Partida Rol por web

Al aparecer en la academia sin ser llamado miré ligeramente sorprendido al resto de integrantes de los convocados y dejé escapar un suspiro al no ver a mi hermano entre los convocados. Eso solo quiere decir que está vivo y libre de sospechas, cosa que no puedes decir tu...

-Así pues, todos los consejeros están muertos, al igual que el pequeño Yordle.- Dije al caer en la cuenta de que no volvería a sufrir ninguna de esas asquerosas setas explosivas venenosas... Mientras cada uno iba a su vola me acerqué al viejo Zilean.- ¿Hay alguna prueba o evidencia de quien a podido ser? Esto parece un trabajo demasiado grande para un solo capeon por muy fedeado que esté...

Mi mirada se dirigió hacia Jinx, ya que esto parecía estar dentro de su abanico de habilidades. 

No creó que haya sido Jinx, no es su forma de actuar.. -no estaba defendiéndola, tan solo sabía que hacer algo tan complicado y sin dejar una muestra de que ha sido ella,  no era propio de la chica.- Tal y como dijo Vi, a Jinx le encanta evidenciar que ha sido ella. Por otro lado.. - Esta vez mira a Darius y a Garen.- Este no es el momento de seguir con vuestra absurda guerra, hemos sido invocados aquí para descubrir quien ha matado a Teemo y a los invocadores. 

Al ver la desproporcionada reacción que todos parecían tener tras mis palabras les dediqué una mirada indescifrable. Sin embargo me guardé mis pensamientos, decidido a mantener los ojos bien abiertos a partir de ese momento.Dejé pasar algunos minutos en silencio, simplemente escuchando lo que tenían que decir mientras apretaba con fuerza la empuñadura de mi arma.

Pero cuando Caitlyn habló, tratándome como si fuera igual a Darius, ni siquiera me planteé no responder. - No he sido yo quien ha mezclado la política con lo que esté sucediendo aquí. - Dije, a pesar de lo ridículo que era tener que aclarar algo así.

Fizz, cansado de tanto grito y discusión, pinchó su tridente en el suelo y se subió al extremo, haciendo equilibrio, y habló:

- Chicos, chicos, nos estamos alejando del asunto primordial, que es encontrar a esos "Campeones Rebeldes". Debemos dejar a un lado las discusiones hacerca de política o territorios. Ahora lo más importante es protejer a la alta consejera para que Fiddlesticks se haga cargo de ellos. Todos hemos perdido algo, estoy seguro. Por eso, y por la Alta Consejera, hagamos de esto un asunto rápido y limpio-

Ezreal habia aparecido en el salon en una posicion extraña: Arrodillado tratando de alcanzar algo, con una pierna mas estirada que la otra y el brazo derecho (donde llevaba aquel poderoso y extraño artefacto que lo ataba a la liga) extendido.

"Tan oportunos como siempre" penso mientras se incorporaba de inmediato con gracia. Pero en menos de un segundo se dio cuenta que esto no era como el resto de las veces que lo invocaban. Esto era nuevo, y mas serio.

Escucho sin decir nada a Zilean y Alistar, y cuando llego el turno de los otros campeones tambien callo, algo muy extraño en el. Casi casi hubiera querido ensañarse en Darius y Garen y sus tontas discusiones del tipico macho, hasta que Fizz interrumpio. "Muy sensato, mi resbaloso amigo"

-Nasus y Fizz tienen razon dijo con un asentimiento Un solo campeon obviamente no seria capaz de algo asi, y no creo que Jinx haya formado parte de esto: Se necesita cerebro y paciencia para planear algo asi, que es algo que le falta. Sin ofender.

Hizo una mueca en su direccion antes de seguir -Ali, siento muchos los asesinatos aseguro al acercarse unos pasos al enorme minotauro Pero sabes que yo no lastimaria a nadie... Permanentemente. Me conoces, hemos compartido tiempo dentro y fuera de la Liga. Y estaba en medio de algo... Crees que puedan dejar que me encargue de aquello y luego volver? Pueden convocarme cuando quieran mientras tenga esto puesto alzo su guantelete y puedes estar seguro no pienso quitarmelo.

¡Basta! - gritó la Alta Consejera Vessaria Kolminye, y el esfuerzo le hizo toser algo de sangre. Alistar se la quiso llevar de allí, pero ella hizo un gesto que estaba bien, y tras limpiarse la sangre miró a los presentes - Estáis atrapados mágicamente, os guste o no. Eso significa que sólo malgastarás munición Jinx, y que no funcionará tu brazalete para irte de aquí Ezreal. Y el hechizo sólo se romperá de 2 formas: o tanto Alistar, como Zilean y yo aceptamos que la rebelión ha finalizado y anulamos el hechizo... o los 3 estamos muertos. No habrá otra forma de salir de la Academia de la Guerra.

