Partida Rol por web

La mañana despuntaba, y el octavo día amanecía entre llamas...

El calor del fuego aumentaba la temperatura del cónclave, aumentando la angustia, el temor, la ira, y la discordia. En medio de vostras como si de una hogera se tratase un cuerpo ardía herido... el fuego apagaba su alma...

Sus gritos habían cesado antes de que vuestro sueño hubiera terminado...

Un úlitmo movimiento...

El rostro de aquella hada os miró una última vez, antes de ser deborada por las llamas... y fueron los ojos de Cenit los que os miraron antes de cerrarlos a la vida... sus ojos se cerrararon mientras su mano se elevaba entre el fuego.

Una mano buscando la nada... pérdida, y finalmente cedida a la sombra de la muerte, mientras el sol alumbraba al mismo fuego de que deboraba su cuerpo... al alba.

Camino prácticamente a gatas en cuanto escucho su grito, apremiada, para ver el cuerpo de Cénit en llamas mientras nos dedica una última mirada inerte.

¡Cénit! ¡Cénit!

Su cuerpo es consumido mientras, en vano, intento echar tierra para apagarlo.

¡Nocturna! ¡Hermana de la noche! ¡Vuelve! ¡Vas a volver!

A duras penas sí puedo contener las lágrimas por su muerte, mis ojos buscan el único apoyo que puedo hayar: Leporidae.

Va a volver... ¿Verdad? Va a volver... Ha vuelto otras veces. Volverá otra vez. ¿Verdad?

La esperanza se puede apreciar aún en mi voz.

Había estado durmiendo hasta que el grito de Shaiya me había despertado, y restregándome los ojos, los abrí para ver una luminosidad extraña, aunque apenas registré su origen hasta que oí el nombre de Cénit ser gritado.
- ¿Cénit? - pregunté mirando a mi alrededor, hasta que mis ojos se posaron en su cuerpo todavía llameante. Con pasos tambaleantes me acerqué mientras veía como su vida se consumía - No, no, no... No tú, hermana, no tú de nuevo... ¿pero qué pasa con ésas traidoras? ¿no les parece bastante sufrimiento haber muerto ya varias veces? ¿tienen que seguir torturándola una y otra vez? - grité mientras miraba a todas partes, como recriminándole al cónclave completo - ¡¡no lo entiendo!! ¿por qué otra vez? -.

Al no tener mis mariposas, corro personalmente al cuerpo de Cenit e intento apagarlo con lágrimas entre los ojos.

Yo velaré su descanso de nuevo...

Escuche unos gritos de varias hermanas... me asume y vi. Que cenit estaba entre llamas...no podía creer lo que estaba viendo... ya ha sufrido bastante si a muerto varias veces y la revivido y ahora otra vez… no se lo que pasa con las traidoras pero estamos siendo todas derrotadas y ellas siguen vivas,..Me acerque donde estan las demás hermanas… agache la cabeza con un poco de pena por la perdida de cenit…  pensé entre mi misma que descanse en paz…

Nooo, nocturna no... aunque ahora era Cenit, en su interior siempre fue ella....porque esas endiabladas no nos dejan en paz, porque les gusta torturarno... porque se obcecan con la pobre ... ella no tenia mas poder que el ya mencionado.... porque... porque ... .porque.....

Tras ver a Ayra acercarse a ella, tu podrias hacer algo por cuerpo verdad, verdad que la traeras de nuevo a nuestro lado.... por favor te lo pido aunque me creas lo que quieras, no lo hagas por mi, si no por ella... por favor Ayra, por favor....

El fuego se cnosumia ante el cuerpo inerte, y entonces el fuego comenzó a crepitar... tras las chispas pequeños toques azulados brotaban de las llamas, unas pequeñas mariposas aladas volvían a la vida, y para proteger sus alas de ardiente elemento mimetizaban sus alas trasformandolas en fuego...

Las mariposas comenzaron a girar en torno al cuerpo caído y poco a poco un tintineo avisaba de que Cenit se volvía a levantar, las mariposas reconstruían sus delicadas alas, y su piel volvía a tornarse sana y delicada como antaño... el fuego se apagaba, y su vida de nuevo alumbraba...

Lágrimas de alegría empezaron a salir de mis ojos, y empecé a correr alrededor del hada.

Mis mariposas, mis mariposas, mis mariposillas están vivas

Una gran sonrisa se dibujó en mi cara.

Apenas podía registrar lo que veían mis ojos, las lágrimas de tristeza se convirtieron en alegría cuando vi a Cénit despertar - ¡¡Cénit!! hermana, no me puedo creer que estés bien... me alegro tanto... ¡las traidoras no han podido salirse con la suya! - grité presa de la alegría.

Mientras espero la respuesta de Leporidae, rápidamente puedo observar la milagrosa resurrección de mi compañera y sonrío, recobro la compostura por segundos y miro a Leporidae con media sonrisa, acto seguido miro a Cénit.

Bienvenida al mundo de los vivos... Me alegra que no te quieran ni ver por allí, hermana de la noche.

Luego miro a Ayra con condescendencia.

Me alegro por tus mariposas... Eres sencillamente increíble.

