Partida Rol por web

Mirando a Aenghus.- Yo y Aenghus, Mafuso y Puk... y Arek y Perendior.

No me importa hacer la segunda guardia con Perendior si a él le parece bien.

Digo mirando a Perendior.

¿Y tendré que estar despierto, y encima con el elfo?. Jo, seguro que no sabe lanzar bolas de fuego...

A mí me parece bien, pero en eso de ir rotando, tengo algo que agregar, los lanzadores de conjuros tienen que descansar ocho horas para poder recuperar los conjuros, por eso deben de hacer o la primera o la ultima

Hago un gesto de conformidad a lady Ailush.

Tienes razon Perendior no lo habia pensado, habra que buscar otro metodo. A respecto a lo de lanzar bolas de fuego Mafuso quien te dijo que no supiera pequeño amigo, no obstante podrias enseñarme tu.

Mientras miro a nuestro pequeño amigo con una sonrisa.

Mafuso quieres la primera o la ultima guardia.

Despues de una larga discusion nuestros amigos se acomodaron para pasar la noche, al final Ailush y Aenghus harian la primera guardia, Puk y Perendior la segunda, y Arek y Mafuso la ultima.

La noche transcurria en calma, una gran luna en cuarto creciente brillaba en el cielo, los sonidos del bosque cambiaban, los animales nocturnos hacian acto de presencia buhos, algunas serpientes, etc.

Sin embargo, nada mas comenzar la primera guardia, el cielo comenzo a cubrirse, al principio parecian unas pocas nubes, poco a poco dejaron de verse las estrellas, hasta que al poco tiempo el cielo se cubrio de nubes negras, algunos relampagos comenzaron a caer en la lejania.

En realidad no quiero hacer guardia, solo quiero un colchón de plumas de cisne y una buena jarra de hidromiel. ¿Alguno sabeis dónde está el establo?

Miro a mi gran y vigoroso compañero. No es precisamente apuesto, pero para meter buenos mamporros debe de valer. Mi tio Tim me enseño que lo importante no es ser guapo o feo, si no saber que hechizo lanzar en el momento justo- Una pena no haber podido ir a asustar a los animales de los establos. Me encanta verlos correr asustados de uns sitio para otro. Seguro que ese el efecto de los enemigos que sobrevivan a una bola de fuego. ¿Tú que piensas Arek?

Aenghus sentado en el tejado aguantando las inclemencias metereológicas, observaba la noche. La falta de estrellas difiocultaba su cometido pero sabía que a escasos metros Ailush meditaba hablando con su dios y atenta al devenir. Pocas palabras se cruzaron ya que así era la forma de ser de Aenghus y Ailush lo sabía.

Aunque le costaba trabajo ya que Ailush era una persona tan sociable que le gustaba hablar y comentar cada pequeño incidente.

Mi pequeño amigo, si los enemigos que sobrevivan a una bola de fuego tuya no se asustan, al vernos a nosotros dos si que se asustaran, al menos, seguro que viéndome a mi, si que se asustan.

Dice Arek soltando después una carcajada.

Hombre, si quieres asustar a alguien, la próxima vez dejaré vivo a algun orco para que le hagas sufrir, que te parece?

Veo que las grandes mentes pensais igual, teneis mucho en común Clyde y tú. Seguro que el tí Tim diría lo mismo.

Mientras permanezco atento a cualquier cosa inusual que pueda suceder, aprovecho para intentar conocer mejor a mi compañero de guardia.

Puk, cuéntame algo de ti, porque básicamente no nos conocemos nada .

Naci ya algo mas de cien años en un bosque en la frontera salvaje, vivia tranquilo pero algo en mi interior me motivo a salir de mi casa en busca de aventuras eso fue no hace mas de un año, empeze hacer algunas escaramuzas por varios pueblos hasta hoy.

Hago una respiracion profunda.

Y tu que me cuentas no pareces de por aqui.

Mientras me hacerco a una ventana para hechar un vistazo por ella.

Mi historia es un poco extraña, yo nací en el seno de una familia acomodada, alguien mato a mi padre y a mi no me quedo mas remedio que vengarlo, ahora sobrevivo realizando trabajos para el mejor postor e intento no caer en las manos de los que me quieren dar caza .

Estas en una situacion dificil por lo que veo, no temes de que esos que te buscan envien a alguien a por ti,no deberias de confiar en nadie sabes; quien sabe despues de averiguar lo que pasa aqui y arreglarlo podria echarte una mano si quieres.

De la que miro por la ventana intento ver algo.

Le hago un gesto a Perendior para que no haga ruido e intento concentrarme por si escucho algun ruido.

Me acerco despacio hasta la ventana y echo un vistazo

La oscuridad de la noche deja paso a la luz del dia, pero el dia esta cubierto nubes, de vez en cuando veis caer un rayo en la lejania.

Ronar esta en el baño lavandose un poco la cara, el y su mujer llevan ya un tiempo despiertos, ellos no han hecho guardia y estan algo mas descansados que vosotros. Se siente seguro con vosotros aqui en la granja.

Arek se despierta junto con algunos de sus compañeros con energía como cada mañana. Cuando se levanta, se dirige hacia la ventana donde observa como el tiempo, al igual que la zona donde sencuentran está revuelta. Un mal presentimiento pasa por la cabeza de Arek.

Parece que hoy va a ser un día muy desagradable

Susurra Arek sin dejar de observar en el horizonte.

Al instante, su mente deja de prestar atención a la tormenta para empezar a rezar al dios que con tanto fervor sigue para así obtener sus conjuros diarios.

Creo que para aprovechar el dia deberiamos desayunar e ir de inmediato a la granja de tu amigo Ronar que os parece compañeros hay que buscar algun indicio.

Me acerco hasta donde esta Ailush y le susurro al oido.

Creo que Ronar y su esposa estarian mas a salvo en la ciudad que aqui o con nosotros deberiamos de hacer algo no te parece.

Me alejo y voy a mirar por la ventana.

Parece que una extraña tormente nos acecha amigos.

Me levanto como siempre, malhumorado y todavía con mas razón al otear el horizonte y vislumbrar la tormenta que se avecina, cuando alguno de mis compañeros dice algo, respondo con gruñidos ininteligibles.

Lo que nos faltaba, ahora toca que nos mojemos.