Miró con tristeza lo solitaria que estaba ahora, como el resto de sus compañeros habían muerto. Esos sentimientos le volvían, porque lo que tenía que decir era aceptar que no era una pesadilla, sino una macabra realidad.

Mi estado de salud no me permite estar aquí mucho más tiempo. Por ello, deberá recaer entre vosotros encontrar a los asesinos. Como 5 eran los miembros de los equipos oficiales, 5 son los dones que tenemos. Es... algo previo de la Academia de la Guerra y la Liga de Leyendas. Si quieren acabar con esto, no veo más solución que actuar como se hacía antes de su existencia. No sé a quienes os irá a parar los poderes de mis compañeros, los he encadenado a los míos para que no desaparecieran. - Vessaria volvió a toser, pero esta vez sólo hubo cansancio -  Mi poder es tener la autoridad de desempatar una votación. Que es lo que haréis, votar cada día antes que Fiddlesticks despierte y salga de celda. Quien más votos tenga acusado de ser un traidor, morirá a sus manos. No es el mejor método, pero es el único del que disponemos. Él también está "dormido" hasta que ceda mi poder. Así que os pido que hagáis una primera votación. Para elegir quien heredará mi poder. Espero que esta primera votación sirva para empezar a daros cuenta de todo...

Zilean seguía con sus cálculos, y su rostro cada vez lucía peor cara. Se giró hacia el resto, incluido a la Alta Consejera y Alistar.

Temo que hayan habido ya más bajas de las que conocemos. Varios de los desaparecidos que no les dábamos importancia, podrían haber caído sin que lo supiéramos a manos de los traidores. Esto puede ser muy malo, incluso aunque lográramos aplacar la rebelión.

Luego se giró hacia la pizarra y señaló unas ecuaciones mágicas, y eso pareció mejorarle algo el humor.

Lo bueno es que si este hechizo arcano funcionase, las muertes de los caídos no serían en vano. En cualquier caso, no sólo afectarán a ellos, seguramente muchos campeones vivos se verán alterados para ello. Sus habilidades servirán temporalmente para ayudaros en vuestra tarea, para que no dependáis únicamente de vuestro instinto y de las votaciones. Quizás también afecte a los traidores, pero con la situación actual, seguiríamos teniendo un buffeo más interesante hacia nuestro lado. Espero que todo salga correcto.

Lo mejor para ellos sería que no les afectara el "hechizo de Morfeo" - replicó Alistar a Zilean. Tras ello el Minotauro miró a los presentes, puesto que la mayoría no deberían entender a que se refiere. - Los asesinos siempre actúan de noche. Pensaréis, "bueno, pues hacemos guardias varios despierto, y así no actuarán o los pillaremos con las manos en la masa". Desgraciadamente, al llegar a cierta hora de la noche un sopor mágico que hace que uno se despierte la mañana siguiente sin poder evitarlo. Aunque los traidores son inmunes a ello, seguramente porque debieron lanzarlo ellos. Por ello, para los que queráis, tendréis vuestras habitaciones. Quizás no sirvan para nada para evitar que los traidores vengan a por vosotros... pero ya que os hemos dejado aquí encerrados, un poco de descanso digno para quien lo desee estará disponible.

Ahri se acerca al minotauro y acariciandole suavemente el pecho le susurra algo al oido, luego Guiña el ojo y se retira un poco moviendo su cola hacia el resto de sus compañeros ahi presentes.

¿No podria dormir entre tus calidos brazos? ya que eres tan grande y fuerte me podrias proteger y estoy segura que la pasariamos muy bien

Cuando la alta consejera dice que la unica forma de salir seria que ella y sus dos guardaespaldas muriesen, dudo unos segundos. Era una forma mas rapida que tener que investigar quienes era los estupidos traidores, pero seguramente eso pondria en mi contra a el resto de campeones. Y confiaba en poder reclutar a algunos para mi futura campaña para liberar mi mundo. Asi que tocaba seguirles el juego.

- Pillar a esos traidores sera pan comido, siendo simples mortales no pueden ser muy listos. Y no hara falta que Fiddlestick los ejecute, ya los matare yo con mis propias manos por provocarnos semejante molestia. Ahora decidire quien tendra el privilegio de compartir una habitacion conmigo- Exclamo con tono desafiante. Acto seguido comienzo a moverme por los campeones, estudiandolos. Me acerco a Sona, y el pongo una mano en el hombre.- Pequeña mortal, tu compartiras mi habitacion. Tu musica es agradable, y tu incapacidad de entablar molestas conversaciones sin sentido es aun mas apreciable.

