado tiene relación con todo lo que está pasando este día. Así que no se que pensar, lo único que si mataron a Naivé, fuera porque dijo que sabía quienes eran las asesinas.

-Oh, Alandra querida, no te preocupes...añadió Nebaleth con un sarcástico gesto de compañerismo. Bien sabemos lo que eres tú. El problema es que yo prefiero buscar a las traidoras antes que ir a por una de sus siervas...¿Pero no tendrás la buena decencia de decirnos para quién trabajas, verdad? Creo que es la única forma que tienes de librarte de la muerte...

Shaira las miró a todas, una por una.

Lamento mi silencio... Ya sabéis que no soy de muchas palabras...

Opino como Nebaleth respecto a Alandra. A pesar de pertenecer a mi misma casa no puedo defenderla, también creo que esconde algo oscuro pero no creo que sea una de las asesinas... Sin embargo, no tengo claro nada...

Ag, esto es mas complicado que una batalla abierta. La lengua nunca ha sido mi mejor arma...

Alandra no puede dar crédito a las palabras de Nebaleth por un momento quedo desconcertada. ¡Trabajar!... ¡¿Me preguntáis para quien trabajo?!

Antaño orgullosas, antaño temidas, y mirad en que nos hemos convertido señalando a cada una de las presentes añade ofendida. En una grotesca parodia de nuestras antecesoras. Nos encontramos  en el conclave que dio vida a las cinco casas... y me preguntas, ¡¿para quién trabajo?!

Os recordare a todas quién soy por si aún queda alguna duda. Observa a las presentes con orgullo y con soberbia en su voz habla. Soy Alandra, la Espía de la Casa del Viento. Hija de La Casa de Arien, La Perversa Dama del Viento. A la cual debo devoción, mi lealtad y mi vida si fuese necesario...

Alandra hinca su rodilla derecha  en el suelo y llevando su puño diestro al corazón y con la cabeza gacha añade. -Fundadoras, perdonar las palabras de Nebaleth y de muchas de nuestras hermanas. Pues parece ser haber olvidado quiénes son realmente y cuál es su papel en este sagrado lugar...

Se incorpora mientras ladea la cabeza con incredulidad y tristeza. Trabajar y me pegunta para quién trabajo... Aquello realmente fue un golpe bajo para Alandra de la estirpe de Arien
 

Preciosa actuación... pero no engañas a nadie, Alandra.

En este momento y hasta que los augurios o las runas no nos muestren otra cosa solo tenemos una certeza, y esa es que tú no eres digna de estar entre las vivas. - baja el tono - Me has decepcionado profundamente.

Alandra clava su daga en el suelo. Si tan claro lo tenéis todas, al menos os pido que sea rápido... Señala a Yidorac. Si el concilio así lo decide... Quiero que seas tú y solo tú la que manche sus manos.

Alandra extiende las manos al cielo y recita una plegaria. Fundadoras llegado el momento concederme el Don de la Venganza... Y si no es así, ¡al diablo con todas!

Con una siniestra sonrisa, voz lenta y pausada añade. Por cierto Gala, llevo esperando días escuchar que revela tu Don sobre mí. Dicho esto marcha silenciosa dejando la daga clavada en medio del concilio.