Bajo al fin del árbol al día siguiente, ayudaba pro el propio viento, que parecía susurrarle secretos del pasado. Aunque su mirada se clavaba en la de Ayra y Cenit quien esta ultima volvía a la vida.
-Con esto mis sospechas contra las enamoras están disipadas. Y me alegro ver que las radicales no consiguen en su empeño.-Podría sonar raro viniendo de ella, pero ahora podía hablar sin miedo a represalias, después de todo una de las vidente había mirado en su interior y observo que como ella misma decía no era mas que un hada tozuda.

Ahora se sentía mas segura para hablar con sus hermanas pero aun no sabia como ayudarlas.

Vi que se movían unas mariposas Ayra y Cenit estaba reviviendo... me alegre porque había resucitado entre los muertos…y le dije me alegro que este de vuelta y me arrime donde estaba Ayra y le dije que guay tía las mariposas estan contigo que alegría que has ayudado a la hermana Cenit...y esperemos que no vuelvan atacar alguna mas ahora deberían de caer unas de las malas…. Se queda mirando a  todas las que estaban alrededor de Cenit y Ayra… se arrima a un tronco que vio y se sienta...

Leporidae salió de su madriguera, aunque en esta ocasión lo hizo de forma diferente. Agazapada, avanzaba dando pequeños brincos, mientras su cabeza se movía rápidamente, como estudiando aquel lugar, como si fuese la primera vez que se encontraba allí. Su nariz no paraba de temblar, intentando captar algún olor que le resultase familiar. Súbitamente, tras captar la esencia que buscaba, Leporidae salió disparada, saltando cual conejillo feliz hasta llegar a Shaiya, donde comenzó a frotar su cabeza contra el vientre de su amante con una amplia sonrisa y con carácter juguetón. 

Ver a Cénit en llamas y seguidamente resurgir de las llamas rodeadas de mariposas que surgían de las mismas fue una escena díficil de olvidar. Los gritos de Shaiya nos despertaron, alarmada no supe que hacer sino ayudar a las demás a echar tierra para apagar el cuerpo que consumían las llamas. Pequeñas lágrimas asomaban en mis ojos cuando sin más surgieron aquellos diminutos insectos y ayudaron a volver a la vida al hada.

- Me alegro que no lo hayan conseguido, me alegro de tu vuelta Cénit -dije mirando al hada con una sonrisa-

Antes de darme cuenta Leporidae se abalanza sobre mí, como un conejillo, lo que consigue arrancarme una sonrisa sincera, posiblemente una de las pocas que se verían en toda mi vida. Me agacho y beso su frente, mientras con mi mano aparto los cabellos de sus ojos y, sin perder mi sonrisa, sencillamente susurro su nombre. Luego miro de reojo a las demás, aunque no dejo de acariciar a Leporidae. Y de dedicarle miradas furtivas. No sé por qué está así, pero me gusta.

¿Y ahora, hermanas? Quedamos menos sin analizar... Suponiendo que ambas hayan dicho la verdad... Y, bueno, mis sombras me han dicho que han habido cambios por la noche... No sé cuales exactamente, pero han habido cambios.

Cenit, preciosa, porque te hacen esto a ti, te matan  de mil maneras horribles, dolorosas, inundadas de horror y sufrimiento, y cada vez que Ayra te devuelve la vida las asesinas insisten en matarte de nuevo... quienes son a quien has perjudicado tu aqui, para que podarmos darla la muerte que merece por tales crimenes contra ti y contra las demas...no tienen derecho a la vida si la menosprecian y la humillan tanto... como os pille sereis ajusticiadas de la manera mas dolorosa posible.... tendidas en el suelo, maniatadas y con una docena de mis gatos mas hambrientos en su interior.... sereis devoradas, os lo juro por mi vida....

Me puse junto a mi amiga y la dije...Me alegro que hayas podido regresar de nuevo, descansa Cenit descansa, has de recuperar fuerzar, tenemos que encontrar a tus asesinas sin dilacion...

Sonrió y digo gratamente: Me alegro de que tus pequeñas vuelvan y más fuertes que nunca, ni el fuego puede con ellas...

La abrazo y dije: Es hora de la venganza, blandiré mi espada para destruiros a las que hicieran sufrir las mariposas de Ayra.

Gió alzo su fular para llamar la atencion.
-Si se me permite la pregunta que es de Vallery y Brisa, ¿Sabemos algo? Antes de mi regreso ya se comunicaba poco con las del...-Le costaba repetir la palabra, era dolorosa.-Cementerio y desde que he regresado apenas e escuchado sus palabras y menos las de las otro lado y mi viento no llega hasta allí.

Sobre Brisa, la verdad es que no se porque goza de esa posible inmunidad que le mostráis, ¿Ya sabéis de sus intenciones?-La musa intentaba integrarse aunque eso pudiera provocar nuevas miradas de recelo.Aun desconocía mucho de los dias anteriores.

Yo miré en el interior de Vallery antes de morir y no es ninguna traidora, Gió. 

Observé al resto del Cónclave. Cénit seguía muriendo y resucitando, ¿por qué las traidoras se habían obcecado con ella? e dirigí a Shaiya.

En ese caso seguiré mirando a las hermanas de las que no sabemos nada.