Sin mas, me alejo de la musico y sigo en mi importante tarea. Si voy a tener que estar mucho tiempo aqui, espero que al menos ese tiempo no sea excesivamente molesto

La invocación le había pillado totalmente de improviso, al aparecer con el resto. El autómata Tenia en su mano un pájaro. Un pájaro que alzo el vuelo y se perdió por el techo al llegar a ese extraño lugar.

Con la paciencia que le caracteriza escucho lo que tenían que decir y la razón de su invocación y tras dejar escapar el humo de sus chimeneas no pudo mas que decir: -¡Peligro Will Robinson! Peligro.-Mientras agitaba sus extremidades descontroladamente.

Poco después recordó que él no era aquel robot y busco en su base las directrices de la vergüenza para callar y esperar que el resto no le hubiera escuchado. Acto que aprovecho para buscar caras conocidas. La primera fue su amigo Rammus a quien le dedico un estrechón de manos.
-Hola Rammus, Me alegra verte aquí. -Hablo pausada y metálicamente, como era mas normal en él.

Después se acerco a Viktor y lo miro directamente a los ojos.
-También me alegro de verte.-Conocía muy bien el sentimiento de la alegría, fue de los primeros en aprender.

Al final escucho lo que tenia que decir Vessaria, Zilean y Alistar y quedo mirando a Viktor, esperando pacientemente ¿Que elegiría él?

Se mantiene callado e indiferente todo lo que dura la explicación, con sus gafas de sol y los brazos cruzados. Bah, demasiada cháchara.

Luego al escuchar que descansarían en habitaciones pensó que no quería compartir con ninguno de los presentes una sala tan pequeña, asi que dormiría echo un ovillo. A eso que llegó el robot. Hey colega, ¿Qué tal? - Mira hacia todos lados-Aquí no hay ningún Will Robinson pequeño amigo dorado.- Le corresponde el estrechón de manos.- Te has vuelto más fuerte, ¿Quien era ese amiguito tuyo? No sabía que ahora comías....-Pausa.- animales.

-Muy buenas, hijo mio- Respondió al golem dorado mientras observaba con semblante tranquilo, al menos eso dejaban ver sus sensores oculares mientras mantenía su cetro pegado al suelo -¿Como continua tu libertad? ¿Era lo que te esperabas?- Preguntó con lo que parecía una leve sonrisa bajo su casco metálico, observando después a todos los presentes ¿Quienes querrian acabar con la academia? Eso era algo que desconocía, pero las disputas de cada uno de los aquí presentes no ayudarían con ello

Veigar previendo que las fuerzas del orden se organizarían rápidamente pues estaba en su naturaleza y que otros se agruparían por lealtades nacionales, decidió que seria buena idea tomar un cuarto para él y otros que tampoco tenían lealtades particulares.

Camino hasta el primer cuarto y declaro:

-Elijo esta habitación para, los que como yo, son profundamente malva... ¡Caóticos! Si. Caóticos y rebeldes.

A continuación observo detenidamente a los presentes. Caminando entre ellos con sus pequeños y graciosos pasitos, eligió a los posibles candidatos.

-Ahri estas invitada. Annie, tu también. Jinx, estas muy loca, eres bienvenida. Lulu, mi gran amiga, tu tienes tu lugar asegurado. Morgana, eres una rebelde por naturaleza, tu lugar esta conmigo.

Veigar observo a los demás dejando escapara un bufido de desprecio. Ningún fanático de alguna nación o defensor de “la justicia” va a estar en MI habitación. Aunque se tomo su tiempo observando a Fizz, los robots y el buen Rammus. No estaba seguro de ellos. Ya se daría cuenta con el paso de los dias

Así que terminada su selección, se giro a sus elegidos expectante de sus respuestas.

La sonrisa de Jinx se congeló en el rostro cuando el proyectil lanzado por Espinas se estrelló contra el techo y ni siquiera una pequeña piedra cayó del techo. Miró a Espinas y al techo incrédula. inspeccionó su arma un instante antes de colgársela de la espalda de nuevo.

Necesito urgentemente una nueva arma... Se acercó a Vi por la espalda y acercó su boca al oído de la policía. Pero no se lo digas a mis otras pistolas! Dijo susurrando, pero con un toque de amenaza y locura. No esperó su reacción, se escabulló a otro lado de la sala y escuchó como la gente opinaba que ella no era capaz de montar algo así.

-Si quisiera habría destruido este sitio hace tiempo. Dijo Jinx con cara de indignada. Solo necesito... Se llevó una mano a la barbilla y se puso a pensar. No duró demasiado tiempo pensando. Cuando habló lo hizo con los ojos abiertos de par en par y una sonrisa que reflejaba lo cuerda que estaba. Bombas! Muchas bombas! Muchas muchas bombas! Cuanto más grandes mejor! Pium! BOOM!

Su vista se perdió imaginando aquellas explosiones en el lugar y se emocionó solo de imaginarlo. Casi parecía una niña con un nuevo juguete.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por la estridente voz de Veigar, más estridente incluso que la de ella. Sonrió al yordle y aceptó la oferta. Cuenta conmigo, hombrecito! Salió corriendo hacia la primera habitación, pero se detuvo de pronto, con cara de fingida preocupación. Vaya, me había olvidado de vosotras... Su mirada se centró en Caitlyn y en Vi. Estaréis bien sin mí? Sé que últimamente habéis desarrollado una adicción muy fuerte por mí y eso. Ya sabéis que me seguís a todas partes y eso... Bueno, si veis que me echáis mucho de menos decídmelo, estamos? Dijo, terminando con una carcajada y siguiendo su camino hasta colocarse junto a Veigar.

Y tu pistola? No decías que eras caótico? Dio una vuelta alrededor del yordle, inspeccionando cada centímetro de su pequeño cuerpo con excesiva minuciosidad. No me estarás engañando, no?

Ahá, ahá, ahá.... Ya veo. Se llevó un dedo a los labios, quedándose completamente pensativa, aunque esa pose tan "seria" duró poco pues en sus labios brilló una traviesa sonrisa. Tomarse aquello como algo terrible solo le traería "quebraderos"  y la vida era demasiado chachiosa como para verla oscurecida por un problema. Pix parecía pensar lo mismo porque soltó un agudo sonidito que la hizo sacudir la cabeza de lado a lado.- Oyes, Pix ¡Que me dejas sorda! -Su larga melena morada se balanceó al ritmo de los movimientos de ella. Cuando Veigar se acercó esta lo miró abriendo muchísimo los ojos ¡Me está preguntando! Debería saber que por supuestísimo que sí iré con él! -¡Claro que sí! ¿Quién te divertirá si no? Una habitación sin mi presencia es tan aburrida ~-Se acercó dando saltitos, que para la pequeña eran de lo más graciosos. Tras eso se paró frente a él subiendo y bajando la cabeza.- Pix y yo ¡Armadas y dispuestas! -Su cabeza se elevó de manera lenta hasta dar con los ojos de Jinx, por un momento no dijo nada, pero en sus labios asomó una gran sonrisa que enseñaba sus pequeños dientitos.- ¿Pistolas? No solo las pistolas crean caos y destrucción.-Ríe de forma divertida.-Aunque... Yo prefiero los animalitos y florecillas, verdad Pix, con ellos podemos jugar a las escondidas y también al pilla pilla.-Gira suavemente, para colocarse al costado de Veigar.

Su gran sombrerote oscurecía totalmente las facciones del Yordle, así que nadie pudo notar la gran sonrisa del pequeño amo de la maldad al escuchar las respuesta de Jinx y Lulu.

-¿Pistola? Esta es mi pistola -dice el enano, levantado muy alto su bastón mágico, claro que muy alto para Veigar era mas bien medio bajo para los demás-. ¡Y estas son mis bombas!

Al decir esto Veigar invoca su materia oscura en medio del lugar. Una gran sombra marca el lugar donde, unos segundos después, una gran masa de materia oscura cae causando una gran explosión.

En cuanto la Alta Consejera volvió a hablar guardé silencio, y presté total atención a sus palabras. Luego escuché también a Zilena y Alistar, momentos antes de que la poca cordura presente desapareciese. Con un suspiro, comencé a recorrer las entradas a las habitaciones, valorando quién podría hacer realmente algo así, y cuántos se necesitarían para ello. ¿Serían amigos entre ellos los culpables? ¿O habrían establecido una alianza en las sombras? Sería capaz de apostar mi mano derecha porque ningún demaciano estaba implicado, pero eso no me acercaba demasiado a la verdad.

Con la vista cansada hice un gesto hacia mi hermana antes de entrar a examinar el interior de una de las habitaciones.

- No es segura. - Dije al salir. - Pero es mejor que nada.

Al ver el revuelo que esta reinando en el lugar me llevo la mano al puente de la nariz mientras inspiro hondo.

-¿Nos estas pidiendo, suma invocadora que votemos a uno de los presentes para ser asesinado sin tener ninguna prueba o sospecha?- Niego con la cabeza con gesto resignado.

Luego me acerque a una de las habitaciones libres con gesto cansado, dejando un reguero de arena tras de mi.

-Me importa poco compartirla. Mientras podamos acabar pronto con esto.